Hacia una asociación estratégica UE-México

La Unión Europea (UE) y México comparten valores e intereses comunes. En este contexto, las asociaciones desarrollan una alianza estratégica para aumentar su influencia a escala mundial, a través de la elaboración de posiciones políticas comunes y de medidas de cooperación conjuntas.

ACTO

Comunicación de la Comisión al Consejo y al Parlamento Europeo, de 15 de julio de 2008, «Hacia una Asociación Estratégica UE-México» [COM(2008) 447 final – no publicada en el Diario Oficial].

SÍNTESIS

La Unión Europea (UE) y México tratan de establecer una asociación estratégica para ampliar el ámbito de su cooperación y de sus relaciones políticas. De hecho, ambos socios desean mejorar su coordinación sobre cuestiones de interés común con una dimensión regional y mundial.

Las relaciones entre la UE y México se basan en un acuerdo, el llamado «Acuerdo global», que cubre el diálogo político, el comercio, la cooperación y las políticas sectoriales.

Diálogo político de dos niveles

Por una parte, el nuevo marco estratégico da un nuevo impulso a las relaciones políticas bilaterales, en los sectores económico y social, en materia de derechos humanos, seguridad, medio ambiente, cultura, educación o incluso comercio, competencia, aviación civil e inversiones.

Por otra parte, el diálogo político se utiliza en el contexto de las relaciones multilaterales, en particular en el seno de las organizaciones internacionales. De este modo, la UE y México podrán fomentar los intercambios entre expertos y responsables políticos, para alcanzar alianzas estratégicas en:

Las discusiones bilaterales se desarrollan en el seno de las estructuras institucionales previstas por el acuerdo global (cumbre, consejo y comités mixtos), así como durante los diálogos políticos temáticos (derechos humanos, medio ambiente, seguridad, cohesión social, etc.).

Contexto

Durante las dos últimas décadas, México ha experimentado una importante modernización socioeconómica. Su competitividad económica ha aumentado y el país es un polo de atracción de inversiones extranjeras, a pesar del deterioro de las condiciones de seguridad.

México puede y debe desempeñar un papel cada vez más importante en el plano mundial, especialmente como «puente» cultural, político y regional con Sudamérica, y también como vínculo entre los países industrializados y los países emergentes.

Última modificación: 04.04.2011