52005DC0636

[pic] | COMISIÓN DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS |

Bruselas, 8.12.2005

COM(2005) 636 final

COMUNICACIÓN DE LA COMISIÓN AL CONSEJO Y AL PARLAMENTO EUROPEO

Una asociación reforzada entre la Unión Europea y América Latina{SEC(2005)1590}{SEC(2005)1613}

ÍNDICE

I Orientaciones 3

I-1 Introducción 3

I-2 La asociación 4

I-3 Los retos 5

I-4 Propuestas de acciones de la Comisión 5

I-5 Cumbre UE-América Latina/Caribe 11

I-6 Conclusiones 11

I ORIENTACIONES

I-1 Introducción

En un mundo que se enfrenta a nuevas amenazas y también a nuevas oportunidades, la Unión Europea (UE), en tanto que actor mundial, debe consolidar sus relaciones con sus socios más cercanos. Un primer lugar lo ocupa América Latina, con la que compartimos un compromiso común con los derechos humanos, la democracia y el multilateralismo. Europa necesita a todos sus amigos para afirmar estos valores comunes. Es difícil encontrar en el mundo otra región con la que existan tantas razones para construir una verdadera alianza. En efecto, debido a la historia y a la cultura que comparten, la Unión Europea y América Latina están en condiciones de comprenderse mejor entre sí que con otras regiones, por lo que disponen de una gran ventaja para multiplicar juntas su capacidad de acción. Por tanto, a ambas les interesa convertirse en aliadas especiales en la escena mundial. Por ello, la Comisión se propone, mediante la presente Comunicación y su anexo detallado, profundizar la Asociación entre la UE y América Latina, mediante una renovación de la estrategia aplicada durante el último decenio. Desde la Comunicación de política general sobre las relaciones entre ambas regiones (1995), nuestras relaciones se han desarrollado considerablemente.

La UE, que se ha dotado de una moneda común y se ha ampliado a veinticinco Estados miembros, se ha convertido en el primer inversor extranjero en América Latina. Es el primer proveedor de fondos en la región así como el primer socio comercial de numerosos países, en particular los del Mercosur. El diálogo político se ha visto reforzado gracias a la organización de tres Cumbres UE-América Latina/Caribe (Río en 1999, Madrid en 2002 y Guadalajara en 2004). La presente Comunicación también sirve como base para la preparación de la próxima Cumbre UE-América Latina/Caribe que tendrá lugar en Viena en mayo de 2006.

Por su parte, la mayoría de los países de América Latina han adoptado sistemas democráticos y han emprendido reformas económicas y sociales ambiciosas. La región dispone de un enorme potencial de desarrollo y desempeña un papel cada vez más importante en la escena internacional. Aún así, este continente debe afrontar grandes retos, como lo demuestra el reciente informe de las Naciones Unidas sobre los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), y existen factores de inestabilidad que pueden, a medio plazo, afectar a la Asociación birregional. La UE, con el respaldo que le da su experiencia, podría contribuir a reforzar la estabilidad y la seguridad y el desarrollo sostenible en América Latina. Estamos en vísperas de un nuevo período de programación de la ayuda comunitaria, que debería permitir asignar recursos importantes a la región (Perspectivas Financieras 2007-2013), y de la próxima Cumbre UE-América Latina/Caribe (ALC) que se celebrará en Viena en mayo de 2006. Próximamente llegaremos al final del ciclo con los futuros Acuerdos de Asociación con las subregiones [(Mercosur, Comunidad Andina (CAN) y América Central (AC)] y con el Acuerdo de Asociación económica con los países del Caribe. Con sus regiones ultraperiféricas, la UE está presente en esta zona geográfica, por lo que es importante extraer de ello el máximo beneficio para mejorar la cooperación con América Latina y los países del Caribe, en particular, mediante una mejor coordinación de los instrumentos financieros. Además, asistimos a nuevas iniciativas en el proceso de integración latinoamericana, que tenemos que tener presentes. Por tanto, es fundamental proponer vías de reflexión para el futuro.

La Comisión quiere transmitir una señal positiva de que Europa se interesa por esta región. Parece que existe la idea, no obstante infundada, de que la UE está demasiado absorta en su propia ampliación, sus relaciones de vecindad o incluso por las situaciones preocupantes que se dan en otros lugares del mundo. Esta percepción también plantea la cuestión de la visibilidad de la UE sobre el terreno debido a la complejidad de sus estructuras y de sus medios de acción. La Comisión se proponer reafirmar que la Asociación con América Latina no es solo una cuestión evidente sino además un imperativo, en interés de ambas regiones, para el presente y para el futuro. Pero si Europa está dispuesta a aumentar su compromiso hacia América Latina, espera que también ésta corresponda con un fuerte compromiso.

