COMISIÓN EUROPEA

Bruselas, 13.10.2021

COM(2021) 660 final

COMUNICACIÓN DE LA COMISIÓN AL PARLAMENTO EUROPEO, AL CONSEJO EUROPEO, AL CONSEJO, AL COMITÉ ECONÓMICO Y SOCIAL EUROPEO Y AL COMITÉ DE LAS REGIONES

Un conjunto de medidas de actuación y apoyo para hacer frente al aumento de los precios de la energía

1.Introducción

La Unión Europea, al igual que muchas otras regiones del mundo, se enfrenta actualmente a un fuerte aumento de los precios de la energía. Esto constituye una gran preocupación para los ciudadanos, las empresas, las instituciones europeas y los gobiernos de toda la UE.

El repunte actual se debe principalmente a la creciente demanda mundial de energía en general, y de gas en particular, vinculada a la recuperación. Aunque en el pasado se han producido fluctuaciones de los precios de la energía, en la actualidad la UE comienza a salir de la crisis de la COVID-19. Los hogares y las empresas europeos se enfrentan a la perspectiva de un aumento de las facturas energéticas en un momento en que muchos de ellos se encuentran en una situación delicada por la pérdida de ingresos derivada de la pandemia. Esto puede afectar a la recuperación y a que esta sea justa e inclusiva. También supone un riesgo para la confianza en la transición energética y el apoyo a esta, que son necesarios no solo para evitar un cambio climático desastroso, sino también para reducir la vulnerabilidad de la UE a la volatilidad de los precios de los combustibles fósiles.

La Comisión Europea desea ayudar y apoyar la lucha contra el impacto negativo en los hogares y las empresas, con carácter prioritario. Tras escuchar a los Estados miembros y al Parlamento Europeo, ha preparado la presente Comunicación para adoptar y apoyar las medidas adecuadas para mitigar el impacto de las subidas temporales de los precios de la energía.

El marco político de la UE ya permite a los Estados miembros adoptar inmediatamente una serie de medidas específicas para proteger a los consumidores vulnerables y mitigar los efectos en la industria. De hecho, la mayoría de los Estados miembros ya han anunciado medidas para hacer frente a la situación actual. Esta caja de herramientas permite un enfoque coordinado para proteger a los que corren mayor riesgo. Está cuidadosamente calibrada para alcanzar el objetivo de abordar los efectos negativos de las subidas repentinas de los precios y garantizar la asequibilidad sin fragmentar el mercado único europeo de la energía ni poner en peligro las inversiones en el sector de la energía y la transición ecológica. 

Aunque el suministro de energía no está en riesgo inmediato y los mercados esperan actualmente que los precios al por mayor del gas se estabilicen a un nivel más bajo para abril de 2022, la seguridad del suministro, los niveles de almacenamiento de gas y el buen funcionamiento del mercado del gas necesitan un seguimiento particular antes de la temporada de invierno. Además de las medidas a corto plazo, la presente Comunicación ofrece una perspectiva sobre las medidas coordinadas que la Comisión considera adoptar a medio plazo para garantizar una mejor preparación frente a las fluctuaciones de los precios del gas, reduciendo al mismo tiempo la dependencia de la UE de los combustibles fósiles.

2.Precios de la energía 

En 2019, los bajos precios de los combustibles, la atonía de la demanda y la rápida expansión de la producción de energías renovables hicieron que los precios al por mayor de la energía cayeran bruscamente y que se generalizaran los precios negativos de la electricidad en 2020. Esta tendencia a la baja se ha invertido bruscamente a lo largo de este año. Los precios al por mayor de la electricidad han aumentado un 200 % en tasa interanual 1 . Esto, a su vez, ha impulsado al alza los precios al por menor, pero en mucha menor medida (+ 9 % de media de la UE hasta agosto de 2021 2 ).

2.1.¿Qué está provocando el alza actual?

