COMISIÓN EUROPEA
Estrasburgo, 19.10.2021
COM(2021) 645 final
COMUNICACIÓN DE LA COMISIÓN AL PARLAMENTO EUROPEO, AL CONSEJO, AL COMITÉ ECONÓMICO Y SOCIAL EUROPEO Y AL COMITÉ DE LAS REGIONES
Programa de trabajo de la Comisión para 2022
Hagamos juntos una Europa más fuerte
1.Hagamos juntos una Europa más fuerte
«Estoy convencida de que es cuando se nos pone a prueba cuando sale a la luz nuestra verdadera alma, nuestro espíritu genuino.» — Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, Discurso sobre el Estado de la Unión, 15 de septiembre de 2021
La Unión está saliendo de un período de crisis sin precedentes. Enfrentados a una serie de perturbaciones a escala mundial, hemos demostrado que, colaborando, permaneciendo unidos y haciendo gala de una gran ambición, podemos hacer frente a los retos más difíciles y obtener resultados en beneficios de los ciudadanos europeos.
La Comisión Europea ha reaccionado con rapidez ante diversos retos: desde combatir la pandemia de COVID-19 hasta mitigar los efectos del cambio climático y de la crisis del entorno natural, pasando por garantizar que las personas tengan acceso a un entorno cada vez más digitalizado o hacer frente a una nueva realidad geopolítica a escala mundial. Al hacerlo, hemos sentado las bases para un futuro mejor. Hemos desarrollado todas estas acciones en consonancia con la agenda audaz y transformadora de la que nos hemos dotado y que se aplica a las seis grandes ambiciones.
El programa de trabajo de este año nos permitirá mantener el impulso ya imprimido y emprender las próximas etapas de este proceso, prestando particular atención a las jóvenes generaciones gracias a la propuesta de declarar 2022 Año Europeo de la Juventud.
El año pasado, la Comisión presentó el innovador paquete de medidas denominado «Objetivo 55» con objeto de cumplir los objetivos acordados en la pionera Ley del Clima de forma sostenible en términos económicos y socialmente justa. El reciente informe sobre el calentamiento global del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas ha dejado aún más patente que no hay tiempo que perder: la COP 15 celebrada en Kunming y la próxima COP 26 de Glasgow constituirán hitos en este esfuerzo, poniendo de manifiesto el estrecho vínculo existente entre la crisis climática y la crisis de la biodiversidad. Los elevados precios que ha alcanzado recientemente la energía confirman también la necesidad de una transición limpia y de reducir la dependencia de la UE de los combustibles fósiles.
También expusimos nuestra audaz aspiración a lograr una Europa centrada en las personas y capacitada digitalmente de aquí a 2030, y adoptamos una Brújula Digital para materializar esta ambición. Ello incluye la propuesta de normas sobre una internet segura y protegida y una identidad digital común en Europa. Adoptamos el Plan de Acción del Pilar Europeo de Derechos Sociales y propusimos un conjunto de objetivos en materia social para 2030, refrendados por los dirigentes de la UE en la Cumbre Social de Oporto. A fin de reforzar en mayor medida la igualdad en la Unión Europea, propusimos medidas para intensificar la lucha contra el racismo y la discriminación por motivos de género y orientación sexual, incrementando al mismo tiempo nuestros esfuerzos por permitir que los ciudadanos con discapacidad participen plenamente en la sociedad. También tomamos medidas firmes para defender y reforzar el Estado de Derecho, proteger los valores fundamentales de nuestra Unión y fortalecer la resiliencia democrática, tal como se establece en el Plan de Acción para la Democracia Europea.
Todo ello se llevó a cabo en el sombrío contexto de la pandemia, que exigió actuar a una escala sin precedentes, tanto para proteger la salud de la población como para minimizar las repercusiones socioeconómicas más amplias de la enfermedad. En total, la Comisión adoptó más de 2 326 medidas de respuesta inmediata. Nuestra estrategia de vacunación, coronada por el éxito, ha contribuido a que la Unión garantizase el suministro de 4 600 millones dosis de vacunas contra la COVID-19 y alcanzase el objetivo de que el 70 % de la población adulta de la UE estuviese completamente vacunada a finales del verano. La UE ha sido también la impulsora de la respuesta mundial a la COVID-19, convirtiéndose en uno de los principales contribuyentes al mecanismo COVAX.
Para garantizar una mejor preparación frente a futuras pandemias, hemos acelerado los esfuerzos por instaurar una auténtica Unión Europea de la Salud. Hemos tomado medidas para apoyar una reapertura segura de Europa, en particular mediante el establecimiento del certificado COVID digital de la UE, acordado en un tiempo récord y utilizado en la actualidad por millones de personas.
