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Document 52011IE1393

    Dictamen del Comité Económico y Social Europeo sobre «Desarrollo rural y empleo en los Balcanes Occidentales» (Dictamen de iniciativa)

    DO C 376 de 22.12.2011, p. 25–31 (BG, ES, CS, DA, DE, ET, EL, EN, FR, IT, LV, LT, HU, MT, NL, PL, PT, RO, SK, SL, FI, SV)

    22.12.2011   

    ES

    Diario Oficial de la Unión Europea

    C 376/25


    Dictamen del Comité Económico y Social Europeo sobre «Desarrollo rural y empleo en los Balcanes Occidentales» (Dictamen de iniciativa)

    2011/C 376/05

    Ponente: Cveto STANTIČ

    El su pleno de los días 19 y 20 de enero de 2011, de conformidad con el apartado 2 del artículo 29 de su Reglamento Interno, el Comité Económico y Social Europeo decidió elaborar un dictamen de iniciativa sobre el tema

    «Desarrollo rural y empleo en los Balcanes Occidentales».

    La Sección Especializada de Relaciones Exteriores, encargada de preparar los trabajos en este asunto, aprobó su dictamen el 8 de septiembre de 2011.

    En su 474o Pleno de los días 21 y 22 de septiembre de 2011 el Comité Económico y Social Europeo aprobó por 166 votos a favor, 1 en contra y 4 abstenciones el presente dictamen.

    1.   Conclusiones y recomendaciones

    1.1   Los datos sobre las características socioeconómicas de las zonas rurales en la UE y en los países de los Balcanes Occidentales (1) no son ni coherentes ni comparables, en parte debido a la falta de una definición unificada de «zona rural». En consecuencia, el CESE apoya la idea de armonizar los criterios para definir las zonas rurales a escala de la UE, lo que permitiría su mejor comparación y facilitaría la aplicación de políticas y medidas.

    1.2   Las zonas rurales de los Balcanes Occidentales se enfrentan a numerosos problemas estructurales y socioeconómicos que se pueden solucionar en el marco de la política de desarrollo rural de la UE y de la política agrícola común (PAC). El CESE recomienda encarecidamente que los países de los Balcanes Occidentales integren la experiencia de la UE en la elaboración de políticas en el ámbito del desarrollo rural, teniendo en cuenta problemas y prioridades nacionales concretos.

    1.3   En los Balcanes Occidentales encontramos enormes zonas rurales despobladas cuyos recursos no se utilizan a la vez que centros urbanos con una concentración de población y una actividad económica desproporcionadas. Esta tendencia ejerce un impacto negativo en términos económicos, sociales, espaciales y ecológicos. Por consiguiente, se deberían diseñar y aplicar medidas específicas basadas en estas zonas para desencadenar en ellas un crecimiento económico sostenible.

    1.4   Las economías rurales de los Balcanes Occidentales se caracterizan por el predominio de la agricultura de subsistencia y semisubsistencia, una elevada tasa de desempleo, el desempleo encubierto y una escasa movilidad de la mano de obra. Las únicas ventajas competitivas de las zonas rurales son los bajos costes de la mano de obra y la calidad de los recursos naturales. El desarrollo del espíritu empresarial es limitado, entre otras cosas, debido a una infraestructura poco desarrollada, la falta de mano de obra cualificada, el acceso limitado a los mercados y a la financiación, la falta de apoyo a las inversiones y el bajo potencial empresarial.

    1.5   La agricultura extensiva sigue siendo un motor esencial de la economía rural y una gran fuente de empleo en las zonas rurales de los Balcanes Occidentales. No obstante, es necesario que se modernice e incremente la productividad, lo que se traducirá en un excedente de la mano de obra agrícola. La solución reside en la diversificación de la economía rural para reducir el riesgo de precariedad económica de los hogares rurales.

    1.6   Las políticas de desarrollo rural que deberían respaldar la diversificación de las economías rurales aún no son adecuadas y no están en consonancia con la política de desarrollo rural de la UE. Incluso cuando existen ciertas políticas nacionales, la inestabilidad política y los frecuentes cambios de gobierno impiden la continuidad y dificultan la aplicación. En la mayoría de los países existen fondos para el desarrollo rural. Sin embargo, en comparación con la UE, aún son escasos.

