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Document 52012AE2595

    Dictamen del Comité Económico y Social Europeo sobre la Comunicación de la Comisión — Estudio prospectivo anual sobre el crecimiento 2013 [COM(2012) 750 final]

    DO C 133 de 9.5.2013, p. 81–89 (BG, ES, CS, DA, DE, ET, EL, EN, FR, IT, LV, LT, HU, MT, NL, PL, PT, RO, SK, SL, FI, SV)

    9.5.2013   

    ES

    Diario Oficial de la Unión Europea

    C 133/81


    Dictamen del Comité Económico y Social Europeo sobre la Comunicación de la Comisión — Estudio prospectivo anual sobre el crecimiento 2013

    [COM(2012) 750 final]

    2013/C 133/15

    Ponente general: Xavier VERBOVEN

    El 19 de diciembre de 2012, de conformidad con el artículo 304 del Tratado de funcionamiento de la Unión Europea, la Comisión decidió consultar al Comité Económico y Social Europeo sobre la

    Comunicación de la Comisión - Estudio Prospectivo Anual sobre el Crecimiento 2013

    COM(2012) 750 final.

    El 13 de noviembre de 2012, la Mesa del Comité encargó al Comité Directivo Europa 2020 la preparación de los trabajos del Comité sobre este asunto.

    En vista del carácter urgente de este dictamen, el Comité Económico y Social Europeo designó a Xavier VERBOVEN como ponente general en su 487o pleno de los días 13 y 14 de febrero de 2013 (sesión del 13 de febrero de 2013), y aprobó por 180 votos a favor, 4 votos en contra y 7 abstenciones el presente dictamen.

    1.   Conclusiones y recomendaciones

    1.1

    El Comité destaca el hecho de que el Estudio Prospectivo Anual sobre el Crecimiento (EPAC) correspondiente al presente año se publica en un contexto de perspectivas económicas y de empleo sombrías, aunque también en un momento de nuevas medidas y compromisos, como el Pacto por el Crecimiento y el Empleo o la reforma en profundidad de la gobernanza económica de la UE. El Comité insta a que el Pacto por el Crecimiento y el Empleo y las medidas destinadas a romper el vínculo entre los bancos y la deuda soberana, incluidos una unión bancaria y el nuevo programa del BCE (operaciones monetarias de compraventa), se apliquen con rapidez y de manera equilibrada, ya que serán un componente indispensable en el camino hacia la recuperación y el restablecimiento de la confianza.

    1.2

    Si bien existen dudas sobre la capacidad de la UE para alcanzar a tiempo los objetivos de Europa 2020, el CESE lamenta que el EPAC 2013 no logre analizar las causas de que no se hayan realizado progresos hacia estos objetivos.

    1.3

    Habida cuenta de la alarmante situación de la economía, las consecuencias negativas sobre la cohesión social, la elevada y creciente tasa de desempleo y el aumento de la pobreza, el Comité se muestra reticente ante la continuación de la actual política de austeridad y advierte de las graves consecuencias de una recesión profunda y prolongada, que puede debilitar estructuralmente la economía y poner en peligro su transición hacia un modelo sostenible desde el punto de vista medioambiental. Muchos otros protagonistas de la política internacional han mostrado una preocupación similar sobre la situación de Europa y el impacto de la austeridad sobre el crecimiento económico.

    1.4

    En lo que se refiere a la idea de consolidación «favorable al crecimiento», el Comité ya exigió en el pasado (1) la consolidación de las finanzas públicas a lo largo de un periodo lo más flexible posible para no romper la dinámica del crecimiento y lograr un equilibrio «inteligente» entre ingresos y gastos, oferta y demanda. El Comité reitera asimismo su advertencia sobre el peligro que conlleva socavar los sistemas de servicios públicos y solidaridad colectiva, a fin de evitar que se debilite la seguridad social contra los grandes riesgos de la sociedad (desempleo, enfermedad, vejez) y aumente el ahorro como medida de precaución.

    1.5

    En lo que se refiere al concepto de consolidación «diferenciada», y a la propuesta de que aquellos Estados miembros que sufren graves problemas financieros puedan imprimir «un ritmo rápido al ajuste fiscal», mientras que a otros Estados miembros se les permite dejar que sus estabilizadores automáticos desempeñen su función, el Comité duda que pueda funcionar este tipo de combinación de políticas. Ello puede tener un claro impacto negativo sobre la zona euro en su conjunto y, en particular, sobre aquellos Estados miembros que ya están atravesando una profunda recesión inducida por la austeridad. Al mismo tiempo, es evidente que, a la hora de salir de la crisis, algunas economías han de hacer un esfuerzo mucho mayor que otras para restablecer la estabilidad y el crecimiento.

    1.6

    El Comité se muestra preocupado por las políticas económicas desequilibradas y por el gran peso que se ha dado a la austeridad. El Comité considera que la consolidación fiscal para corregir los desequilibrios presupuestarios graves requiere un plazo más largo, e insta a equilibrar el plazo fijado para la consolidación fiscal con un Pacto por el Crecimiento y el Empleo considerablemente reforzado y tangible.

    1.7

    El EPAC 2013 parece justificar la consolidación fiscal mediante la necesidad de confianza, en particular de la confianza de los mercados financieros. Aunque el CESE reconoce la importancia del acceso al crédito y de resolver la situación del sector de los mercados financieros, quiere señalar que la confianza de los hogares y las empresas es igualmente importante, y que no puede existir un clima de confianza si las empresas están preocupadas por la demanda y los ciudadanos temen por sus puestos de trabajo, salarios o seguridad social. La confianza de los mercados financieros debe ir de la mano con la confianza de los consumidores y de los productores.

    1.8

    El Comité exige una actuación contundente para restablecer el crecimiento, el empleo y la competitividad en la economía europea, y pide a la actual Presidencia que lidere una agenda de crecimiento decidida. Se requieren medidas ambiciosas para el crecimiento y el empleo y una política de inversión centradas a la vez en un relanzamiento a corto plazo y en una transformación estructural de la economía europea para responder a los desafíos fundamentales de la sostenibilidad, el aumento y la mejora del empleo, la convergencia social hacia arriba y la competitividad basada en la innovación.

