Estrategia de cooperación con China (2007-2013)

La Unión Europea tiene un interés económico y político para apoyar el desarrollo sostenible de China. Para ello, la cooperación entre los socios tiene en cuenta la situación del país, tanto como actor principal del comercio mundial y de los flujos de inversiones mundiales, consumidor de recursos naturales y contribuidor al calentamiento climático, como también las necesidades de China en lo que se refiere al desarrollo social.

ACTO

Comisión Europea – Documento de stratégie pays 2007-2013 Chine (EN).

SÍNTESIS

Las relaciones de la Unión Europea (UE) y China han evolucionado hacia una asociación estratégica. Estas relaciones de cooperación, que se han desarrollado con arreglo a un Acuerdo de cooperación económica y comercial, cubren a partir de ahora un gran número de sectores, gracias a la aplicación de una asociación más fuerte.

El presente Programa de cooperación es un elemento esencial de dicha relación.

Diálogo político

Los socios persiguen profundizar en sus relaciones a través de un diálogo social regular, en particular en los ámbitos:

El diálogo político también sirve de marco para la negociación de un Acuerdo de Colaboración y Cooperación (ACC).

Prioridades de cooperación

En el ámbito comercial, la colaboración apoya la liberalización de los intercambios y los compromisos de China de acuerdo con las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC). La importancia de China en el comercio mundial es tal que el país debe demostrar su capacidad para cumplir las condiciones equitativas y justas de competencia. Del mismo modo, la UE apoya la restructuración del sector de servicios financieros, en vista del aumento de los intercambios de servicios.

La cooperación en materia de aviación civil debe contribuir a mejorar la protección y seguridad aéreas, teniendo en cuenta el rápido desarrollo del mercado aéreo y el lugar de plataforma de tránsito que constituye el país en Asia. Se ponen en marcha acciones de asistencia técnica reglamentaria, al igual que proyectos de investigación, incluido el desarrollo de transportes ecológicos.

China debe conseguir reducir el impacto social negativo de sus reformas económicas, para aumentar su cohesión social y territorial. Este esfuerzo debe traducirse en políticas regionales, de empleo y trabajo digno y de seguridad social y sanidad. De este modo, los socios pueden realizar intercambios de experiencias en ámbitos particulares, como el mercado laboral, la exclusión social y la jubilación.

De igual modo, hay que cooperar más en el sector de la educación y la formación, para que se desarrollen programas de intercambios de estudiantes y profesionales, en particular en el ámbito científico.

Por último, los socios deben aunar sus esfuerzos para luchar contra el cambio climático, el desarrollo de instrumentos jurídicos y económicos de protección del medio ambiente y la gestión sostenible de los recursos energéticos e hídricos.

Última modificación: 12.07.2011