    1.7   El apoyo a la preadhesión para el desarrollo agrícola y rural (IPARD) sigue siendo la principal fuente de ayuda financiera en las zonas rurales. La mayoría de países tiene dificultades para adoptar el actual modelo de desarrollo rural de la UE debido a su complejidad y a sus exigentes procedimientos de aplicación. Por ello, la UE debería considerar la posibilidad de simplificar la gestión del IPARD y controlar los principios y procedimientos para facilitar el uso eficaz de los fondos y de las medidas disponibles.

    1.8   Según parece, una gran dificultad para acceder al IPARD es una administración y capacidad institucional inadecuada a nivel nacional y local y una escasa capacidad de los beneficiarios potenciales. Se insta a los gobiernos nacionales a que realicen un mayor esfuerzo en el desarrollo institucional y la capacidad de los beneficiarios potenciales.

    1.9   El CESE también recomendaría una mayor flexibilidad en el uso de la ayuda a la preadhesión para el desarrollo rural, en particular mediante la eliminación de la distinción entre países candidatos y países candidatos potenciales a la hora de tener acceso a la ayuda para el desarrollo agrícola y rural. Puesto que la situación difiere en función del país, se debería dar más peso a la evaluación individual de la administración y de la capacidad de absorción.

    1.10   Para luchar con más eficacia contra el desempleo, la pobreza y la exclusión rurales es necesaria una mejor coordinación entre las diferentes políticas y los diversos fondos disponibles. La política regional puede proporcionar un importante apoyo complementario a la política de desarrollo rural si ambas se combinan correctamente y se aplican con coherencia.

    1.11   Las políticas y medidas nacionales que se deberían reforzar y coordinar mejor incluyen:

    —   políticas para la inclusión activa: mayor acceso a la información y mejor asesoramiento sobre el derecho a las prestaciones públicas;

    —   políticas del mercado laboral: se podría alcanzar una tasa de empleo más elevada y menores disparidades regionales si se incrementaran las medidas activas en el mercado laboral;

    —   educación y formación: proporcionar educación a todos los niveles, abordar el abandono escolar temprano, reforzar las competencias y cualificaciones de los jóvenes, proporcionar formaciones que respondan a las necesidades con el objetivo de reducir las desigualdades entre los puestos de trabajo y las competencias;

    —   política de desarrollo rural: se debería prestar más atención a los Ejes II y III; ya existen medidas para el Eje I en la mayoría de países (2).

    1.12   La sociedad civil no desempeña un papel importante en las zonas rurales debido a la falta de aptitudes empresariales y organizativas, problemas demográficos y una infraestructura social de mala calidad en comparación con las ciudades. Una posible solución podría ser crear redes de organizaciones de la sociedad civil para cubrir una masa crítica de población y superficie. A este respecto, el enfoque Leader (3) es un instrumento que podría resultar útil a la hora de incrementar la participación de la sociedad civil.

    1.13   Para mejorar la calidad de vida y animar a los jóvenes a que permanezcan en las zonas rurales se necesita una economía rural más diversificada. Los principales retos para alcanzar este objetivo siguen siendo la inversión en infraestructura rural, la agricultura basada en el conocimiento integrada con la industria alimentaria, un mejor capital humano, un entorno favorable para los emprendedores y mejores servicios sociales. El turismo agrícola y el ecológico, basados en el valioso patrimonio cultural, histórico y natural, también parecen ser una buena opción.

    2.   Introducción y antecedentes

    2.1   Definición de zona rural

    2.1.1   Una de las dificultades con las que cabe enfrentarse al abordar este asunto es que, a escala de la UE, no existe una definición unificada de «zona rural». Cada país tiene su propia definición oficial, que incluye aspectos como la densidad de población, la economía basada en la agricultura, la lejanía, la falta de acceso a servicios importantes, etc. Para llevar a cabo comparaciones internacionales, con frecuencia se utiliza la definición de ruralidad de la OECD. Recientemente, los países de los Balcanes Occidentales también han empezado a adaptar sus estadísticas a esta metodología.

    2.1.2   Por ello, el CESE apoya la idea de armonizar los criterios para definir las zonas rurales a escala de la UE, pues permitiría una mejor comparación y supervisión de la efectividad de las diferentes medidas y políticas llevadas a cabo.