Junto con los Estados miembros, hemos paliado el impacto social y económico de la pandemia a través de una serie de programas e instrumentos ambiciosos y de gran alcance. La capacidad combinada del presupuesto a largo plazo de la Unión y de NextGenerationEU permitirá aportar 2 018 billones EUR para impulsar nuestra economía y reconstruir una Europa posterior a la COVID-19 más ecológica, más justa, más digital y más resiliente. La activación de la cláusula general de salvaguardia del Pacto de Estabilidad y Crecimiento y del Marco Temporal relativo a las medidas de ayuda estatal permitió a los Estados miembros prestar un apoyo a la economía cifrado en el 6,6 % del PIB en 2020 y el 7,1 % del PIB en 2021, lo que ha contribuido a salvaguardar la estabilidad y a una fuerte recuperación económica. Garantizaremos que el gasto del presupuesto de la UE se realice en consonancia con los principios de buena gestión financiera y protegiendo plenamente los intereses financieros de la UE. Además, hasta el momento hemos movilizado 21 000 millones EUR con cargo a los fondos de la política de cohesión a fin de prestar ayuda de emergencia al sector sanitario y proteger el empleo, mientras que los 50 000 millones EUR en el marco de REACT-UE han servido de puente en la utilización de los instrumentos de recuperación.
Nuestra labor en pro de la recuperación en Europa ya está dando sus frutos. En la actualidad, el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, que constituye el núcleo del instrumento NextGenerationEU y cuyo valor asciende a más de 800 000 millones de euros, nos ofrece la oportunidad de allanar el camino hacia una recuperación sostenida e inclusiva. El impacto transformador del Mecanismo seguirá desarrollándose y aumentando en los próximos años, a medida que se lleven a cabo las reformas e inversiones previstas, en el pleno respeto de los derechos y valores fundamentales de la UE.
En el año y medio trascurrido hemos aprendido muchas cosas, por ejemplo, que, ante una crisis de tal envergadura, la mera recuperación no es suficiente. Antes bien, hemos de salir de ella fortalecidos y más resilientes, situando nuestras economías en una senda de crecimiento sostenido. Tenemos que aplicar las medidas que hemos acordado durante el último año. Además, tenemos que fomentar inversiones públicas y privadas adicionales en toda la Unión y acometer reformas en los próximos años a fin de lograr la doble transición ecológica y digital.
La Comisión ha cumplido su compromiso de reforzar el liderazgo mundial de la Unión en ámbitos tales como la respuesta a la pandemia, la acción por el clima y la biodiversidad, promoviendo un programa de comercio sólido, abierto y justo y defendiendo un orden mundial basado en normas. Hemos reforzado el compromiso de la UE con los Balcanes Occidentales e intensificado las asociaciones con nuestros vecinos orientales y meridionales, así como con África, a través de ambiciosos planes económicos y de inversión.
Además, hemos establecido una nueva agenda UE-EE.UU. para el cambio mundial, hemos seguido aplicando una política firme y matizada hacia China, hemos consolidado nuestro enfoque con respecto a Rusia, desarrollado una agenda constructiva y realista con Turquía y presentado estrategias para hacer aún más eficaz la cooperación multilateral y la acción humanitaria.
Animados por ese mismo espíritu, presentamos hoy nuestro programa de trabajo para 2022. En él queda patente nuestra determinación por superar la pandemia y salir de ella fortalecidos, acelerar la doble transición ecológica y digital y construir una sociedad más justa, resiliente y cohesionada, en consonancia con la Agenda 2030 de las Naciones Unidas y el Acuerdo de París. Instamos al Parlamento Europeo y al Consejo a que lleguen rápidamente a un acuerdo sobre las propuestas legislativas clave. Actuando en común, podemos garantizar que los ciudadanos, las empresas y las partes interesadas puedan aprovechar los beneficios de nuestros esfuerzos combinados. Paralelamente, presentaremos propuestas acordes con nuestros compromisos, tal como se expone a continuación en los apartados y anexos del presente programa de trabajo.
2.Cumplimiento de las seis grandes ambiciones
2.1.El Pacto Verde Europeo
La Comisión avanzará en la senda trazada para convertir a Europa en el primer continente climáticamente neutro del mundo de aquí a 2050. Propondremos un marco regulador para la certificación de las absorciones de carbono, con el fin de intensificar la implantación de unas absorciones de carbono sostenibles y crear un nuevo modelo de negocio que recompense a los administradores de tierras por promover esas prácticas. Revisaremos las normas sobre emisiones de CO2 para los vehículos pesados y estableceremos un marco legislativo para la medición armonizada de las emisiones causadas por el transporte y la logística con el fin de apoyar la transición hacia una movilidad sin emisiones. Y revisaremos también las normas de la UE sobre los gases fluorados de efecto invernadero con vistas a seguir reduciendo sus emisiones y garantizar el cumplimiento de los compromisos internacionales.
Los bonos verdes desempeñarán un papel cada vez más importante en la financiación necesaria para la descarbonización de nuestra sociedad, como parte del Plan de Inversiones para una Europa Sostenible.