    1.9

    Es importantísimo secuenciar las políticas para relanzar la economía con políticas de ajuste fiscal (2).

    El nuevo planteamiento político para el futuro de Europa ha de basarse en varios principios. En vez de dejar que los Estados miembros compitan entre sí, debe existir un enfoque europeo supranacional y plurianual altamente integrado. Es necesario controlar y orientar las fuerzas de los mercados, y en particular de los mercados financieros, mediante prioridades políticas decididas democráticamente. Las finanzas deben ser sólidas, pero también justas y distribuidas equitativamente. Las regiones más fuertes deben apoyar a las regiones más débiles, ayudando a estas últimas a progresar hacia una economía más productiva, más fuerte e innovadora. A cambio, los Estados miembros que se encuentren bien situados para generar ingresos fiscales adicionales, deben utilizarlos para reducir la carga de la deuda.

    1.10

    El Comité acoge favorablemente el Pacto por el Crecimiento y el Empleo y pide a la Comisión y al Parlamento Europeo que lo apliquen con rapidez y que vayan más allá, transformándolo en un amplio programa europeo de inversiones. El CESE reitera, por lo tanto, su llamamiento para reforzar el presupuesto conforme a las ambiciones de la UE y los desafíos que esta afronta, alcanzar rápidamente un acuerdo sobre el próximo Marco Financiero Plurianual y otorgar un papel destacado al BEI, que trabaja en proyectos con gran capacidad de generar empleo (como, por ejemplo, proyectos para las pymes, infraestructuras clave, energía y clima).

    1.11

    El CESE reitera asimismo la importancia de la política de cohesión para lograr la convergencia en toda la UE.

    1.12

    A la hora de reactivar el crecimiento, el Comité reitera el potencial que ofrecen el mercado único y la necesidad de innovación para la competitividad de la economía europea. Destaca el importante papel de las empresas, en particular de las pymes, de la iniciativa empresarial y la creación de empresas, de las empresas sociales y las cooperativas en el proceso de recuperación.

    1.13

    Dada la relación existente entre los aspectos financieros, económicos, sociales y medioambientales de la crisis, el CESE considera que la ecologización de la economía y del semestre europeo debería ser objeto de una mayor atención, y exige una mayor participación de la sociedad civil en estos ámbitos.

    1.14

    En lo que se refiere al empleo y a la mejora de las cualificaciones, el CESE reitera la necesidad de invertir en educación, formación y formación permanente (incluidas la formación en el puesto de trabajo y los sistemas de aprendizaje duales), para solventar los problemas de falta de cualificación o de inadecuación de esta.

    El Comité reitera su llamamiento para que se facilite la participación en el mercado laboral, mejorando los servicios públicos de empleo, potenciando las medidas activas en favor del mercado de trabajo y apoyando la iniciativa empresarial y el empleo autónomo. Deben realizarse todos los esfuerzos posibles para movilizar las inversiones con alto impacto en el empleo.

    El CESE se remite a sus dictámenes recientes al respecto, y actualmente está elaborando dictámenes específicos sobre el «paquete de medidas sobre el empleo juvenil» (3) y sobre las futuras orientaciones para las políticas de empleo de los Estados miembros (4).

    El Comité observa que el EPAC 2013 promueve la flexibilidad en el mercado laboral sin dar demasiada importancia a la dimensión de la seguridad, o incluso sin darle ninguna importancia. Recuerda sus anteriores dictámenes donde se plantea la idea de que ha de encontrarse un equilibrio entre las necesidades en materia de flexibilidad y de seguridad y de que, en lo que se refiere a la flexiguridad, es necesario «un diálogo social sólido y vital que permita a los interlocutores sociales participar de forma activa así como negociar, influir y asumir la responsabilidad» (5).

    En cuanto a los salarios, el Comité se muestra preocupado por el riesgo de que las reformas estructurales puedan provocar una competencia a la baja entre Estados miembros. Reitera que las reformas relativas a la fijación de los salarios exigen negociaciones a nivel nacional entre los interlocutores sociales, y pide a la Comisión que aclare su punto de vista sobre los salarios, la inflación y la productividad.

    1.15

    El Comité considera que debe prestarse mayor atención a la cuestión de la equidad y la justicia social. Los costes y los beneficios de las reformas han de ser compartidos equitativamente por todos (trabajadores, hogares, empresas).

    1.16

    El Comité exige esfuerzos adicionales para garantizar la efectividad de los sistemas de protección social a la hora de contrarrestar los efectos de la crisis, promover la integración social y aplicar una «estrategia de inclusión activa» para garantizar un mercado laboral integrador y combatir la pobreza.

    1.17

    Por último, el CESE reitera la necesidad de mejorar la responsabilidad y legitimidad democráticas de los distintos procesos del semestre europeo y la coordinación de las políticas económicas nacionales. El diálogo social y civil es fundamental para conformar y aplicar adecuadamente las políticas y reformas. Por lo tanto, es necesaria una estrecha colaboración y concertación con los agentes sociales. El Comité solicita que los interlocutores sociales y la sociedad civil organizada tengan un papel más destacado a nivel de la UE, y especialmente a nivel nacional. Una mayor participación de los interlocutores sociales tendría como resultado una mayor aplicación.

    2.   Introducción

    2.1

    La Comunicación de la Comisión «Estudio Prospectivo Anual sobre el Crecimiento» (EPAC) para 2013, que abre el semestre europeo, establece lo que la Comisión considera que deben ser las prioridades presupuestarias, económicas y sociales generales para 2013. El proceso del semestre europeo tiene por objetivo mejorar la coordinación de las políticas económicas y sociales en Europa, de modo que puedan alcanzarse efectivamente los objetivos centrales de la Estrategia Europa 2020 para un crecimiento inteligente, sostenible e integrador.

    2.2

    El Estudio Prospectivo Anual sobre el Crecimiento deberá contribuir a las decisiones nacionales en materia económica y presupuestaria, que los Estados miembros incluirán en los programas de estabilidad y convergencia y los programas nacionales de reforma.

