EUR-Lex Access to European Union law

Back to EUR-Lex homepage

This document is an excerpt from the EUR-Lex website

Document 52005IE0526

Dictamen del Comité Económico y Social Europeo sobre el tema «Transformaciones industriales en el sector de la ingeniería mecánica»

DO C 267 de 27.10.2005, p. 9–15 (ES, CS, DA, DE, ET, EL, EN, FR, IT, LV, LT, HU, NL, PL, PT, SK, SL, FI, SV)

27.10.2005   

ES

Diario Oficial de la Unión Europea

C 267/9


Dictamen del Comité Económico y Social Europeo sobre el tema «Transformaciones industriales en el sector de la ingeniería mecánica»

(2005/C 267/02)

El 1 de julio de 2004, de conformidad con el apartado 2 del artículo 29 de su Reglamento Interno, el Comité Económico y Social Europeo decidió elaborar un dictamen sobre el tema: Transformaciones industriales en el sector de la ingeniería mecánica.

La Comisión Consultiva de las Transformaciones Industriales, encargada de preparar los trabajos del Comité en este asunto, aprobó su dictamen el 27 de abril de 2005 (ponente: Sr. VAN IERSEL; coponente: Sr. CASTAÑEDA).

En su 417o Pleno de los días 11 y 12 de mayo de 2005 (sesión del 11 de mayo de 2005) el Comité Económico y Social Europeo ha aprobado por 211 votos a favor, ninguno en contra y 4 abstenciones el presente Dictamen.

Resumen

La ingeniería mecánica constituye un sector por derecho propio, aunque, como proveedor de bienes de capital y tecnologías que utilizan distintas industrias, también actúa como potenciador y provoca un efecto en cadena en muchos más sectores europeos. Se trata de una industria innovadora clave y, como tal, toda política industrial europea debe considerarla estratégica. Se adapta perfectamente a un programa concreto de objetivos establecidos a escala regional, nacional y comunitaria con el que se pretenda hacer realidad la Estrategia de Lisboa. Ello exige políticas tanto horizontales como sectoriales, además de una combinación adecuada de ambas. Tales políticas deben ayudar al sector a destacarse, no sólo en Europa sino en todo el mundo.

Existen una serie de cuestiones que deben resolverse en el proceso continuo de consultas y elaboración de políticas en la UE (en lo que se refiere a la ingeniería mecánica) que tendrán un efecto estimulador en otros procesos similares a escala nacional y regional en toda Europa. Entre las condiciones concretas que deben cumplirse en la UE se encuentran las siguientes: una legislación mejorada, que incluya la evaluación de impacto regulador antes de la aplicación de reglamentos, una puesta en práctica adecuada y la aplicación de la legislación comunitaria existente; una vigilancia efectiva del mercado; el establecimiento de una plataforma tecnológica que reduzca la distancia entre los centros de investigación y las universidades, por un lado, y el sector; reducir la creciente divergencia entre la I+D financiada por la UE y las necesidades de este sector; una política de competencia que favorezca el desarrollo y la innovación en las PYME; mejorar el acceso a los mercados financieros y una política comercial que garantice la libertad de acceso a la inversión en los mercados de terceros países. Además de todo ello tiene gran importancia adaptar las capacidades a las normas actuales.

El diálogo entre la Comisión y todas las partes interesadas de la UE sobre las consecuencias para la industria puede crear un marco beneficioso para la ingeniería mecánica de la UE y contribuirá a promover y desarrollar agrupaciones regionales sólidas. Todo ello exige un compromiso activo de las instituciones europeas, en particular de la Comisión.

1.   Introducción

1.1

La Comisión Europea está desarrollando una nueva política industrial que se basa en tres pilares: mejor reglamentación, un enfoque específico para el sector y un enfoque integrado a escala de la UE. Está directamente relacionada con la Estrategia de Lisboa y la actual revaluación de la contribución de la industria manufacturera a la economía europea.

1.2

En muchos sectores se ha acogido muy positivamente esta recuperación de la política industrial comunitaria. El CESE respalda plenamente los principios de la nueva política industrial (1), cuyo éxito dependerá primordialmente de una combinación apropiada de acciones horizontales y sectoriales por las siguientes razones:

los sectores industriales difieren considerablemente;

el nivel sectorial es, en muchos casos, el más apropiado para reunir a los representantes de la industria, incluidos los interlocutores sociales implicados, los representantes de los gobiernos y los responsables políticos (la Comisión y las autoridades nacionales), así como otras partes interesadas que desempeñan un papel importante, como los clientes, los centros de educación y formación, los institutos científicos y tecnológicos y los bancos.

