1.10.2010   

ES

Diario Oficial de la Unión Europea

C 267/39


Dictamen del Comité de las Regiones — «Una política marítima integrada para una mejor gobernanza del Mediterráneo»

(2010/C 267/09)

EL COMITÉ DE LAS REGIONES

Introducción

1.   comparte la opinión de que la región del Mediterráneo presenta tanto oportunidades como retos únicos, especialmente en lo que se refiere a las cuestiones relacionadas con la gobernanza;

2.   lamenta señalar que la región del Mediterráneo es todavía una zona en la que existen condiciones socioeconómicas muy dispares;

3.   señala además que el Mar Mediterráneo es un entorno cerrado y frágil sometido a una actividad marítima intensa y a menudo peligrosa;

4.   hace hincapié en la importancia de fomentar un enfoque sostenible de la utilización de los recursos marinos disponibles en interés de las generaciones presentes y futuras;

5.   advierte con pesar que la intervención humana prolongada y la sobreexplotación de los recursos naturales en el Mar Mediterráneo están afectando gravemente la situación del medio ambiente marino;

6.   respalda la opinión de que el incremento de la actividad económica marítima y la protección del medio ambiente pueden ir de la mano a condición de que exista un adecuado mecanismo de gobernanza que aspire a conseguir un equilibrio idóneo entre los aspectos económicos, por una parte, y la dimensión social y medioambiental, por otra;

7.   señala que el objetivo general de la Comisión es generar mayores ingresos económicos a partir del mar, reduciendo al mismo tiempo las repercusiones en el ecosistema del Mediterráneo;

8.   respalda la idea de que, aunque la política marítima integrada vaya en principio destinada a los Estados miembros, para que sea eficaz (especialmente en una región como el Mediterráneo, en la que sólo un tercio de los Estados ribereños son miembros de la UE) es esencial conseguir un nivel más elevado de entendimiento mutuo y cooperación con los terceros países del Mediterráneo;

9.   señala con satisfacción la adopción el 5 de mayo de 2010 en Ancona por los ocho ministros de Asuntos Exteriores de los países que participan en la Iniciativa Adriático-Jónica (Albania, Bosnia y Herzegovina, Croacia, Grecia, Italia, Montenegro, Serbia y Eslovenia) de la Declaración del Consejo Adriático-Jónico en apoyo a la estrategia europea para la región Adriático-Jónica que, entre otras cosas, aspira a promover de manera sustancial políticas de desarrollo conjuntas, como la política marítima, entre los Estados miembros y los demás Estados participantes en la Iniciativa Adriático-Jónica, especialmente fomentando la implantación de estrategias conjuntas de desarrollo que comprometan a los agentes locales y, especialmente, a los entes regionales, facilitando de este modo la vía de la adhesión a la UE y de la integración en la UE;

10.   subraya el hecho de que el entorno marino y la gobernanza del mismo tiene importantes repercusiones en la dimensión local y regional, que a su vez repercute directamente en dicho entorno;

Principales retos

11.   reconoce la complejidad de las cuestiones y de las presiones que afectan a los responsables políticos en relación con un factor tan importante del tejido económico europeo y mundial como es el Mediterráneo;

12.   señala que los niveles actuales de actividad económica – especialmente en ámbitos como el tráfico marítimo y el transbordo de mercancías, la pesca y el turismo – están dejando una marcada impronta en el ecosistema mediterráneo, que provoca un elevado nivel de degradación medioambiental;

13.   comparte la preocupación por la necesidad de afrontar urgentemente la combinación de contaminación procedente de fuentes terrestres y de buques, vertidos de basura, agresiones a la biodiversidad, sobrepesca y degradación de las costas en el Mediterráneo;

14.   es consciente del hecho de que el patrimonio cultural y natural singular existente en la región del Mediterráneo está cada vez más amenazado;

15.   es asimismo consciente de que la región del Mediterráneo es una zona de alto riesgo en lo que se refiere a los efectos potenciales del cambio climático;

16.   acoge favorablemente que se reconozca que la inmigración irregular por vía marítima es una fuente de grave preocupación en la región, y apoya el llamamiento a cooperar con los interlocutores mediterráneos para contrarrestar el fenómeno e impedir la pérdida de vidas humanas;

