EUR-Lex Access to European Union law

Back to EUR-Lex homepage

This document is an excerpt from the EUR-Lex website

Document 52016DC0860(01)

COMUNICACIÓN DE LA COMISIÓN AL PARLAMENTO EUROPEO, AL CONSEJO, AL COMITÉ ECONÓMICO Y SOCIAL EUROPEO, AL COMITÉ DE LAS REGIONES Y AL BANCO EUROPEO DE INVERSIONES Energía limpia para todos los europeos

COM/2016/0860 final/2

Bruselas, 30.11.2016

COM(2016) 860 final

COMUNICACIÓN DE LA COMISIÓN

Energía limpia para todos los europeos


1.Introducción

La Unión de la Energía es una de las diez prioridades de la Comisión Juncker. Esta iniciativa, que se propone modernizar la economía de la UE, se suma a otras iniciativas emblemáticas como el Mercado Único Digital, la Unión de Mercados de Capitales y el Plan de Inversiones para Europa a fin de aportar respuestas en materia de empleo, crecimiento e inversiones en Europa.

El presente paquete supone una oportunidad para acelerar tanto la transición hacia una energía limpia como el crecimiento y la creación de empleo. Con la movilización de un importe adicional del 177 000 millones EUR de inversión pública y privada al año a partir de 2021, este paquete puede generar un crecimiento de hasta un 1 % del PIB en la próxima década y crear 900 000 nuevos puestos de trabajo 1 . También significa que, en 2030, por término medio, la intensidad de carbono de la economía de la UE será inferior en un 43 % a los niveles actuales 2 , y la electricidad renovable representará la mitad, aproximadamente, de la combinación de producción eléctrica de la UE 3 .

Figura 1: Modernización de la economía, papel de la Unión de la Energía y la Acción por el Clima

El Acuerdo de París, el primero en su género, no hubiera podido hacerse realidad sin la Unión Europea. Hoy hemos mostrado una vez más nuestro liderazgo, dejando claro que, unida, la Unión Europea es capaz de cumplir objetivos.Jean-Claude Juncker, con motivo de la ratificación por la UE del Acuerdo de París, el 4 de octubre de 2016

El sector de la energía es importante para la economía europea: los precios de la energía afectan a la competitividad de todos los sectores económicos y representan por término medio el 6 % del gasto anual de los hogares 4 . El sector da empleo a casi 2,2 millones de personas repartidas en 90 000 empresas en toda Europa 5 , lo que representa un 2 % del valor añadido total 6 . Tiene detrás de sí una industria manufacturera próspera que proporciona los equipos y presta los servicios necesarios, no solo en Europa, sino en el mundo entero. El desarrollo de fuentes de energía renovables y de productos y servicios de eficiencia energética ha dado lugar a la creación de empresas en toda Europa, lo que supone nuevas fuentes de empleo y crecimiento para los europeos. Las repercusiones de la Unión de la Energía en el empleo van mucho más allá del sector del suministro energético. Por ejemplo, más de un millón de trabajadores son empleados, directa o indirectamente, en sectores relacionados con las energías renovables 7 , y casi un millón en sectores relacionados con la eficiencia energética 8 .

La Unión de la Energía es el vector esencial de la UE para una transición global y exhaustiva hacia una economía hipocarbónica, y su principal contribución a este proceso. La UE negoció el acuerdo de París el pasado mes de diciembre y, gracias a su rápida ratificación por la UE, este primer acuerdo mundial sobre la mitigación del cambio climático entró en vigor cuando no había transcurrido siquiera un año, el 4 de noviembre de 2016. El Acuerdo de París establece una hoja de ruta clara y ambiciosa para la inversión en la innovación hipocarbónica. La prioridad ahora consiste en aplicar los compromisos ambiciosos de París sobre el cambio climático y depende en gran medida del éxito de la transición hacia un sistema energético limpio, dado que dos tercios de las emisiones de gases de efecto invernadero se derivan de la producción y el uso de energía.

Asimismo, es importante velar por que la transición hacia un sistema energético limpio beneficie a todos los europeos. Todos los consumidores (sin olvidar a las personas vulnerables y en situación de pobreza energética) deben sentirse implicados y aprovechar los beneficios patentes del acceso a una energía más segura, limpia y competitiva, que son los objetivos principales de la Unión de la Energía. La Comisión ya ha presentado la Estrategia Marco para una Unión de la Energía 9 , propuestas sobre la seguridad del suministro de gas 10 , el régimen de comercio de derechos de emisión de la UE 11 y las normas correspondientes sobre el reparto del esfuerzo 12 , el uso de la tierra y la silvicultura 13 , así como la estrategia a favor de la movilidad de bajas emisiones 14 .

Tal como anunció en su programa de trabajo para 2017 15 , la Comisión presenta hoy propuestas reglamentarias y medidas de facilitación para modernizar la economía e impulsar las inversiones en los sectores relacionados con la energía limpia.

Las propuestas reglamentarias y las medidas de facilitación presentadas en el paquete pretenden acelerar, transformar y consolidar la transición de la economía de la UE hacia una energía limpia, lo que permitirá generar empleo y crecimiento en nuevos sectores económicos y nuevos modelos empresariales.

Las propuestas legislativas se refieren a la eficiencia energética, las energías renovables, la configuración del mercado de la electricidad, la seguridad del suministro y las normas de gobernanza de la Unión de la Energía.

El paquete presentado persigue tres objetivos principales:

Anteponer la eficiencia energética

Lograr el liderazgo mundial en materia de energías renovables

Ofrecer un trato justo a los consumidores

Las acciones facilitadoras incluyen iniciativas para acelerar la innovación en energía limpia y renovar los edificios de Europa, así como medidas para alentar la inversión pública y privada y sacar el mayor partido posible del presupuesto de la UE disponible; promover las iniciativas del sector para fomentar la competitividad; mitigar el impacto social de la transición hacia una energía limpia; implicar a muchos agentes (por un lado, las autoridades nacionales, locales y municipales y, por otro, las empresas, los interlocutores sociales y los inversores) y aprovechar al máximo el liderazgo europeo en tecnologías y servicios energéticos limpios para ayudar a los terceros países a alcanzar sus objetivos estratégicos.

Estas propuestas deben examinarse en el contexto de una UE que abre camino hacia una energía más limpia y más inteligente para todos, a fin de aplicar el Acuerdo de París, impulsar el crecimiento económico, estimular el liderazgo en inversiones y tecnologías, crear nuevas oportunidades de empleo y aumentar el bienestar de los ciudadanos.

Para alcanzar los objetivos de la UE sobre clima y energía de 2030, se necesitarán inversiones anuales por un valor aproximado de 379 000 millones EUR en el período 2020-2030 16 : principalmente en eficiencia energética, fuentes de energía renovables e infraestructuras. Las empresas de la UE deben estar a la vanguardia de esas inversiones. En este contexto, mucho dependerá de su capacidad de innovación. Con 27 000 millones EUR anuales destinados a la investigación pública y privada, al desarrollo y a la innovación en ámbitos relacionados con la Unión de la Energía 17 , la UE está bien situada para que esta transición se convierta en una oportunidad concreta para la industria y la economía.

Gracias a las políticas propuestas hoy por la Comisión, la producción industrial podría aumentar hasta un 5 % en el sector de la construcción y hasta el 3,8 % y el 3,5 % en los sectores de la ingeniería y de la siderurgia, respectivamente, lo cual se traduciría en 700 000 empleos adicionales en la construcción, 230 000 en el sector de la ingeniería y 27 000 en el de la siderurgia 18 .

2.Anteponer la eficiencia energética

La eficiencia energética es la fuente de energía más universalmente disponible. Anteponer la eficiencia energética es admitir que la fuente de energía más barata y más limpia es la energía que no necesita ser producida o utilizada. Para ello, debe velarse por que la eficiencia energética se tenga en cuenta en todo el sistema energético, es decir, conseguir una gestión activa de la demanda que permita optimizar el consumo de energía, reducir los costes para los consumidores y la dependencia de las importaciones, y, a su vez, considerar que la inversión en infraestructuras de eficiencia energética constituye una vía rentable hacia una economía circular e hipocarbónica. De este modo será posible retirar del mercado el exceso de capacidad de producción, especialmente de combustibles fósiles.

La Comisión ha revisado el objetivo de eficiencia energética de la UE, de acuerdo con la petición del Consejo Europeo de octubre de 2014, y considera que la UE debe establecer un objetivo vinculante a escala de la UE de un 30 % de aquí a 2030. En comparación con el objetivo de al menos un 27 % acordado en 2014, se espera que este aumento se traduzca en un aumento del PIB de hasta 70 000 millones EUR y en la creación de más de 400 000 puestos de trabajo, así como en una nueva reducción de la factura de la importación de combustibles fósiles 19 . El objetivo reforzado también permitirá a la UE alcanzar los objetivos para 2030 en materia de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y de energías renovables.

La Comisión propone que se prorroguen más allá de 2020 las obligaciones de ahorro energético establecidas en la Directiva relativa a la eficiencia energética 20 , por las que los suministradores y distribuidores de energía han de ahorrar un 1,5 % de energía al año. Esta medida ha surtido los primeros efectos al atraer la inversión privada y favorecer la aparición de nuevos agentes en el mercado, como los prestadores de servicios energéticos, incluidos los agregadores; por consiguiente, debería seguir impulsando esta dinámica más allá de 2020. La nueva configuración del mercado de la energía contribuirá a crear unas condiciones de competencia equitativas para la participación de la demanda en el mercado.

Los edificios representan un 40 % del consumo total de energía y cerca de un 75 % de ellos son ineficientes desde el punto de vista energético 21 . La eficiencia energética de los edificios sufre una falta de inversión y está expuesta a numerosos obstáculos. Si bien es cierto que los edificios son objeto de mantenimiento y de mejoras con carácter periódico, las inversiones en ahorro energético suelen ser desatendidas debido a la escasez de capital, la ausencia de información fiable, la falta de trabajadores cualificados o dudas sobre los posibles beneficios. Con la tasa de renovación actual de los edificios, del 1 % anual aproximadamente, se necesitaría un siglo para adaptar el parque de edificios a un consumo de energía moderno, casi nulo 22 . Los edificios de energía limpia representan mucho más que un ahorro de energía: aumentan la comodidad y la calidad de vida, permiten integrar las energías renovables, el almacenamiento y las tecnologías digitales, y conectar los edificios con el sistema de transporte. La inversión en un parque inmobiliario de energía limpia puede servir de acicate para la transición hacia una economía hipocarbónica.

El aumento de las inversiones en los edificios públicos, como los hospitales, las escuelas y las oficinas, también depende de la disponibilidad de financiación privada y de empresas de servicios energéticos privadas que ofrezcan mecanismos innovadores, como los contratos de rendimiento energético. El ahorro energético puede tener asimismo un efecto positivo en los presupuestos públicos, dado que cada año se gastan unos mil millones EUR en energía en esos edificios públicos. Sin embargo, las normas de inversión del sector público y de tratamiento estadístico de la renovación de activos deben ser transparentes y claras para facilitar las inversiones en eficiencia energética en los activos públicos. La Comisión está analizando, en estrecha cooperación con los Estados miembros, el impacto de las normas de contabilidad pública en el mercado de los contratos de rendimiento energético y actualizará sus orientaciones sobre el tratamiento estadístico de ese tipo de asociaciones antes de finales de la primavera de 2017.

La modificación de la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios 23 acelerará las tasas de renovación de los edificios al reforzar las disposiciones en materia de estrategias de renovación de edificios a largo plazo, con el fin de descarbonizar el parque inmobiliario a mediados de siglo. La propuesta también mejorará la información a disposición de los promotores de proyectos y de los inversores gracias al refuerzo del papel de los certificados de eficiencia energética, a la difusión de información sobre el consumo energético de los edificios públicos y a la vinculación entre la intensidad del apoyo público y el nivel del ahorro energético alcanzado. La propuesta hace un llamamiento a los Estados miembros para que centren asimismo sus inversiones en las personas en situación de pobreza energética, ya que la eficiencia energética es una de las mejores maneras de tratar las causas profundas de la pobreza energética.

Para respaldar el cumplimiento de la estrategia de movilidad de bajas emisiones de la UE y el uso creciente de la electricidad en el transporte, la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios requerirá la instalación de puntos de recarga eléctrica. Para los edificios existentes, esa disposición solo se aplicará a los edificios comerciales con más de diez plazas de aparcamiento a partir de 2025. Para los edificios nuevos o los edificios sujetos a una renovación de fondo, la disposición se aplicará a los edificios residenciales de más de diez plazas de aparcamiento, que tendrán la obligación de instalar el precableado, y a los edificios comerciales de más de diez plazas de aparcamiento, que tendrán la obligación de instalar puntos de recarga. Las pymes y las autoridades públicas podrán quedar al margen de esta medida (en el caso de estas últimas, porque ya están sujetas a la Directiva sobre combustibles alternativos), en la medida en que sus puntos de recarga sean de acceso público. Para mejorar la eficiencia del transporte y fomentar soluciones de movilidad digitales, este paquete presenta asimismo una estrategia de despliegue de sistemas de transporte inteligentes cooperativos 24 .

Para acelerar la renovación de los edificios y apoyar la transición hacia un parque inmobiliario de energía limpia, la Comisión va a lanzar una iniciativa europea sobre edificios (anexo I) con un componente de «financiación inteligente para edificios inteligentes». Esta nueva iniciativa, en estrecha cooperación con el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y los Estados miembros, puede liberar 10 000 millones EUR adicionales de fondos públicos y privados hasta 2020 para la eficiencia energética y las energías renovables en los edificios, contribuir a desarrollar una reserva de proyectos a gran escala financiables y crear una plataforma de eficiencia energética en cada Estado miembro. La iniciativa también se propone aumentar la confianza en el mercado de los edificios de energía limpia, poniendo a disposición de los inversores y demás partes interesadas datos técnicos y financieros sobre el rendimiento de más de 7 000 proyectos europeos sobre eficiencia energética en la industria y los edificios, y colaborando con el sector financiero en torno a un marco de consenso para suscribir inversiones en edificios de energía limpia, a fin de conseguir una financiación de mercado más específica y normalizada para este tipo de proyectos. Con ello se aportarán mejoras importantes a las condiciones de vida y de trabajo, beneficios en materia de clima y ahorro de energía, así como empleo e inversión. La iniciativa europea sobre edificios da un impulso al sector europeo de la construcción, que se enfrenta a una serie de retos económicos y sociales. La eficiencia energética de los edificios puede convertirse en uno de los motores de la modernización del sector y de su mano de obra.

Los sectores con gran consumo de energía (la siderurgia, el automóvil) deberán mantener sus esfuerzos para mejorar la eficiencia energética. Esas inversiones suelen verse compensadas por la reducción de los costes de la energía. Nuevos sectores, como el de la defensa, disponen de más posibilidades de eficiencia energética (aún sin explotar), por lo que el ahorro de costes tendrá una repercusión directa positiva en los presupuestos públicos.