Procederemos al seguimiento del plan de acción «contaminación cero», en particular en el ámbito de la gestión integrada del agua, para hacer frente a los contaminantes de las aguas superficiales y subterráneas, y en el de la calidad del aire ambiente, a fin de adaptar las normas a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud. Además, propondremos medidas para restringir la adición de microplásticos a los productos y reducir su liberación en el medio ambiente. Abordaremos los retos de sostenibilidad de los plásticos biodegradables y compostables y determinaremos dónde podrían ser beneficiosos para el medio ambiente. También tenemos previsto revisar la legislación sobre clasificación, etiquetado y envasado, y seguiremos trabajando en una revisión específica del Reglamento REACH a fin de proteger mejor la salud humana y la naturaleza.
Además de nuestras iniciativas relativas a una política de productos sostenibles, reforzaremos el derecho de los consumidores a la reparación de los productos a un precio justo. Ello permitirá ampliar la vida útil de los objetos y, por tanto, contribuirá al logro de los objetivos relativos a la economía circular.
La transición hacia una energía limpia es el mejor seguro contra perturbaciones de precios como la que afronta actualmente la Unión. Los elevados precios de la energía no han hecho sino poner de relieve la necesidad de acelerar la implantación de las energías renovables. En apoyo del logro del objetivo correspondiente a las energías renovables fijado en julio de 2021, la Comisión trabajará en la adopción de buenas prácticas para la concesión de los permisos necesarios y publicará una Comunicación sobre energía solar, que se centrará en aplicaciones específicas y abordará la eliminación de los obstáculos existentes.
Movilizaremos recursos para garantizar una transición ecológica justa desde el punto de vista social a escala internacional: paralelamente a la financiación procedente del Fondo de Transición Justa y del Fondo Social para el Clima propuesto, que estará vinculado a la ampliación del comercio de derechos de emisión al transporte y la vivienda, duplicaremos la financiación exterior de la biodiversidad y contribuiremos significativamente a la financiación de la lucha contra el cambio climático en favor de los países menos desarrollados y de los más vulnerables a los efectos del cambio climático.
Seguiremos trabajando en pro de una agricultura más ecológica y sostenible, y poniendo en práctica las acciones previstas en la estrategia «de la granja a la mesa». En 2022, la Comisión colaborará con los Estados miembros para acordar planes estratégicos nacionales ambiciosos que cumplan los objetivos de la política agrícola común y el Pacto Verde y propondrá, entre otras iniciativas, nuevas normas sobre el uso sostenible de los plaguicidas a fin de alcanzar el objetivo de reducción del 50 % inscrito en las estrategias de biodiversidad y «de la granja a la mesa», así como una revisión de las normas de comercialización. Paralelamente, la Comisión tratará de intensificar las prácticas agrícolas sostenibles mediante el fomento de la captura de las emisiones de carbono en la agricultura, la redefinición de modos sostenibles de utilización de los suelos agrícolas, así como del sector de la piscicultura, y la mejora del seguimiento de los indicadores de sostenibilidad a nivel de las explotaciones agrarias.
2.2.Una Europa Adaptada a la Era Digital
La pandemia ha servido de catalizador para acelerar la digitalización de Europa y del mundo. La Comisión hará un seguimiento de su «Itinerario hacia la Década Digital» para lograr la transformación digital de la UE de aquí a 2030. Estamos decididos a liderar la carrera mundial por una tecnología fiable, segura y centrada en el ser humano. Y trabajaremos para alcanzar un acuerdo y aplicar nuestras propuestas con vistas al logro de una internet segura y protegida, una identidad digital europea y una inteligencia artificial fiable.
El mercado único sigue siendo el núcleo de una economía europea innovadora, próspera y orientada hacia el futuro. Es preciso aplicar una política de competencia sólida y eficaz y garantizar el control de su observancia a fin contribuir a una recuperación resiliente y a la doble transición. En este contexto, la Comisión ha puesto en marcha una revisión de la política de competencia para garantizar la adecuación de los distintos instrumentos a los fines perseguidos. Presentaremos asimismo un instrumento de emergencia del mercado único para contribuir a evitar futuras perturbaciones.
Pese a los numerosos retos y perturbaciones con que se ha topado, Europa ha superado la crisis gracias, en gran medida, a su capacidad de innovación, su sólida base industrial y a las cadenas de suministro diversificadas y competitivas de que dispone. Sin embargo, en algunos sectores estratégicos, ha mostrado su vulnerabilidad, que es consecuencia de su elevada dependencia de un número muy limitado de proveedores de terceros países, especialmente respecto de las materias primas. Esto ha quedado especialmente patente en el caso de los semiconductores. El abastecimiento de estos chips utilizados en la fabricación de soluciones digitales en Europa se ha convertido en una auténtica preocupación para la industria de la UE, ya que, en algunos casos, la producción se ha visto ralentizada. En este contexto, adoptaremos una Ley Europea de Chips que promueva un ecosistema de chips europeo de vanguardia a fin de impulsar nuestra capacidad de innovación, garantizar la seguridad del suministro y promover el desarrollo de nuevos mercados para una tecnología europea rompedora.