Esta alianza entre la UE y América Latina también afecta a los países del Caribe que participan en el proceso de las Cumbres UE-ALC y con los que la UE mantiene relaciones desde hace tiempo en el marco de los sucesivos Convenios de Lomé y de Cotonú. La Comisión se propone dedicar una comunicación a esta cuestión, que será adoptada a principios de 2006.

La Comisión expone en detalle, como anexo del presente documento, la estrategia que propone para reforzar la asociación entre ambas regiones. Insta al Consejo y al Parlamento Europeo a que examinen esta propuesta de estrategia detallada. A continuación se exponen las recomendaciones que serán explicadas en el anexo .

I-2 La asociación

La UE y América Latina se comprometieron en la Cumbre de Río a desarrollar una «asociación estratégica birregional» con vistas a la creación de una estrecha relación en los ámbitos político, económico y cultural. En el anexo se exponen las razones por las cuales merece profundizar en esta asociación.

La Comisión propone dar un nuevo impulso a la asociación entre la UE y América Latina, que en la actualidad se enfrenta a numerosos retos. Su objetivo para los próximos años es:

- establecer una asociación estratégica reforzada mediante una red de Acuerdos de Asociación (que comprenden acuerdos de libre comercio), en los que participen todos los países de la región y que pueda contribuir a la integración de la región en su conjunto;

- mantener auténticos diálogos políticos que refuercen la influencia de ambas regiones; en la escena internacional;

- desarrollar diálogos sectoriales (como la cohesión social o el medio ambiente) que sean eficaces para reducir de forma duradera la desigualdad y favorezcan el desarrollo sostenible;

- contribuir a la creación de un marco estable y previsible que pueda ayudar a los países latinoamericanos a atraer más inversiones europeas que, a la larga, contribuirán al desarrollo económico;

- adaptar mejor la ayuda y la cooperación a las necesidades de los países en cuestión;

- aumentar la comprensión mutua a través de la educación y la cultura.

Esta política exige un compromiso continuo por ambas partes, así como un esfuerzo constante.

I-3 Los retos

Los medios de acción de la UE deben adaptarse a las nuevas realidades latinoamericanas:

- los procesos de integración que estructuran nuestras relaciones evolucionan, como lo demuestra la reciente creación de la Comunidad Sudamericana de Naciones;

- estos procesos de integración están lejos de haber concluido y su estado de avance varía según las regiones;

- cada país de la región persigue sus propios objetivos de política exterior a nivel regional e internacional;

- hay actores de peso que merecen ser tratados de manera específica, sobre todo por su papel a nivel regional: Brasil y México.

La asociación entre la UE y América Latina se enfrenta a los siguientes retos, expuestos con más detalle en el anexo.

- Combinar las fuerzas de dos actores mundiales: se impone una reflexión política sobre los medios que habrá que utilizar conjuntamente para mejorar el diálogo político entre ambas regiones con el objetivo de conseguir reforzar la influencia de ambas en el mundo.

- Estimular los intercambios económicos y comerciales sobre una base equilibrada: para la asociación estratégica es importante que los intercambios regionales entre ambas regiones aumenten considerablemente. A pesar del crecimiento significativo de los flujos comerciales y de las inversiones que se han registrado entre ambas regiones durante los quince últimos años, el potencial de crecimiento de los intercambios no se ha aprovechado lo suficiente.

- América Latina, una región en vías de consolidación: para evitar que la estabilidad de América Latina acabe por ser puesta en entredicho, es fundamental que la UE la apoye en sus esfuerzos en los siguientes ámbitos: desigualdad social, pobreza y exclusión; migración; gobernanza democrática; drogas ilegales y delincuencia organizada y medio ambiente.

- Una diversidad latinoamericana que hay que tener más en cuenta: al tiempo que se sigue favoreciendo la integración del conjunto de la región, la Comisión considera que ha llegado la hora de enriquecer el enfoque adoptado hasta la fecha, mediante el desarrollo de relaciones más individualizadas con determinados países sobre políticas específicas y mediante diálogos mejor canalizados.

I-4 Propuestas de acciones de la Comisión

La Comisión propone:

1) intensificar y canalizar mejor el diálogo político con los socios latinoamericanos,

2) crear un entorno propicio a los intercambios y a las inversiones,

3) respaldar los esfuerzos de los países de la región para contribuir a la estabilidad y la prosperidad,

4) mejorar la cooperación para así mejorar el entendimiento mutuo.