El diseño ecológico y el etiquetado energético seguirán desempeñando un papel importante para que los consumidores ahorren energía y recursos y la industria europea consiga oportunidades comerciales. Tras un examen minucioso, la Comisión decidió centrar la atención en los productos con mayor potencial de ahorro desde el punto de vista de la energía y la economía circular.

La Comisión está adoptando un paquete que consta del plan de trabajo sobre diseño ecológico 2016-2019 y de una serie de medidas específicas por producto 25 . El plan de trabajo sobre diseño ecológico expone las prioridades de la Comisión para los próximos tres años, incluidos una revisión de las medidas específicas por producto para adaptarlas a la evolución tecnológica y el estudio de nuevos productos con miras a la posibilidad de adoptar normas que permitan aprovechar todo su potencial. En conjunto, todas las medidas establecidas en el plan de trabajo sobre diseño ecológico podrían dar lugar a un total de más de 600 TWh anuales de ahorro de energía primaria en 2030, lo cual equivale al consumo anual de energía primaria en un Estado miembro de tamaño medio. Todo ello permitirá a Europa mantener su liderazgo mundial en materia de normas de eficiencia de los productos y seguirá ofreciendo ventajas económicas y ambientales tanto a los consumidores como a las empresas.

3.Lograr el liderazgo mundial en materia de energías renovables

El sector de las energías renovables en Europa da empleo a más de 1 100 000 personas 26 , y Europa sigue siendo el líder mundial de la energía eólica. El 43 % de todas las turbinas eólicas instaladas en el mundo son fabricadas por unos cuantos grandes constructores europeos. Las reducciones de costes en las tecnologías eólicas y solares se han conseguido gracias a unas políticas ambiciosas de la UE, que han abaratado el coste y facilitado el acceso a las energías renovables para el mundo entero. Aunque Europa ha perdido su papel de líder en la producción de paneles y módulos solares y debe importarlos, la mayor parte del valor añadido de la instalación de un panel solar (> 85 %) se genera en Europa 27 .

Los mayores empleadores europeos en el sector de las energías renovables son los sectores de la energía eólica, la energía solar fotovoltaica y la biomasa sólida. Sin embargo, el sector fotovoltaico ha registrado pérdidas de empleo: en este sector, el empleo en 2014 apenas superó un tercio de los niveles de 2011, como consecuencia de la pérdida de capacidad de fabricación en el sector 28 . El sector de la energía eólica representó la mayoría de los puestos de trabajo de la UE en energías renovables. En el período comprendido entre 2005 y 2013, el volumen de negocios del sector de la energía eólica en Europa se multiplicó por ocho, con unos ingresos en la UE estimados en alrededor de 48 000 millones EUR 29 . En el mismo período, el empleo en el sector de la energía eólica de la UE se multiplicó por cinco, con un número total correspondiente de empleos de 320 000 aproximadamente en 2014 30 . La Comisión también participará en las iniciativas lideradas por la industria cuyo objetivo sea apoyar el papel de la UE como líder mundial en energías renovables y en tecnologías limpias en general.

El Consejo Europeo estableció un objetivo de al menos un 27 % para la cuota de energías renovables consumida en la UE en 2030. Este objetivo mínimo es vinculante para la UE, pero no se traducirá en objetivos nacionales vinculantes. En lugar de ello, los Estados miembros se comprometerán a través de los planes nacionales integrados de energía y clima 31 que forman parte de la propuesta de gobernanza a lograr de forma colectiva el objetivo de la UE. La presión de los homólogos, ejercida a través de las consultas regionales sobre los planes y la posibilidad de que la Comisión formule recomendaciones, junto con el marco político general establecido por los demás actos legislativos de este paquete, debería alentar a los Estados miembros a adoptar unos compromisos ambiciosos, que no permitan el oportunismo. Si la Comisión observara que se está produciendo una brecha, tanto en la ambición como en los niveles de ejecución, especialmente en materia de energías renovables y eficiencia energética, podrá tomar las medidas necesarias para evitar o colmar esa brecha emergente. El nivel del objetivo se revisará de ahora en adelante en función de los compromisos internacionales de la UE.

El crecimiento de las energías renovables debería verse impulsado por las tecnologías más innovadoras, que permiten obtener importantes ahorros en gases de efecto invernadero. Las previsiones del mercado mundial de soluciones basadas en energías renovables, según los objetivos a largo plazo de descarbonización, apuntan a unos 6,8 billones EUR para el período 2014-2035 32 , con un alto potencial de crecimiento especialmente fuera de Europa. En los últimos años, las inversiones en activos de producción de energías renovables representaron más del 85 % de las inversiones en producción, la mayoría de ellas en instalaciones de baja tensión, especialmente en redes de distribución. Las nuevas propuestas pretenden reforzar esa tendencia, por ejemplo suprimiendo los obstáculos a la autogeneración.

La Directiva sobre las fuentes de energía renovables 33 , junto con las propuestas sobre la nueva configuración del mercado de la electricidad 34 , establecerá un marco reglamentario que permitirá establecer unas condiciones equitativas para todas las tecnologías sin menoscabo de nuestros objetivos en materia de clima y energía. La electricidad desempeñará un papel fundamental en la transición hacia un sistema de energía limpia. La cuota de la electricidad renovable ha aumentado al 29 % de la producción de electricidad y alcanzará aproximadamente la mitad de la combinación de producción eléctrica de la UE, principalmente a partir de fuentes variables como la energía eólica o solar. Una buena parte de esa producción estará conectada de forma descentralizada en el nivel de la distribución. Las normas del mercado deben adaptarse para facilitar esa evolución, gestionar la variabilidad y garantizar la seguridad del suministro eléctrico. Por consiguiente, el nuevo marco reglamentario deberá garantizar no solo que las energías renovables puedan participar plenamente en el mercado de la electricidad, sino también que las disposiciones correspondientes no discriminen a las energías renovables.

Para adaptar mejor la cuota creciente de las energías renovables (que suelen ser muy variables), los mercados mayoristas deben seguir desarrollando y, sobre todo, deben fijar normas adecuadas que permitan la negociación a más corto plazo para reflejar las exigencias de la producción variable. Al permitir una negociación más próxima al momento de la entrega, unos mercados eléctricos a corto plazo bien integrados recompensarán la flexibilidad en el mercado tanto en la producción como en la demanda o el almacenamiento. Además, las normas del mercado se adaptarán para permitir que los productores de energías renovables participen plenamente y obtengan ingresos en todos los segmentos del mercado, incluidos los mercados de servicios de sistema.

La prioridad de despacho seguirá vigente para las instalaciones existentes, las instalaciones de energías renovables a pequeña escala y los proyectos de demostración. Otras instalaciones, independientemente de la tecnología aplicada, estarán sujetas a las normas de acceso no discriminatorio de terceros. Además, las restricciones de energías renovables deben reducirse al mínimo estrictamente necesario.

Estas nuevas normas permitirán a los productores de electricidad renovable obtener una parte más elevada de sus ingresos en el mercado. Sin embargo, los ingresos del mercado no podrán cubrir totalmente el elevado gasto de capital de las energías renovables, especialmente de las nuevas tecnologías emergentes. Los inversores necesitan previsibilidad en las políticas. Por lo tanto, la Directiva sobre energías renovables establece los principios que se aplicarán al apoyo a las energías renovables después de 2020, para garantizar que las subvenciones que resulten necesarias sean rentables y reduzcan al mínimo los falseamientos del mercado.

El éxito de la integración de las energías renovables también seguirá exigiendo unas infraestructuras sólidas de transporte y distribución y una red europea bien interconectada. Europa dispone de la red eléctrica más segura del mundo, pero se requerirán inversiones importantes hasta el año 2030. La Comisión colabora estrechamente con los Estados miembros en el contexto regional (Plan de interconexión del mercado báltico de la energía, Grupo sobre Conectividad del Gas en Europa Central y Sudoriental, Europa sudoccidental y mares septentrionales) para facilitar el desarrollo de infraestructuras clave. También ha creado un grupo de expertos encargado de asesorar sobre la formulación y el logro de los objetivos de interconexión para 2030.

El potencial de la calefacción y la refrigeración para contribuir al objetivo global en materia de energías renovables ha sido infrautilizado. La estrategia relativa a la calefacción y la refrigeración 35 expone el planteamiento general. Las propuestas actuales animarán a los Estados miembros a incrementar su cuota de energías renovables en la calefacción y la refrigeración, y a los operadores urbanos de calefacción y refrigeración a abrir su red a la competencia y a fomentar la incorporación de las bombas de calor, por ejemplo.

La bioenergía representa una parte importante de nuestra combinación de energías renovables y esta situación se mantendrá en el futuro. Esta energía aporta empleo y desarrollo económico en las zonas rurales, sustituye los combustibles fósiles y contribuye a la seguridad energética.

El desarrollo de combustibles alternativos avanzados para el transporte se fomentará imponiendo una obligación de a los suministradores de combustibles, mientras que los biocombustibles producidos a partir de cultivos alimentarios reducirán progresivamente su contribución a los objetivos de la UE en materia de energías renovables. Apoyar la electrificación del transporte es otro de los objetivos clave del marco que regula el mercado de la electricidad, y se verá reforzado por disposiciones sobre los mercados minoristas de electricidad.

La biomasa sólida que se viene utilizando para producir calor y electricidad en la UE es principalmente local y regional y se basa en subproductos de la industria forestal; en general, con los niveles actuales, es un sector respetuoso con el clima. No obstante, se teme que puedan deteriorarse los efectos para el clima si los niveles de uso siguen aumentando. Garantizar beneficios climáticos a largo plazo requerirá, en particular, limitar las presiones adicionales sobre los bosques.

Son necesarias mayores sinergias entre la economía circular y los distintos usos de la biomasa, sobre todo si se tiene en cuenta que la madera puede utilizarse para una amplia gama de productos con un valor añadido que rebasa el de la energía. Para fomentar al máximo esas sinergias, solo debe recibir apoyo público la conversión eficiente de la biomasa en energía, ya sea en forma de ayuda financiera o de un acceso preferente a la red, excepto por razones debidamente justificadas de seguridad del suministro de electricidad.

Hoy en día, la mayor parte de la biomasa utilizada para producir calor y electricidad procede de los bosques. En toda la UE, y más allá de sus fronteras, existe una gran variedad de bosques y de prácticas de gestión forestal. Los Estados miembros de la UE han desarrollado normativas nacionales para la gestión sostenible de los bosques y cooperan, por ejemplo en el marco del proceso «Forest Europe». Varios Estados miembros que exportan grandes cantidades de biomasa para energía también han creado regímenes de sostenibilidad específicos para la biomasa. La propuesta de la Comisión les permitirá mantenerlos. Asimismo, la Comisión Europea seguirá apoyando la movilización sostenible de la madera mediante la política de desarrollo rural de la UE. Estos niveles de acción complementan el apoyo a las prácticas sostenibles de gestión forestal.

Por consiguiente, la Comisión propone ampliar los criterios de sostenibilidad de la UE para cubrir todos los tipos de bioenergía. Se propone un nuevo enfoque para la biomasa forestal, que se basa en la legislación existente sobre gestión forestal sostenible y en una contabilidad adecuada de las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes del uso de la tierra y del sector forestal en el país de origen de la biomasa. La evolución en la producción y el uso de la biomasa será controlada y reexaminada por medio de la gobernanza de la Unión de la Energía.

4.Ofrecer un trato justo a los consumidores

Los consumidores son un pilar fundamental de la Unión de la Energía. La energía es un bien esencial, imprescindible para participar plenamente en la sociedad moderna.

La transición hacia una energía limpia también tiene que ser equitativa para los sectores, las regiones o las partes más vulnerables de la sociedad que se verán afectados por ella.

La Comisión propone reformar el mercado de la energía a fin de capacitar a los consumidores y permitirles controlar mejor sus opciones en el ámbito de la energía. Para las empresas, esto se traduce en una mayor competitividad. Para los ciudadanos, significa una información de mayor calidad, posibilidades de desempeñar un papel más activo en el mercado de la energía y un mayor control de sus costes energéticos.

El primer paso para situar a los consumidores en el centro de la Unión de la Energía es facilitarles más información sobre su consumo de energía y sus costes. Las propuestas permitirán a los consumidores disponer de contadores inteligentes, facturas claras y mayor facilidad para cambiar de proveedor. Las propuestas también abaratarán el cambio de proveedor, ya que se eliminarán las tasas por rescisión de contrato. Unas herramientas de comparación certificadas proporcionarán a los consumidores una información fiable sobre las ofertas disponibles. Las propuestas establecerán unos certificados de eficiencia energética más fiables, con un indicador de «inteligencia».

Como parte de este paquete, la Comisión está aumentando la transparencia con su segundo informe bienal sobre los costes y precios de la energía 36 . El coste de la energía incide en nuestra elección de combinación energética, el gasto de los hogares y la competitividad de Europa. Con una dependencia de las importaciones del 74 %, la UE sigue estando expuesta a la volatilidad de los precios de los combustibles fósiles, que se fijan a escala mundial. En los últimos años, la situación mundial ha reducido la «factura de las importaciones de energía» de la UE en un 35 % y ha estimulado el crecimiento económico. Los precios de la electricidad al por mayor están en su nivel más bajo de los últimos doce años, los precios del gas han bajado un 50 % desde 2013 y los del petróleo casi un 60 % desde 2014. Las diferencias de precios se han reducido en comparación con otras economías mundiales.

En los precios para los consumidores domésticos las tendencias son distintas. La disminución de los precios de la energía se ve contrarrestada por el aumento de los costes de red y por los impuestos y gravámenes, ya que la energía suele utilizarse como base impositiva, habida cuenta de la necesidad acuciante de recaudar ingresos públicos. Los precios de la electricidad al por menor han aumentado un 3 % al año aproximadamente desde 2008, y los precios del gas al por menor, un 2 %. Como consecuencia de ello, los costes de la energía han aumentado ligeramente y representan casi el 6 % del gasto de los hogares.

Los cambios normativos introducidos por el paquete actual y la transición de la producción convencional centralizada a unos mercados interconectados, inteligentes y descentralizados harán más fácil para los consumidores producir su propia energía, almacenarla, compartirla, consumirla o venderla en el mercado, directamente o a través de cooperativas de energía. Los consumidores podrán ofrecer una respuesta de la demanda, directamente o a través de agregadores de energía. Las nuevas tecnologías inteligentes permitirán a los consumidores, si así lo desean, controlar y gestionar de forma activa su consumo de energía, aumentando al mismo tiempo su comodidad. Estos cambios facilitarán la participación activa de los hogares y de las empresas en el sistema energético, y les permitirá responder a las señales de los precios. Para ello será preciso suprimir los límites de precios al por mayor y al por menor, y garantizar una protección plena y adecuada de los consumidores domésticos vulnerables. Las nuevas propuestas normativas también crearán oportunidades para que las empresas nuevas e innovadoras ofrezcan a los consumidores más servicios y de mayor calidad. Con ello se facilitará la innovación y la digitalización, y se ayudará a las empresas europeas a lograr la eficiencia energética y unas tecnologías hipocarbónicas.