    2.2   Desarrollo rural en la UE como parte importante de la política agrícola común (PAC) y la futura reforma de la PAC

    2.2.1   El desarrollo rural es un ámbito político de vital importancia para la UE, pues aproximadamente el 60 % de la población de la UE reside en zonas rurales, que representan el 90 % de la superficie de la UE. La ayuda financiera al desarrollo rural ofrece una amplia gama de medidas. El actual modelo de la UE se basa en cuatro ejes políticos, lo que deja a los Estados miembros y a los gobiernos regionales la suficiente flexibilidad para ajustar las políticas a sus propias necesidades.

    2.2.2   El desarrollo territorial equilibrado representa uno de los principales objetivos de la futura reforma de la PAC. A este respecto, el CESE está convencido de que, si las futuras políticas agrícola y de desarrollo rural europeas se enfocan a la innovación y la competitividad, pueden crear nuevas oportunidades empresariales, más puestos de trabajo y una diversificación de los ingresos en las zonas rurales (4).

    2.3   Importancia de las políticas de desarrollo rural para las economías nacionales de los Balcanes Occidentales

    2.3.1   Teniendo en cuenta el tamaño de las zonas rurales, el porcentaje de población que vive en ellas (5) y la gran importancia de la agricultura para las economías naciones, está claro que el desarrollo rural debe convertirse en un ámbito político de vital importancia en los Balcanes Occidentales.

    2.3.2   Las zonas rurales de los Balcanes Occidentales se enfrentan a una serie de desafíos estructurales y socioeconómicos específicos, como niveles de renta bajos, falta de oportunidades de empleo, deterioro de la calidad de vida, procesos de despoblación, etc., que pueden abordarse con éxito con una política de desarrollo rural adecuada basada en el complejo marco de desarrollo rural de la UE.

    3.   Algunas características comunes en las zonas rurales de los Balcanes Occidentales – determinantes clave de su potencial económico

    3.1   Los Balcanes Occidentales, con su exuberante flora y fauna, son una de las partes más ricas de Europa en cuanto a biodiversidad. Engloban una gran variedad de hábitats naturales que incluyen lagunas costeras, humedales, bosques mediterráneos, pastos de montaña, prados, humedales de agua dulce y terrenos cársticos.

    3.2   Tanto el descenso de la población, principalmente en zonas remotas y menos fértiles, como su envejecimiento (excepto en Albania y Kosovo) ejerce un fuerte impacto negativo en el mercado laboral rural. Una tendencia común en todos los países de la región es la emigración de las zonas rurales a las urbanas y costeras, así como al extranjero. La emigración hacia zonas rurales es casi exclusiva de jubilados y refugiados.

    3.3   La poco favorable estructura educativa, las malas cualificaciones y la falta de conocimientos y competencias entre la población económicamente activa representan una seria limitación para la futura economía rural. El mercado laboral se caracteriza por una escasa movilidad de la mano de obra, lo que resulta en la falta de puestos de trabajo y oportunidades de obtener ingresos alternativos.

    3.4   La agricultura basada en el pastoreo y en los cultivos de baja intensidad sigue siendo la actividad predominante en la mayoría de zonas rurales. El porcentaje del empleo en el sector agrícola está entre los más altos de la UE.

    3.5   Los hogares rurales, en particular aquellos con escasos recursos, tienen acceso limitado a los mercados agrícolas, laborales y financieros, a la información y al conocimiento. Por ello, sus posibilidades de superar el riesgo de pobreza son muy reducidas.

    3.6   Los principales problemas de las zonas rurales son la escasa diversificación de las actividades económicas y de los ingresos y el escaso empleo en el sector privado. Los servicios económicos y la infraestructura social son limitados y están poco desarrollados. Esto afecta la calidad de vida de la población rural, la competitividad y el tejido social de las zonas rurales.

    4.   La agricultura sigue siendo un motor esencial de la economía rural en los Balcanes Occidentales

    4.1   Aunque la proporción de la agricultura en la economía ha ido disminuyendo desde 2000, aún es mucho mayor en los Balcanes Occidentales que en la media de la UE, tanto en cuanto a valor añadido como a empleo.

    4.2   Una característica general de la agricultura en la mayoría de los estados de los Balcanes Occidentales, especialmente en la zona meridional, sigue siendo la naturaleza fragmentada de las explotaciones agrícolas privadas y el hecho de que se trata de explotaciones a pequeña escala. El tamaño medio de las explotaciones oscila entre 1,2 ha en Albania y menos de 4 ha en Serbia. Otros factores que dificultan el desarrollo de la agricultura son: estructuras de mercado poco desarrolladas, infraestructuras inadecuadas, la escasez de la parte de la producción destinada a la comercialización, la falta de conocimientos y competencias, y el no cumplimiento de las normas de seguridad alimentaria.