I-4.1 Intensificar y canalizar el diálogo político.

Es imprescindible reforzar el diálogo político para aproximar las posiciones de ambas regiones en torno a las cuestiones de interés común. En particular, la Comisión desea que los temas se identifiquen mejor y se adapten más en función de los interlocutores: Cumbres, reuniones ministeriales (con el Grupo de Río, con los grupos subregionales incluidos los países del Caribe y los que se benefician de acuerdos de asociación).

La Comisión recomienda

- modular el diálogo político en función de las necesidades con los socios latinoamericanos adecuados, tanto a nivel birrregional, bilateral o subregional, sobre temas bien delimitados (como por ejemplo, la reforma de las Naciones Unidas, el mantenimiento de la paz, la prevención de los conflictos y las situaciones de crisis en determinados países de la región);

- seleccionar un número limitado de temas,

- garantizar que estos diálogos políticos sean preparados mediante reuniones de altos funcionarios (en formato tipo troika),

- organizar de forma periódica con algunos países y según las necesidades, reuniones informales de diálogo político a nivel de altos funcionarios.

I-4.2 Crear un entorno apropiado para los intercambios y para las inversiones

El refuerzo de la asociación estratégica debería contribuir a crear un entorno favorable a los intercambios económicos entre ambas regiones; para América Latina, esto se traduciría en transferencias de tecnología, en una mejora de su productividad, en el desarrollo de sus infraestructuras y en la diversificación de sus mercados. Por su parte, la UE tiene interés en desarrollar y consolidar sus posiciones comerciales y en seguir aplicando una política de inversiones dinámica.

Con esta perspectiva, la Comisión se compromete a continuar su trabajo en las vías siguientes:

- consolidación del sistema comercial multilateral,

- profundización de los Acuerdos de Asociación vigentes, a saber con México y Chile:

- negociación de acuerdos de asociación y de libre comercio birregionales,

- facilitación del acceso de las empresas latinoamericanas al mercado europeo,

- establecimiento de un diálogo sobre los obstáculos a los intercambios comerciales y a las inversiones.

- establecimiento de un diálogo macroeconómico para promover la estabilidad macroeconómica, elemento esencial para incentivar los intercambios y las inversiones.

La Comisión se propone promover:

- el papel de los sectores de punta europeos en el desarrollo de la región, en particular sobre la base de las iniciativas emprendidas a través de los programas marco de investigación y de desarrollo tecnológico,

- un entorno favorable a las empresas europeas en América Latina reforzando el diálogo normativo para la adopción de marcos legislativos y de normas comunes en sectores como los transportes, la energía, las tecnologías de la información y de la comunicación, la seguridad alimentaria y los aspectos sanitarios y fitosanitarios.

I-4.3 Contribuir juntos a la estabilidad y a la prosperidad

1-4.3.1. Construir sociedades más solidarias: promover una mayor cohesión social en beneficio de todos.

Con motivo de la Cumbre de Guadalajara, la UE y América Latina convirtieron la cohesión social en un objetivo compartido y en un eje esencial de sus relaciones. En el contexto de la globalización, la promoción de la cohesión social tiene por objetivo construir sociedades más solidarias, que ofrezcan oportunidades reales a todos (incluidos los más desfavorecidos) de acceso a los derechos fundamentales y al empleo para beneficiarse del crecimiento económico y del progreso social y así participar plenamente en la sociedad.

La Comisión propone que el objetivo de la cohesión social se incluya en todas las iniciativas que emprenda en asociación con América Latina, de forma continua, coherente y concreta. Esta propuesta se refiere a :

- la instauración de un diálogo específico sobre la cohesión social,

- la prioridad otorgada a la cohesión social en la cooperación al desarrollo,

- la cooperación más intensa con las instituciones internacionales,

- la promoción de la participación de los actores implicados.

Además, la Comisión debería apoyar la organización (cada dos años) de un Foro de cohesión social, para difundir los resultados logrados. En este Foro deberían participar las autoridades públicas, la sociedad civil, el sector privado y las organizaciones internacionales.

1-4.3. 2. Una gobernanza democrática más sólida, mediante la creación de una asamblea parlamentaria euro-latinoamericana .

La Comisión se propone mantener su apoyo a la modernización del Estado en América Latina.

- intensificará aquellas acciones de cooperación que refuercen la gobernanza y favorezcan la integración, sobre todo de los ciudadanos más pobres,

- promoverá la participación de la sociedad civil en sus acciones y la asociación de los ciudadanos (de las mujeres en particular) en los proyectos políticos, también a través de los partidos políticos,

- respaldará el deseo del Parlamento Europeo de crear una asamblea transatlántica euro-latinoamericana.