Mejora de la gobernanza marítima

17.   comparte la preocupación por el hecho de que la mayoría de los países mediterráneos aplica cada política sectorial a través de su propia administración, lo que entorpece la obtención de una visión global del impacto acumulativo de las actividades marítimas;

18.   muestra asimismo su preocupación por el hecho de que la amplia proporción de espacio marino de alta mar dificulta a los Estados costeros la planificación, organización y regulación de las actividades que afectan directamente a sus mares territoriales y sus costas;

19.   señala que la aspiración de mejorar la gobernanza en el Mediterráneo se ve dificultada porque las políticas y actividades tienden a desarrollarse de forma autónoma las unas de las otras y sin una coordinación adecuada entre todos los sectores de actividad que repercuten en el mar ni entre los distintos interlocutores locales, nacionales, regionales e internacionales;

20.   al mismo tiempo conviene en que para conseguir una correcta gobernanza es esencial garantizar la participación de los interesados, la transparencia del proceso decisorio y la aplicación de las normas acordadas;

21.   conviene en la necesidad de generar una cultura medioambiental en el Mar Mediterráneo, como elemento básico de sensibilización y participación en los procesos de sostenibilidad marina a todos los niveles;

22.   reitera su opinión de que los entes locales y regionales son los que están mejor situados para determinar las medidas necesarias para aplicar las políticas localmente y a nivel de cada cuenca marítima regional, y pueden por tanto desempeñar un importante papel en la realización de una política marítima integrada en la región del Mediterráneo;

23.   en este sentido señala que los entes locales y regionales participan ya activamente en el desarrollo y la aplicación eficaz de iniciativas regionales encaminadas hacia este objetivo (1);

Papel de los Estados ribereños mediterráneos

24.   apoya el llamamiento a los Estados miembros mediterráneos a proseguir sus esfuerzos para elaborar sus propias políticas marítimas integradas;

25.   acoge favorablemente la creación de un sistema que permite intercambiar la información y las mejores prácticas;

26.   acoge favorablemente la propuesta de la Comisión de que los centros de contacto de alto nivel de los Estados miembros observen regularmente la situación del Mar Mediterráneo para discutir los progresos alcanzados en la elaboración de una política marítima integrada;

27.   respalda los esfuerzos de la Comisión para fomentar el intercambio de las mejores prácticas de gobernanza marítima integrada entre los Estados miembros, especialmente a través de los programas enmarcados en el objetivo de cooperación territorial europea para el Mediterráneo;

28.   comparte la idea de que la peculiar naturaleza continental del Mar Mediterráneo y las repercusiones transfronterizas de las actividades marítimas exigen un incremento de la cooperación con los países mediterráneos no pertenecientes a la UE;

29.   acoge favorablemente la propuesta de la Comisión de fomentar un intercambio de mejores prácticas entre los países de la UE y los terceros países mediterráneos interesados en un enfoque integrado de los asuntos marítimos mediante la creación de un grupo de trabajo dedicado a la política marítima integrada;

30.   aprueba que el proceso de compartir la información y desarrollar programas de apoyo se amplíe a terceros países de la región del Mediterráneo con el fin de alentarles a abandonar una perspectiva compartimentada y sectorial y a adoptar un enfoque global e integrado de los asuntos marítimos;

31.   subraya que la prestación de asistencia técnica y el desarrollo de programas específicos de cooperación conjunta al amparo de las iniciativas políticas existentes (como la política europea de vecindad y el Instrumento Europeo de Vecindad y Asociación) constituyen un paso en la buena dirección;

32.   considera que la participación de organismos académicos, profesionales y no gubernamentales contribuirá a reforzar este proceso;

33.   pide a la Comisión que reconozca que los entes locales y regionales tienen capacidad para aportar una importante contribución a este respecto, por lo que se les debe dar todas las oportunidades y todas las herramientas necesarias para participar activamente en todos los programas e iniciativas que se adopten;

Gobernanza del espacio marítimo

34.   advierte con preocupación que amplias zonas del Mar Mediterráneo quedan fuera de la jurisdicción o soberanía de los Estados ribereños, por lo que la capacidad de estos Estados para establecer y aplicar leyes en dichas zonas resulta en el mejor de los casos limitada;