    4.3   La producción agrícola disminuyó debido a la transición e incluso a la guerra en algunos países, pero a partir de 2000 volvió a aumentar, sobre todo gracias a la inversión en tecnologías de producción. No obstante, en muchos países la producción aún es menor que durante el período previo a la transición. A pesar de algunos contratiempos, muchos de los países de los Balcanes Occidentales cuentan con un potencial natural para la agricultura bastante alto (mano de obra relativamente barata, terreno, agua y buenas condiciones edafoclimáticas para ciertos productos, como tabaco, algunas frutas y verduras, vino, cereales y carne).

    4.4   Asimismo, en la parte septentrional de la península balcánica, hay regiones con una productividad agrícola elevada cuyas economías están bien integradas (la cuenca del Sava, la del Danubio y la llanura Panónica). Esta zona disfruta de condiciones edafoclimáticas favorables para la producción agrícola con gran intensidad de capital. Además, cuenta con un capital humano adecuado, una iniciativa empresarial desarrollada, un sector industrial suficientemente diversificado y una infraestructura bien desarrollada.

    5.   Hacer frente al desafío del desarrollo rural más allá de la agricultura

    5.1   La elevada proporción de mano de obra que trabaja en el sector agrícola no se refleja directamente en la contribución de la agricultura al PIB. Por ello, las futuras economías rurales deberían poder absorber el excedente de mano de obra agrícola en oportunidades laborales alternativas.

    5.2   La creación de industrias ubicadas en el medio rural a menudo ha resultado muy eficaz para crear nuevas oportunidades laborales y proporcionar ingresos adicionales. Además, la experiencia ha demostrado que la inversión en las explotaciones agrícolas, la modernización, la formación y las medidas medioambientales han tenido un efecto positivo que se ha traducido en un incremento del empleo y en una reducción del desempleo encubierto en la agricultura. Entre los sectores con gran potencial de crecimiento encontramos: industrias de transformación, productos con indicaciones geográficas protegidas, alimentos ecológicos, turismo rural, artesanía, productos de madera, producción de energías renovables y una amplia gama de servicios sociales y de salud.

    5.3   Para que el sector rural se desarrolle rápidamente es necesario un mayor y mejor gasto en bienes y servicios públicos: mejores carreteras e infraestructura de irrigación, un mejor entorno empresarial y una transferencia eficiente de información, conocimiento y tecnologías.

    6.   Las políticas agrícola y de desarrollo rural a la luz de la adhesión a la UE

    6.1   Todos los países de la zona tienen grandes expectativas de formar parte de la UE. A este respecto, todos ellos se enfrentan a desafíos similares para transformar y modernizar sus sectores agroalimentarios, altamente fragmentados, y garantizar que sean competitivos en el mercado de la UE.

    6.2   Según los últimos informes de seguimiento de la Comisión Europea sobre agricultura y desarrollo rural (6), la mayoría de los países de los Balcanes Occidentales necesitan seguir esforzándose para garantizar una mayor conformidad con el acervo agrícola de la UE y su política de desarrollo rural.

    6.3   En comparación con la UE, los fondos nacionales que apoyan la agricultura en los Balcanes Occidentales aún son relativamente modestos. En los Balcanes Occidentales se aplica una amplia gama de medidas y mecanismos de apoyo. En los últimos años, los subsidios directos a los productores han sido el principal elemento de las transferencias presupuestarias agrícolas.

    6.4   Ayuda financiera de la UE

    6.4.1   El apoyo a la preadhesión para la agricultura y el desarrollo rural – IPARD (7) es el quinto componente del IPA – el mayor instrumento de la UE en materia de preparación y ayuda a la adhesión. Únicamente los países con estatus de candidato (Croacia, la antigua República Yugoslava de Macedonia, Montenegro y Turquía) pueden beneficiarse de los fondos IPARD.