La pobreza energética es un problema importante en toda la UE, y tiene sus raíces en el bajo nivel de ingresos y en la ineficiencia energética de las viviendas. En 2014, los hogares con los ingresos más bajos de la UE dedicaron casi un 9 % de su gasto total a la energía 37 . Se trata de un aumento del 50 % con respecto a la situación de hace diez años, y mucho mayor que el de un hogar medio. Este paquete propone un nuevo enfoque para proteger a los consumidores vulnerables, lo cual pasa también por ayudar a los Estados miembros a reducir el coste de la energía para los consumidores mediante el apoyo a las inversiones en eficiencia energética. Las propuestas de eficiencia energética de la Comisión instan a los Estados miembros a que tengan en cuenta la pobreza energética, exigiendo la aplicación de una parte de las medidas de eficiencia energética con carácter prioritario en los hogares afectados por la pobreza energética y en las viviendas sociales. Sus estrategias de renovación de edificios a largo plazo también deberían contribuir a mitigar la pobreza energética. Asimismo, como parte del proceso de gobernanza de la Unión de la Energía, los Estados miembros deberán hacer un seguimiento de la pobreza energética e informar al respecto, mientras que la Comisión facilitará el intercambio de mejores prácticas. Además, en consonancia con sus esfuerzos para capacitar y proteger a los consumidores, la Comisión propone determinadas garantías procesales antes de que pueda cortarse el suministro a un consumidor. La Comisión también está creando un Observatorio de la Pobreza Energética para disponer de unos datos más fiables sobre este problema y sus soluciones, y para ayudar a los Estados miembros en sus esfuerzos por luchar contra ello.

5.Medidas de facilitación

La UE ya está tomando un buen número de medidas para apoyar la transición hacia una energía limpia y concretar las tres prioridades clave: anteponer la eficiencia energética, hacer de la UE un líder mundial en materia de energías renovables y dar un trato justo a los consumidores. Pero queda mucho por hacer.

En parte, esto significa que debe adaptarse el marco normativo de la UE para después de 2020, es decir, actualizar las propuestas sobre la configuración del mercado, la eficiencia energética, las energías renovables y la gobernanza, que complementan las iniciativas que ya ha presentado la Comisión en materia de acción por el clima y de movilidad de bajas emisiones 38 .

La UE también debe facilitar la transición hacia una energía limpia mediante otros instrumentos disponibles, en particular haciendo uso de una amplia gama de políticas de la UE: control efectivo de la aplicación de la normativa de la UE, utilización eficaz y coherente de su financiación y fomento de las asociaciones con las partes interesadas.

La transición hacia una energía limpia solo será posible si se consigue movilizar a las múltiples partes interesadas de la sociedad civil y de los niveles regional y local. Las ciudades, las regiones, las empresas, los interlocutores sociales y otras partes interesadas deben participar de forma activa en el debate sobre la transición energética, sobre todo en el contexto de los planes integrados de clima y energía, para que estos respondan adecuadamente a las necesidades de los distintos territorios.

Las acciones necesarias evolucionarán con el tiempo. En el marco del informe anual sobre el estado de la Unión de la Energía, la Comisión informará sobre la aplicación de las medidas para impulsar la transición energética, que se presentarán junto con este paquete, y añadirá nuevas medidas si procede.

Para estimular la competitividad europea y el despliegue de tecnologías energéticas limpias, la Comisión presenta, en el marco de este paquete, una iniciativa para acelerar la innovación en materia de energía limpia 39 . Esa iniciativa establece una serie de medidas concretas a fin de mejorar el entorno reglamentario, económico y de inversión para la innovación en tecnologías y sistemas de energía limpia. Partiendo del Plan Estratégico Europeo de Tecnología Energética (EETE) y de la labor en curso sobre el Programa estratégico de investigación e innovación para el transporte (STRIA, por sus siglas en inglés), la iniciativa incluye asimismo un número limitado de prioridades orientadas a la integración de la investigación, la innovación y la competitividad para apoyar los objetivos estratégicos de este paquete. Esta mayor priorización contribuirá a reorientar una parte significativa de los recursos de Horizonte 2020 (al menos 2 000 millones EUR) y a orientar el apoyo público y las inversiones privadas en toda la UE. Además, la Comisión pondrá a prueba un nuevo enfoque de financiación para apoyar la innovación de alto riesgo y gran repercusión en el ámbito de la energía limpia y ampliar las actividades del Instituto Europeo de Innovación y Tecnología, especialmente de las Comunidades de Conocimiento e Innovación (CCI) pertinentes, a fin de fomentar el espíritu empresarial y la asimilación por el mercado de soluciones hipocarbónicas innovadoras y eficientes desde el punto de vista energético.

Para crear crecimiento y empleo, la industria de la UE ha de liderar la transición hacia la energía limpia. La Comisión apoyará las iniciativas impulsadas por el sector para fomentar el liderazgo mundial de la UE en energía limpia y en soluciones tecnológicas hipocarbónicas. El objetivo de esas iniciativas deberá ser reforzar los vínculos industriales en toda la cadena de valor e integrar a los agentes no económicos, como los interlocutores sociales y las organizaciones de consumidores. La Comisión estudiará asimismo con las partes interesadas la necesidad de crear un «foro sectorial sobre energía limpia» que podría reunir diferentes elementos (energía, transporte, fabricación, digitalización, etc.) y debatir de forma colectiva sobre cómo optimizar los beneficios de la transición hacia una energía limpia para el sector en la UE y fomentar tanto nuestra competitividad a escala mundial como la colaboración internacional.

Los Estados miembros también deben abordar la repercusión social, competencial y sectorial de dicha transición, y reflejar esa repercusión en sus planes nacionales de energía y clima. La Comisión analizará la mejor manera de apoyar la transición en las regiones con gran intensidad de carbón y de carbono. Para ello, trabajará en asociación con los agentes de esas regiones, proporcionará orientaciones, en particular para el acceso a los fondos y programas de la UE y su utilización, y fomentará el intercambio de buenas prácticas, con debates sobre las hojas de ruta sectoriales y las necesidades de reciclaje, a través de plataformas específicas.

En general, la Comisión creará plataformas para los sectores y sus trabajadores a fin de adaptar las capacidades a las necesidades de la transición hacia una energía limpia. Con la experiencia de los primeros proyectos piloto de la Agenda de Capacidades para Europa 40 en los sectores del automóvil y de la tecnología marítima, la Comisión desplegará en 2017 nuevos planes de cooperación sectorial sobre capacidades en el ámbito de las energías renovables y el sector de la construcción, con especial atención a las tecnologías hipocarbónicas.

Este paquete refuerza asimismo la acción de la UE para eliminar las subvenciones ineficientes a los combustibles fósiles, en consonancia con los compromisos internacionales suscritos en el G7 y el G20, y en el Acuerdo de París. El apoyo público restante (aún importante) al petróleo, al carbón y a otros combustibles intensivos en carbono sigue falseando el mercado de la energía, genera ineficiencia económica e inhibe la inversión en la transición hacia una energía limpia y en innovación. La reforma de la configuración del mercado elimina la prioridad de despacho de carbón, de gas y de turba y limitará la necesidad de mecanismos de capacidad que solían depender del carbón. La Comisión procederá asimismo a un seguimiento periódico de las subvenciones a los combustibles fósiles en la UE y espera que los Estados miembros utilicen sus planes en materia de energía y clima para supervisar la eliminación progresiva de las subvenciones a los combustibles fósiles. La Comisión llevará a cabo una evaluación REFIT del marco europeo de la fiscalidad de la energía para definir los próximos pasos, en el contexto de los esfuerzos para eliminar las subvenciones a los combustibles fósiles.

La política exterior y la política de cooperación al desarrollo de la UE son herramientas importantes para apoyar la transición hacia una energía limpia en todo el mundo y ayudar en este proceso a nuestros socios de los países vecinos y de los países en desarrollo 41 .

La UE está reforzando la cooperación en materia de eficiencia energética con los países de los Balcanes Occidentales, Turquía y los países vecinos meridionales y orientales. Ya se han iniciado los cuatro primeros proyectos piloto para intensificar las inversiones en eficiencia energética en el sector de la construcción, y posiblemente se extiendan en 2017 a una gama más amplia de países socios. La Unión Europea reforzará asimismo la financiación de la eficiencia energética de los edificios en los instrumentos de financiación pertinentes de la política de vecindad y preadhesión.

África es un socio privilegiado de la UE y la Asociación África-UE para la Energía ofrece el marco de cooperación conjunta en el ámbito de la energía. La UE también respalda la Iniciativa africana en materia de energía renovable.

Las empresas europeas pueden aprovechar estas oportunidades para ofrecer su excelencia en exportación e inversión en eficiencia energética y energías renovables en unos mercados mundiales abiertos a la competencia. La UE se propone celebrar un Acuerdo sobre Bienes Ambientales ambicioso bajo los auspicios de la Organización Mundial del Comercio y, en sus acuerdos comerciales bilaterales, sigue avanzando hacia la liberalización de los bienes y servicios ambientales y la facilitación del comercio y la inversión en la producción de energías renovables.

En el anexo II, «Impulsar la transición hacia una energía limpia», se hace hincapié en algunos de los ámbitos en los que pueden reforzarse o reorientarse las medidas concretas a corto plazo y aumentarse las sinergias para apoyar el empleo, el crecimiento y la inversión en Europa. Esto también debería ayudar a los Estados miembros a cumplir sus compromisos sobre energía y clima para 2020 y permitirles ser ambiciosos en sus compromisos al fijar de forma rentable sus objetivos para 2030 y, al mismo tiempo, alentar a otros agentes públicos y privados a participar con más ímpetu en la transición hacia una energía limpia.

6.Conclusiones

El Parlamento y el Consejo deben tratar con carácter prioritario todas las propuestas legislativas relacionadas con la Unión de la Energía presentadas por la Comisión en 2015 y 2016. Así lo subrayó el Consejo Europeo en marzo de 2016 y el Parlamento Europeo mostró su apoyo. Los avances registrados se examinarán en el Consejo Europeo de la primavera de 2017.

El Parlamento Europeo y el Consejo deben mantener la coherencia global del paquete y las propuestas previas de la Comisión, en ámbitos como el régimen de comercio de derechos de emisión, el reparto del esfuerzo, el uso de la tierra y la movilidad de bajas emisiones.

(1)

     Evaluación de impacto de la modificación de la Directiva relativa a la eficiencia energética, SWD(2016) 405.

(2)

     Resultados subyacentes de la evaluación de impacto de la modificación de la Directiva relativa a la eficiencia energética, SWD(2016) 405.

(3)

     Evaluación de impacto de la refundición de la Directiva sobre fuentes de energía renovables, SWD(2016) 418.

(4)

     COM(2016) 769.

(5)

     La energía de la UE en cifras, Cuaderno estadístico 2016.

(6)

     Eurostat - cuentas nacionales.

(7)

      EurObserv'ER, The State of Renewable Energies in Europe, 15.ª edición, 2015 (cifras de 2014).

(8)

     Evaluación de la repercusión social y laboral de la eficiencia energética.

(9)

     COM(2015) 80.

(10)

     COM(2016) 52.

(11)

     COM(2015) 337.

(12)

     COM(2016) 482.

(13)

     COM(2016) 479.

(14)

     COM(2016) 501.

(15)

     COM(2016) 710.

(16)

     Evaluación de impacto de la modificación de la Directiva relativa a la eficiencia energética, SWD(2016) 405 (cifras relativas a la inversión, con exclusión del sector del transporte).

(17)

     Dato de JRC-SETIS (pendiente de publicación).

(18)

     Fuente: Evaluación de impacto de la modificación de la Directiva relativa a la eficiencia energética, SWD(2016) 405 (resultados detallados derivados del análisis macroeconómico).

(19)

     Evaluación de impacto de la modificación de la Directiva relativa a la eficiencia energética, SWD(2016) 405.

(20)

     COM(2016) 761.

(21)

     Evaluación de impacto de la modificación de la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios, SWD(2016) 414.

(22)

     Evaluación de impacto de la modificación de la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios, SWD(2016) 414.

(23)

     COM(2016) 765.

(24)

     COM(2016) 766.

(25)

     COM(2016) 773; C(2016) 7764, 7765, 7767, 7769, 7770 y 7772.

(26)

      EurObserv'ER, 15.ª edición, 2015 .

(27)

     Evaluación de impacto de la refundición de la Directiva sobre fuentes de energía renovables, SWD(2016) 418. Véase asimismo el estudio siguiente:

http://gramwzielone.pl/uploads/files/Solar_Photovoltaics_Jobs___Value_Added_in_Europe.pdf .

(28)

     EurObserv'ER, 15.ª edición, 2015.

(29)

     EurObserv'ER, 15.ª edición, 2015.

(30)

     EurObserv'ER, 15.ª edición, 2015.

(31)

     Este punto será tratado en el nuevo Reglamento sobre la Gobernanza de la Unión de la Energía, COM(2016) 759.

(32)

     Agencia Internacional de la Energía, Informe especial sobre las Perspectivas de la inversión mundial en energía (2014).

(33)

     COM(2016) 767.

(34)

     La iniciativa sobre la configuración del mercado consiste en una refundición de la Directiva sobre la electricidad [COM(2016) 864], una refundición del Reglamento de la electricidad [COM(2016) 861], una refundición del Reglamento de la ACER [COM(2016) 863] y un nuevo Reglamento sobre la preparación frente a los riesgos en el sector de la electricidad [COM(2016) 862].

(35)

     COM(2016) 51.

(36)

     COM(2016) 769.

(37)

     Véase el documento de trabajo sobre la pobreza energética (nota a pie de página 4).

(38)

     Véase la Comunicación «Acelerar la transición de Europa hacia una economía hipocarbónica» [COM(2016) 500] y la Comunicación sobre una estrategia europea para una movilidad de bajas emisiones [COM(2016) 501].

(39)

     COM(2016) 763.

(40)

     Véase la Comunicación «Nueva Agenda de Capacidades para Europa: Trabajar juntos para reforzar el capital humano, la empleabilidad y la competitividad», COM(2016) 381.

(41)

     Véase la Comunicación sobre la propuesta de Nuevo consenso europeo en materia de desarrollo – Nuestro mundo, nuestra dignidad, nuestro futuro [COM(2016) 740] y el Plan Europeo de Inversiones Exteriores.

Top

Bruselas, 30.11.2016

COM(2016) 860 final

ANEXO

Acelerar el recurso a energía limpia en los edificios

de la

COMUNICACIÓN DE LA COMISIÓN AL PARLAMENTO EUROPEO, AL CONSEJO, AL COMITÉ ECONÓMICO Y SOCIAL EUROPEO, AL COMITÉ DE LAS REGIONES Y AL BANCO EUROPEO DE INVERSIONES

Energía limpia para todos los europeos


En la iniciativa que la Comisión lanza hoy, los edificios se consideran una parte esencial de la transición hacia una energía limpia.

Centrado en los lugares en que vivimos y trabajamos, el objetivo consiste en desarrollar un enfoque exhaustivo e integrado que anteponga la eficiencia energética, contribuya al liderazgo mundial de la UE en energías renovables y ofrezca un trato justo a los consumidores, ayudando a los Estados miembros a alcanzar sus objetivos en materia de energía y clima para 2020 y 2030.