35.   es consciente del hecho de que existen cuestiones complejas y políticamente delicadas sobre la delimitación de fronteras entre Estados adyacentes y situados en la orilla opuesta en el Mediterráneo que pueden obstaculizar la creación de una verdadera política marítima integrada en la región del Mediterráneo;

36.   considera que la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982 (Unclos) puede servir de base para afrontar estas cuestiones de delimitación, y expresa su convencimiento de que la UE debería sensibilizar a los Estados mediterráneos no pertenecientes a la UE que no han ratificado dicha Convención y animarles para que lo hagan;

37.   apoya los esfuerzos de la Comisión para determinar los principales obstáculos que impiden la ratificación, la aplicación y el cumplimiento de las decisiones adoptadas con arreglo a los acuerdos existentes, así como las posibilidades de mejora de la cooperación y la asistencia multilateral a este respecto;

38.   comparte la idea de que es preciso adquirir una visión global más transparente de las actividades llevadas a cabo por las organizaciones que se ocupan de los asuntos marítimos, que determine asimismo si las disposiciones adoptadas o promovidas por estos organismos son objeto de un seguimiento sistemático y de una plena aplicación;

39.   respalda el llamamiento de la Comisión en pro de una mayor claridad en lo que respecta a los roles y las responsabilidades de los Estados ribereños, especialmente en lo que se refiere a la gestión de las zonas marítimas desde una perspectiva de desarrollo sostenible;

40.   apoya la propuesta de emprender un estudio específico sobre los costes y los beneficios del establecimiento de zonas marítimas;

41.   insta a la Comisión a mostrar mayor firmeza a la hora de reconocer que la mejora de la gobernanza del espacio marítimo a niveles subregionales se debe impulsar y reforzar en mayor medida;

Mayor participación de los interesados

42.   comparte la opinión de que la participación de los interesados debe ser una de las grandes prioridades de la aplicación de la política marítima integrada en el Mediterráneo;

43.   toma nota del compromiso de la Comisión de fomentar la creación de plataformas de interesados que aborden regularmente los problemas que afectan al Mar Mediterráneo;

44.   apoya la recomendación de la Comisión de explorar distintas opciones que permitan asociar mejor a los interesados de todos los Estados ribereños;

Instrumentos horizontales del gobierno marítimo integrado

45.   conviene en que la mejora de la gobernanza marítima integrada requiere una serie de herramientas horizontales que permitan generar un potencial adicional de crecimiento económico marítimo y asegurar la protección del medio ambiente y un mejor futuro a las poblaciones costeras;

Ordenación del espacio marítimo y estrategias marinas

46.   acoge favorablemente las previsiones positivas de la Comisión según las cuales la actividad marítima en el Mediterráneo experimentará un crecimiento a pesar de la actual crisis económica global;

47.   al mismo tiempo, sin embargo, muestra su preocupación por la posibilidad de que este aumento de la actividad marítima, si no se regula y controla adecuadamente, pueda provocar un empeoramiento del frágil tejido social y medioambiental existente en la región del Mediterráneo;

48.   comparte la opinión de que, en el respeto de los sistemas de ordenación nacionales que ya estén vigentes, la ordenación del espacio marítimo en la región del Mediterráneo puede servir de instrumento eficaz de gobernanza que permita aplicar una gestión basada en el respeto a los ecosistemas capaz de amortiguar las repercusiones interrelacionadas de las actividades marítimas, los conflictos entre las distintas utilizaciones del espacio y la preservación de los hábitats marinos;

49.   respalda la aplicación de los principios comunes establecidos en la Comunicación sobre la ordenación del espacio marítimo al contexto específico del Mediterráneo;

50.   considera que debe seguir siendo prioritario el cumplimiento de los objetivos fijados para devolver un buen estado medioambiental a las aguas marinas de aquí a 2020 mediante el desarrollo de estrategias marinas integradoras que apliquen a las actividades humanas que afectan al mar un enfoque que tenga en cuenta el ecosistema. Desde esta perspectiva, es importante centrar la atención no sólo en cuestiones como la contaminación marina causada por los puertos de mar y las comunidades costeras, sino también en la calidad de las aguas de los ríos que desembocan en el Mediterráneo, así como en la necesidad de garantizar un sistema de alta calidad de depuración de las aguas residuales de las ciudades y de las comunidades contiguas a los ríos;