El aumento actual del precio de la electricidad se debe principalmente al aumento de la demanda mundial de gas a medida que se acelera la recuperación económica. El aumento de la demanda no ha ido acompañado de un aumento de la oferta, esto ha tenido unos efectos que se han dejado sentir no solo en la UE, sino también en otras regiones del mundo. Además, se han observado volúmenes de gas más bajos de lo previsto procedentes de Rusia, lo que ha tensionado el mercado a medida que se aproxima la temporada de calefacción. Aunque ha cumplido sus contratos a largo plazo con sus homólogos europeos, Gazprom ha ofrecido poca o ninguna capacidad adicional para aliviar la presión sobre el mercado del gas de la UE. El retraso en el mantenimiento de las infraestructuras durante la pandemia también ha limitado el suministro de gas.

Dado que los precios del gas natural son un determinante fundamental de los precios de la electricidad en la mayor parte de la UE, esta dinámica explica en gran medida el aumento actual de dichos precios de la electricidad. Además, los precios de la electricidad también aumentaron debido a las condiciones meteorológicas estacionales (escasez de agua y viento durante el verano). Esto ha dado lugar a una menor producción de energías renovables en Europa.

2.2.Impacto de los elevados precios de la energía

Si bien las recientes subidas de precios afectan a todos, los hogares en situación de pobreza energética y de renta baja y media son los más afectados porque gastan en energía porcentajes significativamente más elevados de sus ingresos 7 . La Comisión ha seguido de cerca la pobreza energética. Según los últimos datos disponibles, en 2019 alrededor del 7 % de la población de la EU-27, es decir, 31 millones de personas, no pudo calentar adecuadamente sus hogares, con diferencias significativas entre distintos grupos de renta y Estados miembros. Además, el 6 % de la población de la UE vivía en hogares con retrasos en el pago de facturas de servicios básicos.

Los efectos sociales y distributivos dependen de los contratos en vigor, así como de los marcos reguladores, incluidas las salvaguardias existentes que protegen en particular a los consumidores vulnerables y en situación de pobreza energética. Estas salvaguardias pueden incluir medidas de políticas sociales y públicas, incluidas las tarifas sociales, y otros medios conformes con el mercado interior de la energía de la UE, en particular la Directiva sobre la electricidad 8 , la Directiva sobre el gas 9 y las orientaciones de la Comisión 10 . 

El aumento de los precios del gas y la electricidad también puede tener repercusiones importantes en la industria y en las pymes. El impacto de los elevados precios de la energía se percibe de forma desigual dependiendo del sector, el aumento de los precios en los sectores industriales obstaculiza la producción, mientras que el impacto en los servicios es más limitado. La situación actual agrava aún más los problemas de liquidez posteriores a la COVID-19 de algunas empresas y, en particular, de las pymes, con diferentes repercusiones en los distintos sectores.

Los elevados precios de la energía afectan a las cadenas de suministro mundiales y europeas, con repercusiones en la producción, el empleo y los precios. Las industrias de gran consumo de energía 11 se ven gravemente afectadas. El sector de los fertilizantes ilustra este punto. Muy dependiente del gas natural como materia prima, la producción del sector ha dejado de ser rentable y, por lo tanto, se ha reducido sustancialmente en las últimas semanas. Esto, a su vez, afecta a los puestos de trabajo del sector. Además, se espera que una menor producción de fertilizantes dé lugar temporalmente a un aumento de los precios de los alimentos o a unos márgenes más bajos para la industria alimentaria.

El aumento de los precios de la energía también está teniendo un impacto significativo e inmediato en el sector del transporte y la movilidad, lo que se traduce en un aumento de los costes para los conductores, los pasajeros y los usuarios del transporte de mercancías.

