COMUNICACIÓN CONJUNTA AL PARLAMENTO EUROPEO, AL CONSEJO, AL COMITÉ ECONÓMICO Y SOCIAL EUROPEO Y AL COMITÉ DE LAS REGIONES Política europea de vecindad: hacia una cooperación reforzada /* JOIN/2013/04 final */
Política
europea de vecindad: hacia una cooperación reforzada
1.
Introducción
La UE revisó la política europea de vecindad (PEV)
en 2011[1], creando
instrumentos destinados a proporcionar más ayuda a los países socios que
están construyendo una democracia profunda y sostenible, así como a apoyar
el desarrollo económico integrador. Las principales características de la nueva
PEV son la asociación política y la integración económica, la movilidad de
las personas, mayor ayuda financiera de la UE, una asociación reforzada con
la sociedad civil y mejor cooperación respecto de políticas sectoriales
específicas. La presente Comunicación conjunta, acompañada de una serie de
documentos de trabajo conjuntos[2], examina los
resultados de la UE y los países socios en la aplicación de los objetivos
de reforma acordados conjuntamente.
El año pasado fue un periodo agitado y lleno de
retos para la Unión Europea y sus vecinos. La UE siguió trabajando para
superar la crisis financiera y la consiguiente recesión económica en varios
Estados miembros. Algunos de sus países socios vecinos siguieron enfrentándose
a conflictos, inestabilidad política y condiciones socioeconómicas
difíciles. Estos países a veces tienen que hacer frente a tremendos retos
políticos, económicos y sociales, algunos de los cuales exigen respuestas
inmediatas, lo que deja poco tiempo a los responsables políticos para
centrarse en las reformas a medio y largo plazo.
La PEV sigue siendo la base sobre la que la UE
trabaja con sus vecinos para lograr la más estrecha asociación política
posible y el mayor grado posible de integración económica. Este objetivo
se basa en valores e intereses comunes: la democracia, el Estado de
Derecho, el respeto de los derechos humanos y la cohesión social.
Los procesos de transición democrática han
continuado en muchos países socios. Los libios eligieron su asamblea constituyente
por primera vez en más de cuatro décadas. Egipto y Túnez han seguido
aplicando reformas constitucionales, aunque no sin dificultades.
Armenia, Georgia y Ucrania eligieron nuevos
parlamentos, mientras que el parlamento de Moldavia eligió a su
presidente. Las estructuras democráticas se están consolidando, aunque no
todas estas elecciones cumplieron plenamente las normas internacionales.
Los bielorrusos también acudieron a las urnas a elegir a su parlamento. No
obstante, las elecciones no cumplieron las normas de la OSCE ni las normas
internacionales.
La evolución de la situación en Egipto, Túnez y
Libia muestra claramente que la transición es compleja. Por tanto, se
precisará tiempo para establecer nuevos equilibrios y estructuras
políticas, así como para el crecimiento económico y la cohesión social,
sobre la base de un consenso en torno a valores y principios
fundamentales. La reforma constitucional es lenta, el progreso no siempre
es lineal y, en muchos casos, los resultados aún son inciertos. En tales
casos, la UE ha seguido trabajando con sus socios y apoyándoles en su
camino hacia el establecimiento de una democracia sostenible.
El año pasado, el avance de los socios de la
vecindad fue muy dispar. En muchos países socios, los intereses políticos
o económicos impidieron o ralentizaron a veces amplias reformas. En
algunos casos, ha habido retrocesos de las reformas. Sin embargo, el menor
crecimiento económico, el aumento del desempleo, las desigualdades
persistentes, los crecientes retos medioambientales y unos indicadores
socioeconómicos a menudo en declive, hacen más necesarias que nunca el
tipo de reformas que conforman el núcleo de la PEV.
La creciente implicación de otros agentes (países terceros,
organizaciones regionales, etc.) en los países vecinos del sur y del este
significa que la UE debe trabajar más estrechamente con ellos en la
resolución de los problemas que afectan a la región.
La UE ha reforzado el apoyo político y financiero a
aquellos de sus socios que inician reformas políticas. El análisis de la
evolución y de los resultados de las reformas en los países socios pone de
manifiesto que la PEV funciona cuando existe voluntad de reforma y la sociedad
desempeña un papel activo en el proceso. Los valores, modelos de
gobernanza o reformas no pueden imponerse desde el exterior. Solo pueden
arraigar cuando los líderes políticos y los ciudadanos se comprometen con
los objetivos de la reforma acordados entre la UE y sus socios. La UE debe
continuar acercándose y trabajando con quienes apoyan la reforma y la
asociación con la UE. Al mismo tiempo, la UE debe comunicar mejor la forma
en que la PEV y sus instrumentos pueden apoyar los auténticos esfuerzos de
reforma.
Una asociación reforzada con la sociedad es
fundamental para la PEV. Como fuerza impulsora de la democratización y la
inclusión, la sociedad civil desempeña un papel clave en todos los
aspectos de la reforma socioeconómica y democrática, en el fomento de los
derechos de la mujer, en el apoyo a la libertad de expresión y de
asociación, en la defensa de la protección del medio ambiente y, en
general, persiguiendo una mayor justicia social. La UE ha seguido cumpliendo
su compromiso de trabajar con la sociedad civil, los parlamentos
nacionales y otras partes interesadas clave, como los interlocutores
sociales y las empresas, para garantizar que los objetivos de reforma
acordados con los países socios reflejen fielmente las preocupaciones y
aspiraciones de las sociedades. La sociedad civil también tiene un papel
crucial que desempeñar en la promoción de estas reformas y en la
responsabilización de los gobiernos. La creación del Foro de la Sociedad
Civil de la Asociación Oriental (AO), incluido el establecimiento de
plataformas nacionales en los países socios, es un buen ejemplo del
refuerzo del papel de la sociedad civil en la PEV. La UE ha seguido
prestando apoyo a la sociedad civil a través de una serie de diferentes
instrumentos de financiación.
La UE y sus vecinos también se enfrentan a desafíos
comunes, como en los ámbitos económico, de seguridad, medioambiental y de
migración. El cumplimiento de los compromisos asumidos para con sus
vecinos del sur y del este, el apoyo a la transición democrática y a la
reforma económica, así como la colaboración estrecha con ellos en todos
los aspectos de sus agendas política y de reforma, contribuirán a la
seguridad y la prosperidad de la UE.
2. Aplicación
Dos años después de la revisión de la PEV, su
aplicación es la principal tarea y desafío para la UE y sus socios. Desde
2011, el progreso en la aplicación de las reformas acordadas por la UE y
sus socios ha sido desigual. No obstante, ello no debe dar lugar al
desistimiento. Por el contrario, la UE debe intensificar su participación
en el proceso, incluso a largo plazo.
La construcción de la
democracia en los países socios está en manos de sus ciudadanos y de sus
representantes electos. La PEV puede apoyar, pero no sustituir, este
proceso. El análisis de las principales recomendaciones contenidas en los
informes de situación de la PEV muestra que apenas nos encontramos al
comienzo del proceso. También expone los retos que tiene ante sí. En
muchos países vecinos, se han hecho progresos en cuanto a las
recomendaciones fundamentales sobre las elecciones, a menudo con ayuda
financiera y logística de la UE. Se ha registrado un progreso insuficiente
respecto a las recomendaciones clave sobre la libertad de asociación,
expresión y reunión, la libertad de prensa y de los medios de
comunicación, el Estado de Derecho y la independencia del poder judicial,
y la lucha contra la corrupción. Muchas recomendaciones son tan válidas
hoy como lo eran en 2012. En el cuadro siguiente
se destaca la aplicación de las principales recomendaciones de los
informes de situación del año anterior.
Armenia aplicó algunas de las
principales recomendaciones. Elaboró una hoja de ruta para mejorar
el proceso electoral, adoptó una estrategia nacional de derechos humanos
y tomó medidas para luchar contra la corrupción, reformar el sistema
judicial y la administración pública, y hacer avanzar las reformas
sectoriales y la aproximación legislativa al acervo de la UE.
Azerbaiyán solo aplicó un número
reducido de recomendaciones clave. Inició la aplicación del plan de
acción en materia de derechos humanos, prosiguió la reforma judicial y
adoptó medidas para solucionar el problema de las demoliciones y los desalojos
forzosos. No cooperó con el ponente de la Asamblea Parlamentaria del
Consejo de Europa sobre los presos políticos.
Georgia aplicó la mayoría de
las recomendaciones clave. Garantizó en general unas elecciones
parlamentarias libres y justas, continuó su compromiso con las regiones
separatistas, participó activamente en las conversaciones de Ginebra y tomó
medidas para mejorar las condiciones de vida de los desplazados internos.
También reforzó la libertad de expresión y opinión, reformó el sistema
judicial y avanzó en las reformas sectoriales y la aproximación
legislativa al acervo de la UE.
Moldavia aplicó la mayoría de
las recomendaciones clave. Intensificó sus esfuerzos en cuanto a la reforma
judicial y de aplicación de las normas, inició el diálogo con Tiraspol, continuó
aplicando reformas en las áreas de la asistencia social, la salud y la
educación, la energía, la competencia, las ayudas estatales y la
aproximación legislativa al acervo de la UE. Finalizó las últimas medidas
de la primera fase de su plan de acción para la liberalización de visados
(PALV), e intensificó la reforma institucional del sector de la aviación.
Ucrania: aún deben aplicarse la
mayoría de las principales recomendaciones. Sin embargo, Ucrania ha
avanzado hacia la reforma jurídica y judicial, con la entrada en vigor
del nuevo código de enjuiciamiento criminal y otra legislación importante.