    6.4.2   El CESE querría llamar la atención sobre los obstáculos concretos a los que los países de los Balcanes Occidentales se tienen que enfrentar a la hora de utilizar la ayuda de preadhesión para el desarrollo rural. Las medidas de inversión con arreglo al IPARD son difíciles de aplicar, puesto que requieren la existencia de estructuras locales completas para su aplicación y control (la gestión y la responsabilización del IPARD está totalmente descentralizada, las instituciones de la UE únicamente llevan a cabo un control a posteriori). Esto resulta en altos niveles de rechazo y una necesidad de inversión significativa en la fase preparatoria, tanto por parte del país como de los beneficiarios potenciales.

    6.4.3   Los principios y procedimientos de gestión y control del IPARD podrían simplificarse para alentar a los países de los Balcanes Occidentales a que hicieran un mejor uso de las medidas, lo que tendría un efecto directo en el desarrollo rural, como mejorar la infraestructura rural, diversificar las actividades económicas proporcionar formación (Eje III del IPARD).

    6.4.4   Una razón importante de la lenta absorción de los fondos de la UE también es la deficiente capacidad administrativa y la falta de instituciones adecuadas a nivel nacional y, especialmente, local, lo que está dificultando la capacidad de absorción general de los fondos de preadhesión. La falta de servicios generales adecuados (conseguir licencias de obra, registro de la propiedad, servicios fitosanitarios y veterinarios no adecuados, etc.) también ha contribuido al escaso nivel de éxito de los últimos llamamientos en materia de proyectos de desarrollo rural.

    6.4.5   Un obstáculo adicional para mejorar el uso de los fondos de la UE parece ser la escasa capacidad de los beneficiarios potenciales. Esto se podría superar mediante el desarrollo de servicios de divulgación y asesoramiento más eficientes.

    6.4.6   La situación difiere en función del país y no siempre está relacionada con los avances en el proceso de adhesión o con gozar del estatus de país candidato. Por ello, el CESE recomendaría una mayor flexibilidad en el uso de la ayuda a la preadhesión para el desarrollo rural, en particular mediante la eliminación de la distinción entre países candidatos y países candidatos potenciales a la hora de tener acceso a la ayuda y permitiendo que la evaluación individual de la administración y de la capacidad de absorción tenga un mayor peso.

    7.   Mercados laborales rurales en los Balcanes Occidentales

    7.1   Los mercados laborales rurales en la mayoría de países de los Balcanes Occidentales comparten las siguientes características:

    el empleo está dominado por los trabajadores agrícolas, mientras que la proporción de trabajadores en el sector servicios y por cuenta propia (a excepción de la agricultura) está por debajo de la media;

    el trabajo a tiempo parcial y estacional a menudo es la única fuente de ingresos de la mayor parte de la población rural;

    la estructura educativa poco favorable y la falta de competencias y conocimientos son el resultado del envejecimiento de la población y de un aumento del abandono escolar prematuro;

    la falta de oportunidades de empleo fuera de la agricultura conduce a una elevada dependencia del empleo estacional y al desempleo encubierto;

    los grupos más vulnerables en peligro de exclusión del mercado laboral son los jóvenes, las mujeres, las personas mayores, las minorías étnicas (etnia romaní) y los refugiados de guerra. Algunas de estas categorías no siempre están inscritas como desempleados (desempleo encubierto);

    los trabajadores rurales raramente participan en los programas de empleo que organizan los gobiernos. Por ello, es necesario promocionarlos mejor y proporcionar un asesoramiento adecuado.

    8.   Estratégicas y políticas relacionadas con el desarrollo rural y el empleo

    8.1   Las principales características de las actuales políticas rurales nacionales son: escasa conciencia política, escasa comprensión del concepto de desarrollo rural de la UE, falta de un enfoque integrado o de estructuras de programación, ausencia de coordinación política vertical y horizontal y escasa cooperación interministerial en el ámbito del desarrollo rural.

    8.2   Hay problemas y oportunidades de desarrollo clave que no se tienen adecuadamente en cuenta en las políticas nacionales de desarrollo rural: no existen incentivos suficientes para explotaciones ecológicas, recursos genéticos, silvicultura, turismo, etc. Tampoco se abordan ni las zonas menos favorecidas ni la agricultura de semisubsistencia.

    8.3   Las políticas de desarrollo rural, combinadas con políticas regionales y programas operativos sectoriales adecuados, pueden contribuir a mejorar el empleo y la inclusión social en las zonas rurales de manera significativa. Una buena política regional puede proporcionar apoyo complementario importante con el objetivo de reforzar las zonas rurales más pobres.