Las ventajas de este enfoque integrado son claras:

-movilizar las inversiones, a escala nacional, regional y local, y estimular el crecimiento y el empleo, fomentando al mismo tiempo la innovación y las capacidades;

-conseguir un ahorro de energía que suponga una reducción de los costes de funcionamiento, así como un entorno de trabajo y de vida más saludable para los ciudadanos;

-paliar la pobreza energética, haciendo especial hincapié en las viviendas sociales y los edificios públicos ineficientes desde un punto de vista energético;

-descentralizar de forma progresiva el sistema energético europeo mediante el uso de energía sostenible en los edificios;

-integrar los edificios en un sistema conectado de energía, almacenamiento, tecnologías digitales y transporte que contribuya a la estrategia europea de movilidad de bajas emisiones;

-capacitar a hogares, empresas y comunidades de energía; y

-contribuir a la economía circular.

El sector de la construcción proporciona, por sí solo, unos 18 millones de empleos directos en Europa y genera un 9 % del PIB 1 .

El sector europeo de la construcción puede dar respuesta a varios retos económicos y sociales, como el empleo y el crecimiento, la urbanización en auge, la comunicación digitalizada y en las redes sociales, los cambios demográficos y las cadenas de valor mundializadas, las presiones ambientales y, al mismo tiempo, a los desafíos en materia de energía y cambio climático. Los edificios pueden ser uno de los motores de la modernización del sector y de su mano de obra.

La UE ya es un líder mundial en los sistemas de innovación para los edificios. Integrar la eficiencia energética, las energías renovables, el almacenamiento y la conexión con los sistemas digitales y de transporte a través de los edificios permite ampliar ese liderazgo y aprovechar al máximo un marco normativo favorable.

Hoy en día, los edificios representan el 40 % del consumo total de energía en Europa. Alrededor del 75 % del parque inmobiliario es ineficiente desde el punto de vista energético. Con la tasa de renovación actual del 1 % al año, se necesitaría casi un siglo para descarbonizar el parque inmobiliario y alcanzar unos niveles hipocarbónicos modernos 2 .

Para concretar el potencial de los edificios en materia de energía sostenible, deben superarse varios obstáculos sociales, financieros, técnicos o administrativos. Por ejemplo, si bien es cierto que los edificios son objeto de mantenimiento y de mejoras con carácter periódico, las inversiones en energía sostenible suelen ser desatendidas debido a la escasez de capital, la ausencia de información fiable, la falta de trabajadores cualificados o por dudas sobre los posibles beneficios.

Además, muchos promotores de proyectos siguen hallando obstáculos a la hora de recaudar los costes iniciales necesarios para sus proyectos y no pueden obtener en el mercado productos de financiación atractivos y adecuados. Esta deficiencia del mercado se debe ante todo a que las entidades financieras y los inversores no entienden los riesgos, los beneficios múltiples y el interés comercial de las inversiones en energía sostenible, y especialmente en eficiencia energética. Además, el escaso volumen de las inversiones y la falta de soluciones «llave en mano» aumentan los costes de aplicación, y la falta de capacidades y de competencias para estructurar proyectos financiables mantienen la demanda de financiación en niveles bajos.

Le corresponde a la política de energía sostenible ayudar a los consumidores a realizar esas inversiones con mayor facilidad y a crear unas condiciones de inversión más favorables. Cuando renuevan sus hogares, los consumidores deberían poder optar por soluciones más eficaces, partiendo de una información clara, transparente y oportuna sobre el consumo y los costes conexos. Al renovar los edificios públicos, como los hospitales, las escuelas, las viviendas sociales o las oficinas, las autoridades públicas deberían tener acceso a soluciones de financiación atractivas y poder acogerse a servicios de energía innovadores, por ejemplo en forma de contratos de rendimiento energético.

Además de establecer el marco normativo adecuado, especialmente con la revisión propuesta de la Directiva relativa a la eficiencia energética y de la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios, es preciso adoptar medidas complementarias de apoyo para hacer frente a los cambios veloces en la economía real y abordar sin demora el tema de la financiación.

1.    Financiación inteligente para edificios inteligentes

La renovación de edificios centrada en la energía sostenible es un ámbito en el que la agrupación de proyectos y las garantías públicas pueden suponer una gran diferencia. Como parte del Plan de Inversiones para Europa, el Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas (FEIE) 2.0 3 es fundamental para desbloquear a mayor escala la financiación privada en favor de la eficiencia energética y las energías renovables en los edificios.

La eficiencia energética y las energías renovables ya son importantes en los proyectos del FEIE. Por ejemplo, la inmensa mayoría de los proyectos energéticos aprobados para financiación hasta la fecha (que representan el 22 % de la inversión total por valor de 154 000 millones EUR) se refiere al sector de la eficiencia energética y las energías renovables. Apoyándose en el éxito del FEIE, la Comisión ha propuesto ampliar su duración hasta el final de 2020 y exigir que al menos un 40 % de los proyectos del FEIE en los apartados de infraestructura e innovación contribuya a las medidas en materia de clima, energía y medio ambiente en consonancia con los objetivos de la COP21. Se trata de una gran oportunidad y de una contribución concreta para movilizar fondos públicos y privados a fin de apoyar la transición hacia una economía circular hipocarbónica. El apoyo del Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas podrá completarse o combinarse con ayuda en forma de subvenciones o productos financieros, procedentes de otros fondos de la UE, como los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos.

En el período 2014-2020, el Fondo Europeo de Desarrollo Regional y el Fondo de Cohesión invertirán 17 000 millones EUR en eficiencia energética en edificios residenciales y públicos y en empresas, con especial atención a las pymes 4 . Este importe es tres veces superior al del período anterior, lo que confirma el compromiso y la importancia que los Estados miembros y las regiones dedican a la eficiencia energética. Esa dotación podría movilizar un importe mucho mayor de cofinanciación pública y privada nacional, y alcanzar un total de unos 27 000 millones EUR 5 . Uno de los objetivos del Plan de Inversiones para Europa es duplicar, como mínimo, el uso de los instrumentos financieros de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos para movilizar más financiación privada y contribuir a crear unos mercados viables. Los Estados miembros y las regiones ya tienen previsto invertir unos 6 400 millones EUR 6 mediante instrumentos financieros para los objetivos hipocarbónicos, principalmente en materia de eficiencia energética; se multiplican por ocho los fondos en comparación con el gasto del período 2007-2013 7 .

Basándose en el Plan de Inversiones para Europa y en los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos, la Comisión lanzará una iniciativa para seguir estimulando las inversiones de las entidades del sector público, las empresas de servicios energéticos, las pymes, las empresas de capitalización media y los hogares en eficiencia energética y edificios inteligentes. Esta nueva iniciativa, en estrecha cooperación con el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y los Estados miembros, puede liberar un importe adicional de 10 000 millones EUR de fondos públicos y privados 8 hasta 2020 para la eficiencia energética y las energías renovables. Esto debería realizarse mediante intermediarios financieros y plataformas nacionales de inversión en eficiencia energética a fin de agregar proyectos, eliminar el riesgo de las inversiones en eficiencia energética y optimizar el uso de los fondos públicos, especialmente de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos en combinación con financiación al amparo del Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas. Estas combinaciones, que ya son posibles hoy en día, se verán facilitadas por las modificaciones propuestas del Reglamento Financiero y del Reglamento sobre disposiciones comunes 9 . Se anima a los Estados miembros, especialmente a los que más gastan en energía y más dependen de la energía exterior, a que participen en esta iniciativa y aporten contribuciones. El reparto del riesgo entre los fondos, públicos y privados, nacionales y de la UE, ofrecerá más opciones atractivas de financiación a los beneficiarios finales. Además, el recurso a una solución de la UE traerá consigo varias ventajas reglamentarias y administrativas, por ejemplo en lo que se refiere a las ayudas estatales, la contratación pública, las obligaciones de cofinanciación, así como en materia de informes y evaluaciones ex ante. Cabe destacar que, en el contexto de la evaluación de las finanzas públicas con arreglo al Pacto de Estabilidad y Crecimiento, la Comisión también adoptará una posición favorable sobre las aportaciones de los Estados miembros en favor de contribuciones puntuales a plataformas de inversión temáticas o plurinacionales en el marco del FEIE 10 .

Una parte importante de esos fondos se empleará en las ciudades y en las regiones: los agentes locales y regionales desempeñan un papel crucial en el apoyo a los edificios de energía limpia, con sus decisiones en ámbitos como las normas de construcción y la planificación urbana. A través de iniciativas como el Pacto de los Alcaldes para el Clima y la Energía 11 , se anima a las ciudades y a las regiones a aplicar medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, aumentar la resiliencia y asegurar el acceso a una energía limpia y asequible para todos.

Pilar I: Un uso más eficaz de la financiación pública

El objetivo es aprovechar al máximo los fondos públicos recurriendo a instrumentos financieros que remedien las disfunciones detectadas en el mercado y destinando las subvenciones con prioridad a los consumidores vulnerables. A tal efecto, la Comisión debe:

a.Desarrollar modelos de financiación de la energía sostenible, basados en plataformas de inversión nacionales (con una posible dimensión regional) para atraer financiación privada adicional con vistas a la renovación de edificios y elaborados según lo previsto en el Reglamento del FEIE, teniendo en cuenta las normas sobre ayudas estatales de la UE.

En la UE, más que en otras economías desarrolladas, los bancos desempeñan un papel fundamental en la financiación de las inversiones de las empresas y los consumidores. Aunque se muestran cada vez más activos en los nuevos mercados de la energía, especialmente en el de las energías renovables a gran escala, es raro que los bancos consideren la eficiencia energética un segmento en sí mismo del mercado. Esto se traduce en una falta de productos de financiación comercial adecuados y asequibles para la eficiencia energética o las energías renovables en edificios 12 . Para remediar esta deficiencia, la Comisión ha creado un programa de financiación pionero, el instrumento de financiación privada para la eficiencia energética (PF4EE), financiado por el Programa LIFE y gestionado por el BEI. El éxito de este proyecto piloto, como queda patente con un efecto palanca mucho mayor del previsto inicialmente, demuestra la capacidad de impulso de las inversiones en eficiencia mediante el reparto de riesgos, la asistencia técnica y las líneas de crédito del BEI a las entidades financieras participantes. Las enseñanzas extraídas del instrumento de financiación privada para la eficiencia energética (PF4EE) ayudarán a impulsar la combinación del Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas con otras fuentes de financiación pública, incluidos los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos, si procede, a través de plataformas de inversión 13 .

Partiendo de esta experiencia, la Comisión apoyará el desarrollo de plataformas de financiación flexible de la eficiencia energética y las energías renovables a escala nacional o regional. Estas plataformas pueden ofrecer una gama completa de servicios que permitirá a los bancos, los intermediarios financieros, las empresas de servicios energéticos y otras entidades locales poner en común las inversiones a fin de desplegar productos atractivos de financiación de la energía sostenible para un gran número de beneficiarios finales en la zona cubierta por la plataforma 14 . En particular, pueden ponerse a disposición de las entidades que deseen financiar carteras de inversión en favor de la energía sostenible tres elementos de refuerzo mutuo:

-una mayor financiación de la deuda por el BEI mediante el Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas a fin de aumentar su capacidad de financiación (contribuyendo así a hacer hincapié en los edificios de energía sostenible con cargo al Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas 2.0);

-un mecanismo de reparto del riesgo para mitigar el riesgo de las carteras de inversión en energía sostenible y ofrecer condiciones de préstamo más favorables a los destinatarios finales; esta característica podría desplegarse junto con fondos disponibles localmente, incluidos los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos;

-asesoramiento y asistencia técnica para desplegar programas de préstamo desarrollado en cooperación con el Centro Europeo de Asesoramiento para la Inversión, incluso mediante mecanismos como ELENA, JASPERS, ficompass 15 y otras fuentes de financiación nacional o regional.

Para apoyar el despliegue de este modelo y de otros instrumentos asociados de energía sostenible, la Comisión investigará las posibilidades de reasignar los fondos existentes de la UE, por ejemplo para asistencia técnica.

b.Fomentar los contratos de rendimiento energético: Debe reforzarse el papel de los contratos de rendimiento energético para impulsar la eficiencia de los edificios públicos, ya que ofrecen un enfoque global de las renovaciones, incluida la financiación, la ejecución de las obras y la gestión de la energía. En determinadas condiciones, también pueden permitir invertir en eficiencia sin aumentar la deuda pública, lo cual reviste una importancia crucial tanto para los gobiernos como para las autoridades locales y regionales que sufren restricciones presupuestarias, especialmente en lo que se refiere a la vivienda social, los hospitales o las escuelas. Las normas de inversión del sector público y de tratamiento estadístico de los activos de renovación deben ser transparentes y claras para facilitar las inversiones en eficiencia energética en los bienes públicos. Eurostat estudiará cómo hacer frente al impacto de las inversiones en eficiencia energética en la deuda y el déficit de las administraciones públicas. La Comisión está analizando, en estrecha cooperación con los Estados miembros, el impacto de las normas de la contabilidad pública en el mercado de los contratos de rendimiento energético y, si procede, actualizará sus orientaciones sobre el tratamiento estadístico de esas asociaciones antes de finales de la primavera de 2017.

c.Prestar asistencia a los gestores de fondos públicos para la estructuración y el despliegue de instrumentos financieros: además del apoyo prestado en el marco del Centro Europeo de Asesoramiento para la Inversión, fi-compass o las redes de autoridades de energía y de gestión, la Comisión organizará una serie de actos de desarrollo de capacidades regionales con la participación de los principales responsables políticos y otras partes interesadas. El primer taller se celebró en noviembre de este año en Riga para la región del Báltico.

d.Además, la Comisión ha desarrollado una plantilla fácilmente disponible para aumentar la cuota de los instrumentos financieros con cargo a los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos: el instrumento «listo para su uso» para la eficiencia energética. Los Estados miembros se han mostrado activos a la hora de crear instrumentos financieros en favor de la eficiencia energética, con miras, en particular, a alcanzar el objetivo de destinar un 20 % de los Fondos EIE para la inversión en economía hipocarbónica a través de instrumentos financieros. Sin embargo, algunos Estados miembros están a la zaga a este respecto y un mayor recurso a este tipo de instrumentos podría contribuir a colmar esta laguna.

Al mismo tiempo, la propuesta legislativa sobre la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios incluye medidas para vincular los incentivos financieros aportados por los fondos públicos con el ahorro energético obtenido.