Los elevados precios mundiales de la energía también pueden dar lugar a una disminución de los suministros de materias primas y componentes si se recorta la producción. Esto, a su vez, afecta momentáneamente a distintos fabricantes de la UE que dependen de dichos componentes y materiales, con el notable ejemplo del magnesio y la industria automovilística de la UE.

En términos de impacto macroeconómico, el fuerte aumento de los precios de la energía ha contribuido al aumento de la inflación. Después de varios años, la inflación ha repuntado notablemente en la UE y en muchas otras economías avanzadas desde principios de año. Esto se explica principalmente por factores transitorios, como la vuelta de algunos precios de las materias primas desde niveles históricamente bajos hasta sus niveles anteriores a la pandemia, o incluso por encima de estos, y los cuellos de botella en el suministro de determinados bienes. Dado que se espera que estos factores sean transitorios, se espera también que la inflación vuelva a disminuir a partir del próximo año.

En general, la economía de la UE se está recuperando más rápidamente de lo previsto, y se prevé que siga creciendo a corto plazo. Los efectos de primera vuelta sobre los saldos presupuestarios dependerán, por una parte, de la medida en que aumenten los ingresos fiscales debido a una mayor recaudación del IVA sobre los productos energéticos y a unos ingresos superiores a los previstos de la subasta de derechos de emisión y, por otra parte, de la magnitud de las medidas destinadas a proteger a los usuarios finales, en particular las transferencias públicas destinadas a los hogares vulnerables o la reducción del IVA.

2.3.Tendencias y expectativas

3.Un conjunto de medidas para ayudar a afrontar el reto

El actual pico de precios requiere una respuesta rápida y coordinada. El marco jurídico vigente permite a la UE y a sus Estados miembros adoptar medidas para hacer frente a los efectos de las fluctuaciones repentinas de los precios.

3.1.Medidas inmediatas para proteger a los consumidores y a las empresas

3.1.1.Ayuda a la renta de emergencia y evitar las desconexiones de la red

Basándose en la Recomendación del año pasado sobre la pobreza energética 19 , la Comisión pedirá a los representantes de los Estados miembros y a los reguladores de la energía que se comprometan a buscar la mejor manera de proteger a los consumidores vulnerables. Esto permitirá a los Estados miembros intercambiar buenas prácticas y orientar mejor las medidas para abordar la pobreza energética, en consonancia con las políticas conexas de la UE, como la eficiencia energética y la oleada de renovación.

3.1.2.Fiscalidad

Los impuestos y gravámenes proporcionan ingresos para compensar a los hogares más vulnerables y hacer frente a la pobreza energética, al tiempo que ofrecen incentivos para la inversión en fuentes de energía renovables y en apoyo de la transición ecológica.

Los impuestos y gravámenes 20 sobre los precios al por menor de la electricidad y el gas varían considerablemente. Por término medio, representan el 41 % de los precios de la electricidad de los hogares, entre el 30 y el 34 % de los precios de la electricidad de la industria, el 32 % de los precios del gas de los hogares y entre el 13 y el 16 % de los precios del gas de la industria. La Directiva de la UE sobre fiscalidad de la energía 21 y la Directiva sobre el IVA 22 ofrecen cierta flexibilidad a los Estados miembros. La Directiva sobre fiscalidad de la energía permite a los Estados miembros aplicar un tipo reducido, o eximir del mismo, a la electricidad, el gas natural, el carbón y los combustibles sólidos utilizados por los hogares. Los Estados miembros pueden hacer efectivas estas exenciones o reducciones del nivel impositivo directamente, mediante un tipo diferenciado o reembolsando la totalidad o parte del importe del impuesto. Los tipos reducidos deben ser específicos y evitar la introducción de distorsiones. Los Estados miembros pueden decidir aplicar tipos reducidos del IVA a los productos energéticos siempre que respeten los mínimos establecidos en la Directiva sobre el IVA de la UE 23 y que consulten al Comité del IVA de la UE.