    8.4   En comparación con la UE, la política regional nacional de la mayoría de los países está incluso por detrás de la política de desarrollo rural. Por ello, se necesita un enfoque más coherente y una mejor coordinación entre las políticas y los fondos disponibles, es decir, aunar diferentes recursos (fondos nacionales, de la UE y procedentes de donaciones).

    8.5   Debido a la inestabilidad política y a los frecuentes cambios de gobierno, la mayoría de los países de la región se enfrentan a una falta de continuidad en la aplicación de las diferentes políticas y medidas para el desarrollo rural.

    9.   El papel de las organizaciones de la sociedad civil (OSC) en el desarrollo rural

    9.1   El dictamen del CESE sobre la sociedad civil en las zonas rurales  (8) puso de manifiesto varios problemas y obstáculos en el desarrollo de las organizaciones de la sociedad civil en las zonas rurales, con especial atención a los nuevos Estados miembros. Dichos obstáculos incluyen barreras para obtener conocimientos e información, la ausencia de aptitudes empresariales, problemas demográficos y un menor nivel de infraestructuras sociales en comparación con las ciudades.

    9.2   El estatus y el papel de la sociedad civil en los Balcanes Occidentales, junto con los obstáculos a los que esta se enfrenta, son asuntos que el CESE ha abordado en varios dictámenes (9). Aunque cada país tiene sus propios problemas en cuanto a la legislación, la financiación pública y el régimen fiscal de las OSC, el nivel de diálogo civil y social, hay problemas que están presentes en toda la región, en particular en las zonas rurales:

    en general, la sociedad civil no tiene una tradición sólida;

    la financiación pública de las OSC en la mayoría de los casos es insuficiente y no es suficientemente transparente;

    ya se ha puesto en marcha la nueva asistencia técnica financiada por la UE para las OSC de los Balcanes Occidentales (10), aunque aún no está produciendo los resultados deseados;

    en general, se observa una necesidad de creación de capacidades y desarrollo de conocimientos y técnicas específicas en distintos ámbitos;

    a nivel local y regional, hay una incomprensión general entre los entes locales en cuanto a las ventajas de trabajar en asociación con la sociedad civil;

    diferencias entre zonas urbanas y rurales: la mayoría de las OSC se concentran en la capital o en dos o tres ciudades y dejan al campo de lado, sin ser conscientes del papel de la sociedad civil y de sus actividades;

    la mayoría de las OSC, incluidas las organizaciones de agricultores, están fragmentadas y sufren una competencia contraproducente en vez de cooperación, lo que impide que se constituyan en grupos de presión poderosos.

    9.3   Las OSC que tradicionalmente se encuentran en las zonas rurales de los Balcanes Occidentales son grupos religiosos, asociaciones de minorías nacionales, asociaciones de bomberos, cazadores y pescadores, organizaciones culturales y artísticas, clubs deportivos, asociaciones de mujeres y similares. Su distribución geográfica es desigual, pero los grupos religiosos y de las minorías étnicas son los mejor organizados y protegen correctamente sus intereses.

    9.4   Los responsables de la toma de decisiones no siempre reconocen lo suficiente la posibilidad de que estas organizaciones participen de una manera más activa en programas destinados a preservar el patrimonio cultural y el medio ambiente. Su influencia en las iniciativas de desarrollo es menor y no va más allá de los estrechos límites de la comunidad local (pueblo). No existen redes de contactos a niveles superiores.

    9.5   Los proyectos financiados con donaciones han creado nuevas formas de OSC, principalmente centradas en la transferencia de información y conocimientos en los ámbitos de la política de adhesión, la agricultura, el medio ambiente, la protección de los derechos humanos y similares. Los recortes en las donaciones provocaron la desaparición de muchas de estas organizaciones.

    9.6   El papel de las organizaciones de agricultores: durante la transición, el antiguo sistema de cooperativa de la época socialista desapareció en cierta medida. Más tarde, muchos proyectos financiados con donaciones, dirigidos principalmente a modernizar la producción agrícola, favorecieron e incluso condicionaron los procesos de asociación de los agricultores. Actualmente, el impacto real de diversas asociaciones de agricultores y productores en las políticas agrícola y de desarrollo rural es relativamente escaso. La mayoría, no obstante, desempeña un papel importante en la transferencia de información, en varios servicios de asesoramiento y en la promoción de productos agrícolas.