Pilar II: Agregación y ayuda para el desarrollo de proyectos

Para garantizar el éxito de esta iniciativa, es fundamental disponer de una gran reserva de proyectos financiables a fin de alimentar las plataformas de inversión y los instrumentos financieros. Sin embargo, muchos promotores de proyectos (autoridades públicas, particulares o empresas) carecen de las cualificaciones y de la capacidad necesarias para crear, aplicar y financiar proyectos ambiciosos de edificios de energía limpia. Por tanto, la Comisión llevará a cabo las siguientes acciones:

a.Reforzar los mecanismos vigentes de ayuda al desarrollo de proyectos 16 a escala de la UE, como ELENA, en colaboración con el Centro Europeo de Asesoramiento para la Inversión. El objetivo es aumentar la reserva de proyectos de inversión, apoyar el despliegue de instrumentos financieros, estrechar los vínculos con los promotores de proyectos, en particular de Europa Central y Oriental, involucrar a las ciudades y a los actores locales y estimular la agregación y la absorción por el mercado de las soluciones prometedoras, incluidas las tecnologías innovadoras y las estrategias de financiación y organización. La Comisión tiene previsto aumentar el presupuesto de la ayuda al desarrollo de proyectos de la UE: pasará de 23 millones EUR en 2015 a 38 millones EUR anuales a partir de 2017. Se espera que el presupuesto de la ayuda al desarrollo de proyectos de la UE para el período 2016-2017 genere hasta 3 000 millones EUR 17 de inversiones en edificios de energía sostenible.

b.Alentar a los Estados miembros a desarrollar ventanillas únicas específicas, regionales o locales para los promotores de proyectos, que cubran todo el recorrido del cliente desde la información hasta el seguimiento del ahorro, pasando por la asistencia técnica, la estructuración y la prestación de ayuda financiera. Estos instrumentos deberían generar reservas de proyectos más locales y unas asociaciones sólidas, de confianza, con los agentes locales (por ejemplo, las pymes, las entidades financieras y las agencias de energía), consistiendo la clave en conectar la oferta de financiación con la demanda correspondiente. El desarrollo y la reproducción de esas ventanillas únicas recibirán apoyo de la UE mediante un intercambio de buenas prácticas a través de Manag'Energy 18 , financiación con cargo a Horizonte 2020 19 , el mecanismo de ayuda al desarrollo de proyectos de la UE, o financiación de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos, si procede.

En paralelo, la prolongación propuesta, en el artículo 7 de la Directiva relativa a la eficiencia energética, de las obligaciones de ahorro energético para los Estados miembros constituirá un nuevo impulso para agrupar proyectos de pequeña escala.

Pilar III: Reducción del riesgo

En respuesta al llamamiento de las entidades financieras 20 , los inversores y los agentes financieros deben comprender mejor los riesgos reales y los beneficios de las inversiones en edificios de energía sostenible, basándose en los resultados del mercado y en los historiales de rendimiento. Los bancos deben ir reconociendo algunos aspectos fundamentales, como la menor probabilidad de impago en el caso de los préstamos de ahorro energético o el aumento del valor de los activos a resultas de una mayor eficiencia energética. Estos elementos deben quedar reflejados en los precios de sus productos financieros. El desarrollo de productos sostenibles de financiación específica en materia de energía también es importante para apoyar la creación de un mercado secundario (de refinanciación) y aumentar la participación de capital privado. Para apuntalar esa transformación del mercado, la Comisión:

a.Lanza la plataforma de reducción de riesgos en la eficiencia energética, que permite consultar el rendimiento técnico y financiero de más de 5 000 proyectos industriales e inmobiliarios de eficiencia energética. Se anima a los promotores de proyectos, los agentes financieros y los inversores a seguir alimentando esta base de datos de fuente abierta y a aprovechar sus elementos de evaluación comparativa y el aprendizaje entre iguales.

b.Colaborará estrechamente con las entidades financieras públicas y privadas, los representantes del sector y los expertos en un marco consensuado para suscribir inversiones en edificios de energía sostenible. Esta iniciativa, coproducida por el Grupo de entidades financieras sobre eficiencia energética y prevista para 2017, ayudará a las entidades financieras a incorporar los mayores beneficios de la energía en sus prácticas comerciales y, a su vez, reducirá los costes de transacción y reforzará la confianza de los inversores. Esta acción también contribuirá a desbloquear el mercado de los créditos hipotecarios «verdes».

Al mismo tiempo, la propuesta legislativa sobre la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios incluye medidas para ofrecer a los inversores del sector privado un acceso a más información de calidad, con certificados más fiables en materia de eficiencia energética de los edificios, una recogida de datos sobre el consumo real de energía de los edificios públicos y un mayor desarrollo de planes de renovación a largo plazo para orientar las decisiones de inversión.

La Comisión también va a lanzar el Observatorio del parque inmobiliario de la UE para recabar de forma centralizada toda la información pertinente sobre los edificios de la UE y la renovación energética. Esta iniciativa permitirá respaldar la concepción, la ejecución, el seguimiento y la evaluación de las políticas y de los instrumentos financieros conexos.

2.    Sector de la construcción

La Comisión invitará a las partes interesadas del sector de la construcción a debatir sobre los retos y las oportunidades que las inversiones en materia de energía sostenible representan para el sector y sobre cómo fomentarlas más. Esta iniciativa completará la labor del Foro tripartito de alto nivel para la construcción sostenible de la Estrategia 2020 para la construcción.

En el marco de su Agenda de Capacidades para Europa 21 , la Comisión ha lanzado varias medidas para paliar las carencias en materia de capacidades. Partiendo de la experiencia adquirida con los proyectos piloto iniciados este año, la Comisión tendrá que desplegar en 2017 nuevos «planes de cooperación sectorial sobre capacidades»: uno de ellos también estará relacionado con el sector de la construcción y hará hincapié en la eficiencia energética y las competencias digitales. En este contexto, se desarrollarán sinergias con la iniciativa «BUILD UP skills» de la Comisión, que se centra en la mejora de las capacidades de los trabajadores del sector de la construcción en materia de eficiencia energética y de tecnologías de energía renovable, así como de instalación y gestión 22 .

La construcción de nuevos edificios o la renovación de edificios para hacerlos más eficientes desde el punto de vista energético ofrece una oportunidad para reflexionar sobre las prácticas de construcción y demolición y tener más presente la eficiencia en la utilización de los recursos. En el paquete sobre la economía circular, la Comisión Europea presentará el año próximo un marco de la UE para evaluar el rendimiento ambiental general de los edificios. Ese marco debería utilizarse para fomentar la economía circular en el entorno edificado, por ejemplo como referencia en proyectos de aplicación a gran escala, en los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos y en la política y la legislación nacionales. Además, la Comisión Europea está barajando varias opciones de apoyo a iniciativas destinadas a fomentar las inversiones en infraestructuras (nuevas o innovadoras) de reciclado de residuos de construcción y demolición en regiones menos avanzadas ante el objetivo del 70 % de reutilización, valorización y reciclado que deben alcanzar de aquí a 2020 con arreglo a la Directiva marco sobre residuos. Esas inversiones podrían ser respaldadas por el Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas. Está en fase de creación una plataforma específica para proyectos de economía circular. Además, la Comisión ha elaborado un protocolo de gestión de los residuos de la construcción y la demolición para ayudar a las partes interesadas a tratar los residuos de forma respetuosa con el medio ambiente y aumentar su potencial de reciclado. De cara al futuro, la Comisión Europea también está trabajando en una serie de principios y normas para el diseño sostenible de los edificios, con el objetivo de que generen menos residuos de construcción y demolición y se facilite el reciclado de materiales. Todas estas iniciativas contribuirán a su vez a reducir el consumo de energía y los costes relacionados con los materiales de construcción.

El potencial de crecimiento y empleo del sector de la construcción debe liberarse mejorando el funcionamiento de los mercados. Los resultados del control de adecuación de la construcción se utilizarán para garantizar una mayor coherencia al respecto de la legislación sobre eficiencia energética y mercado interior. Por ejemplo, los requisitos derivados de la normativa sobre diseño ecológico deben incorporarse, si procede, a las normas armonizadas en virtud del Reglamento sobre los productos de construcción aplicables a estos mismos productos, de tal modo que los fabricantes dispongan de un marco único para su ensayo. Dado que el mercado interior de los productos de construcción sigue estando fragmentado, está en curso un proceso de consulta a las partes interesadas 23 , que podría dar lugar a una revisión del Reglamento correspondiente durante el mandato de la presente Comisión.

La Comisión Europea seguirá apoyando la innovación estimulando el desarrollo de productos y procesos tecnológicos avanzados en el marco de la asociación público-privada contractual (APPC) Energy-efficient Buildings (EeB). Se espera que esta APP genere las tecnologías necesarias para aumentar la sostenibilidad y la competitividad de la industria europea de la construcción 24 .

La iniciativa podría apuntalarse con un enfoque inteligente de la contratación pública que fomente soluciones innovadoras e hipocarbónicas por medio de iniciativas de normalización lideradas por la industria, como SustSteel 25 . Una vez estén finalizadas estas normas, el sector de la construcción podrá utilizarlas para cumplir sus objetivos de sostenibilidad. Este enfoque podría aplicarse a otros productos de construcción y reforzaría la posición del sector para valorizar sus esfuerzos y comercializar mejor sus productos.

Las nuevas Directivas sobre contratación pública (en vigor desde la primavera de 2016) consolidan y optimizan todos los instrumentos de innovación: criterios funcionales, variantes, consideraciones cualitativas en las especificaciones técnicas y criterios de adjudicación. La UE también contribuye a la contratación innovadora mediante los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos y el programa Horizonte 2020, lo que ha desembocado en una serie de proyectos innovadores. Un ejemplo interesante es el proyecto transfronterizo PAPIRUS (en el que participan Alemania, España, Italia y Noruega), cuyo objetivo es fomentar, aplicar y validar soluciones innovadoras para la construcción sostenible mediante la contratación pública, centrándose en edificios de consumo de energía casi nulo. Además, la Comisión ha publicado un conjunto de criterios voluntarios de contratación pública ecológica para el diseño, la construcción y la gestión de edificios de oficinas, que incluyen una serie de recomendaciones sobre cómo conseguir un edificio de oficinas eficiente desde el punto de vista energético y ecológico 26 .

Las tecnologías digitales pueden aumentar la eficiencia de los procesos de construcción y del funcionamiento de los edificios, contribuyendo así a los objetivos de ahorro energético. Por consiguiente, la Comisión respalda la definición de principios y normas comunes de contratación pública para digitalizar las características de los edificios, incluido su rendimiento energético (modelización de los datos de construcción). Junto con el desarrollo de un marco común para un informe de incidencias digital de los edificios y de acciones específicas para las pymes, con esta medida resultará mucho más fácil intercambiar información y apoyar la toma de decisiones, antes, durante y después de realizar los proyectos inmobiliarios, evitar una fragmentación de estrategias nacionales que compitan entre sí y rebajar los costes para las pymes. Además, con arreglo al Acuerdo sobre Contratación Pública de la OMC y en el marco de los acuerdos bilaterales, la UE se asegura de que la contratación pública se lleve a cabo de forma transparente y competitiva, con el objetivo de que no discrimine a mercancías, servicios o proveedores de la UE.

(1)

   The European construction sector – A global partner (Comisión Europea, 2016).

(2)

   Evaluación de impacto de la modificación de la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios, SWD(2016) 414; véase asimismo el informe del JRC «Energy Renovation: The Trump Card for the New Start for Europe», disponible en la siguiente dirección:

    http://iet.jrc.ec.europa.eu/energyefficiency/publication/energy-renovation-trump-card-new-start-europe  

(3)

   Comunicación «Europa invierte de nuevo – Balance del Plan de Inversiones para Europa y próximas etapas», COM(2016) 359.

(4)

   Nota: cabe mencionar, además, las asignaciones por un importe de 870 millones EUR y 113 millones EUR, respectivamente, con cargo al Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) y al Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP), que también participan en los Fondos EIE.

(5)

   Estimación basada en los cuadros financieros de los programas operativos 2014-2020 para el objetivo temático «Favorecer el paso a una economía baja en carbono » en general.

(6)

   Incluida la cofinanciación nacional.

(7)

   El primer resumen anual de los avances registrados por los instrumentos financieros de los Fondos EIE en el período 2014-2020 será elaborado antes de finales de noviembre de 2016.

(8)

   El BEI concedió 10 500 millones EUR al sector de la eficiencia energética en los últimos cinco años.

(9)

   COM(2016) 605, de 14 de septiembre de 2016.

(10)

   Véase la Declaración de la Comisión sobre su evaluación de las contribuciones puntuales en el contexto de la iniciativa del FEIE a efectos de ejecución del Pacto de Estabilidad y Crecimiento (DO L 169 de 1.7.2015, p. 38), así como la Comunicación de la Comisión «Aprovechar al máximo la flexibilidad que ofrecen las actuales disposiciones del Pacto de Estabilidad y Crecimiento» [COM(2015) 12].

(11)

    http://www.covenantofmayors.eu/index_en.html  

(12)

   En particular, las soluciones de calefacción y refrigeración, los paneles solares en los tejados y las bombas de calor.

(13)

   En su propuesta de Reglamento «ómnibus» adoptada en fecha reciente [COM(2016) 605], la Comisión propone una simplificación de las normas aplicables a la combinación de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos con el Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas, que podría permitir el desarrollo de nuevos modelos y plantillas fáciles de utilizar.

(14)

   Estas plataformas también ofrecerán mayor visibilidad a los proyectos financiados en su seno para aplicar las ventajas reglamentarias y administrativas pertinentes del Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas.

(15)

   fi-compass es una plataforma de servicios de asesoramiento sobre instrumentos financieros en el marco de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos (Fondos EIE), cuyo objeto consiste en apoyar a las autoridades de gestión de los Fondos EIE y a otras partes interesadas, proporcionando conocimientos prácticos y herramientas de aprendizaje sobre los instrumentos financieros. https://www.fi-compass.eu/

(16)

   Instrumento ELENA y convocatoria de la ayuda al desarrollo de proyectos dentro del programa Horizonte 2020.

(17)

   Sobre la base de la ratio de apalancamiento alcanzada anteriormente con el mecanismo ELENA y la ayuda al desarrollo de proyectos EASME.

(18)

   Manag'Energy será el punto central para reforzar las capacidades de las agencias de energía locales y regionales en Europa (más de 400) a fin de incrementar su capacidad de financiación de la eficiencia energética y responsabilizar a las agencias para que desarrollen las estructuras necesarias en función de enfoques globales e integrados, locales o regionales.

(19)

   H2020, EE-23-2017, sobre métodos de financiación innovadores, en particular mecanismos sobre agregadores de proyectos o cámaras de compensación regional o nacional.

(20)

    www.eefig.com

(21)

   Comunicación «Una nueva Agenda de Capacidades para Europa: Trabajar juntos para reforzar el capital humano, la empleabilidad y la competitividad», COM(2016) 381.

(22)

   Iniciativa financiada con cargo a los programas: «Energía inteligente — Europa» y desafío social 3 de Horizonte 2020.

(23)

   Según lo previsto en el informe relativo a la aplicación del Reglamento sobre los productos de construcción (añádase la referencia).

(24)

    http://ec.europa.eu/research/industrial_technologies/energy-efficient-buildings_en.html  

(25)

   El sector del acero está trabajando en unas normas europeas sobre acero sostenible (SustSteel), que permitirán a las empresas certificar que sus productos siderúrgicos para el sector de la construcción se ajustan a los requisitos del desarrollo sostenible en el aspecto económico, ambiental y social.

(26)

   EU GPP Criteria for Office Building Design, Construction and Management, SWD(2016) 180 final.