La propuesta de revisión de la Directiva sobre fiscalidad de la energía, presentada en julio de 2021, tiene por objeto modernizar la fiscalidad de la energía en la UE adaptándola a los objetivos climáticos de la UE y garantizando la justicia social. La Directiva revisada fomentaría la inversión en fuentes de energía renovables y su uso, e introduciría la posibilidad de exenciones específicas para apoyar a los hogares vulnerables y en situación de pobreza energética, especialmente durante la transición hacia un sistema energético más limpio.

3.1.3.Ayudas estatales

3.1.4.Intensificación de la vigilancia del mercado

La formación equitativa de los precios y la integridad del mercado europeo del carbono están garantizadas por un sólido régimen de supervisión aplicable también a otros mercados financieros 26 . La participación de entidades financieras en el mercado de carbono debería aumentar la liquidez, contribuyendo a reducir la volatilidad y la presión sobre los precios. Para examinar con mayor detenimiento los patrones de comportamiento de negociación y la posible necesidad de acciones específicas, la Comisión pedirá a la ESMA que realice un análisis preliminar antes del 15 de noviembre y le encomendará que analice, a principios de 2022, el comercio de derechos de emisión. Por consiguiente, la Comisión evaluará si determinados comportamientos de negociación requerirían nuevas medidas reglamentarias. 

3.1.5.Colaboración con socios internacionales

Dado el carácter mundial del actual aumento de los precios, la cooperación internacional en materia de suministro, transporte y consumo de gas natural puede ayudar a controlar esta subida. La Comisión está dialogando con los principales países productores y consumidores de gas natural para facilitar su comercio. Este diálogo con nuestros socios internacionales tiene por objeto aumentar la liquidez y la flexibilidad del mercado internacional de gas con el fin de garantizar un suministro suficiente y competitivo de gas natural.

3.2.Medidas a medio plazo

El actual aumento inesperado de los precios está arrojando luz sobre algunas incógnitas de la transición hacia una energía limpia que se está llevando a cabo a escala mundial.

Entre las lecciones de esta crisis, la UE debe considerar medidas que, sin tener un impacto inmediato en la situación actual, refuercen la preparación ante posibles perturbaciones futuras de los precios, aumenten la integración y la resiliencia del mercado, capaciten a los consumidores, mejoren el acceso a una energía asequible y reduzcan la dependencia de los combustibles fósiles volátiles.

3.2.1.Capacidad de almacenamiento y un sistema energético de la UE resiliente

La Comisión tiene previsto revisar en diciembre de 2021 el Reglamento sobre la seguridad del suministro de gas. En este contexto, podría reforzarse la resiliencia del mercado del gas de la UE, por ejemplo mediante disposiciones que faciliten el acceso transfronterizo a la capacidad de almacenamiento, en particular para los gases renovables e hipocarbónicos. La Comisión podría explorar los beneficios potenciales de los mecanismos de apoyo basados en el mercado (por ejemplo, mediante subastas) para garantizar que las capacidades de almacenamiento de gas disponibles se utilicen de forma óptima. En este contexto, también es fundamental que los Estados miembros establezcan las disposiciones técnicas, financieras y jurídicas necesarias para el suministro transfronterizo de gas.

La Comisión estudiará también las posibles ventajas de la adquisición conjunta de reservas de gas por parte de entidades reguladas o autoridades nacionales para permitir aunar esfuerzos y la creación de reservas estratégicas. La participación en el régimen de compra conjunta sería voluntaria y el régimen debería estructurarse de manera que no interfiera en el funcionamiento del mercado interior de la energía y respete las normas de competencia.

