24.8.2007   

ES

Diario Oficial de la Unión Europea

C 197/57

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pone de relieve que, aunque desde la publicación del 8 de noviembre de 2006, la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» ha adquirido una nueva dimensión, al abandonar el planteamiento de arriba abajo de la Comisión Europea en beneficio del principio de abajo arriba de los entes territoriales, este cambio no ha sido objeto de comunicación oficial de la Comisión Europea. Por ello, el presente dictamen tiene debidamente en cuenta esta evolución.

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subraya la posibilidad de que el Comité de las Regiones participe activamente en el seguimiento de los programas operativos en el marco de Interreg IV y Urbact II con un cometido consultivo en los comités de seguimiento respectivos.

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manifiesta el deseo de alcanzar una sinergia entre la Plataforma de control de la Estrategia de Lisboa y la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» manteniendo los valores específicos de cada una. La Plataforma de control de la Estrategia de Lisboa representa una oportunidad para transmitir experiencias con el objetivo de contribuir a reforzar la política de cohesión y potenciar la agenda de Lisboa.

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hace hincapié en la comunicación y difusión de información a nivel europeo, elemento clave del éxito de la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico». En este contexto, el Comité de las Regiones tiene el importante papel de actuar de acuerdo con la Comisión Europea.

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considera que la iniciativa debe organizarse de manera que pueda facilitar el descubrimiento de las mejores prácticas en las regiones y crear mecanismos simples para su difusión en las demás regiones de la Unión. La iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» debe ser una palanca, un catalizador de buenas ideas y buenas iniciativas como lo han sido en el pasado otras iniciativas comunitarias.

1.

acoge positivamente la intención de la Comisión Europea de recurrir a la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» para imprimir una mayor eficacia a las acciones de desarrollo regional y local, valorizando considerablemente las experiencias positivas en el ámbito territorial y promoviendo su divulgación, intercambio y adaptación a otros contextos mediante actuaciones en red. Estas actuaciones supondrán un renovado impulso en la medida en que son instrumentos de la política comunitaria para la modernización económica y la mejora de la competitividad;

2.

reconoce que esta iniciativa es central para la vocación institucional del Comité de las Regiones; por consiguiente, cree que se debe recurrir a su potencial de acción y participación, y solicita que se valore en mayor medida su papel como representante unificador de los sistemas regionales y locales de la Unión Europea;

3.

subraya que en el Comité de las Regiones se ha activado la plataforma de control de la Estrategia de Lisboa, compuesta por autoridades locales y regionales que se han comprometido a valorizar y dar notoriedad a la aplicación de esta estrategia en el ámbito territorial

4.

observa que es la única iniciativa explícitamente consagrada a la promoción de cooperaciones temáticas entre entes locales y regionales sin condiciones geográficas previas: no es necesario que pertenezcan a la misma zona fronteriza o al mismo espacio transnacional. Se trata del instrumento potencialmente más flexible de integración europea para los territorios que, no obstante, deberá contribuir a reforzar una política regional cada vez más eficiente, integrada y ambiciosa;

5.

comparte la intención de la Comisión de recurrir a la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» en pos de un verdadero intercambio y divulgación de experiencias y buenas prácticas en materia de desarrollo y cohesión entre las distintas realidades territoriales, desde la perspectiva de la Estrategia de Lisboa. Con esta finalidad, destaca la importancia de implicar de manera efectiva y directa a las autoridades que gestionan los programas operativos regionales en las redes que promueve dicha iniciativa;

6.

toma nota de que la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» de la Comisión Europea respeta el principio de subsidiariedad y se concibe como un proceso de aprendizaje, interrelación y adopción de las mejores prácticas adquiridas a nivel regional y local mediante acciones de cooperación territorial para cumplir los objetivos de Lisboa y Gotemburgo. No obstante, considera que el reforzamiento de este nivel en el ámbito político no puede disociarse de los buenos resultados de la política regional europea;

7.

propone, por lo tanto, a la Comisión Europea que, en el marco de una conferencia conjunta con el Comité de las Regiones, debata anualmente los avances de la iniciativa;

8.

