Cooperación entre universidades y empresas

El Foro Universidad-Empresa constituye una plataforma a nivel europeo para el intercambio de buenas prácticas, la puesta en común de experiencias y el fomento del aprendizaje mutuo entre los distintos agentes implicados. La mejora de la cooperación entre universidades y empresas se considera la piedra angular para la modernización de la educación superior en Europa.

ACTO

Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones, de 2 de abril de 2009 –Una nueva asociación para la modernización de las universidades: el Foro de la UE para el diálogo entre las universidades y las empresas [COM(2009) 158 final – no publicada en el Diario Oficial].

SÍNTESIS

El Foro Universidad-Empresa, creado a resultas de la Comunicación de la Comisión, de 10 de mayo de 2006, relativa a la modernización de las universidades, constituye una plataforma europea para el diálogo. La presente comunicación es el resultado del llamamiento del Foro para reforzar los vínculos entre las empresas y las universidades para de este modo afianzar la posición de Europa como sociedad del conocimiento.

La comunicación persigue tres objetivos:

Este análisis se centra en seis aspectos fundamentales, de los cuales la empleabilidad y la innovación son los desafíos más importantes que se deben abordar. Tales desafíos deben afrontarse realizando cambios sustanciales en los planes de estudios, lo que sólo es posible si las universidades proporcionan un marco adecuado. Los planes de estudios deberían contemplar destrezas transversales y transferibles, así como nociones básicas de economía y tecnología. Los sistemas de evaluación deberían ir orientados a la valoración del aprendizaje y las competencias. Asimismo, los perfiles de admisión y los enfoques de aprendizaje deberían diversificarse para poder detectar el talento procedente de entornos no tradicionales. Por otra parte, las agendas en materia de educación e investigación deberían ser más interdisciplinarias y transdisciplinarias.

Se pretende que la educación superior se convierta en un entorno de aprendizaje que fomente el espíritu emprendedor. Para instaurar una cultura emprendedora, las universidades deben llevar a cabo transformaciones en su dirección y administración. La formación en materia de espíritu emprendedor debería ser exhaustiva y accesible, y se debería implicar a los emprendedores y al mundo empresarial en la actividad docente. Del mismo modo, se debería formar al profesorado y al personal docente en materia de espíritu emprendedor.

Por otra parte, las universidades deben afrontar otro reto: la transferencia de conocimientos. Para permitir tal transferencia entre universidades y empresas, se debe establecer un marco general de cooperación. También resultaría positivo para las universidades contar con oficinas de transferencia de conocimientos para de este modo poder colaborar con las pequeñas y medianas empresas (PYME). Asimismo, las universidades y los organismos públicos de investigación deberían desarrollar estrategias para gestionar los Derechos de Propiedad Intelectual (DPI).

Las universidades también deberían abordar la necesidad de mejorar la movilidad a escala internacional y entre empresas y centros educativos. Para ello, es primordial que todos los agentes implicados promuevan y reconozcan la importancia de la movilidad. Resulta igualmente importante acreditar la movilidad del personal docente, los investigadores y los estudiantes hacia el entorno empresarial. Por último, también es esencial adaptar los marcos legales para de este modo fomentar y facilitar la movilidad.

Las universidades deberían reorientarse hacia el Aprendizaje permanente. El aprendizaje permanente debería incorporarse totalmente a sus objetivos y estrategias. No obstante, el desarrollo del aprendizaje permanente debe realizarse en asociación con las empresas. También es preciso que las universidades y las empresas trabajen juntas para detectar y abordar la demanda de competencias novedosas/ actualizadas. Al mismo tiempo, es imprescindible que en el mercado de trabajo se valoren y reconozcan las competencias actualizadas/perfeccionadas.

Una buena gobernanza de las universidades resulta fundamental para mejorar la cooperación con las empresas. Las estrategias institucionales deberían incorporar tal cooperación y es necesario establecer sistemas de incentivos y evaluación pertinentes. Por último, no debe olvidarse el papel fundamental de las condiciones de los marcos a nivel nacional y regional en la consecución de un entorno favorable para la cooperación de las universidades y las empresas.

La Comisión utilizará las conclusiones de este ejercicio de análisis en su cooperación política y en las iniciativas auspiciadas por sus programas, para de este modo continuar prestando su apoyo a la modernización de las universidades europeas. En lo que respecta a las acciones de seguimiento, la Comisión propone realizar un borrador de un programa de trabajo para el Foro así como una serie de acciones específicas para abordar los asuntos más urgentes ante los que nos encontramos, especialmente en lo que se refiere a la empleabilidad.

El Foro proseguirá su actividad a través de reuniones y seminarios. Por otra parte, se desarrollará un sitio web para sus comunicaciones. La Comisión también se propondrá reforzar la implicación de las autoridades públicas, tal y como se solicita en la comunicación.

Asimismo, la Comisión tiene previsto:

See also

Última modificación: 07.10.2009