Tal como se anunció en la Comunicación de la Comisión de abril de 2021, la Comisión adoptará un acto delegado complementario del Reglamento sobre la taxonomía de la UE y que cubra las actividades aún no contempladas en el acto delegado sobre la taxonomía climática de la UE. Ese acto delegado complementario cubrirá la energía nuclear con sujeción a los resultados del proceso de revisión específico en curso de conformidad con el Reglamento sobre la taxonomía de la UE y manteniendo la coherencia con esos resultados. Ese acto delegado complementario también abarcará el gas natural y las tecnologías conexas como actividad de transición en la medida en que se encuentren dentro de los límites del artículo 10, apartado 2, del Reglamento sobre la taxonomía de la UE. En este contexto se examinarán las ventajas de una cláusula de extinción aplicable a las actividades de transición. La Comisión estudiará la posibilidad de proponer legislación para apoyar la financiación de determinadas actividades económicas, principalmente en el sector de la energía, incluido el gas, que contribuyan a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de una manera que se facilite la transición hacia la neutralidad climática, pero que no puedan incluirse en la taxonomía.

El almacenamiento de energía es cada vez más importante para el sector energético de la UE y su sostenibilidad. Es necesario explotar tanto las opciones de almacenamiento a corto y medio plazo (baterías) como las de almacenamiento a largo plazo (conversión de electricidad en otro producto). El aumento del almacenamiento de electricidad, en particular, contribuye a la integración de las energías renovables en el sistema y a la suavización de los picos de demanda, lo cual también podría reducir los precios de la electricidad durante las horas punta cuando los generadores que utilizan combustibles fósiles a menudo fijan el precio. Es preciso dirigir inversiones sustanciales en este ámbito. La Comisión determinará las acciones clave de la UE para apoyar el desarrollo del almacenamiento de electricidad como herramienta clave de flexibilidad, garantizando la igualdad de condiciones y señales económicas adecuadas.

El mercado de la electricidad de la UE se basa en un sistema de precios marginales y de pago por compensación («pay-as clear»), lo que significa que todos reciben el mismo precio por la electricidad al por mayor. Dado que actualmente las centrales eléctricas alimentadas con gas siguen siendo necesarias con frecuencia para satisfacer la demanda de electricidad, el precio del gas repercute en el coste de producción de la electricidad, con repercusiones negativas como se ha visto ahora. Sin embargo, existe un consenso general sobre que el modelo marginal de fijación de precios es el más eficiente para los mercados liberalizados de la electricidad y el más adecuado para fomentar el comercio efectivo de electricidad entre los Estados miembros en el mercado mayorista. También está diseñado a medida para promover la integración de las energías renovables, lo que reduce los precios gracias a sus bajísimos gastos de explotación.

Aunque todavía no hay pruebas claras de que un marco de mercado alternativo ofrezca precios más baratos y mejores incentivos, la Comisión encargará a la Agencia de Cooperación de los Reguladores de la Energía (ACER) que evalúe los beneficios y los inconvenientes del actual diseño del mercado mayorista de la electricidad, entre otros su capacidad para abordar situaciones de extremada volatilidad de los precios en los mercados del gas y las medidas disponibles para reducir tales situaciones y, al mismo tiempo, garantizar una transición rentable hacia un sistema energético con cero emisiones netas, y que proponga recomendaciones que la Comisión evaluará para su seguimiento cuando proceda. Mientras tanto, la Comisión se pondrá en contacto con la ACER para disponer de una evaluación preliminar de la situación del mercado de la electricidad sobre la que informará a mediados de noviembre.

La salida o deficiencia del mercado de un proveedor puede tener consecuencias negativas para los consumidores, que no pueden controlar. El aumento de los precios de la energía puede representar una presión indebida, especialmente sobre los pequeños proveedores que ofrecen contratos de precio fijo. Por lo tanto, es necesario facilitar el acceso a los mercados financieros de todos los proveedores de energía, incluidos los pequeños, para que puedan cubrir sus contratos frente a la evolución futura de los precios. Para poner remedio a esto, la legislación de la UE reconoce que los Estados miembros pueden designar a un proveedor de último recurso. Sin embargo, también es importante que esto no cree un riesgo moral: proteger a los proveedores de sus decisiones comerciales a expensas de todos los consumidores. Junto con las medidas para mejorar el acceso de los pequeños proveedores a los mercados a largo plazo, la Comisión aclarará las normas para proteger a los consumidores del fracaso de los proveedores individuales y del funcionamiento de los proveedores de sistemas de último recurso.