1.3

Existe un acuerdo político general sobre la necesidad de que Europa responda a los desafíos del futuro convirtiéndose en un líder fuerte en un mundo globalizado. Hacer realidad la Estrategia de Lisboa es hoy más que nunca de la máxima importancia. Por ello, Europa no sólo debe luchar contra sus propias debilidades (en comparación con sus socios comerciales), sino también fomentar y desarrollar sus capacidades. El sector de la ingeniería mecánica aporta recursos tecnológicos sustanciales, pues posee la tecnología que se encuentra no sólo en sus productos, sino también en los procesos de sus clientes, entre los que se encuentra el resto de la industria manufacturera y servicios esenciales como la electricidad, el agua, el transporte y las comunicaciones.

1.4

Con la reactivación de la Estrategia de Lisboa y la importancia que hoy se concede al crecimiento y al empleo, la Comisión subraya acertadamente el papel esencial de la industria manufacturera y, en especial, el de las PYME. En consecuencia, la política industrial europea debe ver en la ingeniería mecánica un sector estratégico que, por otra parte, se encuentra actualmente en pleno desarrollo. De hecho, la atención no sólo debe centrarse en los sectores que se enfrentan a retos inmediatos, sino también en los que presentan buenos resultados.

1.4.1

La ingeniería mecánica constituye un sector por derecho propio, aunque, como proveedor de bienes de capital y tecnologías que utilizan distintas industrias, también actúa como potenciador y provoca un efecto en cadena en muchos más sectores europeos.

1.4.2

El sector de la ingeniería mecánica, como proveedor de tecnología capacitadora a todos los demás sectores económicos, aporta la infraestructura industrial fundamental que sustenta la economía europea.

1.4.3

Por otra parte, la ingeniería mecánica es uno de los principales sectores exportadores y supone alrededor del 15 % de las exportaciones de productos manufacturados europeos.

1.5

La ingeniería mecánica se ha beneficiado considerablemente del mercado interior, que ha supuesto para los fabricantes europeos una base esencial. No obstante, aunque el sector precisa una cantidad proporcionada de normas internacionales coherentes y reglamentos europeos, es esencial mantener el equilibrio a fin de evitar todo exceso de reglamentación que pudiera estorbar la competitividad. Al mismo tiempo es preciso prestar más atención a la aplicación y el cumplimiento del reglamento.

1.6

Se necesitan políticas tanto horizontales como sectoriales, además de una combinación adecuada de ambas.

2.   Importancia estratégica

2.1

El sector de la ingeniería mecánica tiene un papel esencial en la economía europea por varias razones:

2.1.1

La ingeniería mecánica es un sector estratégico: aporta un alto valor añadido, hace un uso intensivo del conocimiento y proporciona a todos los demás sectores de la economía la maquinaria, los sistemas de producción, los componentes y servicios afines, la tecnología y el conocimiento que necesitan. También se considera que contribuye significativamente al desarrollo sostenible porque puede dar lugar a una producción más eficiente y, de esta manera, disociar el uso de los recursos del crecimiento económico. La ingeniería mecánica es un sector homogéneo y al mismo tiempo muy diversificado que abarca una amplia gama de subsectores: sistemas de elevación y manipulación, máquinas herramientas, maquinaria para el trabajo de la madera, equipos para refrigeración y ventilación industrial, bombas y compresores, maquinaria para minería, cantería y construcción, rodamientos, engranajes, componentes de transmisión y elementos motores, conexiones y válvulas, motores y turbinas, maquinaria para uso agrícola y forestal, maquinaria para la producción textil, de aparejos y cuero, maquinaria para el procesamiento de alimentos, bebidas y tabaco, equipos agrícolas, maquinaria para la producción de papel y cartón, hornos y quemadores para uso industrial, maquinaria para metalurgia, etc. Además de todo ello, existen tecnologías comunes, como la mecatrónica, que combinan elementos mecánicos y electrónicos.

2.1.2

La ingeniería mecánica no sólo proporciona los equipamientos, sino también las técnicas y el conocimiento necesarios para mejorar los procesos y productos actuales y desarrollar productos nuevos en todos los subsectores, lo cual adquiere una importancia especial cuando se valora en el contexto del desarrollo económico de la Europa ampliada y más allá.