Asimismo, adoptó una ley sobre el asilo y el estatuto de los refugiados,
aunque su aplicación es deficiente.
Egipto solo aplicó un número
reducido de recomendaciones clave. El poder se entregó a un gobierno
civil y se retiró el estado de emergencia. Se elaboró una constitución y se
aprobó por referéndum. Sin embargo, el proceso fue polémico y muy
criticado por la oposición, lo que condujo a una crisis política muy
disgregadora.
Israel: aún deben aplicarse la
mayoría de las principales recomendaciones. No se observó ningún
cambio significativo en los ámbitos preocupantes.
Palestina[3]: la mayoría de las
recomendaciones clave siguen siendo válidas y aún deben aplicarse. No
obstante, algunas ya se han aplicado, como la celebración de elecciones
locales, la mejora de la gestión de las finanzas públicas y el desarrollo
de modelos de costes en el sector de la protección social. Sin embargo,
las dificultades derivadas principalmente de la ocupación y de la profunda
crisis financiera impidieron a la Autoridad Palestina (AP) iniciar las
reformas.
Jordania aplicó algunas de las
recomendaciones clave, especialmente la creación de la comisión electoral
y del Tribunal Constitucional, así como la adopción de una ley de
partidos políticos y una ley electoral.
Líbano empezó a aplicar
algunas recomendaciones clave, con el nombramiento de magistrados,
cuestión que estaba pendiente. Los objetivos de la reforma
avanzaron con lentitud en el contexto de la actual crisis en la vecina
Siria.
Marruecos adoptó medidas para comenzar
a aplicar la mayoría de las principales recomendaciones, pero no ha
terminado, a pesar de haber manifestado su compromiso con los objetivos
de reforma acordados. Creó un organismo para el
diálogo nacional en materia de reforma judicial, elaboró (pero no adoptó)
una ley que crea un organismo de lucha contra la corrupción y continuó la
aproximación de su legislación al acervo de la UE.
Túnez, que estaba
atravesando una difícil transición, aplicó un reducido número de
recomendaciones clave. Se aprobó el establecimiento de la comisión
electoral independiente, pero no se finalizó la nueva ley electoral.
Túnez firmó el convenio regional sobre las normas de origen
paneuromediterráneas. Los preparativos para la negociación de una zona de
libre comercio de alcance amplio y profundo (ZLCAP) han avanzado.
La UE continuó ocupándose de las
prioridades inmediatas de los países socios, contribuyendo a establecer el
Estado de Derecho y la buena gobernanza y sentando las bases para el
crecimiento económico y la creación de empleo, así como unas sociedades basadas
en el conocimiento y socialmente equitativas. Después del primer grupo de
trabajo para Túnez en 2011, los grupos de trabajo para Egipto y Jordania
reunieron a representantes de las instituciones de la UE, gobiernos,
sector privado, donantes internacionales y sociedad civil, como
catalizadores para la reforma política y económica. La ayuda financiera de
la UE en el marco del IEVA y otros instrumentos ha desempeñado un papel
fundamental en varios casos.
La reunión de los Ministros de
Asuntos Exteriores de la AO de julio de 2012 declaró que la hoja de ruta
de la AO[4] constituía una base
para orientar y supervisar la aplicación de los objetivos de la Asociación
hasta la próxima Cumbre de la AO. La hoja de ruta, al establecer las
reformas clave que los países socios han de aplicar, y describir lo que
puede hacer la UE y qué apoyo puede ofrecer, ilustra los conceptos de
responsabilidad mutua y apropiación conjunta que son esenciales para
avanzar hacia la asociación política y la integración económica.
Los trabajos de fortalecimiento
de las relaciones avanzaron más con algunos países que con otros. Esto
refleja el compromiso de la UE de avanzar más deprisa y más lejos con los
países socios que estén dispuestos y preparados para progresar en la vía
de las reformas (en consonancia con el principio de «más por más»). La UE
siguió negociando acuerdos de asociación que incluyen ZLCPC con la
República de Moldavia, Armenia y Georgia, así como un acuerdo de
asociación con Azerbaiyán. Se iniciaron las negociaciones de la ZLCPC con
Marruecos y se están preparando las negociaciones con Túnez y Jordania. El
Acuerdo de Asociación UE-Ucrania se rubricó, pero no se firmó.
Se lograron progresos considerables
en el desarrollo de planes de acción de la PEV conjuntos de nueva
generación o documentos equivalentes. Los planes de acción reflejan las
necesidades, capacidades y compromisos de reforma específicos de cada uno
de los países socios, lo que permite una relación adaptada y específica
entre la UE y cada uno de estos países. Se concluyeron negociaciones sobre
planes de acción con Líbano, Marruecos y la Autoridad Palestina, y con
Túnez en el contexto de una asociación privilegiada. Los planes de acción
deberán ser aprobados por los Consejos de Asociación respectivos. El nuevo
plan de acción para Jordania entró en vigor en octubre. También en
octubre, la UE y Argelia iniciaron negociaciones relativas a un plan de
acción conjunto de la PEV. Ucrania y la UE llegaron a un consenso para
comenzar a actualizar la actual Agenda de Asociación, que prepara la
aplicación del futuro Acuerdo de Asociación. Estaban en curso los
preparativos para iniciar las negociaciones sobre las Agendas de
Asociación con la República de Moldavia, Armenia y Georgia.
2.1. Democracia profunda y sostenible
En
la zona de vecindad se han producido avances en las reformas hacia una
democracia profunda y sostenible. No obstante, subsisten algunos problemas
y algunos avances corren el riesgo de sufrir retrocesos.
Existe
una creciente divergencia en las reformas democráticas de los países
vecinos. Por consiguiente, la UE deberá responder de una manera más
matizada, basándose en el principio «más por más» y en una revisión
rigurosa de los compromisos de reforma. Para seguir manteniendo la
credibilidad, se deberán aplicar las mismas normas de alto nivel y control
de las reformas democráticas, siempre y con independencia de la forma en que
se produzcan.
Túnez,
Egipto y Libia sufrieron revoluciones que desencadenaron reformas
democráticas, mientras que en Jordania, Marruecos y Argelia, las
autoridades que detentan el poder iniciaron reformas constitucionales,
electorales y jurídicas. Se celebraron elecciones democráticas en
Egipto, Túnez y Libia; a la mayoría de los socios les sigue preocupando la
libertad de reunión, asociación y expresión, incluida la libertad
de los medios de comunicación. La UE ha desplegado misiones de observación
electoral en Argelia y Libia. A principios de 2013, la UE fue por primera
vez observador de las elecciones en Jordania. Egipto ha aceptado que una
misión de observación de la UE supervise las próximas elecciones
parlamentarias.
Los
países orientales también siguen trayectorias cada vez más divergentes. Moldavia,
Georgia y Armenia prosiguieron aplicando reformas para mejorar el marco
electoral y celebraron elecciones que, por lo general, se ajustaron a las
normas internacionales, progresando claramente en la difícil transición hacia
una democracia sostenible. Las elecciones parlamentarias de Ucrania
presentaron un panorama más desigual, con varias deficiencias. Se observó
un deterioro en varios ámbitos en comparación con elecciones anteriores.
Las elecciones en Bielorrusia se desarrollaron en un contexto de represión,
otra oportunidad perdida para que este país celebrase elecciones de
conformidad con las normas de la OSCE y las normas internacionales. En
general, la UE está muy preocupada por la falta de libertad de reunión,
asociación y expresión en una serie de países. No se observaron mejoras en
Bielorrusia en términos de respeto de los derechos humanos, del Estado de
Derecho y de los principios democráticos.
En
algunos países socios, las organizaciones de la sociedad civil
(OSC) y a veces los sindicatos siguen enfrentándose a graves limitaciones
(obstáculos a la libertad de circulación, acciones legales contra dirigentes
de ONG, procesos administrativos farragosos, aceptación de ayuda
financiera sujeta a autorización). Las organizaciones de la sociedad civil
de Egipto se enfrentaron a una creciente presión de las autoridades. La
actual legislación sobre asociación en Egipto, Marruecos y Argelia
constituye también una causa de preocupación. La libertad de asociación en
Bielorrusia y Azerbaiyán es también deficiente. Es preciso garantizar la
libertad de asociación, y las nuevas leyes sobre las asociaciones deben
estar en consonancia con las normas internacionales de derechos humanos.
En varios países vecinos, los medios
de comunicación continúan sufriendo injerencias políticas y económicas,
falta de diversidad y autocensura. Se produjeron numerosos casos de acoso
y encarcelamiento de periodistas en Azerbaiyán y Egipto, mientras que la
aplicación de la legislación sobre transparencia de los medios de
comunicación en Georgia fue un acontecimiento positivo.
La
independencia judicial debe reforzarse en distinto grado en varios
países socios, particularmente en Egipto, Marruecos, Túnez y Argelia en el
sur, y en el este, especialmente en Azerbaiyán y Bielorrusia. En Ucrania, existe
una preocupación en relación con la manipulación del sistema judicial para
fines políticos. A pesar de algunas reformas de los sistemas judiciales,
el poder judicial sigue percibiéndose en todos los países vecinos del este
y del sur como fuertemente dependiente del ejecutivo. Los elevados índices
de condenas, el uso excesivo de las detenciones y la insatisfactoria
aplicación del principio de igualdad de armas socavaron la confianza en el
poder judicial. Si bien se realizaron esfuerzos para mejorar las
infraestructuras penitenciarias, las condiciones de las prisiones siguen
preocupando y los casos de torturas y malos tratos siguen sin investigarse
adecuadamente, lo que fomenta una cultura de impunidad entre las fuerzas
del orden.