    9.7   La aplicación del enfoque Leader al desarrollo rural muestra cómo el establecimiento de contactos y la promoción del diálogo a nivel local puede incrementar la participación de la sociedad civil en la preparación y la aplicación de estrategias de desarrollo local. Su enfoque de asociación de abajo arriba, incluidas varias partes interesadas locales, ha obtenido resultados esperanzadores en muchos países de la UE y se considera un instrumento útil para fomentar el empleo en zonas rurales.

    10.   Aspectos que es necesario abordar para alcanzar una economía rural más diversificada

    10.1   Agricultura diversificada y basada en el conocimiento

    10.1.1   La intensificación y las mejoras tecnológicas en la agricultura están dando paso a nuevas oportunidades de empleo en diferentes actividades de acompañamiento, como el transporte, envasado, instalaciones de almacenamiento, venta y revisión de equipo mecánico, control de calidad, etc.

    10.1.2   La diversificación en el propio sector agrícola hacia el valor añadido de los productos agrícolas (agricultura ecológica, producción de alimentos y carne de calidad, productos con el estatus de Indicación Geográfica Protegida, alimentos tradicionales procesados, etc.) también puede traer consigo nuevas posibilidades para el desarrollo futuro y la reducción del desempleo encubierto.

    10.2   Inversión en infraestructuras rurales

    Una infraestructura de calidad, como carreteras, agua, electricidad y servicios de información y telecomunicaciones, puede estimular el desarrollo tanto de negocios agrícolas como de no agrícolas. Al mismo tiempo, una infraestructura de calidad mejora el nivel de vida de los hogares rurales al incrementar la movilidad y el acceso a los servicios sociales, incluidas la sanidad y la educación.

    10.3   Crear capital humano

    Una mano de obra rural más formada y adaptable tendrá más oportunidades de encontrar empleo fuera del sector agrícola. Resulta particularmente importante garantizar que los programas de formación profesional estén en consonancia con las necesidades de los programas de diversificación rural. Los programas de formación continua, precertificación y refuerzo de los conocimientos y las capacidades de gestión son particularmente importantes.

    10.4   Crear un entorno favorable para los negocios

    10.4.1   Fomentar el espíritu empresarial y una creación más rápida de pequeñas y medianas empresas (PYME) en las zonas rurales también ayudaría a diversificar las actividades económicas y a evitar que los jóvenes se vayan. Unos sistemas impositivos poco atractivos y unos procedimientos poco eficientes de inscripción de empresas, combinados con una infraestructura deficiente y la falta de jóvenes formados obstaculizan las inversiones y los negocios nuevos.

    10.4.2   El acceso a facilidades de crédito adaptadas a las necesidades de la población rural sigue siendo un problema específico. Es necesario animar a bancos y otras instituciones financieras a que concedan préstamos a la agricultura. Esto también es importante en relación con las normas de cofinanciación para los fondos del IPARD.

    10.5   Desarrollar servicios de divulgación y asesoramiento eficientes

    Los servicios de divulgación y asesoramiento deberían pasar de proporcionar asesoramiento técnico a los agricultores a centrarse en un conocimiento más innovador orientado a las necesidades y a la transferencia de información. Los servicios de divulgación modernos deberían dar respuesta a las necesidades de la población rural en general (consumidores, empresarios, agricultores, pobres, etc.) y ayudar a la población rural a adoptar nuevos principios políticos y normas.

    10.6   Resurgimiento de las cooperativas mediante una mejora del marco institucional y el refuerzo de sus recursos humanos y los programas de apoyo

    Las cooperativas son organizaciones de la sociedad rural tradicionales que tienen el potencial de desempeñar un papel clave en el desarrollo del capital social en las zonas rurales. Pueden crear nuevas oportunidades de empleo, generar ingresos adicionales y permitir que la población participe de manera activa en el desarrollo de su comunidad.

    El desarrollo de empresas sociales también puede proporcionar oportunidades para nuevos puestos de trabajo, especialmente para las mujeres y los jóvenes, los grupos más vulnerables.

    10.7   Fomento de enfoques de abajo arriba (como el programa Leader)

    Se necesita una mejor conexión y coordinación de diversos agentes rurales, tanto en términos verticales (organismos gubernamentales a distintos niveles – nacional, regional y local) como horizontales (empresarios, asociaciones profesionales, agricultores, etc.). Las políticas de desarrollo local deberían aplicarse de manera más coordinada entre las instituciones competentes y siguiendo un proceso de toma de decisiones de abajo arriba.