Top

Bruselas, 30.11.2016

COM(2016) 860 final

ANEXO

Medidas para impulsar la transición hacia una energía limpia

de la

COMUNICACIÓN DE LA COMISIÓN AL PARLAMENTO EUROPEO, AL CONSEJO, AL COMITÉ ECONÓMICO Y SOCIAL EUROPEO, AL COMITÉ DE LAS REGIONES Y AL BANCO EUROPEO DE INVERSIONES

Energía limpia para todos los europeos


La mayor parte de las medidas que se presentan en este documento son las que surtirán efecto a corto y medio plazo. En el marco del informe anual sobre el Estado de la Unión de la Energía, la Comisión informará sobre la aplicación de estas medidas y determinará las pautas de nuevas medidas, si procede.

1. Una transición equitativa desde el punto de vista social y nuevas capacidades

La energía es un bien y un servicio esencial, imprescindible para participar plenamente en la sociedad moderna. Ya existen varios instrumentos que habrán de ser desplegados para garantizar que la transición hacia una energía limpia sea equitativa y tenga en cuenta su impacto transformador en sectores, regiones o miembros vulnerables de la sociedad, que pueden verse perjudicados por esta transición.

A este respecto, los principales instrumentos son los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos, incluido el Fondo Social Europeo, que respaldan tanto el ajuste en las regiones y sectores afectados como la transición hacia nuevos modelos de empresa y perfiles profesionales. Al menos 1 100 millones EUR procedentes del Fondo Social Europeo se dedicarán en el período 20142020 a la mejora necesaria de los sistemas de educación y formación para adaptar las capacidades y cualificaciones y crear nuevos puestos de trabajo en sectores relacionados con la energía y el medio ambiente. Algunos Estados miembros también recurren al Fondo Social Europeo para aliviar la pobreza energética, a modo de complemento de los 5 200 millones EUR asignados por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional y el Fondo de Cohesión para inversiones en eficiencia energética de las viviendas. Con esas asignaciones, varios Estados miembros han optado por centrarse en la vivienda social y en las familias necesitadas, contribuyendo así a aportar soluciones a largo plazo para luchar contra la pobreza energética de casi un millón de hogares. Mejorar la eficiencia energética de los edificios es una de las herramientas importantes para que la energía sea más asequible y para luchar contra la pobreza energética. Además de las medidas previstas en la legislación 1 , la Comisión creará asimismo un Observatorio de la pobreza energética que elaborará estadísticas fiables sobre el número de hogares en situación de pobreza energética en cada Estado miembro y contribuirá a difundir las buenas prácticas.

Las acciones específicas en materia de transferencia de conocimientos, adquisición de capacidades y promoción de soluciones innovadoras en relación con el uso y la producción de energía eficiente correrán a cargo de la política de desarrollo rural. Por ejemplo, se espera que 99 000 beneficiarios (sobre todo agricultores y titulares de explotaciones forestales) reciban formación sobre cuestiones relacionadas con la energía en el período 2014-2020.

Para respaldar concretamente la solidaridad en la transición hacia una energía limpia, la Comisión propuso, en el marco de la revisión del régimen de comercio de derechos de emisión de la UE 2 dedicar recursos para tratar las necesidades de inversión adicionales, especialmente elevadas, en los Estados miembros de renta más baja. El objetivo del nuevo Fondo de modernización es facilitar las inversiones en la modernización de los sistemas energéticos y aumentar la eficiencia energética. Además, se propone asimismo que el 10 % de los derechos de emisión objeto de subasta en los Estados miembros se siga distribuyendo en beneficio de algunos Estados miembros de renta más baja. Por último, la Comisión propone que los Estados miembros también destinen los ingresos procedentes del comercio de derechos de emisión a fomentar la formación y la redistribución de la mano de obra afectada por la transición del empleo en una economía en descarbonización, en estrecha coordinación con los interlocutores sociales.

Esta actuación debería completarse con una iniciativa específica que ofrezca más apoyo a medida para la transición en las regiones industriales que son grandes consumidoras de carbón y de carbono. Se trata de iniciar o de dar un nuevo impulso al proceso de planificación de las regiones de cara a los cambios estructurales relacionados con la transición energética y de intercambiar información con otras regiones que presenten situaciones similares. Como primer paso, la Comisión reunirá estas regiones para debatir posibles procesos de planificación, facilitar el intercambio de buenas prácticas y examinar los instrumentos de financiación disponibles.

El concepto de «especialización inteligente» previsto en la política de cohesión de la UE, en particular las plataformas especializadas 3 , puede prestar la debida asistencia a las regiones. Este proceso ascendente, en el que participan especialmente las empresas, las comunidades de investigación, desarrollo e innovación y las autoridades públicas, puede ayudar a las regiones a elaborar y aplicar sus estrategias de transición energética.

La transición hacia una energía limpia ofrece oportunidades de creación de empleo duradero. Sin embargo, el éxito de esa transición requiere el reciclaje de los trabajadores, una mejor planificación y anticipación de los cambios y de las competencias necesarias, así como una mejor adecuación de las competencias. El Fondo Social Europeo puede respaldar estos esfuerzos en todas las etapas de la vida, desde concienciar a los niños en las escuelas hasta fomentar la formación en las competencias pertinentes y las iniciativas empresariales relacionadas con la energía limpia, pasando por la integración social mediante unas carreras adaptadas. En el marco de su Agenda de Capacidades para Europa 4 , la Comisión se esforzó por dar respuesta a los retos en este ámbito y por remediar las carencias de cualificaciones en determinados sectores económicos («planes de cooperación sectorial sobre capacidades»). Partiendo de la experiencia adquirida con los planes piloto iniciados este año (especialmente en los sectores del automóvil y de las tecnologías marítimas), estos nuevos planes representan una oportunidad de responder a las necesidades en materia de capacidades para la transición hacia una energía limpia. El plan en curso sobre tecnologías marítimas ya incluye la energía eólica marina y la energía oceánica y puede ser un estudio de caso especialmente pertinente para una segunda ola en sectores como las energías renovables o la construcción.

Los interlocutores sociales desempeñan un papel fundamental a la hora de planificar las necesidades en materia de capacidades, anticipar los cambios y gestionarlos. Ya están asociados a la labor sobre la Unión de la Energía a escala de la UE y deben participar de forma activa en el proceso, así como en los debates en torno a los planes nacionales integrados de energía y clima.

Para apoyar una transición hacia la energía limpia y las nuevas capacidades que sea equitativa desde el punto de vista social:

La Comisión examinará cómo respaldar mejor a las regiones que son grandes consumidoras de carbón y de carbono en su transición hacia una energía limpia. Para ello, trabajará en asociación con los agentes de esas regiones, proporcionará orientaciones, en particular para el acceso a los fondos y programas de la UE y su utilización, y fomentará el intercambio de buenas prácticas, con debates sobre las hojas de ruta sectoriales y las necesidades de reciclaje, a través de plataformas específicas.

Los Estados miembros deben utilizar sus planes nacionales integrados de energía y clima para abordar la repercusión social, competencial y sectorial de dicha transición.

Partiendo de la experiencia adquirida con los planes piloto, la Comisión habrá de desplegar en 2017 dos nuevos planes de cooperación sectorial sobre capacidades para nuevas tecnologías, en el ámbito de las energías renovables en general y en el sector de la construcción, con especial atención a las tecnologías hipocarbónicas.

La Comisión pide a los Estados miembros que involucren estrechamente a los interlocutores sociales en los debates sobre la transición energética, especialmente en el contexto de los planes nacionales integrados de energía y clima.

2. Una financiación de la UE al servicio de la economía real

Para financiar la transición energética será necesario combinar las inversiones privadas con una financiación pública que impulse las inversiones privadas y remedie las deficiencias del mercado. Las inversiones privadas se verán facilitadas por las propuestas legislativas de este paquete de medidas y por la propuesta de reforma del régimen de comercio de derechos de emisión de la UE. Unos mercados de la energía y del carbono en funcionamiento serán el factor clave para afrontar el reto de la inversión, así como la estabilidad reglamentaria y la transparencia de las políticas.

Además, los instrumentos financieros de la UE están aportando una contribución importante en el apoyo a la transición hacia una energía limpia, como lo demuestra el Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas. El Fondo va por buen camino para cumplir el objetivo de movilizar al menos 315 000 millones EUR de inversiones adicionales en la economía real hasta mediados de 2018. Las últimas cifras alcanzaron 154 000 millones EUR. Con el inicio de la segunda fase del Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas, la Comisión propuso reforzarlo y ampliarlo. Se propone que al menos el 40 % de las inversiones en el apartado de infraestructuras e innovación sean pertinentes desde el punto de vista del clima, la energía y el medio ambiente y contribuyan a alcanzar los objetivos del Acuerdo de París.

En consonancia con el objetivo de la UE de destinar al menos el 20 % del presupuesto de la UE para el período 2014-2020 a la acción por el clima, la política de cohesión reformada 5 desempeña asimismo un papel decisivo para alcanzar los objetivos de la Unión de la Energía, con unas asignaciones financieras por valor de 68 800 millones EUR. Esta cifra se complementará con una cofinanciación pública y privada nacional, por un total estimado de 92 000 millones EUR 6 . Además, los programas de desarrollo rural aportan ayuda a inversiones específicas en eficiencia energética y energías renovables (casi 6 000 millones EUR). Si bien es cierto que las primeras indicaciones sobre los fondos de la política de cohesión resaltan mejoras en materia de ejecución en 2016 7 , se necesita ahora una actuación urgente para acelerar la ejecución de estos fondos en varios Estados miembros. La Comisión seguirá ofreciendo asistencia técnica a los Estados miembros con problemas de ejecución.

Unas normas más sencillas y flexibles, según lo propuesto por la Comisión en su revisión intermedia del marco financiero plurianual 2014-2020, también contribuirán a acelerar la ejecución de esta financiación. Dentro de esa revisión, la Comisión inició un amplio programa de simplificación de las normas que regulan los fondos de la UE. Se trata, en particular, de facilitar la combinación del Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas con otras fuentes de financiación de la Unión, incluidos los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos. Un objetivo consiste en reforzar su adopción en las regiones menos desarrolladas y en transición. En virtud de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos, los Estados miembros y las regiones ya tienen previsto invertir alrededor de 6 400 millones EUR a través de instrumentos financieros en el ámbito de las bajas emisiones de carbono, principalmente para la eficiencia energética. La asignación se ha multiplicado por más de ocho en comparación con el período 2007-2013, y los primeros datos indican que se avanza a buen ritmo 8 . Para fomentar una mayor utilización de los instrumentos financieros, la Comisión también está prestando apoyo a los Estados miembros a través de la plataforma de servicios de asesoramiento fi-compass y de instrumentos listos para su uso que garantizan condiciones estándar compatibles con los reglamentos de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos y con las normas sobre ayudas estatales, y tratan de combinar recursos públicos y privados.

Un ejemplo de proyecto con éxito en el marco del Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas, combinado con los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos, es la plataforma de inversión en la región francesa de Hauts-de-France, que ilustra cómo una amplia gama de agentes públicos y privados puedan poner en común sus conocimientos y experiencia y cómo pueden combinarse varios fondos para impulsar una inversión considerable del sector privado en proyectos de energía hipocarbónica. Otro ejemplo es el instrumento de financiación privada para la eficiencia energética (PF4EE) 9 que proporciona financiación de deuda con protección de riesgos a través de los bancos comerciales locales, lo que les permite ofrecer mejores condiciones de financiación para proyectos de eficiencia energética en los edificios y en las pymes. También proporciona un asesoramiento técnico específico que permite a los bancos locales desarrollar y comercializar nuevos productos de financiación de la eficiencia energética adaptados a las necesidades de los clientes.

La Iniciativa de Transporte Limpio recurrirá a instrumentos financieros y los combinará para desplegar tecnologías hipocarbónicas innovadoras a fin de acelerar el paso hacia una movilidad de bajas emisiones. El posible potencial de mercado de la renovación de la flota de autobuses y autocares se sitúa en torno a 3 500 vehículos u 875 millones EUR de inversión añadida al año.

Para intensificar y reorientar las inversiones en apoyo a la transición hacia una energía limpia:

La Comisión lanza hoy una iniciativa de «financiación inteligente para edificios inteligentes» (véase el anexo I) a fin de apoyar la inversión en edificios de energía limpia. Esta iniciativa respaldará la creación de plataformas de inversión que permitan combinar fondos públicos con un despliegue de productos de financiación atractivos para los agentes del mercado en todos los Estados miembros en 2017. Consolidará asimismo la asistencia técnica para seguir desarrollando y agregando proyectos de pequeña escala y desplegará actividades de reducción de riesgos para inversiones en eficiencia energética.

En el contexto del Plan de Inversiones para Europa, la Comisión lanzó en fecha reciente proyectos piloto para alcanzar en la UE una mayor convergencia de los plazos de los distintos procedimientos relacionados con proyectos de inversión en infraestructuras estratégicas. El proyecto piloto abarca, en una primera fase, a Bélgica y Eslovaquia. Partiendo de una evaluación de estos proyectos, la Comisión ampliará esta experiencia a otros Estados miembros, en el transcurso de 2017, con la ambición de crear una auténtica «ventanilla única» para todos los Estados miembros, que reúna todos los servicios competentes de la Comisión, incluidas sus oficinas de representación en los Estados miembros, en un equipo único encargado de la política de inversión.

La Comisión pide a los Estados miembros que aceleren el despliegue de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos para apoyar la transición hacia una energía limpia.

La Comisión puso en marcha el pasado 1 de diciembre una Iniciativa de Transporte Limpio junto con el Banco Europeo de Inversiones para respaldar la inversión en un transporte limpio y eficiente desde el punto de vista energético, así como unas infraestructuras de transporte y energía integradas.

3. Establecer los incentivos adecuados para la inversión en la transición hacia una energía limpia

Para desplegar fuentes de energía renovables o medidas de eficiencia energética se necesita mucho capital. Se requiere una inversión inicial, ya sea en forma de ahorro de los hogares, de participaciones de empresas o de instrumentos de financiación de deuda de entidades de crédito, para poder contar más adelante con una reducción de la factura energética o unos ingresos.

El contexto económico actual, con un bajo coste del capital, es propicio para fomentar una inversión privada a mayor escala y canalizar los gastos de capital en energía limpia, soluciones eficientes desde el punto de vista energético y activos sostenibles. Se trata de una oportunidad para que los ciudadanos, las empresas, las autoridades públicas y los inversores obtengan mayor rendimiento del capital que del ahorro.

Para apoyar este cambio de paradigma en la inversión y orientarla a la transición hacia una energía limpia, los planes nacionales integrados de energía y clima de los Estados miembros (planes que son parte de la Gobernanza de la Unión de la Energía, sobre la que la Comisión presenta hoy una propuesta 10 ) servirán también de «hojas de ruta para la inversión», que determinarán las inversiones públicas y privadas necesarias para la transición hacia una energía limpia.

