Balance de la Política Europea de Vecindad

La Comisión examina los avances en la aplicación de la PEV globalmente y con cada socio. Dicho examen debe permitir evaluar la validez de los objetivos de la PEV y modificar, cuando sea necesario, los términos del compromiso de la Unión Europea en la región mediterránea, así como en Europa Oriental y en el Cáucaso Meridional.

ACTO

Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo y al Consejo, de 12 de mayo de 2010, denominada «Balance de la Política Europea de Vecindad» [COM(2010) 207 final – no publicada en el Diario Oficial].

SÍNTESIS

La presente Comunicación presenta un balance de los avances realizados desde la puesta en marcha de la Política Europea de Vecindad (PEV). El balance debe guiar el desarrollo de esta política en los próximos años.

Todos los socios de la PEV han sacado provecho de la cooperación establecida. Sin embargo, no todos han llevado a cabo las políticas y las legislaciones necesarias. Todavía siguen siendo necesarios algunos avances en numerosos sectores, entre los que figura la gobernanza democrática.

Refuerzo de las relaciones bilaterales de 2004 a 2009

La mayoría de los socios mediterráneos celebraron Acuerdos de Asociación (AA) para consolidar sus relaciones con la UE. Asimismo, los AA sustituyen progresivamente a los antiguos acuerdos de asociación y de cooperación celebrados con los países vecinos del Este.

Los progresos en materia de buena gobernanza son insuficientes. También se han registrado demoras en lo que respecta a los derechos humanos y al funcionamiento de los sistemas judiciales y electorales.

El Tratado de Lisboa debería ayudar a la UE a contribuir en mayor medida a la resolución de los conflictos prolongados. La UE dirige así misiones civiles de pacificación, basándose especialmente en el refuerzo de los intercambios culturales y comerciales.

Debe fomentarse la movilidad legal y regular de las personas, garantizado un control más estricto de aquellos que pudieran aprovechar la movilidad para fines delictivos. En este contexto, la UE tomó medidas para simplificar los procedimientos de los visados, hacia la liberación total del régimen de visados para las estancias de corta duración.

La instauración progresiva de las Zonas de Libre Comercio (ZLC) implica continuar con la adaptación de la legislación de los socios a la de la UE, facilitar los intercambios de bienes y servicios, fomentar el establecimiento de empresas y las inversiones extranjeras directas. La constitución de la ZLC también debe ir acompañada de un refuerzo de la protección social, de la de los consumidores y del medio ambiente.

La UE y sus socios deben reforzar su cooperación para afrontar los desafíos comunes en el ámbito del medio ambiente. La mejora de la gobernanza medioambiental, el incremento de eficiencia de los recursos y la buena utilización de los servicios del ecosistema sustentarán el desarrollo sostenible a largo plazo.

Todos los políticos implicados deben tener en cuenta el cambio climático. Hay que esforzarse por incrementar la eficiencia energética, los transportes sostenibles y por adaptar algunos sectores a la evolución de las condiciones climáticas (agricultura, agua, catástrofes naturales, etc.).

La UE pretende garantizar la eficiencia energética y la estabilidad del abastecimiento en su territorio. Para ello, fomenta el uso de energías renovables y ha firmado un protocolo de acuerdo energético con algunos países del Este. En la región mediterránea, las prioridades son el desarrollo de las interconexiones regionales y el uso de la energía solar.

Reorientación de los instrumentos financieros

La financiación de la PEV se basa en el Instrumento Europeo de Vecindad y Asociación (IEVA). Tras la revisión intermedia de los documentos de programación, las dotaciones asignadas a cada país se han adaptado mejor a las necesidades existentes, a los niveles de ambición y avance, y a la capacidad de absorción de los socios.

El mandato exterior del Banco Europeo de Inversiones (BEI) ha sido objeto de una revisión intermedia para el periodo 2007-2013. Para apoyar las inversiones vinculadas al cambio climático, la Comisión también ha propuesto asignar 2000 millones de euros adicionales, de los cuales se podrían utilizar como máximo 1000 millones en los países vecinos.

Progreso de las relaciones multilaterales

La Unión por el Mediterráneo es un nuevo marco político que pretende reforzar la asociación euro-mediterránea. Ahora bien, ya se han realizado avances, a pesar del complejo contexto político creado tras el conflicto de Gaza. Los países norteafricanos también se han beneficiado de las acciones de cooperación dirigidas en el marco de la Asociación UE-África.

La Asociación Oriental se puso en marcha en mayo de 2009 para establecer una asociación política e intensificar la integración económica entre la UE y sus socios orientales. Esta asociación se basa principalmente en las relaciones bilaterales entre la UE y cada uno de sus socios. Asimismo, se ha completado con un capítulo multilateral que pretende promover la cooperación, el diálogo político y el intercambio de experiencias y buenas prácticas.

Por último, la Sinergia del Mar Negro también ha contribuido a fomentar la cooperación regional. Se ha puesto en marcha una primera colaboración sectorial en el ámbito del medio ambiente.

Última modificación: 23.08.2010