3.2.3.Aumentar las inversiones en energías renovables y en eficiencia energética.

Las nuevas tecnologías y la digitalización ofrecen nuevas posibilidades de flexibilidad de la demanda. La Comisión iniciará los trabajos sobre un código de red para eliminar los obstáculos reglamentarios al desarrollo de la flexibilidad de la demanda a principios de 2022.

La Comisión ha propuesto recientemente revisar las Directrices sobre ayudas estatales en materia de protección del medio ambiente y energía a fin de ampliar las posibilidades de los Estados miembros de conceder ayuda financiera para la protección del clima y la descarbonización de toda la economía. Las nuevas normas, que se espera entren en vigor el próximo año, reducirán el recurso a los combustibles fósiles, evitarán los activos bloqueados y harán posible la introducción de sistemas de financiación de nuevas tecnologías, como el almacenamiento y el hidrógeno renovable, y facilitarán la financiación de medidas de eficiencia energética.

4.Conclusión

Las medidas descritas en la presente Comunicación tienen por objeto responder al actual aumento de los precios de la energía y contribuirán a lograr una transición energética socialmente justa y sostenible. La Comisión seguirá de cerca la situación en los próximos meses.

Los Estados miembros pueden actuar y ya están adoptando una serie de medidas relacionadas con la fiscalidad, las ayudas directas a la renta y otras medidas específicas y limitadas en el tiempo para aliviar a corto plazo los problemas que el aumento de los precios genera para algunos. A escala de la UE, pueden adoptarse a medio plazo una serie de medidas adicionales sobre almacenamiento, integración del mercado y comunidades de energía para garantizar unos mercados de la energía más resilientes, mejor preparados para la volatilidad y los retos de la transición. Los avances en eficiencia energética y las medidas para la modernización del sistema energético reducirán la factura energética a largo plazo.

La política europea en materia de energía, medio ambiente y clima, la financiación disponible a través de diversos programas de la UE y las recientes propuestas de la Comisión incluidas en el paquete «Objetivo 55» están concebidas para crear un sector energético sostenible a largo plazo. La Unión Europea está firmemente comprometida con la transición a la neutralidad climática y la descarbonización del sistema energético mediante la sustitución de los combustibles fósiles por energías renovables, reduciendo así nuestra dependencia de las importaciones de energía.

Unos compromisos claros de invertir en soluciones energéticas climáticamente neutras en todos los Estados miembros ayudarán a reducir la volatilidad de los precios de la energía y los desequilibrios en la oferta y la demanda de energía provocados por la evolución de los precios internacionales de los combustibles fósiles y otros factores externos. Son esenciales para mantener la energía asequible para todos los consumidores.

Una transición ecológica exitosa liderará la transformación, no solo hacia la energía limpia, sino también hacia una mayor eficiencia energética y un uso diferente. El compromiso de la UE de reducir significativamente sus emisiones de gases de efecto invernadero y el consumo de combustibles fósiles se ve reforzado por los acontecimientos recientes. Es necesario acelerar las medidas, tanto en el ámbito reglamentario como en el de la inversión. La transición hacia una energía limpia es la mejor garantía contra las perturbaciones de precios como la que afronta hoy la UE. Ha llegado el momento de acelerar.

(1)

      En comparación con el precio medio de 2019, los precios a principios de octubre de 2021 han aumentado un 166 % para el valor de referencia EP5 (DE, ES, FR, NL) y el mercado Nordpool (DK, EE, FI, LT, LV, NO, SE).  