2.1.3

La ingeniería mecánica europea es líder mundial, con el 41 % de la producción mundial, y Europa es el primer productor y exportador mundial de maquinaria (261 707 millones de euros en 2002), incluida la exportación de plantas completas. Es vital conservar esta posición de liderazgo para que Europa se convierta en la economía basada en el conocimiento más competitiva del mundo.

2.1.4

La ingeniería mecánica es una industria potente: no sólo es uno de los sectores industriales más grandes de Europa –representa el 8 % de toda la producción manufacturera–, sino también uno de los mayores empleadores, con unas 140 000 empresas (de las que 21 600 tienen más de 20 empleados) que dan trabajo a unos 2,49 millones de personas, en su mayoría altamente cualificadas. El sólido mercado europeo con que cuenta la ingeniería mecánica (2003: UE 15: 285 000 millones de euros; UE 25: 305 000 millones de euros) representa el 70 % de la producción del mercado interior y refuerza tanto la ventaja competitiva de la industria como la estabilidad del empleo en el sector. Así pues, se trata de un sector esencial para alcanzar los objetivos de Lisboa.

2.1.5

La ingeniería mecánica es un sector innovador clave: en Europa tiene una fuerza especial en el ámbito de la maquinaria adaptada y segmentos de mercado especializado, de gran importancia para la capacidad de innovación de todos los demás sectores de la economía. También resulta fundamental para la capacidad de todos los sectores industriales aportar un elevado valor añadido, con lo que se logra una ventaja competitiva que compensa las posibles desventajas de Europa en aspectos como los costes laborales. La ingeniería mecánica impulsa la innovación y es pionera porque aplica e integra las innovaciones en sus propios productos y procesos. Es preciso tener presente que la ingeniería mecánica es un eslabón –muy frecuentemente el primer eslabón– de la cadena de creación de valor: si la cadena falla en algún punto, todo el conjunto se resentirá.

2.1.6

La ingeniería mecánica es una industria de emprendedores, dominada por PYME (2) —en gran medida, de propiedad familiar–, con los retos habituales a que se enfrentan estas empresas, muchas de las cuales son también globales. La ingeniería mecánica, en consecuencia, es el epítome del espíritu empresarial, fundamental para hacer realidad los objetivos de Lisboa.

2.1.7

Otras características del sector de la ingeniería mecánica son las siguientes:

no es una actividad que haga uso intensivo de capital en comparación con otros sectores manufactureros, sino que emplea a personal altamente cualificado en el diseño y la producción de maquinaria adaptada y plantas industriales;

su progreso en las últimas décadas se ha basado en una creciente capacidad de adaptación derivada de la innovación, lo cual permite integrar diversos componentes competitivos que se comercializan en todo el mundo;

dado el papel universal de la maquinaria en todos los procesos de producción, en este sector es imprescindible la fiabilidad absoluta, que es inseparable de la imagen comúnmente aceptada de una sólida tradición industrial en Europa.

2.2

Las empresas que se dedican a la ingeniería mecánica disfrutan de unas relaciones particularmente estrechas con sus clientes, dado que la producción mecanizada de bienes es un proceso complejo que exige avanzadas capacidades de ingeniería, una asistencia técnica continua y la intervención del fabricante de los equipos para su mantenimiento. Es una parte esencial del tejido industrial y la base para agrupaciones prósperas que permiten una cercanía geográfica entre el centro de fabricación y los usuarios finales, como Baden-Wurtemberg, Renania-Palatinado, Piemonte, Lombardía, Ródano-Alpes, las Midlands del Reino Unido y Eindhoven-Aquisgrán. Estos ejemplos ponen de manifiesto que la contribución de los entes locales y regionales suele ser un éxito y resultar indispensable.

2.3

La ingeniería mecánica desempeña un papel esencial en la mejora del medio ambiente al fabricar equipos para el tratamiento y procesamiento del agua, el suelo, el aire, los residuos y el estiércol. Asimismo, contribuye a facilitar el uso de fuentes de energía renovables.

2.4

El sector de la ingeniería mecánica es líder mundial y sustenta las manufacturas y exportaciones europeas, de tal modo que constituye uno de los puntales de Europa.

La introducción de medidas para desarrollar la ingeniería mecánica debería ayudar al sector a llegar a la excelencia no sólo en Europa sino en todo el mundo.