Dado que la economía y la sociedad recurren de manera creciente a las soluciones digitales, debemos asegurarnos de poder defendernos en un mundo en el que la tendencia a la piratería de los productos conectados y los servicios conexos es cada vez mayor. A tal fin, propondremos una Ley Europea de Ciberresiliencia que establezca normas comunes de ciberseguridad destinadas a los productos. También empezaremos a crear un sistema espacial mundial de comunicación segura de la UE, que ofrezca conectividad de banda ancha a escala de la UE allí donde no exista actualmente y comunicaciones seguras e independientes a los Estados miembros.
Dado que el sector de la energía será el mayor contribuyente a la consecución del objetivo climático de la UE de reducir las emisiones en al menos un 55 % de aquí a 2030, la Comisión propondrá un plan de acción para una transformación digital acelerada del sector, necesario para garantizar la transición hacia las energías renovables, la movilidad conectada, los edificios inteligentes y un sistema energético más integrado y centrado en el consumidor. Las perturbaciones energéticas a gran escala registradas durante el año pasado en los EE.UU. y la UE han puesto de manifiesto la necesidad de disponer de una energía resiliente y cibersegura.
A fin de que la ciudadanía europea se beneficie plenamente de la tecnología digital, es esencial impartirle formación y dotarla de unas competencias digitales sólidas. Esta idea se ha ido imponiendo a medida que el aprendizaje a distancia se iba convirtiendo en la norma durante la pandemia de COVID-19 y se ha destacado como un objetivo clave en la Brújula Digital. Para colmar las carencias existentes en materia de competencias y conocimientos, propondremos medidas para facilitar y promover las competencias digitales en la educación primaria, secundaria y superior.
La investigación y la innovación desempeñarán un papel clave a la hora de responder a los retos a los que nos enfrentamos hoy en día. Contribuirán al logro de la recuperación en Europa, basándose en un crecimiento económico que puede impulsar las transiciones ecológica y digital. Serán esenciales para conseguir un crecimiento económico justo que beneficie a todos los ciudadanos y regiones, incluidas las zonas rurales. Es importante garantizar que Europa se sitúe en las fronteras de la ciencia y a la vanguardia de las nuevas olas de innovación.
Las soluciones digitales también pueden contribuir a apoyar una movilidad más integrada y sostenible. Propondremos una iniciativa sobre los servicios digitales para la movilidad multimodal a fin de paliar las deficiencias del mercado en el uso combinado de los modos de transporte, incluido el ferrocarril.
2.3.Una Economía al Servicio de las Personas
Con el retorno de la actividad económica a los niveles anteriores a la pandemia, es preciso emprender una reflexión sobre la forma en que la crisis ha afectado a nuestra economía. Esta es la razón por la cual la Comisión está relanzando el debate público sobre las normas presupuestarias y el marco de gobernanza económica. La Comisión tendrá en cuenta todas las opiniones manifestadas durante el debate público. En el primer trimestre de 2022, suministrará orientaciones en materia de política presupuestaria para el próximo período, con el fin de facilitar la coordinación de las políticas presupuestarias y la preparación de los programas de estabilidad y convergencia de los Estados miembros. Las orientaciones reflejarán la situación económica mundial, la situación específica de cada Estado miembro y el debate sobre el marco de gobernanza económica. La Comisión proporcionará directrices sobre posibles cambios en el marco de gobernanza económica con el objetivo de lograr un amplio consenso sobre el camino a seguir con la suficiente antelación para que puedan tenerse en cuenta en 2023. SURE, el Instrumento Europeo de apoyo temporal para atenuar los riesgos de desempleo en situaciones de emergencia, se ha revelado una herramienta extremadamente exitosa, y la Comisión estudiará detenidamente cuáles son las enseñanzas que pueden extraerse de ella.
Con objeto de garantizar que la población europea tenga acceso a empleo de calidad, condiciones de trabajo justas y una amplia cobertura social y pueda disfrutar de mayor equilibrio en su vida personal, la Comisión hará un seguimiento de la aplicación del plan de acción del Pilar Europeo de Derechos Sociales.
La conmoción provocada por la pandemia ha puesto de relieve la importancia de contar con unas redes sólidas de protección social. Propondremos una Recomendación sobre la renta mínima para apoyar las políticas de los Estados miembros.
La Comisión presentará asimismo una Comunicación para reforzar el diálogo social a escala nacional y de la UE con el fin de apoyar el papel clave que desempeñan los interlocutores sociales en el fomento de una recuperación económica y social cohesiva y justa, y de las transiciones ecológica, digital y del mercado laboral.
También presentaremos una propuesta para mejorar la protección de los trabajadores frente a los riesgos de exposición al amianto en el trabajo, teniendo en cuenta los resultados de la consulta con los interlocutores sociales. Coincidimos con el Parlamento Europeo y con su informe elaborado en virtud del artículo 225 del TFUE y recientemente adoptado en que el problema del amianto es un grave motivo de preocupación.
El sector financiero está desempeñando un papel clave en la recuperación económica. Dado que durante la pandemia han aumentado las transacciones digitales, la Comisión tiene previsto presentar una iniciativa sobre pagos inmediatos para fomentar su plena aceptación en la UE.