La
corrupción sigue constituyendo un gran problema en numerosos países de
la vecindad. En la mayoría de los países no se han tomado medidas para
iniciar la lucha contra la corrupción, o se ha hecho muy tímidamente.
Especialmente en Ucrania, Líbano, Azerbaiyán, Libia y Bielorrusia, la
percepción de la corrupción sigue siendo muy elevada[5].
El
control democrático de las fuerzas armadas y las fuerzas de seguridad ha
mejorado, especialmente en Libia y Egipto. La reforma del sector de la
seguridad, en particular, la reforma de la policía, la total supresión de
los estados de emergencia y la reforma de los códigos penales y militares
con el fin de evitar los juicios militares de civiles, siguen constituyendo
un gran problema en los países vecinos de la cuenca mediterránea.
Cuestiones como la supervisión y responsabilización de la policía, las
condiciones del sistema penitenciario y el tratamiento de los ciudadanos que
realizan el servicio militar se siguen debatiendo en el marco de diálogos
estructurados.
Unos
procesos de justicia transicional creíbles son cruciales para el
éxito de la transición, en particular en los países que han derrocado
regímenes autoritarios que han cometido crímenes contra su propia
población. Las reformas judiciales y de los servicios coercitivos también
gozan de prioridad en la AO, en relación con el objetivo general de
mantener y reforzar el Estado de Derecho.
La
discriminación cultural y social contra la mujer sigue siendo un
problema en los países vecinos del sur. Las mujeres desempeñaron un papel
activo en las revoluciones. Ahora es fundamental que el proceso de
transición y la reforma constitucional no dificulten ni socaven el
progreso de la igualdad de las mujeres ante la ley y en la sociedad.
También hay mucho margen de mejora en términos de igualdad de sexos en los
países del este.
La
falta de una legislación amplia contra la discriminación sigue constituyendo
un problema en los países vecinos, con pocas excepciones. Las actitudes
discriminatorias están muy generalizadas, en particular contra el
colectivo GLTB (gays, lesbianas, transexuales y bisexuales).
2.2. Desarrollo económico y social sostenible
El crecimiento económico se
aceleró en apenas algunos socios de la PEV, como Georgia y Azerbaiyán,
pero se redujo en la mayoría. Los riesgos externos relacionados con la
situación económica mundial aumentaron y los conflictos también repercutieron
negativamente en las perspectivas de recuperación económica. Los socios
orientales y meridionales siguen enfrentándose a desequilibrios
macroeconómicos generales y a un desempleo elevado, a veces en aumento.
Los países socios del sur, en particular, tienen altas tasas de paro
juvenil. La inestabilidad política existente o renovada también ha tenido
un impacto negativo en el crecimiento. Sin un aumento
del crecimiento y sin unas políticas de empleo eficaces (incluida la inversión
en capital humano, la promoción del trabajo digno, y la investigación e innovación),
los altos niveles de desempleo se mantendrán entre los jóvenes y el sector
informal seguirá representando una proporción significativa de la economía
real. Persisten importantes disparidades socioeconómicas en muchos países
vecinos del este y del sur. Estos factores, si no se les hace frente,
continuarán poniendo en peligro la futura estabilidad social y la
transición hacia la democracia. La ayuda financiera de la UE ha ayudado a
abordarlos mediante el apoyo a las reformas económicas clave.
En el contexto de la crisis
económica y financiera continuada de la zona euro y de la desaceleración
económica mundial, los diálogos macroeconómicos que la Comisión mantuvo
en 2012 con la gran mayoría de los países vecinos (todos los países de la
PEV excepto Libia y Siria) han demostrado ser un instrumento útil para la
cooperación económica de la UE y de sus países socios. Estos diálogos permitieron un intercambio abierto
de impresiones sobre la evolución económica y los desafíos políticos, así
como sobre las repercusiones de las turbulencias en la zona del euro en los
países vecinos de la UE. También sirvieron de plataforma para revisar la
aplicación de las prioridades de la reforma económica indicadas en las
agendas de asociación y los planes de acción de la PEV.
Además de los diálogos
macroeconómicos regulares establecidos en virtud de diferentes acuerdos
bilaterales, la Comisión mantiene conversaciones sobre política económica con
países socios que se benefician de la ayuda macrofinanciera de la UE
(AMF). Con ello se pretende ayudar a los países socios a resolver los
desequilibrios macroeconómicos y a aplicar reformas estructurales
orientadas al crecimiento. En 2012, con la
liberación de los pagos finales, la Comisión completó la aplicación de dos
programas de ayuda macrofinanciera aprobados en 2009 (Armenia, 100 millones EUR
en préstamos y subvenciones) y 2010 (Moldavia, 90 millones EUR
en subvenciones). A principios de 2013 se firmó el Memorando de
Entendimiento y el Acuerdo de Préstamo para el programa de ayuda
macrofinanciera en favor de Ucrania por un importe de 610 millones EUR.
En el transcurso de 2012, la UE colaboró estrechamente con las autoridades
egipcias y jordanas sobre posibles programas de ayuda macrofinanciera que
se pondrán en marcha a principios de 2013. La decisión legislativa sobre
el programa para Georgia que la Comisión propuso a principios de 2011 (46 millones EUR
en préstamos y subvenciones) sigue a la espera de la aprobación del
Parlamento Europeo y del Consejo.
En 2012, la cooperación sobre la política
de la empresa siguió centrándose en mejorar el entorno empresarial y el
apoyo financiero para las PYME. La aplicación de la ley de la pequeña
empresa, un marco europeo para una política empresarial favorable a las
PYME, sigue siendo un objetivo clave. El nivel de progreso varía
ampliamente entre los socios. Un mecanismo de consulta que ofreciese a las
PYME la oportunidad de hacerse oír respecto de las cuestiones que les
preocupan mejoraría la elaboración de políticas en toda la región. El
refuerzo del Estado de Derecho y el acceso equitativo y fácil a los
contratos públicos mediante la mejora de los sistemas de contratación
pública, la simplificación administrativa, mejores cualificaciones, acceso
más fácil a la financiación y mayor innovación impulsarían el desarrollo
de las empresas. El apoyo financiero de la UE está ayudando en muchos
casos a las PYME a desarrollar sus capacidades.
La
lucha contra la pobreza y el desempleo siguió siendo una de las
principales prioridades en particular en las zonas rurales. En mayo, la UE
celebró un seminario de alto nivel para presentar y debatir la iniciativa
del Programa Europeo de Vecindad relativo a la Agricultura y el Desarrollo
Rural (ENPARD). En los países socios del sur se están llevando a cabo
actividades piloto. Se han creado comités técnicos con participación de la
sociedad civil y del sector privado. Se iniciaron acciones ENPARD en
Egipto, Argelia, Túnez, Marruecos y el este de Georgia. Asimismo, la Organización
para la Agricultura y la Alimentación (FAO) evaluó los sectores de la
agricultura y el desarrollo rural en cada uno de los países de la AO, e
identificó asimismo algunos retos comunes a escala regional. Los resultados
constituyen una base sólida para el recién creado grupo de la AO sobre agricultura
y desarrollo rural, y se utilizarán en la preparación de posibles nuevos
programas en este ámbito.
2.3. Mercados
La UE sigue siendo el principal
socio comercial de casi todos los países de la vecindad. Así pues, los trabajos
de profundización de la integración económica y comercial entre la UE y
sus socios han continuado. La UE y Ucrania rubricaron un Acuerdo de Asociación,
que prevé asimismo una ZLCAP. Se avanzó considerablemente en las
negociaciones con Moldavia tras el inicio de las negociaciones sobre la
ZLCAP en marzo. Armenia y Georgia progresaron muy satisfactoriamente en las
negociaciones de sus acuerdos de asociación, así como en las relativas a
la creación de una ZLCAP. La inclusión futura de los socios orientales de
la ZLCAP en el sistema paneuromediterráneo de acumulación diagonal de las
normas de origen consolidará su integración económica en la UE y les
proporcionará un incentivo adicional para el establecimiento de zonas de
libre comercio con otros socios de la PEV.
Tras
una preparación detallada, la UE y Marruecos iniciaron a principios de
2013 las negociaciones para una ZLCAP. También avanzaron los preparativos
para negociar una ZLCAP con Túnez. Los preparativos para negociar una
ZLCAP con Jordania se estancaron, y aún no se han iniciado con Egipto. El
Acuerdo Agrícola y Pesquero con Marruecos y con la Autoridad Palestina
entró en vigor en octubre y enero, respectivamente. Las negociaciones de
un acuerdo similar con Túnez no pudieron reanudarse. El Acuerdo de
Asociación sobre evaluación de la conformidad y aceptación de productos
industriales con Israel entró en vigor en enero por lo que respecta a los
productos farmacéuticos.
2.4.
Movilidad
La
UE y sus socios continuaron trabajando para mejorar la movilidad de las
personas. En 2012 se avanzó considerablemente hacia el objetivo de
los viajes sin visado en los países vecinos del este, siguiendo el mandato
de la Cumbre de la Asociación Oriental de 2011. Moldavia dio un gran paso
adelante en el contexto de su plan de acción para la liberalización de los
visados, pasando a la evaluación de la segunda fase y de los criterios de
referencia en relación con la aplicación de la legislación pertinente.
Ucrania también realizó progresos importantes en su PALV. En junio de 2012
se inició un diálogo para la liberalización de visados con Georgia,
con el fin de examinar las condiciones de los viajes sin visado a la UE
para los ciudadanos de Georgia, mientras que Armenia concedió la exención
de visados de entrada a los ciudadanos de la UE a partir de enero de 2013.
