Rumania
REFERENCIAS
Dictamen de la Comisión [COM(97) 2003 final - No publicado en el Diario Oficial]Informe de la Comisión [COM(98) 702 final - No publicado en el Diario Oficial]Informe de la Comisión [COM(1999) 510 final - No publicado en el Diario Oficial]Informe de la Comisión [COM(2000) 710 final - No publicado en el Diario Oficial]Informe de la Comisión [COM(2001) 700 final - SEC(2001) 1753 - No publicado en el Diario Oficial]Informe de la Comisión [COM(2002) 700 final - SEC(2002) 1409 - No publicado en el Diario Oficial]Informe de la Comisión [COM(2003) 676 final - SEC(2003) 1211 - No publicado en el Diario Oficial]Informe de la Comisión [COM(2004) 676 final - SEC(2004) 1200 - No publicado en el Diario Oficial]Informe de la Comisión [COM(2005) 534 final - SEC(2005) 1354 - No publicado en el Diario Oficial] Tratado de adhesión a la Unión Europea [Diario Oficial L 157 de 21.6.2005]
SÍNTESIS
En su dictamen de julio de 1997 la Comisión Europea consideraba que Rumania no había creado todavía las condiciones necesarias para la aparición de un sector privado dinámico y competitivo. Afirmaba además que su industria sólo estaría preparada para resistir las presiones de la competencia del mercado a largo plazo. La Comisión pedía a Rumania que emprendiera una reestructuración global para preparar la adhesión y se comprometiera en los ámbitos político y administrativo a eliminar los factores que obstaculizan el crecimiento del sector privado. Se pedían esfuerzos importantes, en particular para reestructurar las empresas estatales menos rentables.
El informe de noviembre de 1998 constataba progresos, especialmente en la reestructuración de las empresas públicas autónomas y en la privatización de algunos sectores industriales. Quedaba por ver si la reorganización de las empresas públicas autónomas y la reestructuración y privatización previstas de las grandes empresas estatales iban a conseguir reducir los desequilibrios económicos y reactivar las inversiones y la actividad industrial en los sectores viables en un plazo razonable. En caso contrario, habría sido inevitable un deterioro de la situación macroeconómica.
En su informe de octubre de 1999 la Comisión observaba que el Gobierno había iniciado la reforma de la industria, aunque aún debía poner en marcha una política industrial estratégica y crear la capacidad administrativa necesaria dentro del Ministerio de Industria y Comercio. La ausencia de planes de reestructuración efectivos, las dudosas condiciones de estabilidad para la inversión extranjera y la falta de demanda interior, así como el endeudamiento de numerosas grandes empresas, seguían frenando los progresos en este ámbito.
El informe de noviembre de 2000 subrayaba el retraso registrado en los procesos de reestructuración y de privatización, así como la falta de transparencia. Las constantes modificaciones del marco jurídico repercutían negativamente en la privatización, las reestructuraciones y la inversión. Debían solucionarse los problemas de la corrupción y el mercado negro para crear un entorno comercial favorable.
El informe de noviembre de 2001 señalaba los avances realizados por Rumania en política industrial y en el ámbito de las PYME. No obstante, aún debían efectuarse esfuerzos considerables.
El informe de octubre de 2002 indicaba que se había conseguido progresar en materia de política industrial aunque el proceso de privatización avanzase con lentitud. En cuanto a las PYME, pese a los esfuerzos realizados, seguía siendo necesario mejorar su entorno.
El informe de noviembre de 2003 consideraba que Rumania había progresado en la creación de estructuras de realización de su política industrial, así como en materia de privatizaciones. Rumania también había realizado esfuerzos notorios para mejorar el entorno en el que operan las PYME.
El informe de octubre de 2004 constataba que Rumania estaba realizando continuos progresos en el ámbito de la política industrial. No obstante, debía superar el importante reto de la puesta en práctica de dicha política.
El informe de octubre de 2005 considera que Rumania debería ser capaz de aplicar el acervo comunitario relativo a la estrategia industrial desde el momento de su adhesión. No obstante, debe seguir trabajando para cumplir sus compromisos.