Por otro lado, la crisis sanitaria ha vuelto a confirmar la necesidad de desarrollar plenamente los mercados de capitales europeos. La recuperación requiere unas inversiones ingentes que los fondos públicos y los préstamos bancarios tradicionales no pueden aportar por sí solos. La Comisión adoptará medidas en relación con los procedimientos de insolvencia mediante el aumento de la convergencia y la eliminación de discrepancias, con el fin de aumentar la eficiencia, facilitar las inversiones transfronterizas y reducir las cargas que generan. Se simplificarán los requisitos de admisión a cotización a fin de dotar a los mercados públicos de capitales de mayor atractivo para las empresas de la UE y facilitar el acceso a capital por parte de las pequeñas y medianas empresas.
El 8 de octubre, 136 jurisdicciones de todo el mundo, incluidos todos los Estados miembros de la UE, los miembros del G-20 y los miembros de la OCDE, alcanzaron un acuerdo histórico sobre una reforma tributaria mundial, por la que se establece un nivel mínimo de imposición efectiva a escala mundial (segundo pilar) y una reasignación de los derechos impositivos (primer pilar). Desde el inicio del proceso en 2016, la Comisión ha apoyado firmemente este esfuerzo a escala internacional. Del mismo modo, la Comisión se esforzará ahora por mostrar el liderazgo de la UE en materia de equidad tributaria mundial, garantizando una aplicación rápida y coherente de este principio en toda la UE.
2.4.Una Europa más fuerte en el mundo
Los cambios geopolíticos en curso han puesto de relieve la necesidad de reforzar la influencia de Europa en un mundo en rápida transformación y defender sus valores e intereses.
A través de nuestra nueva estrategia de Pasarela Mundial, que se coordinará estrechamente con la estrategia Build Back Better World (Reconstruir un Mundo Mejor), intensificaremos los esfuerzos de la Unión Europea por crear asociaciones en materia de conectividad que promuevan una conectividad digital y ecológica de confianza con nuestros socios a nivel mundial.
Las distintas crisis humanitarias internacionales han puesto de relieve la brecha entre las necesidades existentes y los recursos disponibles. También han confirmado la necesidad de reforzar las asociaciones con nuestros aliados, por lo que presentaremos una nueva Declaración Conjunta UE-OTAN y trataremos de acelerar los trabajos sobre una auténtica Unión Europea de Defensa.
La Comisión tiene previsto elaborar un conjunto de medidas en el ámbito de la defensa que incluirá una hoja de ruta sobre tecnologías de seguridad y defensa a fin de impulsar la investigación, el desarrollo tecnológico y la innovación, y reducir la dependencia estratégica de la UE en tecnologías críticas y cadenas de valor en los sectores de seguridad y defensa.
El año que viene presentaremos una serie de iniciativas nuevas y, paralelamente, nos centraremos en la ejecución de acciones anteriores. Propondremos un Reglamento reforzado sobre el estatuto de bloqueo para proteger mejor a los operadores de la UE, sean estos particulares o empresas, disuadiendo a los terceros países de proceder a la aplicación extraterritorial de sanciones y contrarrestando ese tipo de medidas. Con ello se reforzará aún más la resiliencia de la UE y la autonomía estratégica abierta.
Proseguiremos con la transición energética mundial, así como con el fomento de la seguridad del suministro, de las tecnologías limpias y de los mercados abiertos. Todos estos aspectos se integrarán en la nueva estrategia sobre la colaboración internacional en materia de energía, que explorará nuevas oportunidades para implantar un sistema de energía limpia y promover la eficiencia energética y unas tecnologías seguras y sostenibles, al tiempo que se abandona gradualmente el uso de combustibles fósiles, tendiendo hacia soluciones energéticas ecológicas, y se promueve una transición justa.
Renovaremos la agenda para la gobernanza internacional de los océanos de 2016 mediante la presentación de una Comunicación conjunta en la que se establezca un plan de acción sobre la gobernanza internacional de los océanos, que aborde amenazas clave como la contaminación, las repercusiones del cambio climático y la pérdida de biodiversidad. Este plan de acción enviará un poderoso mensaje acerca del liderazgo de la UE respecto de la aplicación de los compromisos globales establecidos en la Agenda 2030 sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La región del Golfo es un socio clave para la UE. A fin de consolidar la cooperación y crear un marco para nuestro diálogo político, presentaremos una Comunicación conjunta en la que se establecerá una asociación estratégica con el Golfo.
2.5.Promoción de nuestro Modo de Vida Europeo
La juventud debe ser capaz de configurar el futuro y está liderando el debate en el marco de la Conferencia sobre el Futuro de Europa. Nuestra Unión necesita un alma y una visión con las que los jóvenes puedan conectar. Desplegaremos ALMA [por las siglas de Aim, Learn, Master, Achieve (Aspirar, Aprender, Dominar, Lograr)], una nueva iniciativa para brindar ayuda a la población juvenil europea desfavorecida que carezca de empleo y no tenga acceso a educación o formación. Gracias a la iniciativa, estas personas jóvenes adquirirán experiencia profesional en el extranjero con el apoyo social necesario. El objetivo último es integrarlas en la educación o la formación profesional, o que tengan acceso a un empleo de calidad.