    10.8   Turismo y agroturismo

    10.8.1   El turismo rural puede ser un importante desafío para el desarrollo en las zonas rurales. La zona de los Balcanes Occidentales ofrece un patrimonio natural, cultural e histórico bien conservado, alimentos de calidad y una relativa proximidad a los mercados turísticos de la UE. El turismo ecológico y las nuevas tendencias de desarrollo sostenible, que promueven un entorno y un estilo de vida saludables (incluidos productos y alimentos ecológicos como la carne de ternera, plantas medicinales, frutos silvestres, setas, etc.) encajan perfectamente con el patrimonio cultural y natural de la región.

    10.8.2   No obstante, los modernos y activos turistas rurales exigen servicios de calidad, alojamientos acogedores y una gama de actividades lúdicas y culturales. Hay una serie de obstáculos que aún dificultan el desarrollo del turismo rural: una infraestructura deficiente, marcas de productos regionales poco desarrolladas (recuerdos), capacidad limitada y mala calidad del alojamiento, escasa señalización de las atracciones turísticas, falta de gestión de destinos turísticos, etc.

    10.9   Los proyectos transfronterizos también podrían ser un buen vehículo para hacer un mejor uso del potencial de desarrollo local (una red vial común, redes de energía, instalaciones turísticas, marcas locales, etc.).

    10.10   Energía renovable – una fuente de empleo e ingresos en potencia

    La mayoría de las plantas de energía renovable se ubicarán en zonas rurales: cultivos energéticos, centrales de biogás, producción de biocarburantes, producción de bolas y briquetas, centrales eólicas, etc. Estas plantas no solo se construirán, sino que también habrá que mantenerlas y revisarlas durante el período de funcionamiento, lo que garantizará empleo e ingresos adicionales.

    Bruselas, 21 de septiembre de 2011.

    El Presidente del Comité Económico y Social Europeo

    Staffan NILSSON


    (1)  Albania, Bosnia y Herzegovina, Croacia, la antigua República Yugoslava de Macedonia, Kosovo (conforme a la Resolución del Consejo de Seguridad de NU 1244/99), Montenegro y Serbia.

    (2)  Eje I: aumento de la competitividad del sector agrícola, Eje II: apoyo del medio ambiente y la gestión de las tierras, Eje III: fomento de la diversificación de las actividades económicas y mejora de la calidad de vida en las zonas rurales, Eje IV: enfoque Leader.

    (3)  Programa de la UE que utiliza el acrónimo francés de Liaison Entre Actions de Développement de l'Economie Rurale o, lo que es lo mismo, relaciones entre actividades de desarrollo de la economía rural.

    (4)  Dictamen del CESE DO C 132, 3.5.2011, p. 63, punto 3.3.4 «El futuro de la PAC».

    (5)  La superficie total de los países de los Balcanes Occidentales es de 264 462 km2 (lo que equivale al 6 % de la superficie de la UE). Tienen una población de 26,3 millones, el 50 % de la cual reside en zonas rurales. La densidad de población media de 89,2 personas por km2 es mucho menor que la de la UE (114,4).

    (6)  Informes de seguimiento de la Comisión Europea, noviembre de 2010: http://ec.europa.eu/enlargement/press_corner/key-documents/reports_nov_2010_es.htm

    (7)  IPARD, Instrumento de preadhesión en favor del Desarrollo Rural, incluye nueve medidas organizadas en tres ejes prioritarios: 1: mejorar la eficiencia de los mercados y la aplicación de las normas de la UE, 2: establecer acciones preparatorias para la ejecución de las medidas agroambientales y de las pautas de la iniciativa Leader, 3: desarrollar la economía rural, con aproximadamente 1 000 millones de euros concedidos para el período 2007-2013; el total de los fondos IPA asciende a más de 10 000 millones de euros para el período 2007-2013.

    (8)  Dictamen del DO C 175, 28.7.2009, p. 37, La sociedad civil en las zonas rurales.

    (9)  Dictámenes DO C 18, 19.1.2011, p. 11, DO C 317, 23.12.2009, p. 15, DO C 224, 30.8.2008, p. 130, DO C 204, 9.8.2008, p. 120, DO C 27, 3.2.2009, p. 140, DO C 44, 16.2.2008, p. 121.

    (10)  Instrumento para la sociedad civil.


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