    2.3

    Habida cuenta de la necesidad de apoyar la recuperación y restablecer la confianza, la Comisión consideró que las cinco prioridades identificadas en 2012 siguen siendo válidas para 2013: consolidación fiscal diferenciada favorable al desarrollo, restablecimiento del crédito a la economía, promoción del crecimiento y la competitividad presentes y futuros, respuesta al desempleo y a las consecuencias sociales de la crisis, y modernización de la administración pública.

    2.4

    El presente proyecto de dictamen incluye un análisis, observaciones y propuestas sobre el EPAC 2013.

    La parte 3 contiene algunas observaciones generales relacionadas con el contexto en que se publica el EPAC correspondiente al presente año.

    En la parte 4 se presentan observaciones y propuestas específicas: dado que Europa no parece estar en la senda adecuada para alcanzar los objetivos de Europa 2020, el dictamen plantea la cuestión de si debe optarse por la política de austeridad fiscal y sus consecuencias para la economía, el empleo y la cohesión social. En el dictamen se considera que ahora debe darse prioridad a la economía real, a las medidas en favor del crecimiento y el empleo. Pide a los responsables políticos europeos que, sobre todo con miras al Consejo Europeo de marzo de 2013, modifiquen su planteamiento político y vuelvan a orientar las políticas hacia un planteamiento basado en la inversión e impulsado por Europa, centrado en la reactivación de la economía, el empleo y el reto del desarrollo sostenible. Por último, el dictamen reitera la importancia de la participación de la sociedad civil organizada y de los interlocutores sociales en la elaboración de las políticas, tanto a nivel nacional como de la UE.

    3.   Observaciones generales

    3.1

    El EPAC correspondiente al presente año se publicó en un contexto difícil, con sombrías perspectivas en materia de crecimiento y empleo. El Comité comparte las preocupaciones plasmadas en el EPAC relativas a que la duración de la crisis no ha ayudado a que los Estados miembros pudieran seguir avanzando en el cumplimiento de los objetivos asumidos en materia de empleo, I+D, clima/energía, educación y lucha contra la pobreza, y a que existe un escepticismo creciente sobre la capacidad de la UE para alcanzar dichos objetivos.

    El Comité observa asimismo que el EPAC 2013 se ha redactado con el telón de fondo de unos acontecimientos sin precedentes. Por una parte, el Consejo Europeo de junio de 2012 adoptó un Pacto por el Crecimiento y el Empleo (6). Por otra parte, se introdujeron cambios fundamentales en la arquitectura de gobernanza de la Unión (en particular una mayor supervisión recíproca de las políticas fiscales), debido a la incapacidad de la estructura existente para afrontar la crisis económica y evitar su contagio, que pone en peligro la propia existencia del euro y de la Unión Europea y ha prolongado la recesión, generando una alta tasa de desempleo. El Comité insta a que se apliquen estas medias con rapidez y de forma equilibrada, ya que serán un elemento fundamental del camino hacia la recuperación y el restablecimiento de la confianza de los inversores, las empresas y los consumidores.

    3.2

    El CESE toma nota de la publicación reciente de dos documentos importantes: «Hacia una auténtica Unión Económica y Monetaria» (7), y «Un Plan director para una Unión Económica y Monetaria profunda y auténtica» (8), sobre el que el Comité está elaborando actualmente un dictamen.

    El Comité acogió favorablemente la afirmación sobre la necesidad de romper el vínculo entre los bancos y la deuda soberana y los primeros movimientos encaminados a lograr una unión bancaria (9). Se alcanzó un compromiso para hacer «lo que sea necesario» a fin de garantizar la estabilidad financiera, y el BCE se ha comprometido a adoptar acciones significativas para calmar a los alterados mercados europeos de deuda soberana.

    Una unión bancaria contribuiría a la igualdad de acceso al crédito para los hogares y empresas en todas las partes de la UE y permitiría al Mercado Único recuperar competitividad para lograr los objetivos de Europa 2020.

    4.   Observaciones y propuestas específicas

    4.1   Europa no está en la senda adecuada para lograr los objetivos de Europa 2020, y los responsables políticos han de reconocerlo urgentemente

    4.1.1

    El Comité observa con pesar que, aparte de una breve referencia a un informe de Eurostat (10) en una nota a pie de página, el EPAC de la Comisión apenas menciona la Estrategia Europa 2020. En la Comunicación simplemente se señala que «en conjunto, Europa se está quedando rezagada respecto a sus objetivos». No obstante, en el EPAC no se analizan adecuadamente las causas exactas de que no se haya avanzado en la consecución de los objetivos de Europa 2020, y ni siquiera se plantea la pregunta de si las opciones políticas actuales son responsables de haber apartado aún más a la UE de los objetivos de Europa 2020. El Comité exige una revisión radical del proceso de Europa 2020 y la reasignación de fondos estructurales para cumplir estos objetivos, reequilibrando así las políticas de competitividad y austeridad con políticas de crecimiento, empleo y políticas sociales.

    4.1.2

    El Comité expresa su preocupación por la constante disminución de la tasa de empleo de la población con edades comprendidas entre los veinte y los sesenta y cuatro años. Este porcentaje se ha ido reduciendo del 70,3 % en 2008 al 68,6 % en 2011, mientras que el objetivo de la Estrategia Europa 2020 es que el 75 % de la población de este tramo de edad esté trabajando. En términos absolutos, Europa ha perdido cinco millones de puestos de trabajo durante este periodo (11). Los efectos de esta situación se están evidenciando en el aumento de la tasa de desempleo, que actualmente alcanza el 10,7 % en la UE 27 e incluso el 11,8 % en la zona euro (12).

    La crisis ha generado un alto nivel de desempleo y, combinada con los recortes de las medidas de austeridad en el gasto social público, ha añadido entre 2009 y 2011 5,9 millones más a los 113,8 millones de ciudadanos en riesgo de pobreza y exclusión social en la UE (el 24,2 % de la población) (13).

    De continuar estas tendencias, resulta difícil ver cómo pueden alcanzarse los objetivos de Europa 2020 relativos al empleo y a sacar a veinte millones de personas de la situación de pobreza.

