Precios y costes de la energía en Europa

La presente Comunicación consta de un informe sobre los precios y costes de la energía en Europa, y de recomendaciones para tener controladas las facturas de energía.

ACTO

Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones: Precios y costes de la energía en Europa [COM(2014) 21 final de 22.1.2014 - No publicada en el Diario Oficial].

SÍNTESIS

El minucioso análisis de los precios y costes de la energía en Europa realizado por la Comisión Europea se ha concebido para ayudar a los responsables de formular las políticas a comprender el contexto de fondo, el impacto de las recientes subidas en los consumidores y las implicaciones políticas.

El aumento del precio de la energía es una de las principales preocupaciones políticas. Representa una carga económica adicional para el sector industrial y para los hogares, ya bajo presión, y afecta a la competitividad global de Europa.

El objetivo del informe es utilizarlo para ayudar a la Unión Europea (UE) a desarrollar un marco de clima y energía para 2030 que sea ambicioso y creíble a la vez, que resulte rentable y que no ponga en peligro la competitividad de Europa.

La Comisión propone una serie de medidas de acción con vistas a garantizar que los ciudadanos y la industria de Europa puedan hacer frente con eficacia al reto de los precios de la energía, y que la UE pueda mantener su competitividad ahora, en 2030 y más adelante.

Entre las principales propuestas para tener controladas las facturas de energía, se incluye lo siguiente:

• los países de la UE deben realizar el mercado interior de la energía en 2014 con el fin de garantizar que se pueda invertir de forma eficiente y competitiva;
• los consumidores particulares y la industria, especialmente las pymes, deben estudiar la posibilidad de reducir sus precios pasándose a proveedores de energía más baratos;
• queda mucho por hacer para aumentar la eficiencia energética y ayudar a los consumidores a reducir el consumo; los hogares y la industria de Europa pueden mantener bajas sus facturas mejorando la eficiencia energética; prestar más atención a la eficiencia energética al diseñar productos, a las nuevas tecnologías y al comportamiento de los consumidores también puede contribuir al ahorro de dinero y energía;
• para aprovechar las ventajas del mercado interior y el margen de reducción de costes, los países de la UE deben seguir desarrollando la infraestructura energética, diversificar los suministros de energía y las rutas de suministro, negociando con los principales socios energéticos mediante una única voz europea;
• la UE y sus países miembros deben seguir evaluando y comparando los costes y las prácticas de la red energética.

última actualización 01.08.2014