2.5

Un magnífico argumento para que se incremente la ayuda al sector es la importancia que recientemente le ha reconocido la administración estadounidense. Algunos países, como Estados Unidos, son cada vez más conscientes de la importancia de las manufacturas en general y del sector de la ingeniería mecánica en particular para la economía y la seguridad nacional (3).

3.   Necesidades a escala europea

3.1   Transformaciones industriales e innovación

3.1.1

Las transformaciones industriales y la innovación en producción y procesamiento son cuestiones de gran actualidad. La producción menos sofisticada, que precisa personal menos cualificado, se subcontrata cada vez más a otras partes del mundo. Para mantener y reforzar su posición en el mercado interior y fuera de él, el sector precisa una adaptación y una innovación continuas. Esta cuestión debe ser una preocupación de todos los interesados a escala regional, nacional y comunitaria.

3.1.2

El sector atrajo la atención de los reguladores de la UE ya en 1994, año en que manifestaron su parecer en una Comunicación (4) a la que siguió una Resolución del Consejo (5). Ni la Comisión Europea ni los Estados miembros se han mostrado demasiado inclinados a realizar el seguimiento propuesto de la Comunicación y la Resolución del Consejo. Esta renuencia difícilmente puede interpretarse como aplicación positiva de la política. Tal indecisión general había cambiado con la última Comisión, por la prioridad que se dio a la competitividad de las manufacturas en el marco de la Estrategia de Lisboa. Esto podría haber creado un entorno favorable a auténticas asociaciones a escala comunitaria, que, es de esperar, habrían fomentado una interacción positiva entre los interesados nacionales y locales, según los casos. Por desgracia, la Comisión parece estar centrada hoy en un número limitado de los denominados sectores de bandera, entre los que, de momento, no está incluida la ingeniería mecánica.

3.1.3

La nueva política industrial pretende eliminar las barreras que durante tanto tiempo han caracterizado la relación entre el sector público y el privado. Todos los interesados deben saber que persiguen unos objetivos comunes. Esta política industrial busca acercar a las personas y a las organizaciones para acortar unas distancias que, antes, han impedido muchas veces la suficiente innovación.

3.1.4

La gran diversidad de PYME especializadas y a menudo de alta tecnología que hay en el sector supone grandes exigencias en la organización y gestión de los procesos de producción. A diferencia de otros sectores con una cifra relativamente reducida de empresas destacadas, es preciso prever instrumentos y enfoques específicos. Uno de tales enfoques específicos podría ser, por ejemplo, la creación de una plataforma tecnológica para sectores que fomentan el desarrollo industrial o la creación de un programa especial que podría tener un papel destacado en este sentido (6). Es necesaria una inversión cuantiosa en I+D.

3.1.5

La plataforma tecnológica o el programa específico deberían recurrir a las capacidades desarrolladas gracias a la antigua tradición europea en ingeniería mecánica y formar una alianza de apoyo a los programas de investigación europeos, el conocimiento industrial en las agrupaciones de ingeniería mecánica y los puntos fuertes de los centros de investigación europeos especializados.

3.1.6

Tales programas para la ingeniería mecánica deben tener en cuenta la diversidad de subsectores y la interacción entre ellos, como las innovaciones comunes, la combinación de tecnologías y, en consecuencia, la necesidad de desarrollar una circulación efectiva de conocimientos en los servicios de producción y de gestión.

3.1.7

Es preciso tender puentes entre los centros de investigación y las universidades por un lado y el mercado por otro. Ciertamente los programas europeos de I+D no deberían tener una orientación exclusivamente científica y aplicar una perspectiva a largo plazo, sino que deberían tratar de lograr un equilibrio reservando financiación para la investigación aplicada, que permite lograr productos innovadores.

3.1.8

La plataforma tecnológica debería suponer una gran contribución a un mejor entendimiento entre los centros de investigación de todo tipo y la industria de productos mecánicos, lo cual, a su vez, produciría efectos beneficiosos en ámbitos similares de los Estados miembros.

3.1.9

El elevado número de PYME y de empresas de tamaño intermedio en este sector pone de manifiesto la necesidad de reducir las limitaciones y la administración y de incrementar el acceso a los programas comunitarios.