1-4.3.3. Incremento de la seguridad, sobre todo de la lucha contra la droga mediante el principio de la responsabilidad compartida.

La UE ha adoptado una estrategia de lucha contra el consumo, la producción y el tráfico de drogas ilegales[1], para los años 2005-2012. La lucha contra el tráfico de droga y otras formas de delincuencia también exige luchar contra la corrupción y el blanqueo de dinero.

La Comisión mantendrá el enfoque de la responsabilidad compartida en las instancias internacionales, así como su ayuda a América Latina en la lucha contra la droga. Promoverá la buena gobernanza/financiera, fiscal y judicial mediante incentivos económicos en el marco de acuerdos con los países de América Latina.

1-4.3.4. Promover una integración regional más sólida.

-Proceso de integración en América Latina

Los países de América Latina han emprendido procesos de integración regional que ya han dado importantes resultados. En este aspecto, América Latina se encuentra a la cabeza de los países en desarrollo que más esfuerzos han realizado. La integración regional es un eje prioritario de apoyo de la Comisión al desarrollo latinoamericano.

Además, la Comisión considera oportuno reflexionar con los socios latinoamericanos sobre la conveniencia de una estrategia de integración regional para toda América latina. Se trataría de una estrategia a largo plazo que en ningún modo perjudicaría el compromiso actual a favor de los procesos de integración subregionales.

La Comisión desea:

- seguir prestando su ayuda a todos los diferentes procesos de integración regional, en tanto que elemento fundamental para el desarrollo de la región;

- examinar, con ocasión de la Cumbre de Viena, si los progresos en las negociaciones del Acuerdo de Asociación y de Libre Comercio con Mercosur permiten darlas por concluidas,

- que esta Cumbre sea también una ocasión para hacer balance de los progresos realizados en cuanto a la integración regional en el seno de la AC y de la CAN y examinar si se reúnen las condiciones para una apertura rápida de las negociaciones de los acuerdos de asociación y de libre comercio con estas dos regiones.

-Integración territorial e interconectividad

La compleja configuración geográfica de América Latina constituye un obstáculo para su integración territorial. Unas infraestructuras mejores permitirían incrementar de forma importante los resultados comerciales de los exportadores latinoamericanos. La Comisión quiere animar a las instituciones financieras europeas y latinoamericanas a que respalden la integración territorial mediante la interconectividad de las redes de infraestructuras, en particular en los sectores de la energía, el agua, los transportes, las telecomunicaciones y la investigación; en este contexto, conviene tener en cuenta la interconectividad con los países del Caribe y entre sí.

La Comisión propone compartir su experiencia en el ámbito de la interconectividad de las redes de infraestructuras y anima a la BEI a que ofrezca su ayuda en el marco del futuro «Mecanismo para América Latina».

1-4.3.5. Favorecer el desarrollo sostenible.

La Comisión considera que la prosperidad de la UE, de América Latina y de los países del Caribe a largo plazo depende en gran medida de la buena gestión de sus recursos naturales y de su capacidad para asegurar el desarrollo sostenible de sus economías.

La Comisión se propone promover:

- el establecimiento de un diálogo sobre el aspecto medioambiental del desarrollo sostenible,

- la organización de una reunión de Ministros de Medio Ambiente para preparar las Cumbres,

- una concertación en profundidad en el seno de las instancias internacionales, en particular sobre el cambio climático.

1-4.3.6. Prevenir los conflictos y gestionar las crisis de forma conjunta

Habida cuenta del peso de Europa en América Latina en cuanto a presencia diplomática, de vínculos económicos y culturales y de cooperación para el desarrollo, ambas regiones podrían prever el establecimiento de un diálogo político sobre prevención de los conflictos y gestión de las crisis.

Previa petición de los países afectados, la UE debería desempeñar un papel más activo en la prevención de los conflictos y la gestión de las crisis en América Latina. Para ello, podría:

- favorecer la transferencia de experiencia en la materia,

- apoyar los esfuerzos de los países y de las instancias regionales,

- entablar un diálogo y una cooperación estructurada entre la OEA y el Grupo de Río sobre esta cuestión,

- recurrir a un futuro instrumento de estabilidad.

I-4.4 Colaborar más y entenderse mejor

I-4.4.1. Canalizar mejor la cooperación y la ayuda al desarrollo

El objetivo de lucha contra la pobreza constituye el núcleo de la política de ayuda y de cooperación de la Comisión para el período 2007-2013.