    4.1.3

    La economía europea, en fuerte contraste con las otras principales economías del mundo, ha vuelto a caer en recesión en 2012, y las previsiones económicas auguran un crecimiento extremadamente débil en 2013 y una recuperación incierta, pero igualmente débil, en 2014. Esto implica que, si se mantiene la orientación de la política presupuestaria y no se aplican políticas adicionales para impulsar el crecimiento y el empleo, la situación social y de desempleo va a seguir empeorando.

    4.1.4

    El Comité observa que otros muchos agentes políticos internacionales expresan preocupaciones similares sobre la situación de Europa. La OIT ha advertido de que la zona euro podría perder otros 4,5 millones de empleos si no se abandona de manera concertada la estrategia de austeridad (14). El informe «Situación y perspectivas de la economía mundial 2013» (15) de las Naciones Unidas advierte que la recesión de 2012 continuará y se intensificará hasta bien entrado 2015 (16) si Grecia, Italia, Portugal y España se ven obligadas a adoptar recortes presupuestarios aún más profundos en 2013. Junto con el «abismo fiscal» de Estados Unidos y el aterrizaje duro de China, la estrategia europea de consolidación fiscal se ve como un riesgo para la actividad económica mundial. Incluso el FMI, en sus Perspectivas de la economía mundial (17), tiene serias dudas y ha admitido que el impacto de la austeridad sobre el crecimiento económico se ha infravalorado mucho, y ha puesto en tela de juicio la magnitud de los multiplicadores fiscales utilizados.

    4.1.5

    El Comité advierte a los responsables políticos europeos de que una recesión prolongada puede debilitar estructuralmente la economía y poner en peligro la transición hacia otro modelo medioambiental y energético.

    El desempleo de larga duración puede generar pérdida de cualificaciones, desilusión, discriminación en las nuevas contrataciones y salida del mercado de trabajo, y por lo tanto tendría un impacto estructural adverso duradero sobre la productividad y el potencial de crecimiento.

    La falta de inversión pública y privada (al tener las empresas escasas perspectivas de demanda) puede afectar al potencial de crecimiento de la economía, ya que la incorporación de los avances técnicos y de la innovación resulta deficiente. Para contrarrestar esta situación, urge revisar la elaboración de las políticas macroeconómicas y fomentar medidas de reforma como las políticas activas del mercado de trabajo, incentivos a la inversión y políticas de integración social.

    Consolidación fiscal diferenciada y favorable al crecimiento

    4.1.6

    Aunque el EPAC 2013 reconoce que la consolidación fiscal puede tener un impacto negativo a corto plazo sobre la economía, avanza inmediatamente otros dos argumentos que minimizan dicho impacto. El Comité quiere abordar ambos argumentos.

    1)

    El EPAC 2013 se refiere al concepto de «consolidación favorable al crecimiento», implicando que los recortes presupuestarios son más «favorecedores» del crecimiento que nuevos aumentos de los impuestos en países donde la carga fiscal es ya de por sí elevada. Además de observar que la Comisión no especifica qué representaría una carga fiscal «elevada», el Comité recuerda su dictamen de 2011 sobre Estrategias para una consolidación inteligente de la política presupuestaria (18), donde defendió la consolidación de las finanzas públicas a lo largo de un periodo lo más flexible posible para no romper la dinámica del crecimiento y lograr un equilibrio «inteligente» entre ingresos y gastos, y entre oferta y demanda agregadas. En el mismo dictamen, el Comité también advirtió del peligro de socavar los sistemas de servicios públicos y solidaridad colectiva. En efecto, si, tal y como ya ha sucedido en varios Estados miembros, se debilita gravemente la seguridad social frente a los grandes riesgos de la sociedad (desempleo, enfermedad, envejecimiento), es lógico que los hogares reaccionen ante esta generalización de la inseguridad aumentando sus ahorros como medida de precaución –que es lo último que necesita una economía en recesión.

    2)

    El otro argumento consiste en que los Estados miembros que se enfrentan a grandes dificultades financieras deberían continuar con la austeridad, e incluso imprimir «un ritmo rápido al ajuste fiscal», mientras que a otros Estados miembros se les permitiría que dejasen a sus estabilizadores automáticos desempeñar su función.

    Aunque es evidente que, a la hora de salir de la crisis, algunas economías han de realizar esfuerzos mucho mayores que otras para restablecer la estabilidad y el crecimiento, el Comité duda que este tipo de combinación de políticas pueda funcionar. Combinar una política presupuestaria altamente restrictiva en muchos Estados miembros con una política presupuestaria neutra en algunos otros tendría un claro impacto negativo para la zona euro en su conjunto y, en particular, sobre aquellos Estados miembros que ya están atravesando una profunda recesión inducida por la austeridad.

    4.1.7

    En resumidas cuentas, el Comité muestra su preocupación por unas políticas económicas que están desequilibradas. Se ha dado un peso excesivo a la austeridad, y la consolidación fiscal para corregir los graves desequilibrios presupuestarios requiere un plazo más largo. Cifras recientes del Monitor Fiscal del FMI (19) confirman este punto. En un breve espacio de tiempo (2011 – 2012), se ha perdido el 3 % del PIB (20) de la economía de la zona euro mediante recortes en el gasto y aumento de los impuestos, desencadenando así una nueva recesión. Esto representa un ritmo de consolidación tres veces superior al que los responsables políticos europeos habían establecido previamente en el Pacto de Estabilidad reformado (que menciona una reducción mínima del déficit estructural del 0,5% del PIB anual).

    A fin de evitar que las mismas causas produzcan las mismas consecuencias, el Comité insta a que se equilibre el plazo fijado para la consolidación fiscal mediante un Pacto por el Crecimiento y el Empleo considerablemente reforzado y con resultados tangibles.

    4.1.8

    El EPAC 2013 parte de la idea de que es sumamente importante restablecer y mantener la confianza, en particular la confianza de los mercados financieros, ya que estos mercados tienen la capacidad de limitar la disponibilidad de financiación en los Estados miembros. El EPAC 2013 se basa en esta idea para continuar en la senda de la política de austeridad.