El Tratado de adhesión se firmó el 25 de abril de 2005, y la adhesión se produjo el 1 de enero de 2007
ACERVO COMUNITARIO
La política industrial de la CE trata de fomentar la competitividad de las empresas así como de incrementar el índice de empleo y el nivel de vida. Su objetivo es favorecer en el seno de la Comunidad Europea un entorno propicio a la iniciativa, la creación y el desarrollo de empresas, especialmente PYME, la cooperación industrial, así como el aprovechamiento del potencial industrial de las políticas de innovación, investigación y desarrollo tecnológico. En esta perspectiva, la estrategia comunitaria consiste, por una parte, en definir principios de acción, y , por otra, en elaborar declaraciones de política industrial de naturaleza horizontal o sectorial. La política industrial comunitaria se sirve de los instrumentos procedentes de otras políticas comunitarias, unos relacionados con el funcionamiento de los mercados (especificación de productos y acceso al mercado, política comercial, ayudas estatales y política de competencia) y otros relacionados con la capacidad de adaptación al cambio de la industria (entorno macroeconómico estable, tecnología, formación, etc.).
Con el fin de hacer frente a la presión competitiva y las fuerzas del mercado existentes en la Unión, la industria de los países candidatos debe haber alcanzado cierto nivel de competitividad en el momento de la adhesión. Estos países deberán demostrar que persiguen políticas orientadas a la creación de unos mercados abiertos y competitivos en consonancia con el artículo 157 del Tratado de la Unión Europea. La cooperación entre la UE y los países candidatos en materia de industria, inversión, normalización y evaluación de la conformidad con las normas comunitarias, prevista en el Acuerdo Europeo, constituye también un importante indicador del avance de los países candidatos.
EVALUACIÓN
En su dictamen de 1997, la Comisión había constatado que la industria rumana apenas había comenzado su proceso de adaptación a la economía de mercado. Desde entonces, Rumania ha desarrollado una política industrial que se ajusta globalmente a los principios comunitarios en la materia. La estrategia industrial rumana se basa actualmente en las fuerzas del mercado y es estable y previsible. El documento de política industrial de Rumania y el plan de acción con él relacionado se ajustan a las exigencias del capítulo de política industrial, aunque es necesaria una actualización. Ya se ha conseguido la mejora del entorno empresarial, la promoción de las inversiones extranjeras y la aceleración del proceso de privatización y prosigue la reestructuración de la industria siderúrgica. La eficacia de esa política sigue siendo, sin embargo, limitada a causa de ciertas debilidades estructurales en los campos económico, administrativo y jurídico.
Con objeto de concluir su preparación a la adhesión, Rumania deberá intensificar sus esfuerzos en materia de privatización y reestructuración, lo que le permitirá garantizar la puesta en práctica completa de su estrategia de privatización y resolver los litigios surgidos con motivo del proceso de privatización, especialmente durante el periodo siguiente a la misma. Por otra parte, Rumania deberá continuar la reestructuración de los sectores industriales clave, sobre todo aplicando realmente la estrategia de reestructuración de la industria siderúrgica, a la vez que se garantiza su conformidad con el acervo en materia de competencia y ayudas estatales. Así mismo, es necesario poner al día la estrategia adoptada en 2002. Deben consolidarse las estructuras y capacidades administrativas que se han puesto en marcha.
Este capítulo está cerrado provisionalmente, no se ha solicitado ningún régimen transitorio y Rumania ha respetado sus compromisos (véase el informe de 2002).
Desde el Dictamen de la Comisión de 1997, Rumania ha adoptado une serie de iniciativas en favor del desarrollo de las pequeñas y medianas empresas (PYME) y el peso económico de estas últimas ha aumentado considerablemente. La política en favor de las PYME se ajusta actualmente, en su conjunto, a los principios y objetivos de la política comunitaria en favor de las empresas. Rumania participa en el programa plurianual a favor de la empresa y el espíritu empresarial, en particular de las PYME, y se adhirió en 2002 a la Carta europea de la pequeña empresa. Se ha actualizado la estrategia de desarrollo de las PYME para el periodo 2004-2008. Se han realizado progresos en lo relativo a la simplificación y mejora de los procedimientos administrativos y del entorno de las PYME. Se ha creado un fondo de garantía que permite el acceso a una financiación más cómoda. Por otra parte, se adoptó en 2004 una ley sobre incentivos a la creación y desarrollo de PYME, que comprende una definición de las PYME.
Con objeto de culminar su preparación a la adhesión, Rumania deberá continuar sus esfuerzos para la aplicación completa y eficaz de su estrategia en favor de las PYME y de la Carta europea de la pequeña empresa. Además, deberá seguir mejorando el entorno de las empresas. Se trata de garantizar un entorno legislativo estable y simplificar el entorno jurídico y administrativo de las PYME. Por último, Rumania deberá garantizar que su definición de PYME se ajuste completamente a la definición comunitaria.
Este capítulo está cerrado provisionalmente, no se ha solicitado ningún régimen transitorio y Rumania ha respetado sus compromisos (véase el informe de 2002).
Última modificación: 13.02.2006