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Document 52007DC0724

Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones - Un mercado único para la Europa del siglo XXI {COM(2007) 725 final} {SEC(2007) 1517} {SEC(2007) 1518} {SEC(2007) 1519} {SEC(2007) 1520} {SEC(2007) 1521}

/* COM/2007/0724 final */

52007DC0724

Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones - Un mercado único para la Europa del siglo XXI {COM(2007) 725 final} {SEC(2007) 1517} {SEC(2007) 1518} {SEC(2007) 1519} {SEC(2007) 1520} {SEC(2007) 1521} /* COM/2007/0724 final */


[pic] | COMISIÓN DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS |

Bruselas, 20.11.2007

COM(2007) 724 final

COMUNICACIÓN DE LA COMISIÓN AL PARLAMENTO EUROPEO, AL CONSEJO, AL COMITÉ ECONÓMICO Y SOCIAL EUROPEO Y AL COMITÉ DE LAS REGIONES

Un mercado único para la Europa del siglo XXI

{COM(2007) 725 final}{SEC(2007) 1517}{SEC(2007) 1518}{SEC(2007) 1519}{SEC(2007) 1520}{SEC(2007) 1521}

ÍNDICE

1. Introducción 3

2. Aprovechar las oportunidades para los ciudadanos 5

2.1. Dar competencias a los consumidores y a las PYME 5

2.2. Aprovechar la globalización para el beneficio de Europa 7

2.3. Nuevas fronteras: conocimiento e innovación 9

2.4. Las dimensiones social, ambiental y de cohesión 10

3. Obtener resultados 12

3.1. Un mercado único más basado en hechos y guiado por los efectos 12

3.2. Más centrado y mejor ejecutado 13

3.3. Más descentralizado y basado en las redes 14

3.4. Más accesible y mejor comunicado 15

4. Conclusión 16

1. INTRODUCCIÓN

El mercado único es un pilar de la Unión Europea. Ha convertido la libre circulación de personas, mercancías, servicios y capitales en una realidad tangible que ofrece ventajas reales a los europeos[1]. Ha creado puestos de trabajo y estimulado el crecimiento. Ha permitido a los europeos vivir, trabajar, estudiar y jubilarse en un país distinto del suyo. Millón y medio de estudiantes Erasmus, por ejemplo, han aprovechado la movilidad a escala comunitaria. El mercado único ha aportado a los consumidores un abanico más amplio de bienes y servicios a unos precios más bajos, estimulando una mayor calidad y seguridad. Ha creado un conjunto de reglas comunes para las empresas, así como el acceso a un mercado de 500 millones de consumidores. El mercado único ha resultado esencial para el buen funcionamiento de las políticas económica y monetaria de Europa y servido como base sólida para la introducción del euro. El mercado único ampliado ha hecho que Europa sea más abierta, más diversa y más competitiva generando nuevas oportunidades, respetando los derechos sociales y promoviendo un elevado nivel de salud, seguridad y medio ambiente.

A pesar de estos logros, el mercado único aún tiene un potencial que no se ha aprovechado y que debe adaptarse a las nuevas realidades. En febrero de 2007, la Comisión estableció su visión para el mercado único del siglo XXI: un mercado fuerte, innovador y competitivo, que maximice el potencial de los servicios, beneficie directamente a consumidores y empresarios y sitúe a Europa en una posición desde la que pueda responder mejor a la globalización y adaptarse a ella[2].

El presente estudio traduce esta visión en acción. El mercado único se apoyará en sus fuertes bases actuales reposicionándose al mismo tiempo para responder a los nuevos desafíos (la globalización, el rápido ritmo de la innovación y el cambio, las cambiantes realidades social y ambiental). Asimismo, ahora que la UE es más grande y más diversa, el mercado único debe:

- Dar más resultados para ciudadanos, consumidores y PYME : el mercado único debe responder mejor a las expectativas y preocupaciones de los ciudadanos. Debe seguir reportando beneficios a los consumidores en términos de bajadas de precios, calidad, diversidad, asequibilidad y seguridad de los bienes y servicios. Debe alentar las condiciones adecuadas para las pequeñas y medianas empresas.

- Aprovechar más la globalización : el mercado único es una herramienta importante para reportar los beneficios de la globalización a los europeos. Debe maximizar su potencial como trampolín para las empresas que quieran incorporarse a los mercados internacionales, como localización atractiva para los inversores y como líder mundial de referencia en la elaboración de reglas y normas.

- Abrir nuevas fronteras de conocimiento e innovación : el mercado único debe estimular mejor los bienes y servicios que necesitan mucho conocimiento y tecnología como motores del crecimiento futuro.

- Abarcar una fuerte dimensión social y ambiental : la política del mercado único debe tener plenamente en cuenta las implicaciones sociales y ambientales de la apertura de los mercados y debe ir acompañado de medidas que permitan a todos los ciudadanos y empresas aprovechar las nuevas oportunidades.

Todo esto supone nuevos métodos de trabajo y la utilización de una serie de diversos instrumentos. Los esfuerzos se han centrado en suprimir las barreras transfronterizas, fundamentalmente a través de medidas legales. Ahora deben realizarse para desarrollar una serie de instrumentos más variada y un planteamiento más orientado a los efectos haciendo que los mercados den más resultados en las áreas que ofrezcan más beneficios para los consumidores, la creación de crecimiento y empleo. Siguiendo el objetivo de «Legislar mejor» de Europa, se prestará más atención a la aplicación y a la ejecución; se reforzarán las evaluaciones de impacto y la consulta a los interesados; a la simplificación de la legislación existente en la medida de lo posible, eliminando toda la burocracia que resulte innecesaria; y a la supeditación de las políticas y las leyes a una evaluación sistemática. Este esfuerzo exige un compromiso que va mucho más allá de «Bruselas»: en una UE más grande, más diversa, el éxito pasa por la colaboración con los Estados miembros y la implicación de una gama más amplia de interesados.