    4.1.9

    El Comité reconoce que los mercados financieros juegan un papel crucial en la crisis y que resolver los problemas de ese sector es un elemento vital para la recuperación. En efecto, el acceso al crédito es lo que mantiene viva a cualquier economía, ya que sin él las empresas no pueden invertir ni comerciar, y los consumidores no pueden adquirir bienes o viviendas.

    No obstante, el Comité considera que la confianza de otros agentes económicos (hogares y empresas) es igualmente importante. Aunque un mejor acceso al crédito permitiría a las empresas comerciar y crecer, unos tipos de interés más bajos y la abundancia de crédito no tienen los mismos efectos si los ciudadanos están preocupados por su puesto de trabajo, su salario o su seguridad social, y si las empresas tienen serias dudas sobre las perspectivas de la demanda.

    El Comité quiere hacer hincapié en que la confianza de los mercados financieros y la confianza de los consumidores y productores no son necesariamente contrapuestas. A medida que un mayor número de empresas, sobre todo pymes, puede volver a operar normalmente al haberse restablecido el acceso a la financiación, la confianza volverá gradualmente a los consumidores.

    Además, si bien los mercados están preocupados por la deuda soberana, están aún más preocupados cuando la economía está en riesgo de colapso.

    El Comité reitera una idea clave que presentó en su dictamen sobre el EPAC 2012: «Sin una tasa de crecimiento suficiente, no puede resolverse la crisis de la deuda soberana» (21). Otorgar una baja prioridad al crecimiento implicaría un alto riesgo de conducir a la economía a la recesión, lo que a su vez debilitaría inmediatamente la sostenibilidad de la deuda.

    4.2   Las medidas de crisis deben ceder el paso, y ahora debe darse prioridad a la economía real, a las medidas en favor del crecimiento y el empleo.

    Transformar el Pacto por el Crecimiento y el Empleo en un amplio programa europeo de inversiones para el desarrollo sostenible

    4.2.1

    El Comité exige una actuación decidida para restablecer el crecimiento, el empleo y la competitividad a la economía europea, y pide a la actual Presidencia que lidere una agenda de crecimiento ambiciosa. Con demasiada frecuencia el Consejo Europeo ha apoyado acciones minimalistas para salir de la crisis y solo se ha movido cuando las presiones de los mercados han amenazado con destruir el proyecto del euro. Es necesaria una persistencia más genuina a la hora de perseguir una gobernanza económica sólida y equilibrada, junto con reformas que impulsen la competitividad estructural en toda la Unión y traigan al primer plano del proceso del semestre europeo la aplicación de la agenda de Europa 2020. Toda acción correctora del presupuesto traerá contracción, pero si se realiza manteniendo los gastos que fomentan el potencial de crecimiento (educación, formación para los desempleados, I+D, apoyo a las pymes) y va acompañada de avances tangibles para eliminar la fragmentación del sector financiero, podrían mantenerse las perspectivas de crecimiento y empleo a medio y largo plazo.

    4.2.2

    El Comité acoge favorablemente el Pacto por el Crecimiento y el Empleo, que representa un primer paso importante para reconocer que el crecimiento es un elemento esencial para salir de la crisis, y pide a la Comisión y al Parlamento Europeo que lo apliquen con rapidez y que vayan más allá, transformándolo en un amplio programa europeo de inversiones.

    4.2.3

    Debe otorgarse prioridad a los «gastos que propicien el crecimiento», como la educación y las cualificaciones, la innovación (que resulta clave para la competitividad de la economía europea), la ecologización de la economía (que debe ser un motor de la próxima revolución industrial) o las grandes redes (como, por ejemplo, la internet de alta velocidad o las interconexiones de la energía y los transportes). Es fundamental explotar el potencial de los sectores con alta intensidad de empleo: sanidad, economía verde, «economía plateada», construcción, servicios empresariales, turismo, etc.

    4.2.4

    El Mercado Único sigue ofreciendo posibilidades para aportar beneficios directamente percibidos a las empresas, consumidores y ciudadanos, pero es necesario un mayor desarrollo, por ejemplo, en el campo de los servicios, la movilidad, el comercio electrónico, la Agenda Digital, la contratación electrónica, las microempresas y empresas familiares, medidas de apoyo a la creación de nuevas empresas, junto a medidas de protección de los consumidores y en favor de la dimensión social del Mercado Único. Son necesarias una mayor transparencia y sensibilización, participación e implicación de la sociedad civil (22).

    4.2.5

    El Comité destaca el importante papel de las empresas, y en particular de las pymes, de la iniciativa empresarial y la creación de empresas en el proceso de recuperación y a la hora de impulsar el crecimiento económico, la innovación, las cualificaciones y la creación de empleo. Para aprovechar el potencial de las pymes se requieren distintas medidas, como facilitar su internacionalización, eliminar las cargas administrativas, reducir los costes para las empresas de nueva creación y facilitar su acceso al crédito, a los mercados de capitales, a las plataformas de bonos orientadas a las pymes, los fondos estructurales y las garantías para préstamos.

    4.2.6

    El Comité señala asimismo que las empresas sociales son elementos clave del modelo social europeo y del mercado único. Merecen un amplio reconocimiento y promoción, sobre todo en el difícil clima económico actual, y sus especificidades deben ser tenidas en cuenta a la hora de diseñar las políticas europeas.

    4.2.7

    También debe mencionarse el papel de las cooperativas, ya que contribuyen a la cohesión social y territorial, desarrollan nuevas iniciativas empresariales y son más estables y resistentes que otras formas de empresas, protegiendo el empleo incluso en tiempos de crisis (23).

    4.2.8

    El Comité acoge favorablemente que en el EPAC 2013 se subraye la importancia de avanzar hacia el desarrollo sostenible, la energía renovable y la eficiencia energética para lograr los objetivos de Europa 2020 en materia de cambio climático/energía (24). El fomento de una economía «verde» eficiente en el uso de recursos y con bajas emisiones de carbono es esencial para mantener la competitividad económica y potenciar el empleo. También es necesaria la renovación a gran escala de edificios para aumentar su eficiencia energética, así como invertir en servicios de transporte respetuosos con el medio ambiente, en la gestión de residuos y de los recursos hídricos. Esto deberá ir acompañado de un fomento de las redes de transmisión de energía para facilitar el transporte a gran escala y el intercambio de electricidad en toda Europa. Para reforzar aún más la competitividad europea, todo ello debería completarse con inversiones en redes transeuropeas de transporte de alto rendimiento y la ampliación de las infraestructuras para las redes de banda ancha.