Tras el establecimiento de las asociaciones de movilidad con Moldavia,
Georgia y Armenia, se iniciaron los debates para una posible Asociación de
Movilidad entre la UE y Azerbaiyán. Una primera evaluación exhaustiva de
la Asociación de Movilidad UE-Moldavia mostró su utilidad como amplio
marco de cooperación bilateral, pero también puso de manifiesto que la
cantidad de actividades concretas (especialmente en el ámbito de la
migración legal) todavía podía ampliarse. La oferta de la UE para iniciar
negociaciones sobre acuerdos de facilitación de visados y readmisión con Bielorrusia
quedó sin respuesta. Esto subraya la importancia de que los Estados
miembros hagan un uso óptimo de la flexibilidad del Código de Visados de
la UE por lo que especta a los ciudadanos bielorrusos.
Se
desarrollaron vínculos más estrechos en el ámbito de la movilidad y la
migración con los socios del sur, aprovechando la amplia experiencia de la
UE con sus socios orientales. Tras el inicio de los diálogos sobre
migración, movilidad y seguridad con Túnez y Marruecos en octubre de 2011,
las negociaciones sobre las asociaciones de movilidad con ambos países
progresaron satisfactoriamente en 2012. Recientemente, la UE y Marruecos
anunciaron el acuerdo de los negociadores sobre la declaración política
con vistas a una Asociación de Movilidad. El objetivo es concluir las
negociaciones en el primer semestre de 2013. En diciembre de 2012 comenzó
un diálogo con Jordania. Hasta ahora, Egipto no ha aceptado la propuesta
de la UE para entablar un diálogo sobre migración, movilidad y seguridad.
Programas
como Tempus, Erasmus Mundus, Marie Curie y La Juventud en Acción, en los
que los países vecinos participan de modo particular, han contribuido a
promover la movilidad de estudiantes, personal académico, investigadores y
jóvenes de estos países y de la UE, colaborando de este modo a la
modernización y la apertura de los sistemas de enseñanza superior.
2.5. Cooperación
La
UE continuó prestando apoyo financiero a la reforma en los países socios.
El importe total disponible para los países socios en el período 2011-2013
es de 6 500 millones EUR. Esto incluye fondos adicionales
(950 millones EUR) disponibles tras el lanzamiento de la
iniciativa de la Asociación Oriental y la revisión de la política europea
de vecindad. La mayor parte de la financiación adicional se concede sobre
la base del principio «más por más», es decir, en función de los progresos
en la construcción de una democracia sostenible y en la aplicación de los
correspondientes objetivos de la reforma. Los fondos se canalizan a través
de dos programas marco: 540 millones EUR para el programa SPRING[6]
en el Mediterráneo meridional y 130 millones EUR para EaPIC[7]
en los países vecinos orientales. Ambos programas se centran en fomentar
la transformación democrática y el desarrollo institucional, y en apoyar
un crecimiento sostenible e integrador. El resto de la financiación
adicional se ha asignado en su mayoría a programas de movilidad (Tempus,
Erasmus Mundus, etc.) y a prestar ayuda a organizaciones de la sociedad
civil y agentes no estatales. Por lo que respecta a la financiación futura
en virtud del Instrumento Europeo de Vecindad, se propone que la ayuda tenga
en cuenta criterios tales como el compromiso de los países socios con las
reformas y su progreso en la aplicación de las mismas, el progreso en la
construcción de una democracia sostenible y profunda, y el nivel de
ambición de la asociación del país con la Unión[8].
En
este marco, en 2011 se creó el Instrumento para la Sociedad Civil de
la PEV con un presupuesto inicial de 26,4 millones EUR. Su
objetivo es reforzar las organizaciones de la sociedad civil, incluidos
los interlocutores sociales, para que puedan desempeñar su papel en los
cambios en la región de la PEV y participar de forma auténtica en el
proceso de democratización. La primera fase del Instrumento para la
Sociedad Civil, realizada en 2012, se centró en el refuerzo de la
capacidad de creación de redes de la sociedad civil y en la mejora de su
capacidad para promover las reformas nacionales y aumentar la
responsabilidad pública.
En
diciembre de 2012, se aprobó una segunda fase del Instrumento para la
Sociedad Civil con una nueva dotación presupuestaria de 45,3 millones EUR
para 2012-2013. El objetivo es respaldar la mayor implicación de las
organizaciones de la sociedad civil en el diálogo político con los
gobiernos socios y su creciente papel en los procesos de reforma
nacionales y los planes de desarrollo local.
Con
el fin de apoyar a los actores políticos que buscan el cambio democrático
en sus países, en 2011 la Alta Representante y la Comisión propusieron
establecer una Dotación Europea para la Democracia. En 2012 se
adoptaron medidas importantes para organizar y poner en marcha la Dotación
Europea para la Democracia como una fundación independiente europea sin
ánimo de lucro, con la participación de representantes de los Estados
miembros, el Parlamento Europeo, la Comisión Europea, la Alta
Representante y organizaciones de la sociedad civil. La Comisión y una
serie de Estados miembros ya comprometieron financiación por importe de 15 millones EUR
(de ellos, 6 millones EUR de la Comisión), lo que debería
permitir a la Dotación Europea para la Democracia ser plenamente operativa
en 2013.
La
decisión sobre la revisión intermedia del mandato exterior del Banco
Europeo de Inversiones (BEI) en octubre de 2011 abrió la vía a unos
préstamos complementarios de 1 150 millones EUR para los
países socios y de hasta 1 000 millones EUR en préstamos
relacionados con el cambio climático para finales de 2013. En 2012, el BEI
firmó casi 1 700 millones EUR de nuevos préstamos para los
países vecinos del sur y casi 900 millones EUR para los países
vecinos del este (incluida Rusia).
El
Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD), cuyo ámbito de
operaciones se amplió en 2011 para incluir a países mediterráneos
meridionales y orientales, asignó una dotación de 1 000 millones EUR
en mayo de 2012 para iniciar operaciones en los cuatro primeros países,
Egipto, Jordania, Marruecos y Túnez. Se ha asignado un máximo de 100 millones EUR,
con cargo parcialmente al presupuesto de la UE, al apoyo de actividades de
asistencia técnica para identificar y preparar proyectos.
A
finales de 2012, la asignación total al Instrumento de Inversión de la
Política de Vecindad ascendió a 594,9 millones EUR (de los
cuales 259,8 millones EUR se destinaron a la región oriental y
335,1 millones EUR a la zona del sur). Desde la creación de este
Instrumento, se ha traspasado un total de 8 000 millones EUR
de las instituciones financieras europeas (repartidos casi por igual entre
el este y el sur).
2.6. Cooperación sectorial
La cooperación en materia de
políticas sectoriales es una parte importante y en expansión de la renovada
PEV, de forma bilateral y en el marco de la AO y la Unión por el
Mediterráneo (UpM). Esta cooperación, basada cada vez más en la
convergencia con las normas y reglamentaciones de la UE, apoya la
transición, la reforma, la modernización y, en última instancia, la
integración en los mercados de la UE. Abarca una amplia gama de ámbitos,
en particular el empleo y política social, la política industrial, la
política de competencia, la agricultura y el desarrollo rural, la pesca,
el cambio climático, el medio ambiente, la seguridad energética, el
transporte, la política marítima integrada, la sociedad de la información,
la investigación y la innovación, la educación, en particular, la
cooperación y la movilidad en el ámbito de la enseñanza superior (a través
de programas como Erasmus Mundus, Tempus, las acciones Marie Curie), la
cooperación en materia de juventud, la salud y la cultura.
Algunos
socios cooperan con la UE en el marco de instrumentos sectoriales
jurídicamente vinculantes, como la Comunidad de la Energía, el Acuerdo Bilateral
de Aviación, o el Convenio regional sobre las normas de origen
preferenciales paneuromediterráneas. Estos instrumentos establecen bloques
regionales que pueden ofrecer beneficios sociales, económicos, jurídicos o
reglamentarios y políticos, que van más allá del enfoque bilateral, y
pueden conducir a una integración progresiva en sectores específicos.
Crean una red de vínculos entre la UE y sus socios, ampliando las normas
jurídicas de la UE. La UE debe reflexionar sobre cómo ampliar
progresivamente el alcance geográfico de estos instrumentos para abrirlos
a otros socios de la PEV, o sobre cómo desarrollar acuerdos sectoriales con
los socios, como la Comunidad de Transportes con países de los Balcanes
Occidentales.
En el sector de la energía,
los esfuerzos conjuntos se centraron en la seguridad energética, la reforma
del mercado y la integración, incluso por medio del desarrollo de
infraestructuras, la mejora de la eficiencia energética y la utilización
de más fuentes de energía renovables. Se adoptaron nuevas medidas para la
apertura del corredor de gas meridional, que presenta una importancia estratégica.
Los socios de Europa Oriental como Moldavia y Ucrania progresaron en la
aplicación de sus compromisos de la Comunidad de la Energía. Georgia
también ha solicitado recientemente la adhesión. La UE y sus socios
mediterráneos realizaron progresos limitados hacia la creación futura de
una Comunidad de la Energía Mediterránea.
Los socios tomaron medidas
adicionales para preparar y aplicar estrategias y legislación medioambiental,
y realizaron algunos esfuerzos para mejorar la situación del medio
ambiente. La UE ayudó a los países socios a hacer frente a la degradación
del medio ambiente y promover el uso sostenible de los recursos naturales,
en particular en los ámbitos de la calidad del aire, el agua, la
contaminación industrial, la gestión de residuos, los plaguicidas
peligrosos, la protección de la naturaleza y la gestión forestal, así como
a reforzar los sistemas de información y gobernanza medioambientales. Los
socios deben aplicar plenamente los acuerdos multilaterales sobre medio
ambiente de los que sean partes.