Para responder tanto a los retos ya existentes como a los nuevos, hacer frente a las carencias demográfica y del mercado laboral y cumplir con nuestras responsabilidades a escala mundial, es de vital importancia encontrar una base común europea sobre cómo gestionar la migración y el asilo. Acontecimientos recientes como los ocurridos en Bielorrusia y Afganistán ponen de manifiesto la urgente necesidad de alcanzar con rapidez un acuerdo sobre las propuestas legislativas pendientes en el marco del nuevo Pacto para la Migración y el Asilo. El Pacto, presentado por la Comisión hace un año, incluye todos los elementos necesarios para instaurar un sistema equilibrado y humano que sea aceptable para todos los Estados miembros. Seguiremos colaborando con el Parlamento Europeo y los Estados miembros con vistas a reafirmar la confianza y establecer una política europea sostenible de gestión de la migración.
La Comisión perseverará en la construcción de una auténtica Unión de la Seguridad e informará periódicamente sobre los avances logrados en el ámbito de la seguridad, por ejemplo, acerca de las negociaciones en curso sobre expedientes legislativos clave, en particular en relación con las cuatro prioridades estratégicas: propiciar un entorno de seguridad que resista el paso del tiempo; hacer frente a amenazas en constante evolución; proteger a los europeos frente al terrorismo y la delincuencia organizada, e instaurar un ecosistema europeo de seguridad sólido. La continuación de los trabajos sobre ciberseguridad sigue siendo un elemento esencial de la Unión de la Seguridad. Paralelamente, prosiguen los trabajos sobre la lucha contra la trata de seres humanos, al tiempo que se van a adoptar nuevas medidas para mejorar el intercambio seguro de información clave con terceros países en beneficio de todos aquellos proveedores de seguridad en primera línea, junto con una actualización de las normas relativas a la información anticipada sobre los pasajeros.
La respuesta a la pandemia ha vuelto a demostrar que la ciencia y la educación son bienes inestimables no solo para promover nuestro modo de vida, sino para proteger nuestra salud. Aunque nuestros centros de educación primaria y secundaria y nuestras universidades se están adaptando a la revolución digital, la crisis, que ha afectado de forma más acusada a unos estudiantes que a otros, ha puesto de manifiesto el reto que supone el logro de la igualdad en la educación. Queremos garantizar el futuro de la próxima generación de científicos y profesores universitarios europeos y mantener la posición de liderazgo mundial de las universidades europeas, impulsando al mismo tiempo su colaboración. A tal fin, presentaremos la estrategia de la UE para las universidades y propondremos vías para una cooperación transnacional más profunda y sostenible en la enseñanza superior, que se elaborarán paralelamente a las iniciativas para la mejora del entorno digital en la enseñanza primaria, secundaria y superior a fin de garantizar la coherencia.
Una vez extraídas las oportunas enseñanzas de la crisis de la COVID-19, presentaremos una nueva estrategia asistencial europea dirigida tanto a quienes prestan cuidados como a quienes los reciben, y que abarcará desde la atención a la infancia hasta los cuidados de larga duración. La estrategia establecerá un marco para la introducción de reformas políticas destinadas a orientar el desarrollo de cuidados de larga duración sostenibles que garantice un acceso mejor y más asequible de toda la población a servicios de calidad. También abordará la educación y los cuidados de la infancia, prestando especial atención a los niños con discapacidad y a los pertenecientes a grupos desfavorecidos. Además, contribuirá a colmar la brecha de género en el empleo, aumentar el empoderamiento de las mujeres y favorecer la igualdad de género, en particular mediante la revisión de los objetivos de Barcelona.
Seguimos trabajando en la consecución de una Unión Europea de la Salud sólida y propondremos un nuevo marco para un sector farmacéutico de la UE dinámico, a fin de garantizar que todos los ciudadanos de la UE tengan acceso a medicamentos asequibles de alta calidad, fomentar la innovación y mejorar la seguridad del suministro. Esta iniciativa proporcionará un entorno regulador simplificado y eficiente a través de la digitalización innovadora y, por tanto, será emblemática a efectos de reducción de la carga administrativa. También propondremos una revisión de la legislación sobre medicamentos pediátricos y enfermedades raras para paliar las deficiencias observadas y garantizar que los medicamentos y tratamientos innovadores estén fácilmente disponibles. Ambas iniciativas dan seguimiento a la Estrategia Farmacéutica para Europa, contribuirán a la consecución de una autonomía estratégica abierta en el sector médico y aprovecharán la experiencia adquirida durante la pandemia para apoyar un sistema farmacéutico con perspectivas de futuro y resistente a las crisis. Las iniciativas se verán reforzadas por la propuesta de crear un auténtico espacio europeo de datos relativos a la salud, con una gobernanza fiable que garantice la seguridad y la protección de los mismos. De este modo se impulsará la investigación sobre medicamentos revolucionarios y se permitirá a los ciudadanos ejercer un mayor control sobre sus datos sanitarios.