51.   opina que los entes locales y regionales deben aportar una importante contribución a este respecto, por lo que acoge favorablemente la sugerencia de la Comisión de poner en marcha un proyecto que permita comprobar la aplicación de la ordenación del espacio marítimo a escala subregional con el fin de fomentar prácticas transfronterizas concretas. El desarrollo de este tipo de métodos debe respetar los actuales sistemas de ordenación nacionales y estar orientado a su interconexión más que a su reorganización forzada;

52.   acoge favorablemente el desarrollo de una estrategia de aplicación común a fin de ayudar a los Estados miembros a cumplir las obligaciones que les impone la Directiva marco sobre estrategia marítima en relación con sus estrategias marinas, aunque expresa sus reservas sobre las posibilidades de cumplir antes del final del presente año el objetivo de realizar una evaluación completa de las aguas marinas y sus utilizaciones;

Gestión integrada de las zonas costeras y las islas

53.   apoya que se dé un impulso a la cuestión del cambio climático como ámbito de interés prioritario;

54.   acoge favorablemente la atención que se presta al desarrollo portuario, el turismo costero y la protección del patrimonio marítimo y el medio ambiente marino, incluidos los sitios Natura 2000;

55.   conviene en que se debe considerar la acuicultura como un elemento a tener en cuenta en la Gestión Integrada de las Zonas Costeras, y que forma parte de la cultura y del sistema productivo costero del Mar Mediterráneo;

56.   conviene en que existe un amplísimo potencial de desarrollo en toda la cuenca del Mediterráneo, inherentemente rica en cultura;

57.   advierte con satisfacción la relevancia que se da a la cuestión específica de los Estados y las regiones insulares, y en particular a las dificultades relacionadas con la conectividad física;

58.   apoya la propuesta de aplicar un enfoque integrado a la gestión de las zonas costeras mediterráneas;

59.   conviene en que los instrumentos de gobernanza horizontales pueden ayudar a las regiones costeras del Mediterráneo en su búsqueda de la sostenibilidad social, medioambiental y económica con métodos integrados;

60.   reitera su apoyo a la iniciativa de la Comisión de adoptar instrumentos jurídicos a nivel de cuenca marítima en cumplimiento del objetivo de conseguir una gestión integrada de las zonas costeras del Mediterráneo (2);

61.   conviene en que el intercambio de las mejores prácticas es un importante instrumento para garantizar la mejora de las prácticas, y apoya por tanto la iniciativa de la Comisión de compilar un inventario en red de los instrumentos, las mejores prácticas y los estudios de casos concretos de gestión integrada de las zonas costeras;

62.   apoya la intención de adoptar iniciativas para desarrollar la base de conocimientos sobre la gestión integrada de las zonas costeras en el Mediterráneo y la especial importancia que se da a la cooperación internacional;

63.   considera positivo adoptar medidas para reforzar la interfaz tierra-mar, especialmente mediante la conexión de la ordenación del espacio terrestre y la ordenación marítima.;

64.   al mismo tiempo, sin embargo, insta a la Comisión Europea a mostrarse más audaz en su planteamiento y a proponer nuevos instrumentos más eficientes para conseguir un cumplimiento efectivo de los objetivos fijados, teniendo en cuenta el valor añadido potencial de la participación de los entes locales y regionales en este proceso;

65.   declara que apoyaría la creación de Grupos de Acción Marítima, que integrasen distintos aspectos sectoriales que hoy se gestionan de forma independiente, en un intento de mejorar la complementariedad y sinergia entre fondos estructurales (FEDER, FSE) y no estructurales (FEP), que pueden tener actuaciones en el ámbito marítimo;

Promover una actuación basada en el conocimiento

66.   conviene en que el desarrollo de economías marítimas sostenibles y de una gestión costera eficaz exige unas políticas apoyadas en los cimientos de los mejores conocimientos científicos disponibles;

67.   pide a la Comisión Europea que promueva iniciativas para la gestión sostenible de las zonas portuarias;

68.   comparte la afirmación de que es preciso actuar en mayor medida para recoger y difundir los datos básicos para evaluar el estado medioambiental del Mar Mediterráneo y su posible rendimiento de recursos naturales;