Los programas emblemáticos sobre
prevención, preparación y respuesta ante las catástrofes de origen natural
o humano (PPRD por sus siglas en inglés) (PPRD sur y este) contribuyeron a
la aplicación parcial del Marco de Acción de Hyogo 2005 para la reducción
del riesgo de catástrofes, facilitando la aproximación a la legislación y
a las normas de la UE. La UE apoyará el desarrollo de estrategias de
comunicación y sensibilización, el desarrollo de capacidades y la mejora
de la coordinación.
Los
socios han tomado medidas en el ámbito del cambio climático, en
particular a través de algunos proyectos del Mecanismo de Desarrollo
Limpio y proyectos de aplicación conjunta. La UE les ayudó en la
transición hacia la resiliencia frente al cambio climático y el desarrollo
con bajas emisiones de carbono, mediante el desarrollo de capacidades e
inversiones. No obstante, el diseño y la aplicación de políticas ambiciosas
sobre el clima sigue constituyendo un reto, al igual que la integración de
las consideraciones climáticas en otras políticas conexas (por ejemplo,
energía, transporte o agricultura). Se alienta a los socios a que participen
en el desarrollo de estrategias nacionales de lucha contra el cambio
climático, es decir, políticas de desarrollo con bajas emisiones de
carbono y estrategias de resiliencia frente al cambio climático, que
también serán necesarias en el contexto de las negociaciones
internacionales y su conclusión en 2015. Esto incluye la integración del
cambio climático en otras políticas.
Los
socios de la PEV aplicaron reformas para acercarse a las normas de transporte
de la UE. El trabajo conjunto en el grupo de trabajo sobre transporte de la
AO se centró en una mayor integración de los sistemas de transporte, la
definición de una red de transporte regional conectada a la RTE-T, y la
identificación de proyectos de interconexión prioritarios. Este trabajo
debería concluir en 2013; y trabajos similares con los socios meridionales
deberán ser aprobados por la segunda conferencia ministerial sobre
transportes en noviembre de 2013. La UE y Moldavia firmaron a principios
de este año un Acuerdo de Zona Común de Aviación. En 2012 ya se rubricó un
acuerdo de este tipo con Israel. En 2013 se pondrán en marcha las
negociaciones sobre aviación con Túnez, que deberán reanudarse con el
Líbano. Las negociaciones sobre un acuerdo de aviación con Ucrania, relanzadas
en 2012, deberían concluirse en 2013 y deberían iniciarse con Azerbaiyán
en 2013. El diálogo ministerial informal de la AO sobre transporte tuvo
lugar en febrero de 2013 para preparar la segunda reunión de los Ministros
de Transporte de la UE y de la Asociación Oriental en 2013.
La CE, el BEI
y la Organización Marítima Internacional (OMI) trabajaron juntos en 2012 en
una serie de propuestas de acción conjuntas como seguimiento al estudio de
viabilidad sobre la cooperación al desarrollo en el Mediterráneo, realizado
en el marco del Fondo Fiduciario del Mecanismo Euromediterráneo de
Inversión y Cooperación (FEMIP). En 2013, la CE, el BEI y la OMI están coorganizando
la 12ª Conferencia del FEMIP con vistas a reforzar la cooperación marina y
marítima entre los países mediterráneos y apoyar el crecimiento económico
y la creación de empleo en la región.
En
lo que respecta a la política de la sociedad de la información, el
trabajo conjunto se centró en la creación de unos mercados de
telecomunicaciones equitativos, modernos, abiertos y transparentes, en la
utilización de Internet de forma abierta y dinámica para todos, y en un entorno
diverso de los medios de comunicación. En 2012 se creó una red de reguladores
de las comunicaciones electrónicas de la AO. Se reforzará la red de
reguladores del Mediterráneo.
Se
dieron pasos importantes hacia el desarrollo del espacio común de
conocimientos e innovación. En 2012 aumentó la participación de los países
socios de la PEV en el Séptimo Programa Marco (2007-2013) (7º PM). La convocatoria
de propuestas de cooperación internacional publicada en julio de 2012
incluyó actividades orientadas específicamente a los países socios de la
PEV a nivel regional y bilateral, con el objetivo de apoyar el diálogo
político, así como una acción especial para acercar distancias entre
investigación e innovación. A finales de 2012, la contribución total de la
UE a proyectos con participación de los países de la PEV alcanzó los 960 millones EUR.
En marzo de 2012, se firmó un Acuerdo de Cooperación Científica y Tecnológica
entre la UE y Argelia. La República de Moldavia se asoció al 7º PM en
enero de 2012. Están en curso iniciativas para reforzar la cooperación
birregional euromediterránea a raíz de la Conferencia Euromediterránea
sobre Investigación e Innovación, que se celebró en Barcelona en abril de
2012. En 2012 se creó un grupo de expertos sobre investigación e
innovación en el marco de la actual plataforma IV de la AO «Contactos
entre personas», que se pondrá en marcha en 2013.
57. En 2012 continuó el
diálogo con los países socios para identificar sus principales intereses con
respecto a la participación en los programas de la UE y el trabajo con las
agencias de la UE. La UE organizó reuniones de información sobre el enfoque
general respecto de la participación en los programas y el trabajo con las agencias
en la mayoría de los países socios.
En octubre, entró
en vigor el protocolo que permitía a Marruecos participar en los programas
de la UE abiertos a la participación de los socios de la PEV. En diciembre, la UE firmó protocolos similares con Armenia y
Jordania. Se iniciaron las negociaciones de los protocolos con Azerbaiyán y
Georgia[9].
En noviembre, la
UE organizó un seminario de información que reunió a los países de la PEV
y las agencias de la UE. Adoptó un proyecto de ayuda financiera de 3,7 millones EUR,
a partir de principios de 2013, con el fin de apoyar las medidas
preparatorias de las agencias de la UE para ayudar a los socios de la PEV a
participar en su trabajo. Los socios de la PEV
consolidaron su interacción con varias agencias de la UE, en particular en
materia de cooperación técnica bilateral.
La
UE está dispuesta a negociar protocolos que permitan a otros países de la
PEV interesados participar en sus programas. Puesto que los programas
actuales expiran en 2013, la UE informará a los socios acerca de los
programas 2014-2020 abiertos a su participación, una vez se hayan
adoptado. La UE seguirá ayudando a los países socios a participar en los
trabajos de sus agencias, en particular mediante la financiación de
actividades preparatorias. Los países socios deberán determinar claramente
un número limitado de prioridades a fin de facilitar el diálogo y la
cooperación sobre la base de intereses comunes. La UE está dispuesta a
cofinanciar, con carácter temporal y decreciente, algunos de los costes asociados
a la participación.
2.7. Dimensiones oriental y meridional de la PEV
61. La PEV se basa en las asociaciones
individuales entre la UE y cada país vecino a través de una política única,
sobre la base de la responsabilidad mutua y un compromiso compartido con los
valores universales de los derechos humanos, la democracia y el Estado de
Derecho. Este enfoque se complementa con las dos dimensiones regionales de la
PEV. La AO y la Asociación para la Democracia y la Prosperidad Compartida con
los Países del Mediterráneo Meridional vecinos tienen por objetivo estimular la
cooperación regional y desarrollar respuestas y sinergias regionales a los
problemas geográficos, económicos y sociales específicos de cada región.
2.7.1 Asociación Oriental
Con el establecimiento de la AO,
se realizó un importante progreso bilateral y multilateral. A pesar de
ello, los progresos limitados de algunos países en términos de reformas
democráticas, derechos humanos y Estado de Derecho siguen constituyendo un
reto para la realización del objetivo de los países socios de asociación
política e integración económica con la UE. La hoja de ruta
elaborada en 2012[10] constituyó una
base para orientar y supervisar la aplicación de los objetivos de la Asociación
definidos en las Declaraciones de Praga y Varsovia hasta la próxima cumbre
de Vilnius en otoño de 2013.
Las plataformas y grupos de trabajo de la AO
proporcionaron un espacio común para el diálogo, la cooperación y el
intercambio de información en ámbitos tales como la reforma de la
administración pública, el transporte, y la migración y el asilo. Ya se
han creado plataformas del Foro de la Sociedad Civil en los seis países
socios de la AO. Se avanzó considerablemente en los Acuerdos de Asociación
(AA), particularmente en las zonas de libre comercio de alcance amplio y
profundo (instrumentos clave para el apoyo a la transformación democrática
y económica), y la UE avanzó hacia el objetivo de liberalización del
régimen de visados para los desplazamientos de corta duración con cinco de
los seis países socios. La UE aportó fondos considerables para apoyar los
esfuerzos de reforma de sus socios. Para el período 2011-2013, están
disponibles 1 900 millones EUR para la cooperación bilateral
y regional (incluido un importe de 350 millones EUR de recursos
adicionales). El Programa de Integración y Cooperación de la Asociación
Oriental (EaPIC) ha servido como instrumento para una aplicación más
sistemática de una mayor condicionalidad política y la aplicación del
principio «más por más». En 2012, tres países socios (Moldavia, Georgia y
Armenia) se beneficiaron del EaPIC en términos de una mayor asistencia
financiera.
