El futuro de la asistencia sanitaria y de la atención a las personas mayores: garantizar la accesibilidad, la calidad y la sostenibilidad financiera

Los sistemas de asistencia sanitaria nacionales se enfrentan a tres grandes retos comunes debido a que la población europea envejece, la atención sanitaria, cada vez más eficaz, es igualmente más costosa y los pacientes, los verdaderos usuarios de la asistencia sanitaria, cada vez más exigentes. Frente a estos tres retos, la Comisión propone tres objetivos a largo plazo: el acceso a la atención sanitaria para todos, un alto nivel de calidad de la oferta de asistencia y la sostenibilidad financiera de los sistemas nacionales de la salud.

ACTO

Comunicación de la Comisión, de 5 de diciembre de 2001, titulada «El futuro de la asistencia sanitaria y de la atención a las personas mayores: garantizar la accesibilidad, la calidad y la sostenibilidad financiera» [COM (2001) 723 final - no publicada en el Diario Oficial].

SÍNTESIS

En la Unión Europea, la sanidad en general y los sistemas de asistencia gozan de una situación excepcional a nivel mundial gracias a la generalización de la cobertura del riesgo de enfermedad-invalidez, al incremento del nivel de vida, la mejora de las condiciones de vida y una mejor educación en materia de salud.

El gasto global de sanidad aumentó desde aproximadamente el 5 % del PIB en 1970 hasta superar el 8 % en 1998. El gasto público de sanidad ha seguido el mismo ritmo de crecimiento superior al PIB en numerosos países.

LOS RETOS COMUNES A TODOS LOS SISTEMAS DE ASISTENCIA SANITARIA DE LA UNIÓN EUROPEA

Impacto del envejecimiento demográfico en los sistemas y los gastos

El envejecimiento demográfico en Europa presenta dos aspectos:

Si se confirman las hipótesis de Eurostat, los gastos públicos de asistencia sanitaria podrían experimentar, durante el periodo 2000-2050, un incremento de 0,7 a 2,3 puntos del PIB.

De este modo, el incremento del número de personas de esas categorías de edad provocará nuevas solicitudes de asistencia de larga duración.

En vista de estas necesidades, deberán evolucionar las estructuras de atención sanitaria, las modalidades de financiación y la organización de la oferta. Hará falta en particular, paliar la creciente necesidad de mano de obra cualificada, ya que las estructuras familiares más reducidas y más inestables permiten cada vez menos apoyarse en las redes familiares de solidaridad.

Desarrollo de nuevas tecnologías y terapias

La evolución de las tecnologías médicas (terapias génicas, cultivo de órganos, nuevos medicamentos, etc) aporta ciertas ventajas a los pacientes, como la reducción de riesgos patológicos o los tratamientos preventivos. Sin embargo, estas innovaciones suponen un coste y plantean la cuestión de su financiación. En el contexto del control de gastos, esto obliga a desarrollar mecanismos de evaluación claros, transparentes y eficaces que puedan garantizar la accesibilidad de los nuevos productos o terapias a un mayor número de pacientes.

Desarrollo de las expectativas de los pacientes

Se observa desde hace medio siglo que el aumento de la demanda de atención médica no es proporcional al incremento de la renta per cápita, sino superior. El nivel de vida y el nivel de educación configuran esta demanda. Este fenómeno tiene tres consecuencias:

TRES OBJETIVOS A LARGO PLAZO: ACCESIBILIDAD, CALIDAD Y SOSTENIBILIDAD

La organización de los sistemas sanitarios, sus modalidades de financiación (ratio de financiación público-privado) y la planificación de la oferta de atención sanitaria en función de las necesidades de la población son la competencia de los Estados miembros. Sin embargo, esta competencia se ejerce cada vez más en un marco general en el que intervienen numerosas políticas comunitarias (investigación, política de la salud pública, libre circulación de personas y servicios, sostenibilidad de las finanzas públicas).

Esta situación justifica el desarrollo de una cooperación europea.

La Comunicación identifica tres objetivos a largo plazo para los sistemas nacionales, que deberán cumplirse paralelamente.