69.   apoya la intención de la Comisión de seguir promoviendo la importancia de los dictámenes científicos y la compilación de datos para la aplicación de la Política Pesquera Común y la legislación medioambiental en el Mediterráneo;

70.   conviene en que es preciso reforzar la infraestructura de investigación marina, desplegar nuevos esfuerzos de investigación y desarrollo tecnológico integrados a través de agrupaciones marítimas y plataformas tecnológicas, y obtener sinergias entre los Estados miembros y las regiones para encontrar soluciones coherentes que permitan explotar la totalidad del potencial económico del Mar Mediterráneo mediante un enfoque que respete los ecosistemas, y considera por tanto que el desarrollo de un sistema pluridisciplinar de observación de los ecosistemas marinos, incluido el lecho marino, es un paso en la dirección adecuada;

71.   reconoce el importante trabajo que se está realizando con vistas a la creación de una red europea de observación y compilación de datos marinos (Emodnet) para mejorar la infraestructura de conocimientos y superar los obstáculos que dificultan el descubrimiento de los datos, el acceso a los mismos y su utilización;

72.   acoge favorablemente la intención de la Comisión de dedicar una atención especial al Mar Mediterráneo cuando establezca la red marina integrada ERA-NET (Red del espacio europeo de investigación) destinada a reforzar la coordinación de la investigación marina entre Estados miembros;

73.   conviene en que sería útil realizar un amplio esfuerzo de investigación multidisciplinar con vistas a la integración de los conocimientos sobre el Mar Mediterráneo de todas las disciplinas pertinentes;

74.   acoge favorablemente la elaboración de un atlas europeo de los mares para facilitar la toma de conciencia al respecto y crear una identidad marítima compartida dentro de cada cuenca marítima, incluida la del Mediterráneo;

75.   señala que, con respecto a las realidades geopolíticas específicas de la región del Mediterráneo, el éxito final de cualquier iniciativa o medida depende en buena medida de la plena participación de todos los Estados mediterráneos y de la existencia de programas conjuntos adecuados e iniciativas para el desarrollo de capacidades;

76.   en este contexto, apoya la iniciativa de definir un marco estratégico a largo plazo para la cooperación científica en toda la cuenca del Mediterráneo que permita desarrollar la cooperación sobre investigación marina en el marco de una programación estructurada y como respuesta a una serie de retos comunes preacordados;

Vigilancia integrada para un espacio marítimo más seguro y protegido

77.   conviene en que la supervisión de las actividades y las operaciones marítimas, especialmente con vistas a contrarrestar los problemas de seguridad y protección de la vida humana y preservar el ecosistema marino, es un requisito necesario para el éxito de la gestión de las actividades en el mar;

78.   considera necesaria la integración en la Vigilancia Marítima de las actividades de pesca y transbordos que se realizan tanto en las riberas de los Estados como en las aguas internacionales del Mediterráneo;

79.   respalda la opinión de que es esencial la estricta aplicación de la legislación de la UE en materia de seguridad marítima;

80.   considera que hace falta adoptar más medidas para el desarrollo de capacidades en las administraciones marítimas y en las autoridades portuarias de los países socios mediterráneos no pertenecientes a la UE para permitirles afrontar el reto de garantizar un espacio marítimo seguro y protegido en el Mediterráneo;

81.   comparte la opinión de que ha llegado el momento de aprovechar los logros del proyecto Safemed para colmar las lagunas reguladoras y estructurales entre los Estados miembros de la UE y los países socios mediterráneos, y apoya la propuesta de la Comisión de que la Agencia Europea de Seguridad Marítima inicie una cooperación técnica con esos interlocutores mediterráneos;

82.   en relación con la vigilancia de los movimientos de los buques, anima a la Comisión a que amplíe el alcance del servidor regional mediterráneo denominado Sistema de Identificación Automático instando a los Estados miembros no pertenecientes a la UE a que se integren en su ámbito;

83.   reconoce la contribución de Frontex a una mejor vigilancia de la región del Mediterráneo, especialmente en lo que se refiere al apoyo que brinda a los Estados miembros europeos sujetos a una abrumadora presión migratoria ilegal;