Una estructura favorable y coherente de incentivos económicos también es esencial para impulsar las inversiones privadas en esa transición. Unas medidas eficaces de tarificación del carbono y de eliminación progresiva de las subvenciones a los combustibles fósiles son sumamente importantes para eliminar falseamientos perjudiciales del mercado, internalizar los costes ambientales y sociales de una situación de statu quo y ayudar a valorar los riesgos que suponen las distintas oportunidades de inversión.

La Comisión ya ha propuesto una reforma del régimen de comercio de derechos de emisión de la UE para el período posterior a 2020 11 . La UE también está apoyando la creación de regímenes de comercio de derechos de emisión mediante la cooperación bilateral 12 y la participación y financiación de iniciativas multilaterales con nuestros socios internacionales 13 .

De conformidad con los compromisos contraídos en virtud del Acuerdo de París sobre el cambio climático y en el G7 y el G20, la UE ya ha adoptado una serie de medidas concretas para eliminar las subvenciones a los combustibles fósiles; sin embargo, el apoyo público restante, aún significativo, al petróleo, al carbón y a otros combustibles que originan muchas emisiones de carbono sigue falseando el mercado de la energía, genera ineficiencia económica e inhibe la inversión en la transición hacia una energía limpia y en innovación.

Según el último informe de la Comisión sobre los precios y costes de la energía, publicado hoy como parte de este paquete de medidas, las subvenciones directas de la UE a los combustibles fósiles para electricidad y calefacción ascendieron a 17 200 millones EUR en 2012, mientras que, por otra parte, las subvenciones a los combustibles fósiles en el transporte se estimaron en 24 700 millones EUR. 14 Según las estimaciones de 2015 del Fondo Monetario Internacional, las subvenciones a los combustibles fósiles de la UE alcanzan los 300 000 millones EUR si se incluyen los costes externos. Aunque se trata, con todo, de una proporción relativamente reducida del importe global de más de 4,8 billones EUR 15 , no deja de ser una carga económica importante para la UE. Los precios bajos actuales del petróleo y del gas ofrecen una oportunidad para eliminar progresivamente las subvenciones a los combustibles fósiles, incluidas las exenciones fiscales, sin efectos negativos en el bienestar social.

Para ayudar a encauzar los flujos financieros en torno a la transición hacia una energía limpia:

A fin de garantizar que el sistema financiero pueda financiar un crecimiento sostenible a largo plazo y evitar la dependencia respecto de infraestructuras y activos con niveles elevados de emisiones, la Comisión ha nombrado un grupo de expertos de alto nivel que facilitará asesoramiento antes de finales de 2017 para desarrollar un sistema de financiación sostenible.

Basándose en el informe sobre los precios y costes de la energía que se publica hoy, la Comisión reforzará la transparencia. Seguirá supervisando estrechamente los precios y costes de la energía cada dos años y reforzará su supervisión de las subvenciones a los combustibles fósiles en consonancia con los compromisos del G7 y del G20 para eliminar las subvenciones ineficientes a los combustibles fósiles.

En 2017, la Comisión llevará a cabo una evaluación REFIT del marco normativo europeo de la fiscalidad de la energía para definir los siguientes pasos en el contexto de los esfuerzos por eliminar las subvenciones a los combustibles fósiles.

Los planes nacionales integrados de energía y clima de los Estados miembros les permitirán determinar las inversiones necesarias para la transición hacia una energía limpia. Los Estados miembros también deberían utilizar esos planes para velar por la eliminación progresiva de las subvenciones a los combustibles fósiles.

Al revisar las Directrices sobre ayudas estatales en materia de protección del medio ambiente y energía 2014-2020, la Comisión examinará asimismo cómo dichas normas, junto con las normas sobre ayudas estatales para inversiones en I+i, permiten a los Estados miembros estimular la innovación en tecnologías y soluciones de energías renovables.

4. Investigación, innovación y competitividad

La investigación y la innovación son fundamentales para apoyar la competitividad mundial de Europa y su liderazgo en tecnologías avanzadas de energía renovable 16 y soluciones de eficiencia energética y permitir su integración con éxito en toda la economía. La Unión Europea participa en la iniciativa «Misión innovación», lanzada en la Conferencia de París sobre el clima de 2015, que reúne a países que se comprometen a duplicar su inversión en investigación sobre energía limpia en un período de cinco años.

Junto con este paquete de medidas, la Comisión presenta una estrategia específica sobre aceleración de la innovación en energía limpia 17 . Esta estrategia determina mejor las prioridades y aporta medidas concretas para garantizar que la innovación hipocarbónica se despliegue a mayor escala y llegue al mercado con mayor rapidez. Así pues, la iniciativa constituirá un banco de pruebas para los enfoques horizontales futuros en materia de innovación y competitividad. 

Al acelerar la innovación en energía limpia, Europa puede sacar el máximo partido de la transición hacia una economía hipocarbónica: puede crear oportunidades de crecimiento y creación de empleo, mediante un incremento de las exportaciones y de la creación de empresas, y capacitar a los ciudadanos integrando soluciones digitales.

Las iniciativas industriales también pueden desempeñar un papel importante para impulsar la innovación y la competitividad mundial de la UE. Ya son un elemento importante del Plan Estratégico Europeo de Tecnología Energética (EETE). Pueden hallarse algunos buenos ejemplos de estas iniciativas lideradas por la industria en la energía solar 18 y en el sector de las redes inteligentes 19 y el almacenamiento. Otro buen ejemplo es la hoja de ruta estratégica de la energía oceánica, cuyo objetivo es maximizar la inversión privada y pública en el desarrollo de la energía oceánica, reduciendo en la medida de lo posible los riesgos tecnológicos.

En la estrategia de la Unión de la Energía 20 , la Comisión Europea anunció una iniciativa para la puesta en común y la puesta a disposición de datos, análisis e información confidencial. Esto debe, ante todo, permitir a la Comisión efectuar una evaluación fiable del rendimiento global de las tecnologías de energía limpia de la UE, no solo en cuanto a investigación e innovación, sino también en materia de cuotas de mercado, importaciones/exportaciones, empleo, crecimiento e inversión. Esta evaluación competitiva deberá actualizarse periódicamente cuando se adopte el Estado de la Unión de la Energía, y las acciones y prioridades clave deberán revisarse en consecuencia.

Para impulsar la competitividad europea y el despliegue de tecnologías de energía limpia:

La Comisión presenta hoy una iniciativa para acelerar la innovación en energía limpia, con una serie de medidas concretas a fin de mejorar el entorno reglamentario, económico y de inversión para la innovación en tecnologías y sistemas de energía limpia, y que define las prioridades clave para el uso de los instrumentos financieros y programas de la UE, como Horizonte 2020. 

La Comisión apoyará las iniciativas lideradas por la industria para fomentar el liderazgo mundial de la UE en tecnologías de energía limpia, reforzar los vínculos industriales en toda la cadena de valor e integrar a los agentes no económicos, como los interlocutores sociales y las organizaciones de consumidores. La Comisión estudiará asimismo con las partes interesadas la necesidad de crear un «foro sectorial sobre energía limpia» para reunir a los distintos sectores (energía, transporte, fabricación, digitalización) y optimizar los beneficios de la transición hacia una energía limpia para la industria de la UE.

La Comisión colaborará con la industria, la comunidad de investigadores y otras partes interesadas clave para proporcionar información confidencial estratégica y fiable sobre el rendimiento global de la UE y su posición competitiva en la energía hipocarbónica y las soluciones eficientes desde el punto de vista energético. Esa evaluación competitiva se actualizará periódicamente.

5. Construir la infraestructura física necesaria para apoyar el flujo libre de la energía y la transición hacia una energía limpia

El sistema energético europeo se halla en una fase de transición. Deben actualizarse y modernizarse las redes energéticas para hacer frente a la demanda creciente de electricidad, debida a un cambio sustancial en el conjunto de la cadena de valor y en la combinación energética, con una mayor integración de energías renovables variables. También se necesitan infraestructuras específicas para respaldar la movilidad de bajas emisiones.

La prioridad a corto plazo consiste en garantizar el funcionamiento adecuado del mercado interior de la energía, desarrollando las interconexiones que aún faltan para alcanzar el objetivo de interconexión del 10 % en 2020, poniendo fin al aislamiento de varios Estados miembros y eliminando puntos de congestión interiores. Aun así, las infraestructuras energéticas que se planifiquen ahora deben, a su vez, ser compatibles con las decisiones políticas a más largo plazo, incluida la transición hacia una movilidad de bajas emisiones.

Esto supone asimismo velar por que la eficiencia energética 21 se tenga en cuenta en la planificación del sistema energético general: conseguir una gestión activa de la demanda para reducir el consumo de energía, los costes para los consumidores y la dependencia de las importaciones, y tratar la inversión en infraestructuras de eficiencia energética como una vía rentable hacia una economía circular e hipocarbónica. La inversión en infraestructuras cada vez más inteligentes y flexibles es una de las opciones útiles en todo caso.

Con el fin de apoyar el desarrollo de la infraestructura física necesaria para garantizar la transición hacia una energía limpia y un flujo libre de la energía:

En el marco del informe anual sobre el Estado de la Unión de la Energía, la Comisión hará balance de los proyectos de interés común que se retrasan o aplazan a fin de facilitar su aplicación. También podrá abordar estas cuestiones en sus recomendaciones a los Estados miembros, en particular en lo que se refiere a los proyectos de interés común seleccionados en el contexto de los grupos de alto nivel sobre energía.

Con motivo de la próxima revisión del Reglamento RTE-E en 2017, la Comisión estudiará cómo mejorar el marco normativo para incentivar la realización de los proyectos de interés común.

La Comisión ha creado un grupo de expertos para proporcionar asesoramiento técnico sobre cómo desglosar de forma rentable el objetivo de interconexión de electricidad del 15 % en los niveles de interconexión nacionales, regionales o transfronterizos. La Comisión informará al respecto en el otoño de 2017, junto con la adopción de la tercera lista de proyectos de interés común de la Unión.

6. Digitalización

El objetivo de la estrategia para el mercado único digital de mayo de 2015 22 es crear las condiciones y el entorno adecuados para desplegar las redes y servicios digitales avanzados, también en el sector de la energía.

Para ofrecer un trato equitativo a los consumidores, serán necesarias empresas innovadoras que combinen las nuevas tecnologías energéticas con la tecnología digital (macrodatos, computación en nube) y la tecnología de comunicaciones móviles (5G), así como nuevos productos y servicios (producción descentralizada de electricidad, sistemas de gestión de la energía, aparatos inteligentes y controles inteligentes; y almacenamiento a pequeña escala, incluidos los coches eléctricos) que apoyen a los consumidores activos y contribuyan a optimizar el consumo de energía (reducción y cambio) y, por ende, a ahorrar dinero. En septiembre de 2016, la Comisión propuso una revisión de la normativa sobre telecomunicaciones de la UE para satisfacer las necesidades de conectividad crecientes de los ciudadanos europeos mediante el fomento de la inversión en redes de muy alta capacidad. También presentó un plan de acción para la 5G 23 , que prevé un calendario común de la UE para la coordinación del lanzamiento comercial de la 5G en 2020.

En paralelo, debe mantenerse el diálogo sobre el acceso a los datos, la intimidad y la protección de los datos, así como sobre la ciberseguridad, las normas abiertas y la interoperatividad. La labor sobre este último tema se inició con la Comunicación de la Comisión de abril de 2016 relativa a la digitalización de la industria europea 24 . Con esa Comunicación se lanzó asimismo una nueva iniciativa europea de computación en nube, que puede convertirse en la piedra angular del nuevo sistema de datos sobre energía.

Garantizar la resiliencia de los sistemas de suministro de energía frente a los riesgos y amenazas cibernéticos resulta cada vez más importante, ya que el uso generalizado de las tecnologías de la información y de las comunicaciones y el tráfico de datos están pasando a ser la base del funcionamiento de las infraestructuras subyacentes a los sistemas energéticos. Una plataforma de expertos sobre la ciberseguridad en la energía está analizando las necesidades específicas para la seguridad de las infraestructuras energéticas y asesorará a la Comisión al respecto.

En el contexto de la estrategia del mercado único digital:

La Comisión está preparando una iniciativa para impulsar una economía de datos europea. Junto con la propuesta sobre la configuración del mercado de la energía 25 , esta iniciativa abordará las cuestiones relativas a la localización de datos, así como cuestiones que pueden surgir en materia de propiedad y responsabilidad, (re)utilización, acceso e interoperatividad, y será especialmente pertinente por lo que se refiere a los datos que se necesitan en los procesos y nuevos servicios en el ámbito de la energía.

La Comisión está trabajando en una revisión de la Directiva sobre la privacidad y las comunicaciones electrónicas para armonizarla con las normas recién adoptadas en materia de protección de datos. Este punto será importante para la explotación de los datos sobre consumo de energía inteligente.

Basándose en el éxito del desarrollo de normas sobre las redes inteligentes, la Comisión iniciará en 2017 un proyecto de dos años para desarrollar normas comunes de comunicación segura que garanticen el flujo libre de los datos sobre energía a las partes interesadas pertinentes. La Comisión publicará los resultados antes de finales de 2018.

En 2017, la Comisión creará grupos de trabajo de las partes interesadas en el marco del Grupo de trabajo sobre redes inteligentes a fin de preparar el terreno para los códigos de red en cuanto a respuesta a la demanda, ciberseguridad en el sector de la energía y formato común de los datos de los consumidores. La Comisión presentará un informe sobre la estructura, el alcance y la programación de estos grupos en la primavera de 2017 y los resultados definitivos a finales de 2018.

Partiendo de la labor del Grupo de expertos sobre la ciberseguridad en la energía, la Comisión lanzará una plataforma de consulta con las partes interesadas en 2017 y, si procede, propondrá las medidas adecuadas antes de finales de 2017.

A modo de seguimiento de la estrategia de movilidad de bajas emisiones, la Comisión está adoptando una estrategia europea para el despliegue de sistemas de transporte inteligentes cooperativos, que permita desplegar dichos sistemas en toda la UE de aquí a 2019 y acelerar la transición hacia un transporte por carretera cooperativo, conectado y automatizado.

7. Dimensión exterior

La política exterior y la política de desarrollo son instrumentos importantes para apoyar la transición mundial hacia una energía limpia y ayudar a los países socios, incluidos los de la vecindad de la UE, a cumplir los compromisos suscritos en virtud del Acuerdo de París y los objetivos de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible.

Esto supone una mayor participación de la UE en las iniciativas multilaterales y el fomento de una arquitectura más sólida e inclusiva de la energía a escala mundial, en consonancia con el plan de acción de la UE en materia de diplomacia energética 26 . La UE es un miembro activo de la reunión ministerial multilateral sobre energía limpia, un foro mundial de alto nivel creado para fomentar políticas y programas que impulsen tecnologías de energía limpia, compartir las enseñanzas extraídas y las mejores prácticas, y alentar la transición hacia una economía mundial de energía limpia. La Comisión se cerciorará de que la transición hacia una economía hipocarbónica sigue siendo una parte integrante del diálogo sobre energía y de la cooperación de la UE en sus relaciones bilaterales y multilaterales.

