Construir una Europa que fomente la integración

Tras la reunión informal que los ministros de Asuntos Sociales de la Unión Europea celebraron en Lisboa los días 11 y 12 de febrero de 2000, y después de una amplia consulta de los Estados miembros y la sociedad civil, se constata que la lucha contra la exclusión social se ha convertido en uno de los principales retos a los que se enfrentan nuestras economías y nuestras sociedades. Muchos europeos viven aún en la pobreza y tienen dificultades para participar en la vida social. Para facilitar más la integración y limitar la aparición de nuevas formas de exclusión, la Comisión propone que se acelere la construcción de una Europa para todos, basada en el conocimiento y la información.

ACTO

Comunicación de la Comisión, de 1 de marzo de 2000, Construir una Europa que fomente la integración [COM (2000) 79 final - no publicada en el Diario Oficial].

SÍNTESIS

1. Como consecuencia de la Cumbre de Luxemburgo (noviembre de 1997), en la que se inició la estrategia europea de empleo, la Comisión propone que se cree una nueva iniciativa a fin de apoyar a los Estados miembros en su lucha contra la exclusión social. Dicha iniciativa hace especial hincapié en la necesidad de tener en cuenta los efectos de la creación de empleo sobre la cohesión social.

El reto de la exclusión social

2. Según los datos de Eurostat (1994), aproximadamente el 18 % de la población de la Unión Europea vive con menos del 60 % de la renta media nacional. Las personas que viven por debajo de ese umbral se hallan en una situación de privación y tienen dificultades para integrarse en el plano social.

3. Las personas vulnerables son aquéllas que sufren la pobreza a largo plazo, pero también las que se enfrentan a la precariedad en el mercado laboral y a los bajos ingresos. El hecho de tener un empleo en un momento determinado no protege necesariamente contra el riesgo de exclusión social.

4. La exclusión social es un fenómeno pluridimensional cuyo principal fenómeno es el desempleo. Hay desempleados de larga duración, aquéllos para los cuales los períodos repetidos de inactividad se alternan con los períodos de trabajo mal remunerados y, por último, los trabajadores «desanimados», que no buscan trabajo porque piensan no tener ninguna posibilidad de encontrarlo.

5. Sin embargo, la exclusión social va más allá de los problemas de acceso al mercado laboral y se manifiesta a través de varias formas de discriminación. Solos o combinados, estos obstáculos impiden una plena participación de las personas en ámbitos como la educación, la sanidad, el medio ambiente, la vivienda, la cultura, el acceso a derechos o ayudas familiares, así como a la formación y a las ofertas de empleo. Evidentemente, la incidencia de estos factores varía de una persona a otra y de un Estado miembro a otro.

6. Los cambios estructurales de nuestras sociedades llevan consigo el crecimiento económico, pero también pueden fomentar la exclusión social.

7. Con la mundialización de las economías y las rápidas transformaciones tecnológicas, el mercado laboral cambia radicalmente y ofrece nuevas oportunidades a los que tienen más capacidad de adaptación, de modo que aquéllos que no están dispuestos a adquirir las competencias que requieren las nuevas tareas de la economía y el conocimiento se hallan en una situación de marginación.

8. Los conocimientos actuales se transmiten cada vez más a través de las tecnologías de la información, que es un motor esencial de la creación de empleo. La falta de cultura informática o de acceso a las competencias puede crear nuevas formas de exclusión social. Por consiguiente, el reto de la exclusión social debe consistir en un incremento de la participación activa a fin de conseguir una distribución equitativa de las oportunidades y de preparar a los ciudadanos para el cambio.

Acciones políticas en los Estados miembros

9. La lucha contra la exclusión social compete sobre todo a los Estados miembros. Sin embargo, los interlocutores sociales y las organizaciones no gubernamentales también desempeñan un papel fundamental. En el último decenio, se ha prestado cada vez más interés a la necesidad de garantizar la inclusión social. Irlanda y Portugal, por ejemplo, adoptaron programas nacionales:

Otros Estados miembros, como Francia, tratan de mejorar el impacto general de las medidas de integración social mediante una legislación marco, en la que se define la exclusión en términos de acceso a los derechos fundamentales en los ámbitos del empleo, la educación, la vivienda, la asistencia sanitaria, etc.