señala que la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» debe entenderse como una medida complementaria de las modalidades existentes de cooperación interregional, sobre todo porque esta última se reforzó en el marco del nuevo objetivo de política regional «cooperación territorial europea». En este contexto, es preciso velar por que se siga fomentando de manera suficiente la cooperación entre regiones, ciudades y otros entes locales europeos iniciada en el marco de Interreg III C;

9.

considera necesario que se aclare la modalidad de cooperación entre las regiones y las ciudades desde el momento en que los documentos de la Comisión citan y toman en consideración estos dos niveles institucionales, aun cuando después se haga principalmente referencia a las redes de regiones. A este respecto, cabe subrayar que tanto las regiones como las ciudades pueden optar al Programa «Interreg IV C» y a «Urbact 2007-2013», aunque será preciso reconocer el papel impulsor de las regiones en el primero y de las ciudades en el segundo. Asimismo considera que sería particularmente útil y constructivo fomentar la participación de los entes e instituciones activos en las regiones y las ciudades;

10.

exhorta a la Comisión a dar prueba de una mayor transparencia que en el pasado. El programa de trabajo de las redes ya operativas debería divulgarse, cuando menos, en Internet, al igual que los sumarios de los distintos encuentros que hayan tenido lugar, así como los resultados, las mejores prácticas del pasado y los datos de contacto del socio principal de la red, de modo que los interesados tengan acceso a esta información y puedan utilizar los resultados. También estima útil que la Comisión considere la creación de un sitio Internet donde los interesados puedan hallar socios y otras informaciones relevantes;

11.

observa que, tras los encuentros y debates mantenidos el 31 de enero y el 16 de marzo de 2007 en la Comisión COTER, así como respecto al proyecto de dictamen aprobado en la última reunión, la Comisión Europea ya ha actualizado y puntualizado su posición respecto a la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico». En particular, es evidente que, aunque todavía no se ha oficializado formalmente en ningún documento oficial de la Comisión Europea, en la selección de las operaciones para la opción rápida se recurrirá al planteamiento de abajo arriba. Además, la realización de tales operaciones será conforme al funcionamiento de los programas operativos Interreg IV C y Urbact II y a los respectivos reglamentos de actuación. De esta manera debería asegurarse efectivamente el acceso a la iniciativa en igualdad de condiciones para todas las regiones y ciudades europeas, así como la deseada transparencia de la iniciativa.

12.

recomienda, asimismo, que se publiquen paralelamente las manifestaciones de interés en el sitio Internet de la Comisión y del Comité de las Regiones, y que se envíe una comunicación a las oficinas de las regiones con representación en Bruselas, así como a los representantes regionales de las representaciones permanentes de los Estados miembros en la UE, con el fin de que la información se difunda y llegue con rapidez a las regiones y ciudades. Por último, es posible explotar la red de centros de información que la Comisión mantiene en casi todas las regiones de la UE, al igual que la red de promoción y divulgación que se ha creado en los Estados miembros para satisfacer las exigencias de los MCA;

13.

además, propone que se establezca una modalidad de participación activa del CDR (¿consulta previa invitación/propuesta de la Comisión?) en la elaboración de los programas operativos o, alternativamente, que se cree un canal de comunicación para hacer llegar sus observaciones a las estructuras técnicas encargadas de su preparación;

14.

comprende que la Comisión sienta la necesidad de hacer más generales y menos restrictivas las redes existentes, y que el planteamiento temático prevalezca sobre el geográfico (véase el punto 3). Sin embargo, considera que estos dos planteamientos son, en realidad, complementarios y que se debe aprovechar esta circunstancia; como se reconoce la necesidad de proteger y reflejar la diversidad, es necesario acometer la definición de los temas teniendo presente su proyección territorial. Además, hay que perseguir un objetivo crucial como es la sinergia entre las distintas redes poniendo de manifiesto su carácter complementario tanto en el plano temático como en el territorial. En este contexto, destaca la atención que debería prestarse a las zonas menos favorecidas que presentan características de marginalidad;

15.

destaca la necesidad de dejar aún más margen para las iniciativas in situ. Como representantes de los entes locales y regionales, los miembros del CDR no pueden sino felicitarse por ello y piensan movilizarse para que esta «apertura» no traiga consigo un «cierre» a nivel nacional. El CDR piensa obrar para que la iniciativa apoye y distinga realmente aquellas redes de regiones y ciudades que desean trabajar conjuntamente para promover las mejores innovaciones en términos de desarrollo económico, social y medioambiental;