Se impulsará aún más el cribado y el diagnóstico precoz del cáncer, prácticas que permiten salvar vidas, a través de una Recomendación sobre el cribado del cáncer que tenga en cuenta las últimas pruebas científicas disponibles, como parte del Plan Europeo de Lucha contra el Cáncer.
2.6.Un Nuevo Impulso a la Democracia Europea
En pleno apogeo de la Conferencia sobre el Futuro de Europa, todos los europeos están invitados a expresar su opinión sobre la forma de configurar nuestro futuro en común. La Conferencia supone un ejercicio democrático sin precedentes, abierto e inclusivo, y cuenta con una plataforma digital multilingüe. Escucharemos atentamente las ideas propuestas y las aportaciones realizadas, y estaremos preparados para hacer un seguimiento de todo cuanto se acuerde en el marco de la Conferencia. A fin de aprovechar al máximo esta oportunidad, estamos aplicando herramientas nuevas e innovadoras para transformar nuestra manera de dialogar con los ciudadanos. Ello contribuirá a garantizar que la juventud pueda liderar el debate.
La iniciativa ciudadana europea ya permite a la ciudadanía contribuir a la configuración de la Unión requiriendo a la Comisión que proponga nueva legislación. En la actualidad, se está recabando apoyo para once iniciativas de este tipo y el proceso se iniciará en breve en relación con otras tres.
La preservación de la libertad y el pluralismo de los medios de comunicación es uno de los cimientos de nuestros regímenes democráticos. Tomaremos nuevas medidas para mejorar la transparencia, la rendición de cuentas y la independencia en relación con las acciones que incidan en la libertad y el pluralismo de los medios de comunicación mediante una Ley europea sobre la libertad de los medios de comunicación.
El Estado de Derecho se halla en el núcleo de nuestra identidad y nuestros valores en tanto que ciudadanos europeos. Constituye también un requisito previo para un funcionamiento eficaz de la UE basado en la confianza mutua. Si bien el Informe sobre el Estado de Derecho de 2021 mostró una evolución positiva en los Estados miembros, constató también retrocesos y la aparición de nuevas preocupaciones. La Comisión proseguirá su labor en calidad de guardiana de los Tratados a fin de garantizar que se determinen los retos que plantea el Estado de Derecho y se les haga frente, por ejemplo mediante la formulación de recomendaciones específicas a los Estados miembros en el informe sobre el Estado de Derecho de 2022. También adoptará las medidas necesarias para mantener la primacía del Derecho de la UE. Y recurrirá a toda la gama de instrumentos de que dispone para garantizar un enfoque coherente y eficaz, por ejemplo, con vistas a proteger el dinero de los contribuyentes de la UE.
La Comisión seguirá trabajando en la implantación de un marco jurídico común para una transmisión eficiente de los procedimientos penales entre Estados miembros, con el fin de intensificar la lucha contra la delincuencia transfronteriza. También evaluaremos la forma de lograr la convergencia entre los Estados miembros en materia de detención preventiva y de condiciones de detención en el marco de la mejora de la cooperación transfronteriza en asuntos penales.
La Comisión seguirá esforzándose por que la Unión de la Igualdad se convierta en una realidad para todos. La ciudadanía en su conjunto debe sentirse segura y no temer sufrir discriminación o violencia por motivos de orientación sexual, identidad de género, expresión de género, características sexuales, origen racial o étnico, religión o creencias, discapacidad o edad. Dado que los organismos de promoción de la igualdad desempeñan un papel clave a la hora de garantizar estos derechos, propondremos medidas para reforzar su función y su independencia. Propondremos asimismo medidas para mejorar el reconocimiento de la paternidad entre los Estados miembros y reforzar la cooperación judicial en materia de protección de los adultos vulnerables en situaciones transfronterizas. Las medidas que presentemos para prevenir y combatir la violencia contra las mujeres se complementarán el año próximo con una iniciativa para apoyar a los Estados miembros en la mejora de la prevención y la adopción de medidas de apoyo para hacer frente a las prácticas perjudiciales contra las mujeres y las niñas.
Intentaremos avanzar en el diseño del nuevo órgano interinstitucional de la UE encargado de las cuestiones éticas, en particular prosiguiendo nuestra estrecha colaboración con las demás instituciones a fin de encontrar la necesaria base común de entendimiento sobre el alcance, el papel y las competencias del futuro órgano. Deberán respetarse las particularidades de cada institución, así como sus diferentes responsabilidades y obligaciones institucionales y democráticas en virtud de los Tratados. El informe de iniciativa del Parlamento Europeo constituye una importante contribución al debate en curso.
La Comisión también presentará una iniciativa sobre la fuga de cerebros y la mitigación de los retos asociados al declive de la población, que estudiará los distintos factores impulsores y las consecuencias a largo plazo de estos fenómenos, así como las posibles soluciones para detenerlos o incluso para invertirlos.