3.1.10

Naturalmente, la realización de proyectos industriales a gran escala precisa programas de I+D centrados en tecnologías innovadoras, que tienen un efecto en cadena sobre todo el sistema de creación de valor. Sin embargo, es importante lograr el equilibrio apropiado en la financiación a estos grandes proyectos y las PYME.

3.1.11

Todo ello tendrá, además, un efecto positivo en los programas nacionales. En un ámbito dominado por la interacción y las evaluaciones comparativas, es preciso tener en cuenta las mejores prácticas. Dado el elevadísimo número de PYME, las organizaciones con representación nacional deben tener una presencia activa en este contexto.

3.2   Transformaciones industriales y capacidades

3.2.1

Existe una estrecha interconexión entre las nuevas políticas industriales, la innovación, la creatividad, la productividad y las capacidades.

3.2.2

Hoy día los jóvenes no se sienten tan inclinados a estudiar y trabajar en las industrias técnicas, fenómeno que está en parte relacionado con la imagen anticuada de la industria. Esto exige una acción de la propia industria centrada en las nuevas tecnologías y respaldada por un impulso cultural de los medios de comunicación nacionales y comunitarios, con vistas a modificar esta percepción. Es crucial una buena comunicación entre las empresas y el público, en especial los jóvenes. Es preciso un cambio de mentalidad y de enfoque para alterar las tendencias actuales. Se necesita un mejor conocimiento de la realidad de la ingeniería mecánica, un conocimiento que abarca todo el proceso de la tecnología, los servicios a las empresas, las cadenas de tecnologías interrelacionadas, el procesamiento, la comercialización, la internacionalización, etc. Cuanto mejor sea la forma de presentar estas interrelaciones y estos atractivos procesos, tanto más se fomentará el interés del público en general y de los jóvenes en particular.

3.2.3

Todas las mejoras empiezan por sistemas educativos innovadores y exigentes. Es necesario crear módulos actualizados, también en las propias empresas. Debe alentarse a la industria a cooperar estrechamente con los institutos educativos, los centros de educación superior y los de formación profesional. Hay que fomentar la participación de los directivos en los oportunos programas educativos y, a su vez, debe ofrecerse a los profesores la oportunidad de interactuar con la industria. Hay que animar a las escuelas a participar en las ferias empresariales (internacionales).

3.2.4

Es preciso crear parques empresariales y tecnológicos próximos a las universidades técnicas y desarrollarlos de un modo más activo. Conviene destacar el éxito de algunos de ellos, como los de las universidades de Cambridge, Eindhoven y Aquisgrán.

3.2.5

Debido a que los ciclos de producción y servicio cambian muy rápidamente, el aprendizaje continuo y, en consecuencia, la flexibilidad de los trabajadores ante el cambio deben convertirse en práctica corriente de las empresas.

3.2.6

La coordinación efectiva entre la industria (dirección, sindicatos, personal) y los centros educativos de todos los niveles reforzará la especialización regional y, por tanto, promoverá la formación y el desarrollo de agrupaciones regionales sólidas. Esta coordinación sería en gran medida regional, no sólo por el elevado número de empresas presentes, sino también por el impacto de la especialización regional y las distintas culturas.

3.2.7

El diálogo entre los interlocutores sociales sobre las consecuencias industriales en la UE puede aportar resultados beneficiosos. Los ejemplos ilustrativos, las comparaciones y las evaluaciones comparativas a escala comunitaria pueden dar lugar a un marco adecuado y establecer o reforzar la tendencia a los programas nacionales y regionales. Un magnífico ejemplo de diálogo capaz de crear tal marco es el llevado a cabo por el Grupo de trabajo ad hoc WEM-FEM en 2003 (7). Sería útil cuantificar los resultados de la gran diversidad de iniciativas y evaluar las mejores prácticas, ya que ello puede aumentar el dinamismo en otras regiones.

3.2.8

Este proceso puede profundizarse, sobre todo con la participación de los nuevos Estados miembros, y puede ampliarse para incluir a los centros educativos.

3.2.9

Aunque la movilidad de los ingenieros y técnicos en ingeniería dentro de la UE aún deja mucho que desear, el proceso de Bolonia y la creciente convergencia de los programas de estudio de las universidades europeas de ingeniería, los centros de formación profesional y las organizaciones profesionales de ingenieros están dando paso a un mercado de trabajo europeo dentro de la ingeniería.