La energía sostenible y la lucha contra el cambio climático son factores fundamentales de la propuesta de la Comisión para un Nuevo consenso europeo en materia de desarrollo 27 . La energía es un factor de desarrollo imprescindible en las soluciones para un planeta sostenible, tal y como se reconoce en la Agenda 2030 y, en particular, en los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) 7 «Energía asequible y no contaminante» y 13 «Acción por el clima» 28 . El enfoque estratégico de la UE en cuanto a la energía en la política de cooperación al desarrollo se centra en tres prioridades clave: i) remediar la falta de acceso a la energía, ii) aumentar la producción de energía renovable, y iii) contribuir a la lucha contra el cambio climático. Habida cuenta de la magnitud de las inversiones necesarias, la UE seguirá aumentando la cooperación con socios de los sectores público y privado para dar respuestas sobre el acceso a la energía, la eficiencia energética y la producción de energía renovable. Estas iniciativas irán en paralelo al apoyo de la UE a los terceros países para luchar contra el cambio climático y desarrollar economías hipocarbónicas y resilientes al cambio climático, en consonancia con el liderazgo mundial de la UE en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.

La Comisión ha propuesto un Plan Europeo de Inversiones Exteriores 29 para ofrecer un paquete financiero integrado a fin de financiar inversiones fuera de la UE. El plan podría incluir un Fondo europeo para el desarrollo sostenible; asistencia técnica para desarrollar proyectos sostenibles y atraer a los inversores; y un conjunto de programas de asistencia técnica al desarrollo para mejorar el entorno estratégico y de inversión de los países interesados, en particular un aumento de las inversiones públicas y privadas en la economía hipocarbónica.

La energía es un elemento fundamental de la cooperación de la UE con sus vecinos, que se centra en reformas normativas y el fomento de la utilización de energías renovables y la eficiencia energética. En la Comunidad de la Energía, por ejemplo, la UE está ayudando a crear un mercado regional de la energía en consonancia con las normas de la UE. En la vecindad meridional, está en curso el proceso de creación de un mercado euromediterráneo de la electricidad y el gas y, en la vecindad oriental, el proyecto EU4energy ofrece apoyo a las reformas en el sector de la energía. Se trata en cada caso de medidas ideadas a fin de crear un entorno propicio para las inversiones en energías renovables y eficiencia energética. En particular, la ayuda de la UE contribuirá a crear el marco regulador que permita el comercio transfronterizo de la electricidad renovable.

Un ejemplo de proyecto con éxito es la mayor planta solar del mundo, radicada en Uarzazat, que proporcionará la mitad de la demanda de energía renovable de Marruecos en 2030 y posiblemente permita exportar electricidad a la UE y hacia el este 30 .

La UE está reforzando la cooperación con los países de los Balcanes Occidentales, Turquía y los países vecinos meridionales y orientales en materia de eficiencia energética. En cooperación con las instituciones financieras internacionales, la Comisión va a intensificar las inversiones en eficiencia energética en el sector de la construcción, empezando con cuatro países piloto: Ucrania, Georgia, Serbia y Túnez.

África es un socio privilegiado de la UE y la Asociación África-UE para la Energía ofrece el marco de cooperación conjunta adecuado. La UE también es partidaria de la Iniciativa africana en materia de energía renovable, una iniciativa liderada por África con el objetivo de aumentar la capacidad africana en energía renovable en 10 GW de aquí al año 2020 y de movilizar el potencial de África de 300 GW de energía renovable de aquí a 2030. Para desbloquear el potencial africano de energía sostenible, se hará hincapié en el aumento de la capacidad de producción con recursos autóctonos, la mejora de las interconexiones transfronterizas y la gobernanza del sector de la energía.

En su calidad de miembro de la Organización Mundial del Comercio, la UE también defiende con empeño la liberalización de bienes y servicios, que puede aportar beneficios ambientales. La UE ha colaborado estrechamente con otros dieciséis miembros de la OMC, que representan la parte preeminente del comercio mundial de bienes ambientales, con el objetivo de lograr un acuerdo ambicioso al respecto. La UE también persigue en sus acuerdos comerciales bilaterales una liberalización rápida de los bienes y servicios ambientales y la facilitación del comercio y la inversión en la producción de energía renovable.

Está previsto que la intensificación de los intercambios comerciales contribuya a la rápida difusión de productos, servicios y tecnologías ambientales en todo el mundo y a la transición hacia una economía hipocarbónica. La UE es líder mundial en la importación y exportación de bienes ambientales. En 2013, las exportaciones de la UE de productos clasificados como «verdes» ascendieron a 146 000 millones EUR (en torno al 8 % del total de la UE), y las importaciones, a 70 000 millones EUR. Las empresas europeas deben aspirar a seguir desarrollando y exportando su creatividad y sus conocimientos técnicos en el ámbito de la innovación.

Por último, la Comunicación sobre la gobernanza de los océanos 31 presenta las medidas que contribuirán a crear una igualdad de condiciones a escala mundial para el sector de la energía oceánica.

En el contexto del compromiso por que la transición hacia una energía limpia sea un elemento esencial de la contribución de la UE a la aplicación de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible y del Acuerdo de París:

La Comisión invita a los colegisladores a adoptar el paquete de medidas del plan de inversiones exteriores con la mayor brevedad.

La Comisión dará prioridad a la energía como uno de los temas centrales de la Cumbre UE-África 2017 que se celebrará en Abiyán en noviembre de 2017.

La Comisión organizará en África, en la primavera de 2017, una Mesa redonda de alto nivel en el foro empresarial sobre energía renovable para mejorar la comprensión y la concienciación en cuanto a los esfuerzos de la Comisión y las necesidades del sector privado para invertir en energía renovable en África.

En la primavera de 2017, en cooperación con las instituciones financieras internacionales, la Comisión hará balance del ejercicio piloto para intensificar las inversiones en eficiencia energética en el sector de la construcción en cuatro países piloto, con vistas a ampliarlo a otros países en el momento oportuno.

En 2017, procederá a la revisión intermedia de la programación plurianual estratégica de la vecindad europea y del instrumento de ayuda de preadhesión a fin de integrar una mayor financiación para la eficiencia energética de los edificios, en el marco de las inversiones en energía, clima y creación de empleo.

La Comisión mantendrá sus esfuerzos para la celebración de un Acuerdo sobre bienes y servicios medioambientales (OMC) a fin de reducir los costes de las actividades destinadas a mitigar el cambio climático.

8. Gobernanza y asociaciones para unos resultados eficaces

La transición energética no puede imponerse por decreto. Requiere una acción política de los distintos niveles de gobierno (local, regional, nacional, de la UE e internacional) y de otras partes interesadas. La Gobernanza de la Unión de la Energía contribuirá a garantizar la armonización de las políticas y a garantizar que la UE en su conjunto alcance sus objetivos en materia de clima y energía, en particular los objetivos para 2030.

La transición hacia una energía limpia solo será posible si se consigue movilizar a las múltiples partes interesadas de la sociedad civil y de los niveles regional y local. La UE está en una posición privilegiada para incorporar la transición hacia una energía limpia a todos los sectores y a todos los niveles de gobernanza. Por consiguiente, será importante que las ciudades, las regiones, las empresas, los interlocutores sociales y otras partes interesadas se comprometan a elaborar y aplicar planes nacionales integrados de energía y clima.

La cooperación regional entre Estados miembros ayudará a estos a cumplir los objetivos de energía y clima de la UE de forma eficaz y rentable. Las propuestas legislativas de este paquete de medidas facilitarán la cooperación regional. La Comisión preparará orientaciones para los Estados miembros en materia de cooperación regional sobre la base de las estructuras de cooperación existentes e integrando la cooperación regional en las cinco dimensiones de la Unión de la Energía.

Dado que las ciudades y las comunidades urbanas constituyen el lugar en el que se producirá concretamente una parte importante de la transformación, la UE ha venido prestando especial atención a estos factores de cambio. La labor encaminada a facilitar la actuación a nivel municipal se intensificó en 2016 con la adopción del «Pacto de Ámsterdam por el que se establece la Agenda Urbana de la UE», la creación del Pacto Mundial de los Alcaldes y la inauguración por la Comisión de una «ventanilla única» de Internet para las autoridades locales que buscan información a medida sobre iniciativas urbanas de la UE, por ejemplo sobre la transición hacia una energía limpia. El Pacto de los Alcaldes para el clima y la energía, como iniciativa emblemática de la UE en pro de una actuación urbana en la lucha contra el cambio climático, está adquiriendo un nuevo impulso con un ámbito de aplicación más amplio, que ahora incluye la mitigación del cambio climático, la adaptación al mismo y el acceso a una energía limpia y asequible. La Comisión está reproduciendo ese modelo de éxito en América del Norte y México, en América Latina y el Caribe, en Japón, en China, en la India, en el Sudeste asiático y en el África subsahariana en el marco del Pacto de los Alcaldes. Debería darse mayor visibilidad a los proyectos municipales y regionales ambiciosos de transición hacia una energía limpia para poder reproducirlos en toda la Unión, por ejemplo en el marco de la Gira de la Unión de la Energía de 2017.

Las zonas rurales también pueden aportar una contribución importante a esa transición, por ejemplo en el ámbito de la eficiencia energética y las energías renovables, incluida la bioenergía sostenible.

Las islas y las regiones insulares ofrecen plataformas para iniciativas piloto sobre la transición hacia una energía limpia y pueden servir de modelo a escala internacional, como, por ejemplo, en las regiones ultraperiféricas de la UE, en El Hierro (Islas Canarias), isla de energía renovable al 100 %. La Comisión desea contribuir a acelerar el desarrollo y la adopción de las mejores tecnologías disponibles en las islas y las regiones insulares, incluido el intercambio de buenas prácticas en materia de financiación y regímenes jurídicos y reglamentarios, así como en el ámbito de la energía para el transporte. El primer paso consiste en reunir a las islas, independientemente de su tamaño, geografía o ubicación.

Para respaldar la integración de la transición hacia una energía limpia:

La Comisión hace un llamamiento a las ciudades, las regiones, las empresas, los interlocutores sociales y otras partes interesadas para que participen de forma activa en el debate sobre la transición energética, sobre todo en el contexto de los planes nacionales integrados de clima y energía, con el fin de que se elaboren soluciones que respondan adecuadamente a las necesidades de los distintos territorios.

En 2017, la Comisión presentará orientaciones a los Estados miembros sobre cooperación regional para facilitar el cumplimiento efectivo y eficaz de los objetivos de la Unión de la Energía.

En el primer semestre de 2017, la Comisión organizará una reunión de alto nivel en La Valeta sobre las oportunidades que ofrece la energía limpia y los desafíos que supone para las islas. Con ella se iniciará un proceso de apoyo a las islas en su transición hacia una energía limpia.

(1)

   Véase la propuesta de modificación de la Directiva relativa al rendimiento energético de los edificios [COM(2016) 765].

(2)

   Propuesta por la que se modifica la Directiva 2003/87/CE para intensificar las reducciones rentables de emisiones y facilitar las inversiones en tecnologías hipocarbónicas [COM(2015) 337].

(3)

    http://s3platform.jrc.ec.europa.eu/

(4)

   Comunicación «Una nueva Agenda de las Capacidades para Europa: Trabajar juntos para reforzar el capital humano, la empleabilidad y la competitividad», COM(2016) 381.

(5)

   La política de cohesión se plasma a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional, el Fondo de Cohesión y el Fondo Social Europeo, que forman parte de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos.

(6)

   Estimación basada en la media ponderada de los cuadros financieros de cofinanciación de los programas operativos 2014-2020 correspondientes a los objetivos temáticos «Favorecer el paso a una economía baja en carbono» y «Promover el transporte sostenible y eliminar los estrangulamientos en las infraestructuras de red fundamentales».

(7)

   Los datos sobre la selección de proyectos a finales de 2016 estarán disponibles a principios de 2017.

(8)

   El primer resumen anual de los avances registrados por los instrumentos financieros con cargo a los Fondos EIE en el período 2014-2020 será elaborado antes de finales de noviembre de 2016.

(9)

   La financiación privada para la eficiencia energética es un instrumento financiero de la UE, creado por la Comisión, financiado con cargo al Programa LIFE y desplegado por el Banco Europeo de Inversiones.

(10)

   COM(2016) 759.

(11)

   COM(2015) 337.

(12)

   Por ejemplo, con China y Corea.

(13)

   En el marco del Acuerdo de París, casi la mitad de los países ha indicado que utilizará mecanismos de mercado para cumplir sus compromisos de reducción de las emisiones.

(14)

   Esta cifra incluye las subvenciones al carbón (9 700 millones EUR) y al gas (6 600 millones EUR), que proceden del legado de subvenciones históricas a la inversión, subvenciones a las inversiones en combustibles fósiles, regulación de tarifas, exenciones fiscales para los combustibles, producción de electricidad y desmantelamiento y eliminación de residuos. (Fuente: estudio de 2014 sobre los costes y subsidios de la energía. Para el transporte (subvenciones al petróleo), la fuente es el inventario de la OCDE de 2013.

(15)

   Fondo Monetario Internacional (2015).

(16)

   Véase asimismo la propuesta de refundición de la Directiva sobre fuentes de energía renovables, SWD(2016) 767.

(17)

   COM(2016) 763.

(18)

   Esta iniciativa se propone mejorar la competitividad y la sostenibilidad del sector, facilitar la expansión asequible y a gran escala, así como su integración en la red eléctrica.

(19)

   «Iniciativa europea sobre la red eléctrica», que pasó a ser, en fecha reciente, la «plataforma europea de tecnología e innovación para las redes inteligentes en la transición energética».

(20)

   COM(2015) 80.

(21)

   Véase la propuesta de modificación de la Directiva relativa a la eficiencia energética [COM(2016) 761].

(22)

   COM(2015) 192.

(23)

   COM(2016) 588.

(24)

   COM(2016) 180.

(25)

   La iniciativa sobre la configuración del mercado consiste en una refundición de la Directiva sobre la electricidad [COM(2016) 864], una refundición del Reglamento de la electricidad [COM(2016) 861], una refundición del Reglamento de la ACER [COM(2016) 863] y un nuevo Reglamento sobre la preparación frente a los riesgos en el sector de la electricidad [COM(2016) 862].

(26)

   Conclusiones del Consejo sobre la diplomacia energética, adoptadas por el Consejo de Asuntos Exteriores el 20 de julio de 2015 (10995/15).

(27)

   Comunicación sobre la propuesta de Nuevo consenso europeo en materia de desarrollo – Nuestro mundo, nuestra dignidad, nuestro futuro [COM(2016) 740].

(28)

   Véase asimismo la Comunicación «Próximos pasos para un futuro europeo sostenible – Acción europea para la sostenibilidad» [COM(2016) 739].

(29)

   Comunicación «Reforzar las inversiones europeas en favor del crecimiento y el empleo: Hacia una segunda fase del Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas y un nuevo Plan Europeo de Inversiones Exteriores» [COM(2016) 581].

(30)

   Gobernanza internacional de los océanos: una agenda para el futuro de nuestros océanos. Comunicación conjunta de la Comisión y de la Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad [JOIN(2016) 49, de 10 de noviembre de 2016].

Top