84.   reconoce que mediante un proceso eficaz de diálogo y asistencia financiera a los países socios mediterráneos se les podrá también animar a que participen directamente en las actividades coordinadas por Frontex en el Mediterráneo;

85.   no obstante, muestra su preocupación por el hecho de que Frontex sigue estando muy mal equipado para desempeñar cabalmente las tareas que se le han asignado, y apoya a la Comisión en sus esfuerzos por garantizar que esta agencia reciba los instrumentos y recursos necesarios para cumplir su mandato;

86.   al mismo tiempo manifiesta su preocupación por el hecho de que las nuevas directrices recientemente aprobadas para las patrullas fronterizas de la UE han creado una situación en la que los Estados que no son capaces de soportar el peso añadido de la inmigración ilegal podrían evitar participar activamente como países anfitriones de las misiones de Frontex, con lo que se reducirá notablemente el éxito potencial de dichas misiones;

87.   propugna que se adopten medidas más directas, tanto en el territorio de la UE como en el exterior, para llevar ante la justicia a quienes facilitan la inmigración ilegal mediante sus actividades delictivas;

88.   al mismo tiempo pide a la Comisión que no escatime esfuerzos para garantizar en todos los casos, tanto en el territorio de la UE como en el exterior, el máximo respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales de los inmigrantes concernidos;

89.   apoya toda iniciativa encaminada a impulsar el trabajo positivo realizado en el ámbito de la aplicación de la legislación sobre estupefacientes en el mar;

90.   lamenta señalar que en la Comunicación no se hace ninguna referencia al riesgo cada vez mayor del terrorismo, incluida la piratería marítima, que desgraciadamente asoma su fea catadura en zonas no muy lejanas de la región;

91.   respalda todo esfuerzo encaminado a integrar la vigilancia marítima en el Mediterráneo mediante el fomento de los intercambios de información y el refuerzo de la cooperación entre las autoridades nacionales responsables del control y la vigilancia en el mar;

92.   considera sin embargo que la inclusión de los países socios mediterráneos en la integración de la vigilancia marítima no es algo que deba estudiarse más adelante, sino que debe constituir más bien una cuestión prioritaria para la Comisión;

93.   al mismo tiempo subraya el hecho de que la vigilancia eficaz de las actividades y operaciones marítimas y la mitigación de las inquietudes relativas la seguridad no se podrán lograr sin la participación activa de los entes locales y regionales;

Conclusión

94.   conviene en que las dificultades que aquejan al Mar Mediterráneo reclaman respuestas comunes y sobre todo integradas, ancladas en la mejora de la gobernanza marítima, y apoya la iniciativa de la Comisión de asumir un papel de coordinación y fomento de las acciones nacionales en el ámbito de la política marítima mediterránea;

95.   en este sentido señala que la Comunicación es por regla general respetuosa con los principios de subsidiariedad y proporcionalidad, pero manifiesta su decepción porque en ella no se reconoce siempre debidamente la dimensión local y regional, especialmente en el contexto de los programas e iniciativas propuestos, por lo que pide a la Comisión que adopte medidas para garantizar que los entes locales y regionales tengan la oportunidad de participar directamente en estos programas e iniciativas y de dar respuestas conjuntas a los retos cruciales que afronta el Mediterráneo. La Comisión debe ser consciente de las diferencias entre las estructuras del nivel local en los distintos Estados miembros, y de que las competencias de que disfrutan en cada caso brindan posibilidades diferentes en cuanto al grado de compromiso deseable;

96.   comparte la opinión de que el enfoque integrado de los asuntos marítimos no debe socavar las herramientas ni los objetivos que se han fijado para avanzar en sectores marítimos específicos;

97.   conviene en que una política marítima integrada eficaz en el Mediterráneo tiene el potencial para impulsar la optimización de la eficiencia y los resultados en los diversos ámbitos de actividad que afectan a la región;

98.   al mismo tiempo, sin embargo, no puede sino señalar con pesar que en la Comunicación no se dan detalles sobre la financiación de las acciones previstas;

99.   por consiguiente, aun respaldando los objetivos y las acciones expuestos en la Comunicación, insta a la Comisión a tomar nota del presente Dictamen y a adoptar las medidas necesarias para reforzar la Comunicación;