Se acordó el establecimiento de diálogos
informales de la Asociación Oriental, que se celebrarán en el nivel de la
Alta Representante y Vicepresidenta, el Comisario de Vecindad Europea y
los Ministros de Asuntos Exteriores de los seis países socios. Los
diálogos informales deberían abordar cualquier cuestión de política
exterior de interés común para la UE y sus socios, controlar la aplicación
del plan de trabajo de la Asociación Oriental y, en su caso, incluir un
diálogo sectorial. La primera reunión tuvo lugar en Chisinau en junio de
2012 y el segundo diálogo se celebró en Tbilisi en febrero de 2013,
incluido un diálogo informal sobre transporte, con la participación del vicepresidente
de la Comisión, Sr. Kallas, y de los Ministros de Transporte de los países
socios.
La Cumbre, cuya celebración está
prevista en noviembre de 2013 en Vilnius, será otro hito en la aplicación
de la AO. Algunos socios de Europa Oriental desean seguir avanzando en sus
relaciones con la UE. En la Comunicación de mayo de 2011 sobre la
PEV[11], la Alta
Representante y la Comisión señalaron que los valores en los que se
fundamenta la Unión Europea (libertad, democracia, respeto de los derechos
humanos y de las libertades fundamentales y Estado de Derecho) se
encuentran igualmente en el núcleo del proceso de asociación política e
integración económica en el marco de la PEV. Se trata de los mismos
valores que están consagrados en el artículo 2 del Tratado de la Unión
Europea y en los que se basan los artículos 8 y 49. Los Jefes de Estado y
de Gobierno, en la Cumbre de Varsovia de la Asociación Oriental en 2011,
reconocieron las aspiraciones europeas y la elección europea de algunos
socios[12].
2.7.2.
Asociación para la Democracia y la Prosperidad Compartida
66.
En 2012, un plan de trabajo[13] estableció
los objetivos que deben perseguirse en el marco de la Asociación en la vecindad
meridional, a nivel bilateral y regional, y los logros previstos para finales
de 2013. La aplicación del plan de trabajo se vio influida por las
situaciones cambiantes de los socios mediterráneos en 2012. La UE ha proseguido
su política de compromiso renovado a escala bilateral y regional, ofreciendo
ayuda a la transición y reconociendo simultáneamente que la apropiación
corresponde a los socios. En cuanto a la ayuda financiera, además de los 3 500 millones EUR
ya programados para el periodo 2011-2013, la UE está aportando cerca de 700 millones EUR
de nuevas subvenciones para los vecinos del sur. 67.
En 2012 se celebraron con éxito elecciones democráticas en Egipto,
Argelia y Libia, se realizaron reformas electorales en preparación de las
elecciones en Jordania y el Líbano, y se formaron nuevos gobiernos en la
mayoría de los países. La UE, a través de la ayuda o de misiones de
observación, apoyó lo que en muchos casos fueron las primeras elecciones
verdaderamente democráticas. La política pluralista adquirió una nueva dinámica
y la sociedad civil ganó en actividad y protagonismo. En muchos países de la
región, hay un mayor respeto por la libertad de expresión en general y se ha
facilitado la creación de partidos políticos o sindicatos. No obstante, es
evidente que se necesitará tiempo para establecer instituciones democráticas,
en particular en los países en que el proceso de transición sigue inmerso en la
inseguridad jurídica (Egipto). No obstante, el nuevo dinamismo de los partidos
políticos y la sociedad civil es un indicio del desarrollo de una cultura
democrática, que ofrece a la UE nuevas vías de diálogo. Al mismo tiempo, con el
empeoramiento de la seguridad, en particular en Libia, Sinaí y el Sahel, ha
cobrado mayor importancia la reforma del sector de la seguridad heredado de los
regímenes anteriores, manteniendo simultáneamente la ley y el orden. 68. En cuanto al aspecto
económico, las incertidumbres políticas, así como la falta de reformas
estructurales en pro de un crecimiento integrador, han continuando ralentizando
la actividad económica. El
déficit fiscal siguió siendo elevado o incluso empeoró en 2012, debido a la
debilidad de la economía y al aumento de los gastos para satisfacer reivindicaciones
sociales de peso. Los niveles de desempleo aumentaron a partir de niveles ya
elevados. Aunque el contexto político no era propicio para una reforma
económica decisiva, se observan indicios de estabilización.
El Representante Especial de la
Unión Europea para la región del Mediterráneo Meridional desempeñó un papel
fundamental en la mejora del diálogo político de la UE con los países de
la región en transición, contribuyendo al trabajo de la UE de refuerzo de
la democracia y desarrollo institucional y a la mejora de su eficacia,
presencia y visibilidad en la región. Se crearon grupos de trabajo para
Túnez (28-29 de septiembre de 2011), Jordania (22 de febrero de 2012) y
Egipto (13-14 de noviembre de 2012). Los grupos de trabajo contribuyeron a
profundizar la relación de la UE con los tres países de manera diferenciada,
adaptada y orientada a los resultados, con la participación de todas las
instituciones de la UE y del sector privado. Los empresarios europeos
también participaron en misiones para el crecimiento encabezadas por el vicepresidente
de la Comisión Europea, Sr. Tajani, a Marruecos y Túnez en noviembre de
2012. En Túnez, se puso en marcha un Consejo sobre iniciativa empresarial
UE-Túnez para asesorar al Gobierno tunecino respecto de mejoras en el
entorno empresarial.
70. A nivel regional, la
copresidencia del Norte de la Unión para el Mediterráneo se transfirió a la UE
y Jordania asumió la copresidencia del Sur. Esto supuso una señal de la
renovada voluntad en las dos orillas del Mediterráneo de convertir la UpM, como
foro único de 43 miembros[14], en un catalizador
efectivo para el desarrollo de proyectos regionales. La reunión ministerial UE-Liga
de Estados Árabes de noviembre envió un claro mensaje político del compromiso
de la UE y los ministros árabes de cooperar para resolver sus problemas comunes.
En diciembre, una Comunicación conjunta[15] expuso las formas en
que la Unión Europea podría apoyar una colaboración más estrecha entre los
países del Magreb. La
Comisión también participó en la Cumbre del diálogo 5+5 celebrado en octubre
entre los cinco países del sur del Mediterráneo de la UE y el Magreb, mostrando
el apoyo a una mayor integración regional como una forma importante de mejorar
la seguridad y la prosperidad.
Si bien en 2012 se realizaron grandes
avances en los objetivos del plan de trabajo, el progreso en 2013
dependerá de la voluntad de la UE y de los socios de cumplir los
compromisos ya contraídos. A medida que se estabilice la situación
política y los países socios avancen en la transición a la democracia, los
gobiernos se encontrarán en mejores condiciones para aprovechar las
ventajas que ofrece la UE y dar un nuevo impulso a su participación en la
cooperación regional.
2.8.
Resolución de conflictos en la vecindad
Una parte importante de la
política de la UE es resolver los prolongados conflictos en la vecindad:
Moldavia, el Cáucaso Meridional y Oriente Medio. El compromiso de la PESC/PCSD
de la UE continuará siendo parte integrante de la PEV. La presencia de las
misiones de la PCSD en la vecindad reflejan el enfoque amplio y
polifacético de la UE en este ámbito, abordando cuestiones de seguridad,
Estado de Derecho y gestión de las crisis civiles.
El Representante Especial de la
Unión Europea para el Cáucaso Meridional y las Crisis en Georgia continuó
desempeñando un papel clave en los esfuerzos de la UE para resolver los
conflictos en Georgia y Nagorno Karabaj. Junto con las Naciones Unidas y
la OSCE, el Representante Especial copresidió los debates internacionales
de Ginebra sobre la crisis en Georgia. Estas conversaciones representan
en la actualidad el único foro de diálogo entre las autoridades de Georgia
y las regiones separatistas de Abjazia y Osetia del Sur, aunque la nueva
administración georgiana ha manifestado su intención de establecer canales
de comunicación directos con los representantes de las entidades de facto.
La misión de observación de la UE en Georgia ha contribuido a estabilizar
la situación en el país a través de su control de las líneas fronterizas
administrativas con las regiones separatistas.
Por lo que respecta a Nagorno
Karabaj, han proseguido los contactos de alto nivel con Armenia y
Azerbaiyán con vistas a fomentar la resolución pacífica del conflicto,
específicamente mediante el apoyo al trabajo del Grupo de Minsk de la OSCE.
Reconociendo el papel de los copresidentes del Grupo de Minsk, la UE manifestó
su disposición a ayudar a facilitar la reconciliación y la rehabilitación,
apoyando los progresos que puedan hacerse en las negociaciones. En
septiembre de 2012 se puso en marcha la segunda fase del programa para la
sociedad civil financiado por la UE, la Asociación Europea para la
resolución pacífica del conflicto en torno a Nagorno Karabaj (EPNK).
El
proceso de solución del conflicto del Transdniéster del grupo 5+2,
que se reanudó oficialmente en diciembre de 2011, cobró impulso. En enero
de 2012, las dos partes, reunidas en Odessa, acordaron un planteamiento de
«pequeños pasos» para abordar cuestiones prácticas de gran importancia
para los ciudadanos. En abril, los 5+2 adoptaron por consenso reglamentos
internos y una completa agenda de negociación. La agenda de negociación
cubre aspectos socioeconómicos, humanitarios, jurídicos, políticos y de
seguridad. A partir de entonces, los 5+2 prestaron su apoyo político a los
debates técnicos encabezados por las distintas partes. Ello permitió
reanudar el transporte de mercancías por ferrocarril a través de la región
del Transdniéster, así como considerables avances en educación y otros
aspectos socioeconómicos. En noviembre, los participantes intercambiaron
opiniones, sin alcanzar un consenso, sobre la necesidad de debatir los
aspectos políticos de la solución y la falta de claridad que obstaculiza
la resolución de problemas humanitarios y socioeconómicos. La UE, con el
objetivo de consolidar la estabilidad en la región, participó activamente
en los debates de los 5+2 e intensificó su presencia sobre el terreno,
facilitando la participación de empresas con sede en la región del
Transdniéster en los flujos comerciales entre la UE y Moldavia y financiando
un creciente número de proyectos de fomento de la confianza con los ámbitos
social, de salud, de educación y humanitario.