Accesibilidad

El acceso a la asistencia sanitaria es un derecho inscrito en la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea. Sin embargo, está a menudo condicionada por la posición social de las personas. De este modo, es especialmente necesario asegurar el acceso a la atención médica a los grupos desfavorecidos y a las personas más necesitadas. El informe conjunto de evaluación de los planes nacionales de acción para la inclusión social propone tres categorías de medidas:

Calidad

Para los gobiernos nacionales, proporcionar una asistencia sanitaria de calidad implica obtener la mejor relación posible entre los beneficios para la salud y los costes de los productos o los tratamientos. Este enfoque de la calidad resulta complejo debido a:

El estudio comparativo de los sistemas de atención sanitaria y de las prácticas terapéuticas debe permitir la identificación de las «buenas prácticas» y contribuir así a la mejora de la calidad de los sistemas de asistencia sanitaria.

Sostenibilidad financiera

La disponibilidad de una atención sanitaria de calidad para la mayoría exige un cierto nivel de financiación. La presión en alza de los costes de la asistencia sanitaria se hace sentir, independientemente del modo en que se organicen los sistemas de asistencia médica de los Estados miembros. Estos últimos han llevado a cabo reformas desde el comienzo de los años noventa basándose en dos elementos principales:

No obstante, a menudo cuesta distinguir a corto plazo los efectos más estructurales de estas reformas que permitan realmente alcanzar un ritmo viable de evolución de los gastos. La presente Comunicación recomienda intensificar los intercambios de experiencias que permitan hacer balance de las políticas emprendidas y constituyan un instrumento útil de comparación y de progreso.

Para alcanzar estos objetivos, es vital que todas las partes implicadas (autoridades públicas, profesionales de la salud, organismos de protección social, organismos de seguros complementarios y usuarios) logren construir asociaciones fuertes.

Contexto

Esta Comunicación es la respuesta a las conclusiones del Consejo Europeo de Lisboa (marzo de 2000), que subrayaron la necesidad de una reforma de los sistemas de protección social para proporcionar servicios de asistencia de calidad. Responde igualmente a la demanda del Consejo Europeo de Gotemburgo (junio de 2001) de establecer un informe para el Consejo Europeo de primavera de 2002 que propusiera orientaciones en materia de asistencia sanitaria y de cuidados para las personas mayores.

Cifras claves del acto

ACTOS CONEXOS

Comunicación de la Comisión, de 20 de abril de 2004 - Modernizar la protección social para el desarrollo de una asistencia sanitaria y una asistencia de larga duración de calidad, accesibles y duraderas: apoyo a las estrategias nacionales a través del «método abierto de coordinación» [COM (2004) 304 final - no publicada en el Diario Oficial]. En esta Comunicación se propone ampliar el «método abierto de coordinación» al sector de la salud y de la asistencia de larga duración, lo cual permitirá establecer un marco que fomente el intercambio de experiencias y de buenas prácticas. De esa forma se apoyará a los Estados miembros en sus esfuerzos de reforma de la asistencia sanitaria y de la asistencia de larga duración.

Informe conjunto de la Comisión y del Consejo, de 13 de marzo de 2003, sobre asistencia sanitaria y atención a las personas mayores: apoyar las estrategias nacionales para garantizar un alto nivel de protección social (DE) (EN) (FR). El Consejo Europeo de Barcelona (2002) invitó a la Comisión y al Consejo a profundizar en las cuestiones del acceso, la calidad y la sostenibilidad financiera. Se remitió un cuestionario a los Estados miembros a fin de recabar información sobre su enfoque en relación con esos tres objetivos. El informe conjunto está basado en las respuestas a dicho cuestionario presentadas por los Estados miembros en 2002.

Ese informe conjunto fue aprobado por el Consejo «Empleo, asuntos sociales, sanidad y consumidores» el 6 de marzo, y el 7 de marzo por el Consejo «Asuntos económicos y financieros», como contribución al Consejo Europeo de marzo de 2003.

Última modificación: 14.10.2005