3.3   Condiciones generales

Las condiciones generales en las que operan las empresas son de la máxima importancia e incluyen las siguientes:

3.3.1   El mercado interior

El mercado interior debe garantizar un acceso armonizado al mercado de la UE y al EEE y, en consecuencia, aumentar la competitividad europea. Por desgracia, el mercado interior de productos aún no es una realidad y es preciso subrayar particularmente las siguientes deficiencias:

3.3.1.1   Reglamentaciones

Una legislación mejorada es un requisito previo esencial para todas las empresas y sobre todo para las PYME.

La legislación debe utilizarse sólo cuando resulte verdaderamente necesaria (8), es decir, tras una detallada evaluación de impacto que incluya una consulta exhaustiva a las partes interesadas.

La legislación debe ser sencilla y tener el mínimo posible de cargas administrativas. Esto es de aplicación especialmente a las PYME, que constituyen la inmensa mayoría de las empresas de ingeniería mecánica. Desafortunadamente, con demasiada frecuencia ocurre que los reguladores de la UE, a pesar de sus buenas intenciones, pasan por alto la enorme e innecesaria carga administrativa que se deriva de la reglamentación.

Es esencial una evaluación de impacto regulador: deberían recurrir a ella todas las instituciones comunitarias y nacionales, no sólo para la propuesta inicial, sino durante todo el proceso legislativo y posteriormente durante un cierto período después de que se aplique la legislación. De este modo podría evaluarse el éxito en la consecución de los objetivos políticos.

La legislación comunitaria actual debería aplicarse y cumplirse debidamente: la Comisión debería mejorar su seguimiento y garantizar una aplicación armonizada. Debería animarse a todas las partes interesadas a participar en la aplicación, a supervisarla y a vigilar su cumplimiento.

Todas las reglamentaciones surgidas de las distintas directivas deben ser armonizadas y las definiciones de las manufacturas que se empleen en aquéllas han de ser uniformes.

Deben evitarse los requisitos nacionales adicionales. Es excesiva la divergencia en los requisitos de producción entre los Estados miembros, lo cual se agrava por la divergencia en la transposición. Los excesos en la aplicación sólo conducen a la fragmentación del mercado interior y, por tanto, reducen la ventaja competitiva.

3.3.1.2   Vigilancia del mercado

Es crucial mejorar la vigilancia del mercado: en estos momentos es insuficiente en Europa y crea desigualdad de condiciones (9). Por tanto, las autoridades aduaneras deberían aumentar los controles y contar con los medios oportunos para garantizar que los productos no puedan llegar al mercado si no cumplen todas las normas aplicables.

Además, debería reforzarse el control de los productos de ingeniería en las fronteras de la UE para luchar contra las falsificaciones, problema grave y en aumento que llega a afectar al 5 % de los equipos que se venden en la UE. No basta con que los Estados miembros actúen sólo cuando se produce un accidente.

Dado que la vigilancia del mercado corresponde a las autoridades nacionales según diversos criterios, es precisa una armonización que la Comisión podría lograr mediante una guía sobre vigilancia del mercado dirigida a todos los Estados miembros.

3.3.2   Comercio

El objetivo principal es que las empresas europeas puedan acceder al mercado sin que ello produzca un deterioro de las normas europeas en el mercado interior. Con unas exportaciones de maquinarias y equipos por un valor de 129 000 millones de euros, la UE es líder mundial del mercado de equipos mecánicos. Por tanto, es de enorme importancia que la industria de la ingeniería mecánica pueda acceder a los mercados de terceros países e invertir en ellos.

Otra cuestión importante es la liberalización del comercio global de productos y servicios de ingeniería (incluidos muchos en el mercado interior). La ingeniería mecánica europea ha sido pionera en la supresión de barreras arancelarias y no arancelarias al comercio en las Rondas de Uruguay y Doha. La Comisión debería proseguir sus negociaciones comerciales multilaterales, regionales y bilaterales a fin de favorecer la eliminación de barreras técnicas al comercio, liberalizar la inversión y el establecimiento en el exterior, liberalizar los servicios a empresas y acabar con los aranceles a la importación de productos de ingeniería en condiciones de reciprocidad.

Por lo que se refiere a los servicios a empresas, el principal objetivo sería garantizar que no haya interferencias en la provisión de productos y servicios afines.

