Salud y bienestar de los jóvenes

La presente Resolución pone de relieve la importancia de promover la salud y el bienestar entre los jóvenes europeos. Entre otras cosas, alienta a los Estados miembros y a la Comisión a que emprendan medidas para integrar la política sobre salud de los jóvenes en otros ámbitos y para hacer partícipes a todas las personas interesadas en el desarrollo de iniciativas relacionadas con la salud.

ACTO

Resolución del Consejo y de los Representantes de los Gobiernos de los Estados miembros, reunidos en el seno del Consejo, de 20 de noviembre de 2008, relativa a la salud y al bienestar de los jóvenes [Diario Oficial C 319 de 13.12.2008].

SÍNTESIS

Si bien el estado de salud de los jóvenes en Europa es globalmente satisfactorio, aspectos tales como la nutrición, la actividad física, el abuso de alcohol y la salud sexual y mental siguen siendo motivo de preocupación. En este contexto, es esencial promover un modo de vida sano, adoptar medidas de prevención y tomar en consideración las cuestiones de género.

Determinados factores vinculados a las condiciones de vida pueden poner en peligro la salud y el bienestar de los jóvenes. Un entorno físico y social sano es fundamental para el desarrollo de la salud de los jóvenes. Un mayor apoyo a los padres contribuiría a lograr este objetivo.

Existen fuertes interacciones entre la salud y el bienestar de los jóvenes, y su inclusión social y nivel educativo. Por lo tanto, es importante sensibilizar a los jóvenes respecto de los efectos positivos de un modo de vida sano, y ayudarlos a hacerse más responsables de su propia salud y a aumentar su autonomía en este sentido.

Para garantizar la eficacia de una política de salud de los jóvenes, es preciso evaluar la situación y desarrollar estrategias adaptadas que tengan en cuenta las necesidades y diferencias entre los jóvenes. Dichas estrategias deben basarse en un enfoque global y transversal. La política de salud de los jóvenes debería aplicarse a escala local, regional, nacional y europea, y para su elaboración, debería contarse con la estrecha colaboración de un amplio espectro de partes interesadas.

Por todo ello, el Consejo invita a los Estados miembros a:

También se invita a la Comisión a que garantice la consideración de la dimensión de la juventud en sus iniciativas relacionadas con la salud, y a que asocie a los jóvenes y a las personas implicadas en las políticas de la juventud en todos los niveles de su actuación en este ámbito.

Por último, el Consejo invita a los Estados miembros y a la Comisión a que colaboren para:

Antecedentes

El Libro Blanco sobre la juventud de 21 de noviembre de 2001 reconocía la importancia de la salud para la autonomía, inclusión social y desarrollo de la ciudadanía activa de los jóvenes. El Pacto europeo para la juventud, adoptado en marzo de 2005, también recalcó la necesidad de integrar la dimensión de la juventud, concretamente de las cuestiones relativas a la salud de los jóvenes, en otras políticas europeas relevantes.

Última modificación: 25.02.2009