(2)

      VaasaETT (https://www.vaasaett.com/)

(3)

     Entre enero de 2021 y septiembre de 2021, el precio del RCDE ha aumentado en aproximadamente 30 EUR/tCO2 , lo que se traduce en un aumento de los costes de aproximadamente 10 EUR/MWh para la electricidad producida a partir de gas (suponiendo una eficiencia del 50 %) y unos 25 EUR/MWh para la electricidad producida a partir de carbón (suponiendo una eficiencia del 40 %). Esto se ve claramente superado por el aumento observado del precio del gas de aproximadamente 45 EUR/MWh durante el mismo período, lo que se traduce en un coste adicional de producción de electricidad de aproximadamente 90 EUR/MWh.

(4)

     El artículo 29 bis de la Directiva RCDE establece que si, durante más de seis meses consecutivos, el precio de los derechos de emisión es superior al triple del precio medio de los derechos de emisión durante los dos años anteriores en el mercado europeo del carbono, la Comisión convocará inmediatamente una reunión del Comité con los Estados miembros para debatir posibles medidas.

(5)

     El gas natural puede importarse a la UE a través de gasoductos desde su fuente o transportado en forma de gas natural licuado (GNL). El gas debe almacenarse para equilibrar las fluctuaciones de la demanda diaria y estacional. Esto también garantiza el suministro de gas en caso de interrupciones del suministro o de demanda especialmente elevada. La principal ventaja del gas almacenado es que está disponible cerca de los consumidores y puede suministrarse sin demora.

(6)

     Petróleo (97 %), carbón (44 %) y gas (90 %).

(7)

   Durante la COVID-19, 8 Estados miembros (de 21 en los que se dispone de datos) registraron un aumento interanual de la tasa de pobreza energética en 2020, mientras que 13 registraron un descenso, incluidos los 5 Estados miembros con tasas superiores al 15 % en 2019 (Bulgaria, Grecia, Chipre, Lituania y Portugal).

(8)

     Directiva (UE) 2019/944 del Parlamento Europeo y del Consejo de 5 de junio de 2019 sobre normas comunes para el mercado interior de la electricidad y por la que se modifica la Directiva 2012/27/UE.

(9)

     Directiva 2009/73/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 13 de julio de 2009, sobre normas comunes para el mercado interior del gas natural y por la que se deroga la Directiva 2003/55/CE.

(10)

      Véase la Recomendación (UE) 2020/1563 de la Comisión , de 14 de octubre de 2020, sobre la pobreza energética.

(11)

     Los costes energéticos representan una parte significativa de los costes de producción en determinados subsectores, por ejemplo, el 71 % de los costes de producción de fertilizantes, el 40 % del aluminio primario, el 31 % del zinc y el 25 % del vidrio plano.

(12)

     El índice de futuros de gas Dutch TTF, que actualmente se sitúa en torno a los 90 EUR/MWh, tenía un precio en torno a 50 EUR/MWh en abril de 2022.

(13)

     A un año vista: 42 EUR/MWh. A dos años vista: 35 EUR/MWh. A tres años vista: 32  EUR/MWh.

(14)

     Los niveles actuales de almacenamiento de gas en la UE se sitúan ligeramente por encima del 75 %, por debajo del 90 % registrado por término medio en los últimos 10 años. A 3 de octubre de 2021. 

(15)

     Reglamento (UE) 2017/1938 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 25 de octubre de 2017, sobre medidas para garantizar la seguridad del suministro de gas y por el que se deroga el Reglamento (UE) n.º 994/2010. 

(16)

     Mientras que los fondos del RCDE deben apoyar principalmente nuevas reducciones de emisiones a través de, en particular, inversiones en medidas de eficiencia energética, transición energética e innovación en tecnologías limpias, el artículo 10, apartado 3, de la Directiva RCDE (Directiva 2009/29/CE) establece que los Estados miembros pueden utilizar los ingresos del RCDE para prestar ayuda financiera para abordar aspectos sociales en hogares con ingresos bajos y medios. 

