Plan de acción para el espíritu empresarial

Este plan de acción comunitario propone una serie de iniciativas para promover el espíritu empresarial y así ayudar a que los empresarios realicen plenamente sus ambiciones y cuenten con un clima propicio a la actividad empresarial. El motivo: aunque el 47 % de los europeos muestra preferencia por el trabajo autónomo, únicamente el 17 % consigue cumplir sus ambiciones.

ACTO

Comunicación de la Comisión al Consejo, al Parlamento Europeo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones, de 11 de febrero de 2004, «Plan de acción: el programa europeo en favor del espíritu empresarial» [COM (2004) 70 final - no publicada en el Diario Oficial].

SÍNTESIS

Habida cuenta de las reacciones que ha provocado la publicación del Libro Verde sobre el espíritu empresarial, el presente plan de acción propone una serie de medidas relativas al fomento del espíritu empresarial, destinadas a ayudar a los empresarios a cumplir todas sus ambiciones y proporcionarles un entorno favorable a la actividad empresarial.

El citado plan de acción establece los objetivos clave que deben alcanzar la Unión Europea (UE) y los responsables políticos de los Estados miembros en estos cinco ámbitos estratégicos:

Fomentar la cultura empresarial

Con el fin de promover el espíritu empresarial entre un mayor número de personas, la Comisión propone el fomento entre los jóvenes de la educación en materia de espíritu empresarial mediante la aplicación de medidas educativas (tales como los juegos de rol) en los centros escolares. La Comisión invita a los Estados miembros a incluir la educación en materia de espíritu empresarial en los planes de todos los centros enseñanza, a organizar campañas de sensibilización, a proponer material de formación, a elaborar cursos de formación para el personal docente y a conseguir, en colaboración con organizaciones profesionales, que los empresarios participen en los programas de formación.

Animar a un mayor número de personas a convertirse en autónomos

El Eurobarómetro indica que, aunque el 47 % de los europeos muestran preferencia por el trabajo autónomo, sólo el 17 % consigue cumplir sus ambiciones. Animar a un mayor número de personas a convertirse en autónomos supone:

Habida cuenta del envejecimiento de la población y de que el grupo de edad más activo a la hora de crear empresas (25-34 años) dejará de ser tan activo en el futuro, este plan de acción exige a los Estados miembros una respuesta rápida.

Orientar a los empresarios hacia el crecimiento y la competitividad

Para que las pequeñas y medianas empresas (PYME) aprovechen al máximo las posibilidades que les ofrece la economía basada en el conocimiento, la UE ha elaborado una serie de iniciativas al respecto. Por ejemplo, ha decidido destinar el 15 % del presupuesto del Sexto Programa Marco de investigación y desarrollo tecnológicos (IDT) a las PYME. Asimismo, ha ampliado el ámbito de aplicación del Reglamento relativo a la exención por categorías de las ayudas a la investigación y el desarrollo (I+D) concedidas a las PYME. En lo que respecta concretamente al espíritu empresarial, la presente Comunicación propone:

Conforme al Libro Verde relativo al espíritu empresarial, las empresas de rápido crecimiento, denominadas asimismo empresas «gacela», escasean en Europa. Dichas empresas son, sin embargo, los motores de la innovación y el dinamismo empresarial. El crecimiento empresarial raramente se produce de forma accidental: los empresarios se inspiran, sobre todo, en modelos de éxito. Como consecuencia, la Comisión intentará buscar buenas prácticas políticas para difundir dichos modelos y ofrecer así un apoyo adecuado a las futuras empresas «gacela».

Mejorar los flujos de financiación

La Comisión contribuye actualmente a mejorar el entorno financiero de las empresas, especialmente las PYME, mediante sus instrumentos financieros y de diálogo entre las PYME y los actores financieros, con el fin de intercambiar buenas prácticas y conseguir un mejor entendimiento entre las PYME y la comunidad financiera.

La presente Comunicación pretende aumentar el capital propio y sanear los balances de las empresas. La Comisión tiene previsto utilizar sus instrumentos financieros en favor de las PYME para facilitar el crecimiento empresarial, mediante la estimulación de la oferta de financiación mediante capital propio y endeudamiento. La Comisión pretende igualmente intensificar sus medidas, con el fin de mejorar la disponibilidad de capital riesgo, la financiación de los inversores providenciales (business angels) y las inversiones de los particulares (micro-angels).

Asimismo, la Comisión ha proyectado analizar el impacto de estas ayudas y paliar las posibles deficiencias del mercado en lo que respecta a la financiación de las PYME, concretamente aquéllas de nueva creación y rápido crecimiento.

Instaurar un marco normativo y administrativo más favorable para las PYME

El mercado interior ha simplificado enormemente la vida de las empresas, concretamente en lo que respecta a las PYME. No obstante, su consecución sigue siendo una prioridad, dado que algunos obstáculos aún no se han eliminado. La Comisión continúa fomentando asimismo una mayor participación de las PYME en materia de normalización. La Comisión pretende conseguir una consulta más eficaz de las PYME que les permita pronunciarse sobre nuevas iniciativas desde la fase inicial del proceso de toma de decisiones y sobre la idoneidad de las normas y prácticas existentes.

La presente Comunicación pretende asimismo reducir la complejidad del cumplimiento de la legislación fiscal. Una empresa que trabaje en un contexto intereuropeo debe someterse a las diferentes legislaciones y normativas fiscales nacionales, lo que obstaculiza las actividades transfronterizas, concretamente de las PYME. Con el fin de simplificar y reducir los procedimientos fiscales relativos a la imposición directa, la Comisión pretende poner en marcha un proyecto piloto en el que las PYME puedan aplicar la fiscalidad según las normas del Estado de origen. Las PYME afectadas se beneficiarán así de ahorros considerables y de una mayor eficacia.

Respecto a las diversas categorías de operaciones entre empresas y consumidores, la aplicación del IVA en el lugar de consumo significa que los operadores deben identificarse y realizar declaraciones y liquidaciones en cada Estado miembro en los que efectúan operaciones imponibles, lo que resulta oneroso para los operadores del mercado interior. La Comisión pretende proponer un sistema de ventanilla única que permita a las empresas tratar con una única administración fiscal, en su propio idioma, además de someterse a un único conjunto de obligaciones.

INFORME SOBRE LA PUESTA EN MARCHA DEL PLAN DE ACCIÓN

En septiembre de 2006, el balance de la Comisión (pdf) (EN) reveló que la mayor parte de las iniciativas presentadas en el plan de acción ya se habían llevado a la práctica.

Entre otras cosas, la financiación comunitaria en favor de las medidas para ayudar a las empresas ha aumentado y se ha facilitado el acceso a la financiación. Además se han alcanzado progresos en materia de educación en la cultura empresarial para ofrecer a los jóvenes la oportunidad de adquirir lo antes posible las técnicas comerciales básicas, desarrollar cualidades personales y competencias generales como creatividad, espíritu emprendedor, confianza en sí mismos o sentido de la responsabilidad.

Por consiguiente, el plan de acción ha demostrado ser una herramienta extraordinaria para conseguir la promoción del espíritu empresarial. Las iniciativas así creadas tendrán su continuación en el marco de la política comunitaria para las PYME.

See also

Para más información sobre el plan de acción relativo al espíritu empresarial, consúltese la página de la Dirección General de Empresa e Industria (EN).

Última modificación: 11.09.2007