    4.2.9

    La política industrial, el uso eficiente de los recursos naturales y la innovación han de ir de la mano para crear un desarrollo sostenible.

    4.2.10

    Es necesaria una gran inversión para fomentar las transformaciones estructurales y situar a la economía de la UE en la senda hacia un crecimiento inteligente, sostenible e integrador.

    El Comité toma nota del acuerdo sobre el próximo Marco Financiero Plurianual (MFP) alcanzado por los jefes de Estado y de Gobierno y reitera la importancia de contar con un MFP que permita lograr los objetivos de Europa 2020.

    El CESE se remite a sus recientes dictámenes sobre el presupuesto de la UE (25), donde ha insistido firmemente en que la UE necesita un presupuesto reforzado para afrontar los desafíos actuales. El presupuesto de la UE no debería verse como una carga, sino como un medio inteligente para lograr economías de escala, reducir los costes e impulsar la competitividad, el crecimiento y el empleo.

    Además, podrían movilizarse nuevos recursos mediante fuentes de financiación adicionales. El CESE apoya la acción del BEI, que facilita financiación a largo plazo para inversiones en la economía real y atrae financiación privada adicional. El Comité acoge favorablemente el énfasis en proyectos con un impacto máximo en el crecimiento sostenible y en el potencial de empleo (como los proyectos para las pymes, la economía del conocimiento, el capital humano, la eficiencia energética y el cambio climático), e insta a que el aumento de la financiación facilitada al BEI se canalice rápidamente hacia el sector de las pymes. El Comité también acoge con satisfacción el uso de garantías del BEI para inversiones privadas en la renovación de edificios para dotarlos de una mayor eficiencia energética.

    El CESE apoya asimismo la introducción de obligaciones para la financiación de proyectos a fin de estimular la financiación de proyectos de infraestructura claves en materia de transporte, energía y TIC. Es un primer paso importante hacia un programa de inversiones de la UE muy necesario para los próximos años.

    4.2.11

    El CESE señala la importancia de la política de cohesión para lograr la convergencia económica, social y territorial en toda la UE, de acuerdo con la Estrategia Europa 2020. El CESE reitera su llamamiento en favor de una política de cohesión única y unificada con la participación activa de la sociedad civil, centrada más en resultados sostenibles reales y que pueda ayudar a los Estados miembros de la UE menos desarrollados y a los más duramente afectados por la crisis (26).

    4.2.12

    El Comité se felicita de la importancia otorgada por el EPAC a la modernización de la administración pública. En opinión del Comité, esto implica, entre otras cosas, utilizar la contratación pública para impulsar la innovación, luchar contra la corrupción, aumentar la eficacia de la recaudación fiscal, garantizar unos recursos financieros adecuados y aumentar la capacidad de absorción de fondos estructurales.

    Crear empleo y modernizar las cualificaciones

    4.2.13

    El EPAC 2013 reconoce que «tras varios años de crecimiento débil, las consecuencias sociales de la crisis están siendo graves» y que «el desempleo se ha incrementado sustancialmente y la miseria y la pobreza se están recrudeciendo». Algunos grupos se ven más duramente afectados que la media: los jóvenes, las personas con baja cualificación, los desempleados de larga duración, los progenitores solteros y las personas de origen inmigrante (27).

    Deben realizarse todos los esfuerzos posibles para movilizar las inversiones tanto públicas como privadas para fomentar el empleo. El CESE ha solicitado reiteradamente un paquete europeo de estímulo con un impacto completo sobre la política del mercado laboral, que represente el 2 % del PIB (28). El CESE ha exigido asimismo un «pacto de inversiones sociales» para afrontar la crisis de manera sostenible e invertir en el futuro (29).

    El Comité reitera su llamamiento para que se aumente la participación en el mercado laboral, se mejoren los niveles de cualificación, se facilite la movilidad, se mejoren los servicios públicos de empleo, se potencien las medidas activas en favor del mercado de trabajo y se apoye la iniciativa empresarial y el empleo autónomo. Para determinados sectores o regiones, el Comité está de acuerdo con la descripción que hace la Comisión del desfase existente entre las elevadas tasas de desempleo, por un lado, y los problemas de falta de cualificación o inadecuación de esta, por otro.

    También sugiere medidas para fomentar el diálogo social sobre la distribución del tiempo de trabajo en el nivel adecuado.

    El Comité acoge favorablemente el «Paquete de medidas sobre el empleo juvenil» publicado recientemente por la Comisión (30). Sus propuestas, entre las que figuran la aplicación de una «garantía juvenil», deberían ser oportunas y vinculantes, y estar respaldadas por suficientes recursos. Todos los Estados miembros deberían tener la posibilidad de adoptar estas propuestas.

    4.2.14

    El Comité reitera la necesidad de invertir en educación, formación y formación permanente (incluidas la formación en el puesto de trabajo y los sistemas de aprendizaje duales), para solventar los problemas de falta de cualificación o de inadecuación de esta (31).

    4.2.15

    El Fondo Social Europeo, complementado por el Fondo Europeo de Adaptación a la Globalización, deberá concentrarse en proteger a los grupos de ciudadanos desfavorecidos de los efectos de la crisis (32), y debería crearse un fondo de solidaridad específico para los jóvenes (33).

    Necesidad de un enfoque equilibrado con respecto a las reformas del mercado laboral

    4.2.16

    El Comité observa que el EPAC 2013 promueve la flexibilidad en el mercado laboral sin dar demasiada importancia a la dimensión de la seguridad, o incluso sin darle ninguna importancia.

    El Comité toma nota de que evitar la segregación en el mercado laboral reduciendo las diferencias en materia de protección del empleo entre los distintos tipos de contratos de trabajo puede contribuir a una mayor tasa de empleo.