Moldavia
y Ucrania siguieron participando de forma constructiva en los trabajos de
la misión de asistencia fronteriza de la Unión Europea en la frontera
entre Moldavia y Ucrania (EUBAM). Con el apoyo de la EUBAM, las
autoridades aduaneras y el servicio de guardia fronteriza de Moldavia
siguió mejorando su capacidad profesional y la cooperación entre
organismos en el país y con Ucrania. La EUBAM continuó apoyando la demarcación
de la frontera con Ucrania.
Los
cambios en el mundo árabe pusieron de manifiesto una vez más la urgente
necesidad de reanudar las negociaciones entre Israel y los palestinos. En
el transcurso de 2012, la UE siguió alentando a ambas partes a que volvieran
a la mesa de negociaciones, en consonancia con la declaración del Cuarteto
de septiembre de 2011. A pesar del apoyo de Jordania a principios de año,
lamentablemente las negociaciones no se reanudaron. La UE, al tiempo que
reafirmó su apoyo a la solución consistente en la coexistencia de dos
Estados, expresó su creciente preocupación por la evolución de la situación
sobre el terreno, que amenaza con hacer imposible tal solución. Siguió
abogando por resolver el conflicto palestino-israelí a través de conversaciones
bilaterales pacíficas sobre la base del Derecho internacional y parámetros
definidos de común acuerdo. Además de su apoyo práctico y continuo en el
marco de la PEV, sus esfuerzos políticos quedaron bien patentes en sus
conclusiones del Consejo de Asuntos Exteriores de mayo y diciembre de
2012.
La
UE ayudó asimismo a la Autoridad Palestina en sus esfuerzos de
consolidación estatal sobre la base del Estado de Derecho y el respeto de
los derechos humanos. Reiteró su llamamiento en favor de la reconciliación
del pueblo palestino e insistió en la prevención de los actos unilaterales
que amenazan la viabilidad de una solución basada en la coexistencia de
dos Estados, sobre todo en relación con la expansión de los asentamientos
israelíes, particularmente en Jerusalén Oriental. Reconociendo plenamente las
necesidades legítimas en materia de seguridad de Israel, continuó su
llamamiento para poner fin al bloqueo de la Franja de Gaza con el objetivo
principal de mejorar la insostenible situación humanitaria. Cooperó
estrechamente con los Estados Unidos y otros socios internacionales, particularmente
dentro del Cuarteto. Acogió con satisfacción los esfuerzos de mediación de
Jordania y Egipto a favor de la resolución del conflicto, y el apoyo
general de la Liga Árabe al proceso de paz en Oriente Medio.
Las operaciones de EUBAM Rafah
se encuentran suspendidas debido a la toma de control violenta por Hamás
de la Franja de Gaza a mediados de 2007. La ejecución de partes
sustanciales de su mandato sigue en suspenso desde entonces. Mientras
tanto, la misión ha mantenido su capacidad y está dispuesta a proseguir su
actividad y desplegarse en el paso fronterizo de Rafah en cuanto lo
permitan las condiciones políticas y de seguridad. A raíz de la crisis de
Gaza en noviembre de 2012, se reanudaron los debates sobre la posible
reactivación de EUBAM Rafah.
En el caso de Siria,
la UE ha condenado en varias ocasiones las violaciones de los derechos
humanos, ha adoptado varias series de medidas restrictivas contra el
régimen sirio, y ha proporcionado ayuda humanitaria a los desplazados
internos y a los refugiados. Ha tomado medidas diplomáticas para facilitar
una solución pacífica de la crisis, apoyando a los enviados especiales de
Naciones Unidas y de la Liga de Estados Árabes, participando en las
reuniones de los Amigos de Siria, y apoyando los esfuerzos destinados a
promover una oposición unificada y representativa. Durante toda la crisis siria, la UE
ha estado en la vanguardia de la respuesta humanitaria internacional, actuando
en estrecha coordinación con otros donantes y organizaciones
internacionales para garantizar la rápida identificación de las
necesidades y la pronta y eficaz prestación de ayuda. En 2012, se
proporcionaron 150 millones EUR de ayuda humanitaria a Siria y
los países vecinos, junto con una contribución de 208 millones EUR
de los Estados miembros de la UE. Se aportaron alrededor de 80 millones EUR
en el marco del IEVA y de instrumentos temáticos para abordar las necesidades
a más largo plazo de la población siria (apoyo a la sociedad civil, a los
defensores de los derechos humanos, a los refugiados, etc.) y para ayudar
a los países vecinos a hacer frente a la afluencia de refugiados.
3. Coherencia de las políticas
La PEV es un buen ejemplo de un
enfoque global de la política exterior. La cooperación con nuestros
vecinos emplea todos los instrumentos y políticas de la UE. Combina la
asociación política a largo plazo, la política comercial, las políticas
sectoriales y la cooperación financiera con las políticas y medidas a
corto plazo de los instrumentos de la PESC/PCSD. Muestra cómo puede
utilizarse un enfoque global para generar una acción coherente en la que
participen todos los actores pertinentes de la UE. Tal como se anunció en
el programa de trabajo de la Comisión para 2013, la Alta Representante y
la Comisión están trabajando actualmente en una comunicación conjunta
sobre cómo desarrollar este enfoque.
La
UE colabora estrechamente con otros países donantes y actores
internacionales para responder a las crisis humanitarias, promover la
transición democrática y fomentar el desarrollo económico en los países
socios. La búsqueda de mayores sinergias y coordinación con las principales
instituciones financieras internacionales (IFI) en la región de la PEV ya
es una tarea clave y cobrará mayor importancia en el futuro. Los
mecanismos de consulta precoces, a través de los marcos actuales, el Memorando
de Acuerdo tripartito entre la Comisión, el Grupo del BEI y el BERD, y el
Grupo de Luxemburgo (la UE, el FMI, el Banco Mundial, la CFI, el BEI y el
BERD), así como una mayor cooperación sobre el terreno, son esenciales
para mejorar la armonización de las políticas con los objetivos de la PEV.
El Representante Especial para la región del Mediterráneo Meridional y la
Comisión se ocupan de la coordinación con las IFI y el G8 en el contexto
del Proceso de Deauville. A nivel mundial, también se discutieron
cuestiones de la PEV en la reunión anual con los administradores europeos del
Banco Mundial en 2012. También se organizan periódicamente consultas con
los miembros europeos del consejo del BERD, que pueden abordar cuestiones
políticas relacionadas con la PEV.
La
asociación política y estratégica entre el Consejo de Europa y la UE se ha
reforzado continuamente durante los últimos años. La cooperación y el
diálogo con el Consejo de Europa contribuyen a la realización de los
objetivos comunes consistentes en un mayor respeto por los valores comunes
de los derechos humanos y las libertades fundamentales, la democracia y el
Estado de Derecho en los países de la región. La UE también colabora
estrechamente con la OSCE en la resolución de conflictos en el contexto
del Grupo de Minsk y del proceso de solución del conflicto del Transdniéster
de los 5+2, así como con la OSCE y las Naciones Unidas en los debates
internacionales de Ginebra sobre el conflicto de Georgia.
El
Parlamento Europeo, el Comité de las Regiones y, en particular, sus dos asambleas,
la CORLEAP (Conferencia de Entes Regionales y Locales de la Asociación
Oriental) y la ARLEM (Asamblea Regional y Local Euromediterránea), y el
Comité Económico y Social Europeo desempeñan un papel cada vez más activo
e importante en la PEV, contribuyendo al desarrollo del diálogo político y
a la mejor incorporación de otras dimensiones de la cooperación en el
marco de la PEV. Esto reforzará aún más las sinergias en la aplicación y la
comunicación de la política.
Los
vecinos de la UE también se están convirtiendo en socios en el ámbito de
la PCSD. Ucrania participa en diversas misiones de la PCSD. Se han
celebrado acuerdos marco de participación en la PCSD con Ucrania y
Moldavia, se están manteniendo negociaciones con Georgia, y Armenia también
ha expresado su interés.
Todavía queda margen para la
mejora. La UE seguirá estudiando la manera en que los distintos agentes
pueden operar de manera más coherente. Está claro que, en una serie de
ámbitos, especialmente en el ámbito de la movilidad, donde los Estados
miembros conservan importantes competencias, la UE debe colaborar más
estrechamente con los Estados miembros para cumplir los compromisos que ha
adquirido con sus socios. También debe encontrar maneras para que otros
interesados participen en la elaboración de políticas, por ejemplo, en la
preparación de planes de acción o agendas de asociación.
Las instituciones de la UE y los
Estados miembros deben esforzarse por maximizar la coherencia, que es
imprescindible para que la UE pueda aportar un valor añadido. Las Delegaciones
de la UE en los países socios tienen un papel importante que desempeñar reuniendo
a todos los actores y garantizando la coherencia y las sinergias sobre el
terreno. También deberán asumir un papel más importante como centros de
operaciones donde las autoridades de los países socios, la sociedad civil
y las empresas puedan obtener información sobre la política aplicada y las
ayudas de que pueden beneficiarse.