16.

hace hincapié en el problema de la sostenibilidad de las redes: hay que cerciorarse, por un lado, de la posibilidad de mantener los intercambios ya operativos durante un periodo suficientemente largo (lo que plantea un problema de recursos) y, por otro, de su capacidad para facilitar la participación y la interacción tanto entre las instituciones (participación efectiva de los interlocutores institucionales interesados), como entre los territorios (participación de los distintos contextos regionales y locales europeos y de los respectivos agentes territoriales que puedan extraer un verdadero provecho de la experiencia común);

17.

exhorta a la Comisión a garantizar la participación de los diversos tipos de regiones y entes locales a fin de reflejar su diversidad y originalidad, así como el valor de las distintas soluciones de desarrollo adoptadas. Las acciones que se lleven a cabo en el ámbito de la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» y de las opciones rápidas deberían tener presentes tanto estas experiencias diversas como la interacción entre las dimensiones regional y local en lo referente a los temas preseleccionados. El Comité de las Regiones se propone representar eficazmente la integración entre estas dos dimensiones, tanto en la definición de las orientaciones temáticas generales de la iniciativa y de sus modalidades de actuación, como en el diseño y la ejecución de los programas de referencia directa («Interreg IV C» y «Urbact 2007-2013»);

18.

teme que, aunque estos temas son suficientemente amplios y se inscriben claramente en el marco de la Agenda renovada de Lisboa, las modalidades de selección unívoca de los temas privilegiados pueden resultar demasiado rígidas (1), como ocurre con el papel que desempeña la industria en el desarrollo regional, que no se aborda en los temas propuestos en la actualidad. Así pues, convendría precisar y definir un procedimiento que permitiera integrar o revisar estos temas garantizando la máxima transparencia en el proceso decisorio, en sinergia y colaboración con las regiones y los entes locales. Además, las regiones y los entes locales deben conservar intacta su autonomía a la hora de gestionar sus redes, incluso cuando éstas se orienten hacia temas seleccionados por la Comisión. Por otra parte, el Comité se plantea la coherencia entre algunos de los temas y prioridades establecidos por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (2). En este contexto, se debería especificar, en particular, la admisibilidad de aquellos temas que corresponden directamente al Fondo Social Europeo;

19.

reconoce que, por lo general, el uso eficiente y eficaz de los recursos financieros previstos para la política de cohesión hace imprescindible no sólo un compromiso por parte de las autoridades nacionales y regionales, sino también un papel más directo de la Comisión Europea, la cual, a este respecto, deberá establecer con carácter voluntario nuevas vías de interacción, intercambio y cooperación entre la propia Comisión, las regiones y los entes locales;

20.

considera útil, además, una definición más precisa del marco de referencia financiero previsto para esta iniciativa, teniendo especialmente en cuenta que los recursos deberían proceder de diversas fuentes: posibles recursos remanentes disponibles en los programas 2000-2006, los dos nuevos programas operativos (en una proporción aún por definir en los respectivos proyectos de presupuesto), los principales programas regionales, así como los fondos de la asistencia técnica de la Comisión directamente disponibles. En este contexto, los recursos financieros con que cuentan los instrumentos «Interreg IV C» y «Urbact 2007-2013» sólo serán un primer impulso para la aplicación de los programas de referencia. Estos programas deberán ser la principal fuente de financiación de las iniciativas y, además, habrá que delimitar el porcentaje de la cofinanciación nacional, teniendo en cuenta las limitaciones que impone la necesidad de mantener la estabilidad presupuestaria en los Estados miembros;

21.

considera que la iniciativa debe organizarse de manera que pueda facilitar el descubrimiento de las mejores prácticas en las regiones y crear mecanismos simples para su difusión en las demás regiones de la Unión. En resumen, la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» debe ser una palanca, un catalizador de buenas ideas y buenas iniciativas como lo han sido anteriormente otras iniciativas comunitarias;

22.

insiste en la importancia que reviste el efecto de demostración y divulgación para asegurar la validez de la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico». Esta iniciativa debe justificarse a través de su dinamismo y demostrando, en particular, que es capaz de integrar los mejores proyectos en la programación principal («mainstream») de la política de cohesión para asegurar su financiación;

23.