3.Mejora de la legislación, aplicación del Derecho de la UE y garantía de su cumplimiento
3.1.Mejora de la legislación
Nuestro programa de mejora de la legislación garantiza que las decisiones políticas se adopten basándose en los mejores datos disponibles, teniendo en cuenta el impacto que tendrán sobre el terreno y los puntos de vista de las personas y las empresas que puedan verse afectadas por ellas. Este enfoque contribuye a garantizar que la normativa sea específica y fácil de cumplir y no lleve aparejadas cargas normativas innecesarias. La Comunicación de 2021 «Aunar fuerzas para legislar mejor» establece formas esenciales de mejorar la calidad de la legislación y maximizar sus beneficios.
Para minimizar las cargas asociadas a la consecución de los objetivos políticos de la UE, la Comisión aplicará plenamente el principio de «una más, una menos» en relación con el presente programa de trabajo. De esta forma, al introducir nuevas cargas, procuraremos reducir, proactiva y sistemáticamente, las impuestas por la legislación en vigor. Los costes previstos en relación con el cumplimiento de la legislación de la UE se cuantificarán de manera más transparente, siempre que sea viable y proporcionado, y se incluirán sistemáticamente en las evaluaciones de impacto. Los costes administrativos se compensarán. En la medida de lo posible, se adoptarán otras medidas para compensar los costes de adaptación. El principio de «una más, una menos» complementará el programa de adecuación y eficacia de la reglamentación (REFIT), que identifica y elimina sistemáticamente la burocracia y los costes innecesarios.
La mejora de la legislación también es fundamental para apoyar la sostenibilidad y la transformación digital. En nuestras evaluaciones, evaluaciones de impacto y consultas se concederá mayor importancia a las ambiciones ecológica y digital de la Comisión y a su dimensión social y de equidad, poniendo el énfasis en los Objetivos de Desarrollo Sostenible y en los principios de «no causar un perjuicio significativo» y de «digital por defecto». El principio de igualdad para todos, incluida la igualdad de género, así como las implicaciones exteriores de las políticas internas se tendrán en cuenta en todas las fases de elaboración de las políticas. Se reforzarán las evaluaciones de impacto territorial y la comprobación del impacto rural, de modo que se tengan en cuenta mejor las necesidades y especificidades de los distintos territorios de la UE. Se prestará especial atención a la repercusión en las jóvenes generaciones. La integración de la prospectiva en la formulación de políticas reforzará también la futura verificación de nuestras normativas.
3.2.Aplicación y control del cumplimiento del Derecho de la UE
La adopción de una legislación ambiciosa e innovadora no basta: su adecuada aplicación es esencial a la hora de proteger los derechos de los ciudadanos y las empresas en la Unión. La Comisión seguirá apoyando a los Estados miembros y colaborando con ellos para garantizar una aplicación rápida y correcta de las normas de la UE tanto nuevas como ya existentes y no dudará en hacer cumplir el Derecho de la UE a través de procedimientos de infracción cuando sea necesario. Lograrlo es un requisito previo para alcanzar nuestros objetivos políticos en ámbitos como el correcto funcionamiento del mercado único, la introducción de Europa en la era digital, la consecución del Pacto Verde Europeo y la aplicación del pilar europeo de derechos sociales. Los casos de infracción son también una parte esencial del conjunto de instrumentos de que dispone la Comisión para defender los derechos y valores fundamentales que cimientan la Unión.
4.Conclusión
A lo largo del último año y medio, la Unión y sus ciudadanos han demostrado su fortaleza, tenacidad y unidad frente a una multitud de retos sin precedentes. El mundo actual sigue caracterizándose por un entorno incierto y acontecimientos disruptivos y tensiones geopolíticas crecientes, combinados con el cambio climático y la crisis de la naturaleza. Pero aprovechando las oportunidades que ofrecen estos retos y construyendo sobre los cimientos que hemos sentado podremos llevar a cabo la transformación social que Europa necesita y sus ciudadanos merecen.
El presente programa de trabajo establece medidas específicas para seguir cumpliendo las ambiciones que fijó la actual Comisión al inicio de su mandato y seguir orientando a la Unión hacia una recuperación sostenible. También incluye una lista de las propuestas legislativas clave que deberían tener prioridad en el proceso legislativo a fin de garantizar una rápida aplicación sobre el terreno. Esta lista constituirá la base de nuestro diálogo con el Parlamento Europeo y el Consejo con el fin de acordar una Declaración Conjunta sobre las prioridades legislativas para finales de año, en consonancia con el Acuerdo interinstitucional sobre la mejora de la legislación.
Hemos demostrado que, actuando juntos, estamos más capacitados para dar respuesta a los retos generacionales a los que nos enfrentamos y para proteger las vidas humanas y los medios de subsistencia.
Esta unidad es hoy más necesaria que nunca, pero no debe ir en detrimento de nuestra ambición. Ambas serán necesarias si lo que deseamos es seguir avanzando en la construcción de una Unión resiliente para un futuro próspero.