3.3.3   Política de competencia

Para que la UE se convierta en la economía más dinámica del mundo no sólo importa el desarrollo de nuevas tecnologías, sino que también es esencial que aumente de forma significativa su difusión rápida. Por ello es preciso crear las condiciones generales apropiadas en la política de competencia, a fin de facilitar la transferencia de tecnología a terceras partes. Cuando se desarrolla una tecnología innovadora –y la ingeniería mecánica en Europa a menudo está especializada en nichos de mercados– no resulta adecuado utilizar cuotas de mercado, como defienden las autoridades europeas de la competencia, para determinar los efectos específicos y contrarios a la competencia.

3.3.4   Impuestos y financiación

La imposición es elevada por lo general en la Unión Europea. Reducir el impuesto de sociedades resulta de gran utilidad para generar bienes de capital, pero otras medidas, como los créditos fiscales para la inversión, supondrán un incentivo.

3.3.5   Banca

Con frecuencia se olvida el papel que desempeñan las instituciones financieras, y sin embargo, es crucial para lograr los objetivos de la política industrial al aceptar o rechazar el riesgo y por la facilidad de acceder a ellos. En algunos países, como Alemania y Francia al parecer, las prácticas del sector bancario son más estimulantes para las empresas que en otros. El CESE está a favor de introducir este aspecto en la política industrial, especialmente en el sector de la ingeniería mecánica, de tanta importancia para las PYME. Así podrían mejorarse las prácticas en toda Europa. Otras cuestiones, como las disposiciones de Basilea II, dificultan cada vez más el acceso a la financiación necesaria para invertir en investigación para el desarrollo de productos innovadores o para el crecimiento de las empresas en general.

3.4.   El análisis y el diálogo continuos entre todos los interesados, particularmente los interlocutores sociales, sobre todo en lo relativo a las consecuencias industriales en la UE (así como en los ámbitos local y regional) ciertamente dará impulso a estos procesos.

4.   Recomendaciones

4.1

El CESE considera que, a la hora de diseñar la política industrial, las palabras deben ir acompañadas de hechos. El coste de la llamada «no Europa» podría ser especialmente elevado en la ingeniería mecánica si se piensa que este sector, pese a ser líder y pese a sus destacadas competencias básicas, se enfrenta a una serie de retos que no sólo son cíclicos, sino también estructurales. Es preciso darles respuesta y, en este sentido, es vital tomar en consideración los siguientes puntos:

4.2

Este sector se adapta perfectamente a un programa concreto de objetivos establecidos a escala regional, nacional y comunitaria con el que se pretenda hacer realidad la Estrategia de Lisboa.

4.3

En opinión del CESE, el compromiso de la UE tiene una doble vertiente:

debe establecerse una agenda global para mejorar cualitativamente los resultados de la ingeniería mecánica en Europa y

han de cumplirse unas condiciones específicas a escala comunitaria en cuanto a reglamentación, I+D, comercio, evaluaciones comparativas, etc.

4.3.1

La responsabilidad corresponde a la Comisión y al Consejo de Competitividad, en estrecha cooperación con representantes del sector. Es conveniente que el sector se reúna periódicamente con los interlocutores sociales correspondientes y la Comisión. Para ello deben tenerse debidamente en cuenta los requisitos del sector de la ingeniería mecánica cuando se organicen las infraestructuras de apoyo a la política de la UE, en especial en la Dirección General de Empresa e Industria.

4.3.2

El CESE aboga también por garantizar que la Comisión disponga de los conocimientos prácticos suficientes y de experiencia en el sector de la ingeniería mecánica.

4.4

El CESE considera que es preciso prestar una atención especial a este sector a escala comunitaria, dado el elevadísimo número de PYME que lo conforman. En este sentido, merece la pena subrayar los siguientes aspectos:

4.4.1

Por lo que se refiere a la investigación y la innovación, debe examinarse la creciente divergencia entre la I+D financiada con fondos europeos y las necesidades del sector de la ingeniería mecánica, y debe facilitarse la participación de las empresas para alcanzar el ambicioso objetivo de aumentar la competitividad con unos medios financieros igualmente ambiciosos en las partidas correspondientes del presupuesto de la UE. La mayoría de las empresas son PYME y empresas intermedias y, en estos momentos, los proyectos europeos de investigación industrial no se ocupan de ellas debidamente y dificultan la participación de las empresas.

4.4.2

Es necesario mejorar las condiciones del marco reglamentario de la UE en consulta con el sector, ya que el exceso de reglamentación y el peso creciente de la burocracia ponen en peligro el espíritu empresarial dinámico, en vez de estimularlo.