en el marco de la política de comunicación de la iniciativa, valora positivamente la información facilitada por la DG Política Regional durante la reunión que mantuvo la Comisión COTER el 31 de enero de 2006 sobre la inclusión de un miembro del Comité de las Regiones en la Comisión de evaluación de los premios anuales para la innovación, previstos en la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico»;

24.

subraya que la comunicación y la divulgación son fundamentales para la difusión de esta iniciativa. Las conferencias anuales programadas deberían versar sobre la presentación de las mejores prácticas y su posible incorporación a las regiones y ciudades europeas. El Comité de las Regiones manifiesta su disposición a cooperar con la Comisión en este punto, especialmente por lo que respecta al intercambio de datos con la plataforma de control de la Estrategia de Lisboa. Sería conveniente difundir más información sobre la iniciativa, ya desde la fase preparatoria en curso. Algunos de los documentos de referencia, como el documento de trabajo que recoge los temas propuestos (3), se hallan disponibles actualmente sólo en inglés, por lo que también se sugiere su divulgación en otras lenguas comunitarias;

25.

acoge favorablemente las tres conferencias que ha organizado la Comisión hasta la fecha en el marco de la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» y considera recomendable que se emprendan nuevas iniciativas en materia de comunicación y cotejo (puntos de encuentro, conferencias y foros reales o virtuales) y, sobre todo, que las acciones de comunicación, promoción y difusión se integren en un Plan coordinado de comunicación. En previsión de una planificación plurianual de las acciones, este plan serviría para definir el marco de coordinación en el que se inscribirán los esfuerzos que se esperan de los servicios de la Comisión del ámbito informativo y de otras partes interesadas, entre las que destaca por su particular papel el Comité de las Regiones, que se muestra dispuesto a profundizar todo lo que resulte necesario en esta materia;

26.

propone que se pongan a disposición de las autoridades que gestionan los programas del Objetivo 3 fondos adicionales para que la iniciativa permita valorizar las acciones de las redes de cooperación territorial a la hora de aplicar la Estrategia de Lisboa y, en particular, favorecer a los ciudadanos en el marco del Plan D de la Comisión Europea (4);

27.

respalda las propuestas de la Comisión Europea de organizar en el marco de esta iniciativa conferencias temáticas periódicas y, a través de una opción rápida, incorporar a los principales programas de los Fondos Estructurales las ideas particularmente útiles en materia de política estructural;

28.

se pregunta cuáles son los plazos necesarios para emprender esta iniciativa. Cabe señalar que esta iniciativa no será plenamente operativa hasta el segundo semestre de 2007. Así, la Comisión ha manifestado su intención de emprender ya algunas acciones rápidas recurriendo posiblemente a fondos disponibles con cargo a programas todavía en fase de ejecución («Interreg III C» y el actual «Urbact») para adelantar así la entrada en funcionamiento de los nuevos programas. Por ello, sería útil precisar los plazos previstos en su conjunto;

29.

propone la participación, con carácter consultivo, de un miembro del Comité de las Regiones en los comités de vigilancia de los programas «Interreg IV C» y «Urbact 2007-2013» para garantizar una correcta interacción y colaboración en el funcionamiento de la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico», en reconocimiento del papel de representación de los entes locales y regionales en el ámbito europeo, en tanto que prerrogativa del Comité de las Regiones;

30.

Sugiere que las instituciones mantengan un diálogo regular con las asociaciones en las que los ciudadanos se integren y con la sociedad civil potenciando, de esta manera, la democracia participativa.

31.

solicita a la Comisión que proporcione mayor información sobre las modalidades de gestión de la iniciativa. Es importante precisar las modalidades de colaboración entre las direcciones generales implicadas de la Comisión Europea y las regiones y ciudades, así como las modalidades de contacto entre la Comisión y el Comité de las Regiones;

32.

solicita que, en el marco de los programas operativos, sea el comité de vigilancia del programa el que tome las decisiones concernientes a la adopción de acciones innovadoras dentro de una red en la que participe la región;

33.