(17)

     Los precios al por menor regulados para los hogares en situación de pobreza energética y vulnerables solo están permitidos en virtud de la legislación de la UE en situaciones excepcionales y en condiciones estrictas. Los precios regulados distorsionan las señales de inversión en generación y desamparan a los consumidores.

(18)

     Medidas especiales en relación con la COVID-19 para proteger a los consumidores vulnerables: los gobiernos nacionales y los reguladores de la energía dejaron en suspenso las desconexiones por impago de las facturas de energía. Además de las medidas gubernamentales, una serie de empresas energéticas de toda la UE adoptaron iniciativas voluntarias para apoyar a los clientes, como acuerdos de pago y políticas de no desconexión.

(19)

     Recomendación (UE) 2020/1563 de la Comisión, de 14 de octubre de 2020, sobre la pobreza energética

(20)

     Estos impuestos y gravámenes incluyen, en particular, los impuestos especiales sobre los productos energéticos y la electricidad y el impuesto sobre el valor añadido (IVA), que están armonizados a escala de la UE, pero también otros impuestos y gravámenes medioambientales nacionales para financiar las inversiones en energías renovables necesarias para la transición ecológica.

(21)

   Directiva 2003/96/CE del Consejo, de 27 de octubre de 2003, por la que se reestructura el régimen comunitario de imposición de los productos energéticos y de la electricidad.

(22)

     Directiva 2006/112/CE del Consejo, de 28 de noviembre de 2006, relativa al sistema común del impuesto sobre el valor añadido.

(23)

   El marco jurídico sobre los tipos del IVA se está revisando actualmente en el Consejo.

(24)

   De conformidad con los Reglamentos de Exención por Categorías y las Directrices sobre ayudas estatales, toda intervención estatal debe establecerse de manera transparente y no discriminatoria, sobre la base de criterios objetivos y proporcionados.

(25)

     La conducta comercial implica que las empresas pueden determinar de manera independiente sus decisiones, sin verse obligadas a comportarse de un modo determinado por la ley. 

(26)

     El mercado está supervisado por reguladores financieros de 27 Estados miembros, bajo la coordinación de la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA).

(27)

     COM(2020) 823 final, Propuesta de Directiva del Parlamento Europeo y del Consejo relativa a las medidas destinadas a garantizar un elevado nivel común de ciberseguridad y por la que se deroga la Directiva (UE) 2016/1148.

(28)

      https://ec.europa.eu/info/news/commission-publishes-report-barriers-eu-retail-energy-markets-2021-feb-23_en

(29)

     COM(2021) 550 final. Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones, «Objetivo 55»: cumplimiento del objetivo climático de la UE para 2030 en el camino hacia la neutralidad climática.

(30)

   Si determinadas centrales eléctricas no flexibles tienen que seguir produciendo a pesar de los precios negativos.

(31)

     Por ejemplo, se calcula que el aumento de la electricidad renovable fue responsable, ceteris paribus, de una disminución del 24 % de los precios de la electricidad al contado en Alemania durante el período 2008-2015, y del 35 % en Suecia durante el período 2010-2015 (Hirth, 2018).

(32)

     IRENA, Costes de generación de electricidad en 2020.

(33)

     Los gastos notificados para el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia son estimaciones de la Comisión basadas en las cifras de seguimiento del clima publicadas como parte de los análisis de la Comisión de los planes de recuperación y resiliencia. El importe notificado cubre los veintidós planes nacionales de recuperación y resiliencia evaluados y aprobados por la Comisión a fecha 5 de octubre. Evolucionará a medida que se evalúen más planes.

(34)

      https://ec.europa.eu/energy/topics/infrastructure/projects-common-interest_en  

(35)

    https://data.consilium.europa.eu/doc/document/ST-169-2014-INIT/es/pdf