4.4.3

Debe incrementarse la vigilancia del mercado con vistas a garantizar la igualdad de condiciones a las empresas y a los fabricantes europeos y a las importaciones de terceros países.

4.4.4

Es necesario mejorar el acceso de estas empresas a los mercados financieros.

4.4.5

Las relaciones comerciales con terceros países deben garantizar la libertad de acceso a los mercados de terceros países y las inversiones en ellos.

4.4.6

La política de competencia debería favorecer el desarrollo, la innovación y la tecnología en las PYME.

4.4.7

Un debate a escala europea entre los interlocutores sociales y la Comisión sobre cómo mejorar los resultados, las capacidades y los sistemas de educación y formación puede constituir un marco útil para que se entable un diálogo similar en los Estados miembros, sobre todo en el ámbito regional.

4.5

Como industria en transición, la ingeniería mecánica está pasando rápidamente de ser una industria centrada en los productos a ser un «proveedor de valor y acceso» que integra unos servicios en continuo aumento y ofrece soluciones globales a sus clientes. Este tremendo desafío, esencial para mantener el crecimiento sostenible y una posición sólida en los mercados mundiales, debe tener el eco oportuno en las políticas de la UE.

El CESE confía en que la Comisión tenga presentes estas recomendaciones y tome las medidas necesarias para que Europa consiga lo que, en palabras del Presidente Durão Barroso, es una de las grandes prioridades de la Comisión Europea: hacer realidad la Estrategia de Lisboa.

Bruselas, 11 de mayo de 2005.

La Presidenta

del Comité Económico y Social Europeo

Anne-Marie SIGMUND


(1)  Véase el Dictamen del CESE sobre el tema «Acompañar los cambios estructurales: Una política industrial para la Europa ampliada» (COM(2004) 274 final, 21.4.2004), aprobado el 15.12.2004; ponente: Sr. VAN IERSEL.

(2)  Sólo 21 600 de ellas emplean a 20 personas o más, y únicamente unas 4 500 de ellas emplean a 100 personas o más.

(3)  Véase «Manufacturing in America» – Departamento de Comercio de Estados Unidos. Otro ejemplo concreto de la importancia estratégica de la ingeniería mecánica es la disposición incluida en la «Ley de autorización de defensa» del ejercicio 2004, por la que se establece un incentivo para los contratistas del sector de la defensa de Estados Unidos que utilicen máquinas herramientas en los contratos de defensa. La razón es que se considera crucial mantener una capacidad independiente en máquinas herramientas por motivos de defensa, seguridad y de índole política.

(4)  Fortalecimiento de la competitividad de la industria europea de fabricación de maquinaria – Comunicación de la Comisión al Consejo, al Parlamento y al Comité Económico y Social (COM(94) 380 final, de 25 de octubre de 1994).

(5)  Resolución del Consejo de 27 de noviembre de 1995 sobre el fortalecimiento de la competitividad de la industria europea de fabricación mecánica, publicada en el DO C 341 de 19 de diciembre de 1995, págs. 1-2.

(6)  Véase, entre otros, el Dictamen del CESE sobre el tema «Ciencia y tecnología», CESE 1647/2004 (ponente: Sr. Wolf) y el Dictamen complementario sobre el mismo tema, (ponente: Sr. VAN IERSEL).

(7)  Grupo de trabajo ad hoc de la Organización Patronal Europea de las Industrias Metalúrgicas y la Federación Europea de Metalúrgicos, «Principales resultados del intercambio de ejemplos nacionales», enero de 2003.

(8)  Ejemplo: la propuesta REACH para los productos químicos y la propuesta de Directiva sobre requisitos de diseño ecológico aplicables a los productos que utilizan energía, que, en su forma actual, plantean a las empresas problemas de gestión.

(9)  Por ejemplo, en el contexto de los equipos de construcción (y otros tipos de maquinaria), ha habido muchos casos que demuestran la existencia de un «mercado gris» que importa máquinas de terceros países con la marca CE y la declaración de conformidad, pero que de hecho NO cumplen la reglamentación europea. También abundan los casos de máquinas que no tienen la marca CE ni son conformes con la reglamentación pero que, pese a todo, se encuentran en el mercado europeo con total impunidad. A fin de garantizar la igualdad de condiciones entre los fabricantes europeos y los de terceros países, es preciso evitarlo.


Top