Nutrición y salud

La Resolución del Consejo sobre la salud y la nutrición pretende provocar una reflexión en profundidad, a escala nacional y también comunitaria, sobre la necesidad de desarrollar una política nutricional global y coherente de salud pública.

ACTO

Resolución del Consejo de 14 de diciembre de 2000 sobre la salud y la nutrición [Diario Oficial C 20 de 23.1.2001].

SÍNTESIS

La Resolución destaca la integración de la salud nutricional, no sólo en el programa de acción comunitario en el ámbito de la salud pública (2003-2008), sino también en las otras políticas comunitarias que afectan a la salud nutricional, como la agricultura.

Asimismo, el Consejo considera que una política de estas características en materia de salud nutricional debería implicar a todos los agentes interesados, incluidos los profesionales del sector, los consumidores, las organizaciones no gubernamentales, etc. Debería tener en cuenta también, en su caso, la formación de estos agentes.

La Resolución constata la importancia de la nutrición como un determinante importante de la salud humana. Un régimen alimenticio inadaptado constituye uno de los principales factores presentes en el origen de numerosas enfermedades, como las cardiovasculares. Fenómenos recientes como el aumento significativo de la obesidad, en particular entre los niños y adolescentes, y el cambio en los hábitos alimentarios a favor de la restauración colectiva y los alimentos precocinados tienen como única consecuencia un mayor riesgo para la salud. Habida cuenta de esta amenaza sobre la salud, de los costes sociales que representa y de la ausencia de información fiable y accesible sobre las características nutricionales, el Consejo considera que es necesaria una medida adicional a escala nacional y también comunitaria.

Desde esta perspectiva, el Consejo invita a los Estados miembros a:

• fomentar actitudes y costumbres alimentarias favorables a la salud para así desarrollar las capacidades de toda la población de elegir sensatamente en materia de consumo;
• permitir participar a todos los interlocutores interesados en la reflexión sobre la salud nutricional, así como en su fomento;
• seguir desarrollando la produción, la difusión y la aplicación de recomendaciones en materia de salud nutricional; éstas deberían basarse en un asesoramiento científico sólido;
• mejorar los conocimientos en materia de nutrición de los profesionales de la salud y de las actividades relacionadas con la alimentación y la nutrición;
• participar de forma activa en las redes de recogida de datos sobre nutrición y actividad física en la Comunidad.

En el marco del Libro Blanco sobre la seguridad alimentaria, la Comisión prevé entre otras cosas la elaboración de una política nutricional global y coherente, así como la presentación de un plan de acción que contenga orientaciones en materia de regímenes alimentarios. Además, el Consejo invita a la Comisión a:

• disponer que se tenga en cuenta la salud nutricional en la definición y en la aplicación de todas las políticas comunitarias pertinentes, y que se desarrollen intrumentos que permitan evaluar las repercusiones de las demás políticas comunitarias en la salud nutricional;
• seguir desarrollando instrumentos de vigilancia de la salud nutricional y de sus determinantes con el fin de obtener datos comparables y garantizar una evaluación periódica de esos datos; esta acción debería completar las acciones de los Estados miembros, apoyándose en particular en los instrumentos ya existentes;
• respaldar el intercambio periódico de experiencias en este ámbito;
• facilitar el desarrollo de los conocimentos científicos especializados en materia de salud nutricional que servirá de ayuda para actualizar las recommendations alimentarias nacionales y locales y la información destinada al consumidor;
• respaldar la investigación sobre los vínculos existentes entre salud y nutrición, las patologías relacionadas con la alimentación, la comprensión de los comportamientos alimentarios y las repercusiones de las políticas que se aplican en materia de salud y nutrición;
• facilitar el intercambio de información sobre las formaciones y profesiones relacionadas con la nutrición;
• desarrollar la utilización del etiquetado nutricional adaptándolo a las necesidades de los consumidores, así como de otros medios de información nutricional;
• estudiar la posibilidad de desarrollar proyectos para el fomento de regímenes alimentarios saludables;
• reflexionar sobre la utilización de las nuevas tecnologías de la información para mejorar la información de los agentes de este sector y también la de la población;
• establecer el seguimiento de las acciones relativas a la nutrición.

El Consejo subraya asimismo la necesidad de seguir cooperando con las organizaciones internacionales, como por ejemplo la Organización Mundial de la Salud (OMS), con objeto de evitar la duplicación de esfuerzos.

ACTOS CONEXOS

Propuesta de Reglamento del Parlamento Europeo y del Consejo de 16 de junio de 2003 sobre las alegaciones nutricionales y de propiedades saludables en los alimentos [COM(2003) 424 final - No publicado en el Diario Oficial].

Esta propuesta pretende establecer normas que regirán la utilización de las alegaciones nutricionales y de propiedades saludables en los productos alimenticios, incluidos los complementos alimenticios. El objetivo es garantizar una mayor información al consumidor en el etiquetado de los productos alimenticios evitando información que induzca a error o sea poco comprensible para el consumidor.

El Reglamento proporcionará seguridad jurídica y tratará estos aspectos precisando las condiciones de alegaciones nutricionales y de propiedades saludables, prohibiendo ciertas alegaciones y evaluando científicamente su uso en función del perfil nutricional de los productos alimenticios.

Última modificación: 11.04.2005