4. Desafíos futuros
Los valores universales en
que se asienta la Unión Europea (libertad, democracia, respeto de los
derechos humanos y de las libertades fundamentales y Estado de Derecho),
también están en la base de la PEV. Para los socios que quieran acercarse
lo más posible a la UE, es el principal punto de referencia para sus
reformas. Este proceso de reforma debe ser integrador. Solo si la sociedad
en su conjunto, y no únicamente las élites o determinadas partes del
espectro político, hacen esta elección y se adhieren a los valores
universales mencionados, el proceso será sostenible y, en última
instancia, un éxito.
El principio de «más por más»
seguirá siendo un elemento importante para que la PEV responda a los
esfuerzos y a los progresos realizados en las reformas democráticas. El
nuevo instrumento financiero para la política de vecindad en el período
2014-2020 incorporará este principio en el ámbito de la cooperación
financiera. Pero el principio no se limita a la cooperación financiera.
Tal como se recoge en la Comunicación conjunta de 2011, la UE también
adaptará su oferta, en particular en términos de acceso a los mercados y mejor
movilidad, en respuesta al nivel de reformas y la ambición de sus socios.
Los
análisis han puesto de manifiesto que, a excepción de algunos países que
siguieron la mayoría de las recomendaciones, muchas de las recomendaciones
clave contenidas en los informes de situación de la PEV del año
anterior siguen siendo válidas y permanecerán en el centro del proceso de
reforma en el año o años venideros. Los limitados progresos de una serie
de socios hacia los objetivos acordados conjuntamente, y la limitada respuesta
de algunos a los incentivos de la PEV, puede requerir un examen crítico de
sus instrumentos y mecanismos. En caso
necesario, la UE debe reflexionar sobre si algunos ajustes de los mismos podrían
permitir a la PEV responder mejor a las expectativas y necesidades de los
socios, contribuyendo así a una mejor utilización. Al mismo tiempo, los
socios deben demostrar su compromiso con la consecución de los objetivos
acordados conjuntamente con la UE. Las prioridades y programas de reforma
acordados con la UE deben convertirse en parte integrante de las
estrategias nacionales de reforma y desarrollo.
Ofrecer nuevas oportunidades para
que los ciudadanos viajen, estudien y hagan negocios con la UE es
crucial para compartir los valores que constituyen sus cimientos. La UE
debería hacer más hincapié en el tipo de políticas y medidas que se
centran en estas cuestiones. La movilidad de las personas, las becas para
estudiantes y las redes de empresas pueden hacer más en favor de la
«elección europea» de los socios que cualquier otro factor. En el este, los
planes de acción para la liberalización de visados han resultado eficaces
para fomentar la reforma en los países socios. La plena aplicación por los
socios deberá hacer más tangible la perspectiva de la supresión de visados.
La naturaleza polifacética de la
PEV, los múltiples actores que intervienen en ella y su naturaleza a veces
técnica, dificultan la comunicación sobre la PEV. No obstante, la
UE es percibida por los ciudadanos de los países vecinos como un modelo y
una inspiración por lo que respecta a los valores que subyacen a la PEV:
los derechos humanos, la democracia, las libertades fundamentales y la
prosperidad y la solidaridad. Una encuesta realizada
en los países socios de la PEV[16] muestra que la UE tiene
una imagen positiva en la mayoría de los países vecinos[17].
La UE se asocia con la promoción de los derechos humanos, la solidaridad,
la prosperidad, la democracia y la libertad de expresión. Estos valores y el
desarrollo económico se consideran los principales aspectos de la
cooperación. La misma encuesta pone de manifiesto, sin embargo, que muchas
personas no se sienten bien informadas sobre la actuación de la UE en sus
respectivos países. Esto subraya la necesidad de informar mejor a los
ciudadanos de los países socios acerca de la PEV, sus objetivos e
instrumentos y sus logros.
Los conflictos siguen constituyendo
un problema en algunos ámbitos de la vecindad europea, y podrían socavar los
futuros procesos de reforma. El fomento de la paz y la estabilidad
mediante la utilización de todos los instrumentos civiles y militares de
que dispone la UE es una necesidad urgente que no puede obviarse.
Las variaciones en la orientación
de la política exterior de los países socios y la creciente
intervención de otros actores en la región también pueden hacer que la UE
sea menos atractiva como modelo y socio. Esto requerirá que la UE
reflexione sobre cómo adoptar un enfoque más multilateral, involucrando y
trabajando de forma más sistemática que ahora con los demás agentes que
trabajan en los países vecinos, con el fin de abordar, junto con los propios
países socios, las cuestiones de interés común. En el sur del
Mediterráneo, Turquía, los países del Golfo y organizaciones tales como la
Liga Árabe están desempeñando un papel más importante en los intentos de
resolver los conflictos y promover en mayor medida sus intereses
económicos y políticos. La aparición de otros programas de integración
regional en los países vecinos del este representa un nuevo reto. La
aparición de la Unión de Eurasia entre la Federación de Rusia, Bielorrusia
y Kazajistán ha cambiado el panorama. Se considera que ofrece un modelo
alternativo de desarrollo político y económico para la integración en la
UE. Sin embargo, es preciso optar. Por ejemplo, la adhesión a la Unión Aduanera
que forma parte de la Unión de Eurasia impediría la integración económica
con la UE a través de una ZLCAP.
5. Conclusión
Mientras que los principios y
objetivos subyacentes de la PEV siguen aplicándose a todos los socios y a
todos los elementos de la política, la relación que la UE mantiene con
cada uno de sus socios es única, y los instrumentos de la PEV se adaptan a
cada una de dichas relaciones. La PEV ofrece a la UE una serie de
instrumentos que permiten adaptar su enfoque político y su respuesta al
contexto de cada uno de sus socios y a sus aspiraciones en cuanto a sus
relaciones con la UE. Cada vez será más necesario diferenciar la respuesta
política, en consonancia con las distintas evoluciones, ambiciones y necesidades
de sus socios.
Los socios de la PEV no deberían
rebajar su nivel de ambición ni su compromiso en lo referente a la reforma
de sus sociedades y sus sistemas políticos y económicos. Estas reformas siguen
siendo esenciales para responder a las aspiraciones y necesidades de su
población. Es esencial un compromiso político renovado para aplicar
reformas a menudo difíciles. Por su parte, la UE tiene que seguir haciendo
frente a los compromisos que ha contraído en relación con una asociación
política reforzada, mayor integración económica y apoyo a las reformas.
[1] COM (2011) 303 de 25.5.2011. [2] La presente Comunicación conjunta va acompañada de doce informes de
situación por países que evalúan la aplicación de la PEV en 2012 en aquellos
países con los que se ha acordado un plan de acción de la PEV o un documento
equivalente; dos informes de situación regional que analizan los progresos
realizados en 2012 en la aplicación de la Asociación Oriental y la Asociación
para la Democracia y la Prosperidad Compartida; y un anexo estadístico. [3] De conformidad con la Resolución 67/19 de la Asamblea General de las
Naciones Unidas, la denominación «Palestina» se utilizará en todas las
ocasiones al hacer referencia a lo que hasta la fecha se denominaba «Autoridad
Nacional Palestina» o «Territorio Palestino Ocupado». Esto no supone el
reconocimiento de Palestina como Estado, en línea con las Conclusiones del
Consejo de diciembre de 2009. [4] Declaración conjunta de la reunión de los Ministros de Asuntos
Exteriores de la Asociación Oriental, Bruselas, 23 de julio de 2012, Consejo de
la Unión Europea, 12862/12, PRESSE 348. Comunicación conjunta al Parlamento
Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las
Regiones «La Asociación Oriental: plan de trabajo para la Cumbre de otoño de
2013», JOIN(2012) 13 final de 15.5.2012. [5] Transparency International, índice de percepción de la
corrupción 2012. [6] Apoyo a la Asociación, las Reformas y el Crecimiento integrador
(SPRING, por sus siglas en inglés). [7] Programa de Integración y Cooperación de la Asociación Oriental
(EaPIC, por sus siglas en inglés). [8] COM(2011) 839 final. [9] Los protocolos que permiten a la República de
Moldavia y Ucrania participar en los programas de la UE abiertos a su
participación entraron en vigor en 2011, y en 2008 se firmó un protocolo con
Israel. [10] Comunicación conjunta al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité
Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones, La Asociación
Oriental: plan de trabajo para la Cumbre de otoño de 2013, JOIN(2012)
13 final de 15.5.2012. [11] Comunicación conjunta al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité
Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones, Una nueva respuesta
a una vecindad cambiante, COM (2011) 303 de 25.5.2011. [12] Declaración Conjunta de la Cumbre de la Asociación Oriental, Varsovia,
29-30 de septiembre de 2011. [13] Documento de trabajo conjunto sobre Asociación para la Democracia y la
Prosperidad Compartida: Informe de las actividades en 2011 y plan de
trabajo para la acción futura, que acompaña al documento Comunicación conjunta
al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al
Comité de las regiones, sobre la consecución de una nueva política europea de
vecindad, SWD(2012) 121 final de 15.5.2012. [14] La participación de Siria está actualmente en suspenso, de modo que
existe cooperación entre 42 países. [15] Comunicación conjunta al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité
Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones, Apoyo al refuerzo de
la cooperación y la integración regional en el Magreb: Argelia, Libia,
Mauritania, Marruecos y Túnez. JOIN(2012), 36 final de 17.12.2012. [16] Barómetro de vecindad de la UE, primavera de 2012 y otoño de 2012. [17] Con excepción de Egipto y Libia, donde la mayoría de los encuestados
no parecen tener opinión ni disponer de mucha información sobre la imagen de la
UE o el estado de las relaciones.