    El Comité recuerda, no obstante, su anterior dictamen (34) donde avanza la idea de que es necesario lograr un equilibrio entre flexibilidad y seguridad. «El concepto de flexiguridad no significa un recorte unilateral e ilegítimo de los derechos de los trabajadores». El CESE ha subrayado en varias ocasiones la necesidad de «un diálogo social sólido y vital que permita a los interlocutores sociales participar de forma activa así como negociar, influir y asumir la responsabilidad sobre la definición y las características, además de evaluar los resultados de la flexiguridad» (35). El CESE reitera asimismo que, para hacer frente a mercados segmentados, es necesario proporcionar «una seguridad adecuada para los trabajadores en todas las modalidades de contrato» (36).

    El Comité señala que la flexibilidad no puede corregir los errores cometidos en la demanda macroeconómica y puede agravar la situación si se sustituyen puestos de trabajo estables y de calidad por relaciones laborales inseguras; además, la supresión de «amortiguadores de choques» (como la protección del empleo o las prestaciones de desempleo) puede hacer que la economía sea mucho más vulnerable a los choques económicos negativos.

    Reforma estructural del ámbito de los salarios

    4.2.17

    El Comité recuerda que las reformas en materia de fijación de salarios exigen negociaciones a nivel nacional entre los interlocutores sociales. Estas deben encontrar el justo equilibrio entre lograr un crecimiento suficiente de la demanda, garantizar la estabilidad de los precios, controlar las grandes (o crecientes) desigualdades y mantener la competitividad de los precios. El Comité se muestra preocupado por que las reformas estructurales en el ámbito salarial puedan alentar la competencia a la baja entre los Estados miembros, reduciendo la demanda interior en la UE y contribuyendo, mediante un excedente exterior cada vez mayor en la zona euro, a una sobrevaloración más pronunciada del euro. La OIT (37) confirma esta tendencia y advierte de sus profundas implicaciones económicas y sociales.

    El planteamiento del EPAC con respecto a los salarios mínimos, consistente en que «es importante encontrar el justo equilibrio entre la creación de empleo y la adecuación de los ingresos», refleja la idea general de que para crear empleo son necesarios diversos factores, como reducir su calidad y la disposición a aceptar una oferta de empleo. El Comité cuestiona la validez de este planteamiento, dado que la investigación de la OIT sobre las experiencias en materia de salarios mínimos en la UE no encontró pruebas para justificar la afirmación de que los salarios mínimos destruyen el empleo (38). El Comité recuerda el principio consistente en que «el trabajo debe compensar», que, aunque se estableció antes de la crisis, debe seguir aplicándose.

    El Comité insta a la Comisión a que clarifique su opinión sobre los salarios, la inflación y la productividad. Aunque en la Comunicación de la Comisión relativa al paquete de medidas sobre el empleo (39) se aclara que los salarios reales deben adaptarse a la evolución de la productividad, el EPAC 2013 no logra determinar si lo que quiere adaptar a la productividad son los salarios nominales o los salarios reales. La diferencia entre estos dos planteamientos es vital, ya que en el último caso existe la posibilidad de que los salarios nominales solo tengan en cuenta la productividad, pero ya no la inflación. Esta «regla» conllevaría el riesgo de inflación cero, que produciría deflación en caso de choques económicos negativos.

    Fomento de la justicia social

    4.2.18

    En general, el Comité considera que debe prestarse mayor atención a la cuestión de la equidad y la justicia social. Para generar confianza y garantizar la aplicación efectiva de las políticas, los costes y beneficios de la política económica y de las reformas estructurales han de ser compartidos equitativamente por todos (trabajadores, hogares, empresas). El Comité reconoce la importancia que el EPAC otorga a la transparencia y a la equidad en términos de impacto sobre la sociedad, y pide a la Comisión que vigile si las políticas de los gobiernos nacionales tienen en cuenta este aspecto en sus programas de reforma.

    Fomento de la inclusión social y lucha contra la pobreza

    4.2.19

    El Comité apoya que en el EPAC se exijan esfuerzos adicionales para garantizar la efectividad de los sistemas de protección social a la hora de contrarrestar los efectos de la crisis, promover la integración social, y aplicar una «estrategia de inclusión activa» para garantizar un mercado laboral integrador y combatir la pobreza.

    Promoción de la igualdad entre hombres y mujeres

    4.2.20

    El CESE considera que la perspectiva de igualdad entre hombres y mujeres, que no se abordó en ninguna de las siete iniciativas emblemáticas de la Estrategia Europa 2020, debe integrarse ahora en el proceso del semestre europeo (por ejemplo, en los programas nacionales de reforma), ya que es vital para lograr los objetivos principales de Europa 2020 (40).

    4.3   Importancia de la participación de la sociedad civil organizada y los interlocutores sociales en el semestre europeo

    4.3.1

    El Comité reitera la necesidad de mejorar la responsabilidad democrática y la transparencia de los distintos procesos del semestre europeo, así como la coordinación de las políticas económicas nacionales. En el actual contexto de pérdida de confianza en la capacidad de las instituciones europeas para obtener resultados, es indispensable otorgar un papel más fuerte a las instituciones que representan a los ciudadanos, los interlocutores sociales y la sociedad civil, a fin de mejorar su legitimidad y la implicación de estos últimos. El diálogo vertical y horizontal es sumamente importante (41), y deben aplicarse rápidamente las disposiciones relativas a la democracia participativa del artículo 11 del TUE (42).

    El Comité considera insuficiente el lenguaje utilizado en el EPAC para referirse al papel del diálogo social. En caso necesario, deberían emprenderse reformas estructurales en estrecha colaboración y concertación con los interlocutores sociales, en lugar de limitarse a consultarlos. El diálogo con los interlocutores sociales y con la sociedad civil organizada, como las organizaciones de consumidores, es indispensable para configurar y aplicar adecuadamente las políticas y reformas. Puede mejorar la credibilidad y la aceptación social de las reformas, ya que el consenso y la confianza pueden contribuir al compromiso de las partes interesadas y al éxito de las reformas. Los interlocutores sociales y las organizaciones de la sociedad civil pueden realizar evaluaciones del impacto de las políticas y formular las advertencias oportunas, en caso necesario. Las organizaciones sociales, y en particular los interlocutores sociales, en muchos ámbitos son también los que deben concretar en la práctica las propuestas políticas (43).