subraya que la iniciativa tiene como objetivo alimentar los programas principales gracias a las mejores ideas procedentes de las redes. Por consiguiente, pide que se aclare el proceso para la selección de las mejores prácticas y, por ende, su control a la hora de rendir cuentas. Avanza la posibilidad de que, además de la presentación voluntaria de su candidatura, las regiones, ciudades y otros entes locales propongan a la Comisión, según una modalidad codificada sencilla y ágil, propuestas y observaciones sobre experiencias de especial interés y de posible valor para el establecimiento o la ampliación de las redes, en el contexto de los temas definidos en la iniciativa;

34.

pide a la Comisión Europea que aclare también la organización y la financiación de la asistencia técnica relativa a esta iniciativa, que se considera muy importante de cara a lograr una verdadera valorización de las mejores prácticas; considera, en particular, que es necesario un apoyo metodológico para analizar las innovaciones reales y distinguir aquellas que sean transferibles o puedan seguir desarrollándose. Por consiguiente, el Comité propone que la Comisión asuma este papel, en cooperación con los evaluadores externos para cada acción temática, sin perjuicio de las decisiones del comité de vigilancia;

35.

se plantea si el título de la iniciativa es pertinente y completo. Así, se pregunta si la expresión «Las regiones, por el cambio económico» es realmente la más adecuada o si, por el contrario, existe peligro de que induzca a confusión con otras iniciativas como, por ejemplo, «Regiones del conocimiento» o el Grupo de Lisboa. Considera que, a efectos de comunicación, habría sido preferible denominar la iniciativa «Regiones y ciudades, por el cambio económico», reconociendo, en cualquier caso, que el término global Regiones se ha preferido precisamente por su sentido inclusivo, en el que tienen cabida los distintos niveles institucionales de dimensión territorial;

36.

destaca que el Comité de las Regiones ha puesto en marcha la Plataforma de control de la Estrategia de Lisboa que, a su entender, constituye un instrumento operativo de los entes locales y regionales con la finalidad de dar notoriedad a la contribución de estos niveles a la gestión de la Estrategia de Lisboa y de aumentar el sentido de la apropiación de esta Estrategia en el plano territorial. Esta plataforma interactiva es operativa desde 2006 y, por el momento, participan en ella 100 regiones y ciudades. El objetivo principal de esta plataforma es ayudar a las regiones a posicionarse mejor ante las actuales corrientes modernizadoras en Europa y escapar así de una perspectiva puramente nacional. Los instrumentos de esta plataforma son el seguimiento (valoración de las necesidades), el análisis comparativo (la transparencia en el ámbito europeo), el intercambio en grupos de trabajo y la interactividad (intercambio on-line);

37.

expresa a la Comisión Europea su deseo de que, ante el riesgo de complicaciones, estos trabajos redunden en una mayor simplificación, y recomienda perseguir la sinergia y la complementariedad con la política regional. Todo ello implica que sería útil encontrar puntos de encuentro entre la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico» y la Plataforma de control de la Estrategia de Lisboa del Comité de las Regiones;

38.

propone, en particular, que se agilice, en las modalidades que resulten más adecuadas y eficaces, la interacción entre la iniciativa y la plataforma de control de Lisboa, teniendo en cuenta la función que desempeña esta última en cuanto foro de debate y comparación de las experiencias registradas por las regiones y las ciudades europeas, a fin de facilitar y alimentar con ideas y propuestas el proceso de selección de las redes interregionales de las regiones por el cambio económico y, en particular, en lo referente a la opción rápida. Entre tanto, la plataforma debería mantener y valorizar su función de control de los aspectos de gobernanza y orientación política en materia de planificación y aplicación de la Estrategia de Lisboa. Con esta finalidad, el Comité de las Regiones se muestra dispuesto a establecer las sinergias necesarias a nivel institucional y operativo con la Comisión y con los programas Interreg IV C y Urbact 2007-2013;

39.

propone, a modo de conclusión y teniendo en cuenta tanto lo anteriormente expuesto como el papel y el significado que reviste la iniciativa «Las regiones, por el cambio económico», que el Comité de las Regiones asuma, coherentemente con sus objetivos institucionales, un papel de representación, acompañamiento y apoyo que podrá ser decisivo para la puesta en práctica de esta iniciativa. Así, recuerda los instrumentos específicos que propone el Comité en el presente dictamen para desempeñar dicho papel:

40.

reitera que hay que debatir y evaluar, en el marco de una conferencia anual conjunta, los avances y el contenido temático de la iniciativa.