10. Los esfuerzos realizados han puesto de manifiesto que el empleo contribuye a resolver el problema de la exclusión, pero sólo resuelve en parte el problema. Los Estados miembros deben fomentar más la integración duradera de las personas mediante un enfoque integrado.

Contribución de los instrumentos y las políticas de la UE a la integración social

11. La estrategia europea de empleo ha contribuido de forma decisiva a la lucha contra la exclusión social centrándose en el desempleo de larga duración, el desempleo de los jóvenes y en la desigualdad de oportunidades de las mujeres y las personas con discapacidad en el mercado laboral. Las directrices para el empleo de 1999 hacen hincapié en la reintegración de los trabajadores. Las medidas previstas en dichas directrices incluyen reformas de la fiscalidad y de los sistemas de indemnización, pero también la promoción de la educación y de la formación, en particular en sectores que experimentan cambios rápidos, como las tecnologías de la información y de la comunicación.

12. Los Fondos Estructurales son el principal instrumento financiero de que dispone la Unión para intervenir directamente en favor de las regiones y las personas desfavorecidas. Están en curso algunas iniciativas comunitarias, como los programas URBAN II y LEADER+, relativos, respectivamente, a la integración urbana y a la integración rural.

13. La sociedad del conocimiento dispone del potencial necesario para favorecer la integración y la cohesión en Europa. En las comunicaciones de la Comisión relativas a las iniciativas « e-Europe: Una sociedad de la información para todos » y «Estrategias para la creación de empleo en la sociedad de la información» se hace hincapié en el hecho de que la población de Europa, en particular los jóvenes, deben poder acceder fácilmente a las nuevas competencias de base y ser capaces de utilizar las tecnologías de la información.

14. Otras medidas comunitarias contribuyen a fomentar la integración social, como los programas marco para la investigación o los centrados en la educación (Sócrates), la formación (Leonardo da Vinci), la juventud (Juventud), etc.

Apoyo de los esfuerzos de los Estados miembros dirigidos a promover la integración y la participación

15. En la reunión informal celebrada en Lisboa en febrero de 2000, los ministros de Asuntos Sociales decidieron que era fundamental que las políticas económicas y sociales de los Estados miembros favorecieran más la integración. La Unión Europea desea comprometerse políticamente en ese sentido. La intención es fomentar las formas abiertas de cooperación entre los Estados miembros en lugar de crear un pesado proceso de coordinación.

Objetivos comunes en relación con la integración social

16. Con arreglo a lo dispuesto en el Tratado de Amsterdam, la Comunidad tiene la misión de completar y apoyar las iniciativas de los Estados miembros, centrándose en las acciones que aportan realmente un valor añadido.

17. Los cambios convergentes que se están produciendo en los Estados miembros permiten pensar en la elaboración de objetivos comunes a nivel europeo, a saber:

18. Estos objetivos comunes suponen que los Estados miembros deben establecer a escala nacional unas estrategias generales y, en su caso, poner en práctica programas nacionales o una legislación marco.

19. La Comisión elabora con los Estados miembros mecanismos de evaluación comparativa de los resultados a fin de que se obtengan progresos en todos los países.

Instrumentos operativos en el marco de las nuevas disposiciones del Tratado de Amsterdam

20. Con arreglo al último párrafo del apartado 2 del artículo 137 del Tratado constitutivo de la Comunidad Europea (CE), está previsto un programa plurianual destinado a fomentar la cooperación entre los Estados miembros y a que sus políticas sean más favorables a la integración.

21. Este programa de apoyo a la cooperación utiliza los recursos humanos existentes y dispone de un presupuesto limitado. Sus actividades se centran en torno a tres apartados generales:

22. Asimismo, en el párrafo primero del apartado 2 del artículo 137 del Tratado CE se prevé un instrumento marco capaz de fomentar la integración de las personas excluidas del mercado laboral. Los principios clave de ese instrumento marco son, entre otras cosas, la necesidad de un enfoque global e integrado de la exclusión social, la necesidad de asociaciones y de medidas de coordinación y la creación de itinerarios de inserción.

See also

Para más información, consúltese el sitio web de la Dirección General de Empleo y Asuntos Sociales de la Comisión (DE) (EN) (FR).

Última modificación: 21.12.2004