En el marco de su política de ayuda y de cooperación para el período 2007-2013, la Comisión propone lo siguiente:

- concentrarse en los temas prioritarios (cohesión social e integración regional),

- dedicar la mayoría de los fondos a reducir la pobreza en los países de bajo nivel de renta (incluidos los que figuran en la categoría inferior de los países de renta intermedia),

- realizar acciones de interés mutuo bien elegidas con los países pertenecientes a la categoría superior de los países de renta intermedia,

- proseguir la cooperación en el ámbito de la integración subregional con Mercosur, la CAN y la AC,

- concentrar la programación regional para el conjunto de América Latina en los sectores de interés estratégico regional,

- reflejar en la asignación de los recursos la importancia que se concede a la región .

La Comisión recuerda la necesidad de aumentar la coordinación de la ayuda europea en general y la visibilidad de su cooperación en particular.

I-4.4.2. Reflejar el papel específico que en la región tienen algunos actores

La estrategia para profundizar la asociación entre la UE y América Latina también debe tener en cuenta la importancia y el papel especial de los grandes países de la región. Esto es especialmente oportuno en lo que respecta a Brasil y a México.

La Comisión propone entablar diálogos políticos, específicos con determinados países de la región que desempeñan un papel especial y la modulación adecuada de sus acciones de cooperación.

I-4.4.3. Construir un espacio común de la enseñanza superior UE-ALC

De conformidad con la Cumbre de Guadalajara (2004), la Comisión concede prioridad a la construcción de un espacio común de enseñanza superior UE-ALC. Se plantea como objetivo que durante el período 2007-2013 sean acogidos en las universidades europeas más de 4.000 estudiantes y profesores latinoamericanos.

I-4.4.4. Mejorar la visibilidad de ambas regiones y transmitir la idea de Europa.

Algunos sondeos de opinión indican un cierto desconocimiento de la UE en América Latina[2]. La situación en la mayoría de los países de la UE es comparable con respecto a los países latinoamericanos. Por ello, es indispensable que ambas regiones se resuelvan a aumentar la comprensión mutua. Es preciso reflexionar sobre qué acciones aumentarían la visibilidad de ambas regiones, sobre todo en el ámbito cultural.

La Comisión prevé aumentar la transferencia de conocimientos y de buenas prácticas en el ámbito de la cooperación cultural, tanto entre los países de América Latina como entre esta región y la Unión Europea. Recomienda que cada año se organice una semana de Europa en torno al 9 de mayo (Fiesta de Europa) en todos los países latinoamericanos en los que cuenta con representación, en estrecha colaboración con las embajadas de los Estados miembros.

I-5 Cumbre UE-América Latina/Caribe

Para la Cumbre de Viena del 12 de mayo de 2006, la Comisión considera que los temas de la Declaración de Guadalajara (cohesión social, integración regional y multilateralismo), siguen de actualidad pero deben concretarse más. Con ocasión de esta Cumbre, la Comisión desea examinar si los progresos en las negociaciones del acuerdo de asociación con Mercosur permiten darlas por concluidas. Esta Cumbre también será la ocasión para hacer balance de los avances realizados en integración regional en el seno de la CAN y la AC a partir de las conclusiones y recomendaciones del grupo de trabajo que ha realizado una evaluación conjunta y estudiar si se cumplen las condiciones para una apertura rápida de las negociaciones y de los Acuerdos de Asociación con estas dos regiones. Además, la Comisión presentará en ese foro la programación de su ayuda y de su cooperación para los años 2007-2013. Animará a los agentes sociales y a la sociedad civil a que contribuyan a la Cumbre. Concederá una especial atención a cuestiones mundiales, como la lucha contra la droga.

I-6 Conclusiones

En el último decenio, la UE y América Latina se comprometieron a consolidar sus vínculos mediante una asociación estratégica. Por la presente Comunicación, la Comisión expone una serie de recomendaciones cuya aplicación dependerá del compromiso de todas las partes interesadas. La Comisión insta al Consejo y al Parlamento a que estudien estas recomendaciones a la vista de la exposición completa que se realiza en el anexo del presente documento. La Comisión considera conveniente que sean debatidas con los socios latinoamericanos y manifiesta su deseo de fomentar la reflexión y de iniciar un debate sobre los medios para profundizar la alianza entre la UE y América Latina

[1] Véase:http://europa.eu.int:8082/comm/external_relations/drugs/docs/strategy_05_12.pdf

[2] «Percepción de la Unión Europea en América Latina», Focus Eurolatino - CJD/Latinobarómetro – 2004 y 2005