Recomendaciones

El Comité de las Regiones recomienda en particular:

100.   impulsar un diálogo más profundo y constructivo entre todos los actores relevantes de la región, también a nivel local y regional, con el fin de cimentar la confianza y el entendimiento mutuos;

101.   establecer mecanismos efectivos mediante los cuales se aliente y capacite a todos los Estados mediterráneos para contribuir de modo equitativo a la gobernanza eficaz de esta región única prestando especial atención a la protección del medio ambiente marino y de la biodiversidad;

102.   que la Comisión considere la recomendación y aprobación de medidas para coordinar acciones directas específicas entre los Estados miembros de la Unión Europea y los países socios mediterráneos no pertenecientes a la UE con el fin de combatir la creciente actividad delictiva organizada internacional en la región del Mediterráneo, con especial atención al fenómeno de la trata de seres humanos y al tráfico de estupefacientes y de armas;

103.   prestar más atención y reconocer en mayor medida el papel potencial de la dimensión local y regional, tanto en la UE como en los países terceros mediterráneos, y en este sentido dedicar más atención, coordinación y apoyo a los trabajos de la Asamblea Regional y Local Euromediterránea (ARLEM);

104.   brindar imperativamente al Comité de las Regiones, y a los niveles de gobierno local y regional que representa, la plena oportunidad de participar directamente en los trabajos del grupo de centros de contacto de alto nivel de los Estados miembros que se propone para debatir regularmente sobre la política marítima integrada;

105.   asimismo, dar al Comité de las Regiones, y a los niveles de gobierno local y regional que representa, la plena oportunidad de participar directamente en las deliberaciones del grupo de trabajo sobre la política marítima integrada en el Mediterráneo;

106.   realizar un estudio a fondo sobre los productos y materiales que actualmente se transportan por vía marítima en el Mediterráneo con el fin de determinar los verdaderos niveles de riesgo relacionados con este transporte;

107.   fomentar y concebir nuevas iniciativas público-privadas, activamente respaldadas por los instrumentos financieros europeos, con el fin de limpiar y detener la pérdida de biodiversidad del Mediterráneo e impulsar la investigación para descubrir formas más eficaces y menos peligrosas de conectar las materias primas con la industria;

108.   que la Comisión apoye el estudio en profundidad de los fenómenos relacionados con el cambio climático y la contaminación costera, que tienen graves repercusiones económicas en la pesca costera; el Comité subraya al mismo tiempo la necesidad de que la Comisión apoye los esfuerzos de los Estados miembros para tomar medidas inmediatas a fin de aliviar la carga de los profesionales y trabajadores del sector de la pesca;

109.   desarrollar y mantener de corto a medio plazo instrumentos y mecanismos concebidos para impulsar efectivamente una mayor integración de la política marítima y tendentes a un aumento del nivel de armonización y simplificación de las políticas marítimas;

110.   establecer medidas para animar a todos los Estados del Mediterráneo a que ratifiquen y apliquen plenamente los convenios y protocolos sobre protección del medio ambiente marino, la biodiversidad, el transporte marítimo y la pesca en el Mediterráneo, incluso mediante una gestión común y compartida de las poblaciones de peces y una armonización de las obligaciones correspondientes a los diferentes sistemas de pesca en todos los Estados del Mediterráneo;

111.   dar la debida consideración en particular a sus reiterados llamamientos a establecer un único mecanismo financiero simplificado con el fin de agrupar todos los asuntos marítimos en el marco de un Fondo europeo de zonas costeras e islas;

112.   que la Comisión amplíe su sugerencia de poner en marcha un proyecto que permita comprobar la aplicación de la ordenación del espacio marítimo a escala subregional con el fin de fomentar prácticas transfronterizas concretas presentando una propuesta detallada en un plazo razonablemente corto y en este contexto recuerda su posición a favor de una gobernanza multinivel innovadora en la que se deberían tener en cuenta los aspectos sociales y medioambientales y los convenios regionales existentes.

Bruselas, 10 de junio de 2010.

La Presidenta del Comité de las Regiones

Mercedes BRESSO


(1)  COM(2009) 540 final.

(2)  En la línea del Protocolo relativo a la gestión integrada de las zonas costeras del Mediterráneo de 21 de enero de 2008.