    El Comité solicita que los interlocutores sociales y la sociedad civil organizada tengan un papel más importante tanto a nivel nacional como de la UE. Deben participar de manera eficaz y oportuna en el marco del semestre europeo, en la elaboración de los estudios prospectivos anuales sobre el crecimiento, las orientaciones para las políticas de empleo, las orientaciones generales de la política económica (que, conjuntamente, conforman las Directrices Integradas Europa 2020) y las recomendaciones específicas para cada país. A nivel nacional, los interlocutores sociales y la sociedad civil organizada deberían participar más en la elaboración de los programas nacionales de reforma, y el CESE seguirá trabajando en estrecha colaboración con su red de CES nacionales e instituciones similares para facilitar información a los responsables de las políticas europeas sobre la participación de estos últimos a nivel nacional. Una mayor participación de los interlocutores sociales tendría como resultado una mayor aplicación.

    Bruselas, 13 de febrero de 2013.

    El Presidente del Comité Económico y Social Europeo

    Staffan NILSSON


    (1)  DO C 248 de 25.8.2011, pp. 8–15.

    (2)  ETUC/CES, BUSINESSEUROPE, UEAPME, CEEP, Declaración conjunta sobre la Estrategia Europa 2020, 4 de junio de 2010.

    (3)  Dictamen del CESE sobre la Comunicación de la Comisión Promover el empleo juvenil, COM(2012) 727 final, (pendiente de su publicación en el DO).

    (4)  DO C 143 de 22.5.2012, p. 94–101.

    (5)  DO C 211/48 de 19.8.2008, pp. 48-53.

    (6)  EUCO 76/12, pp. 7-15.

    (7)  Informe del Presidente del Consejo Europeo Herman Van Rompuy, 5 de diciembre de 2012.

    (8)  COM(2012) 777 final/2, de 30.11.2012.

    (9)  DO C 11 de 15.1.2013, p. 34–38.

    (10)  Eurostat, Statistics in focus 39/2012, Europe 2020 Strategy – towards a smarter, greener and more inclusive EU economy?

    (11)  COM(2012) 750 final.

    (12)  Comunicado de prensa de Eurostat no 4/2013, 8 de enero de 2013.

    (13)  Cuadro de Eurostat http://epp.eurostat.ec.europa.eu/tgm/table.do?tab=table&init=1&plugin=0&language=en&pcode=t2020_50

    (14)  OIT 2012, Eurozone job crisis: trends and policy responses, p. ej. p. 11.

    (15)  Naciones Unidas, Situación y perspectivas de la economía mundial 2013 - Informe global, publicado en diciembre de 2012, p, 28.

    (16)  – 0,9 % en 2013, – 2,1 % en 2014 y – 3,3 % en 2015.

    (17)  FMI 2012, Perspectivas de la economía mundial, Hacer frente a los altos niveles de deuda y al lento crecimiento, octubre de 2012, p. ej., p. 21 o cuadro 1.1 de la p. 41.

    (18)  DO C 248 de 25 de agosto de 2011, pp. 8-15.

    (19)  Monitor Fiscal del FMI: Taking stock – a progress report on fiscal adjustment, octubre de 2012.

    (20)  El 3 % corresponde a la modificación del déficit estructural entre 2010 y 2012; el déficit estructural se calcula sin tener en cuenta el efecto del ciclo empresarial. Este déficit necesita corregirse.

    (21)  DO C 143 de 22.5.2012, pp. 51–68, punto 16.

    (22)  DO C 76 de 14.3.2013, p. 24–30.

    (23)  DO C 191 de 29 de junio de 2012, pp. 24-29.

    (24)  Objetivos de Europa 2020: reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 20 % con respecto a la década de 1990, alcanzar un 20 % de energía procedente de fuentes renovables en 2020, y aumentar en un 20 % la eficiencia de los recursos en 2020.

    (25)  DO C 229 de 31.7.2012, pp. 32–38 y DO C 248 de 25.8.2011, pp. 75–80.

    (26)  DO C 44 de 15.2.2013, p. 76–82.

    (27)  DO C 143 de 22.5.2012, pp. 94–101.

    (28)  DO C 11 de 15.1.2013, p. 65–70.

    (29)  DO C 143 de 22.5.2012, pp. 23–28.

    (30)  COM(2012) 727 final – sobre el cual el CESE está elaborando actualmente un dictamen (SOC/474 – CES2419-2012_00_00_TRA_APA).

    (31)  El CESE está elaborando actualmente un dictamen (SOC/476 – CES658-2013_00_00_TRA_APA) sobre la Comunicación de la Comisión Un nuevo concepto de educación: invertir en las aptitudes para lograr mejores resultados socioeconómicos, COM(2012) 669 final.

    (32)  DO C 143 de 22.5.2012, pp. 82–87.

    (33)  DO C 11 de 15.1.2013, p. 65–70.

    (34)  DO C 211 de 19.8.2008, pp. 48-53.

    (35)  DO C 256 de 27.10.2007, pp. 108-113, punto 1.3.

    (36)  DO C 211 de 19.8.2008, pp. 48–53, punto 1.1.1.

    (37)  OIT 2012, Global wage report 2012/2013 – Wages and equitable growth (Informe mundial sobre los salarios 2012/2013 – Salarios y crecimiento equitativo).

    (38)  OIT 2010, The minimum wage revisited in the enlarged EU, p. 26.

    (39)  COM(2012) 173 final.

    (40)  DO C 76 de 14.3.2013, p. 8–14.

    (41)  DO C 299 de 4.10.12, pp. 122-127.

    (42)  Dictamen del CESE sobre Principios, procedimientos y acciones para la aplicación del artículo 11, apartados 1 y 2, del Tratado de Lisboa, DO C 11 de 15.1.2013, p. 8 .

    (43)  Dictamen del CESE sobre la Comunicación de la Comisión Medidas en favor de la estabilidad, el crecimiento y el empleo, DO C 44 de 15.2.2013, p. 153.


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