El mercado único es el núcleo de una serie de políticas de la UE. La creación del euro a final de siglo y su adopción por un número cada vez mayor de Estados miembros refuerza la interacción entre el mercado único y la Unión Económica y Monetaria. El euro ha demostrado ser una garantía de estabilidad y un motor para el proceso del mercado único que ha beneficiado a la economía de la UE en su conjunto, no sólo a la zona euro. Como poderoso estímulo para el crecimiento y el empleo, el mercado único resulta clave para lograr las prioridades marcadas por la estrategia de Lisboa. Este estudio deberá ser seguido en la próxima fase de la estrategia, para la cual la Comisión presentará propuestas en diciembre de 2007. El mercado único también va de la mano con las políticas sociales y ambientales para contribuir a lograr un desarrollo sostenible.

El estudio establece un nuevo planteamiento del mercado único. No incluye un programa clásico de acción legislativa. Su objetivo es más bien estimular la flexibilidad y la adaptabilidad manteniendo al mismo tiempo la seguridad jurídica y reguladora necesaria para preservar un mercado único que funcione adecuadamente. La manera en que lo hará se resume e ilustra con acciones más adelante. Se describe con mayor detalle en los documentos sobre la supervisión del mercado, los instrumentos sobre el mercado único y los instrumentos comerciales que acompañan al estudio. Un documento adjunto sobre los servicios financieros al por menor ilustra más detalladamente cómo se aplicará el planteamiento en este importante sector. El estudio se complementa con una visión sobre cómo promover las oportunidades, el acceso y la solidaridad en la Europa del siglo XXI, que se presenta junto al estudio, así como con un documento de acompañamiento sobre los servicios de interés general. Estos documentos, junto con un resumen de los logros del mercado único, forman el «paquete del estudio». Representan una parte importante de la respuesta de la Comisión a los desafíos de la globalización «El interés europeo: consecución de los objetivos en la era de la globalización»[3] que se presentó en el Consejo Europeo informal en octubre de 2007.

2. APROVECHAR LAS OPORTUNIDADES PARA LOS CIUDADANOS

2.1. Dar competencias a los consumidores y a las PYME

El mercado único debe ofrecer mejores resultados y beneficios tangibles para los consumidores y para las PYME, respondiendo a sus expectativas y preocupaciones. Los consumidores deben sentirse confiados y competentes para utilizar plenamente sus derechos. La apertura de los mercados y la política de los consumidores van de la mano. En la actualidad, los consumidores pueden hacer sus compras en otros países de la UE o en internet sin tener que preocuparse por pagar derechos de aduana o IVA adicional. Gozan de la garantía de unas normas de alto nivel para los alimentos y los bienes de consumo. El etiquetado de productos y alimentos, así como los requisitos de transparencia de los precios, facilitan la comparación a la hora de comprar. Las mercancías que no se ajustan al contrato de venta pueden devolverse y deben ser reemplazadas o reparadas. Existe legislación que prohíbe las prácticas comerciales deshonestas y la publicidad engañosa. La Red de Centros Europeos de los Consumidores (ECC-Net) asesora y apoya a los consumidores en los litigios transfronterizos. Recientemente, la Comisión propuso la elaboración de una Carta de los Consumidores de Energía que establece los derechos básicos del consumidor para el suministro de gas y electricidad. El bienestar de los consumidores también está protegido por la rigurosa aplicación de las normas de competencia de la UE: se han desmantelado carteles en sectores que van desde el de las escaleras móviles al de la cerveza; se han prohibido las fusiones anticompetitivas entre aerolíneas; se ha obligado a empresas como Microsoft, Telefónica, Deutsche Telecom y Wanadoo a dejar de abusar de su posición dominante; el control de las ayudas estatales garantiza el buen uso de los fondos públicos. Todo esto ha contribuido a un mejor funcionamiento y a unos mercados más innovadores que ofrecen mejores bienes y servicios a mejores precios.

Pero hay que seguir actuando. El mercado único debe seguir centrándose en áreas que afectan a las vidas diarias de los consumidores, como la energía, las telecomunicaciones, los servicios financieros al por menor y el comercio al por mayor y al por menor. Debe tratarse la falta de competencia efectiva y la fragmentación de los mercados, en parte causadas por la diversidad de las legislaciones nacionales en materia de contratos con los consumidores, con el fin de asegurarse de que los consumidores disfrutan efectivamente de las ventajas de la apertura de los mercados y que les resulte más fácil comprender cómo puede funcionar para ellos el mercado único. Educando y dando competencia a los consumidores, por ejemplo en el campo de los servicios financieros al por menor, la actuación a escala de la UE puede ser un estímulo para la productividad y la eficacia. Aunque exista un marco regulador para el comercio electrónico, también puede hacerse más para garantizar que los ciudadanos pueden aprovechar las oportunidades ofrecidas por internet.

El mercado único tiene que mantener unas normas de alto nivel, especialmente en áreas tales como la seguridad de los productos y de los alimentos. Se están realizando esfuerzos para mejorar la gestión del mercado de mercancías, por ejemplo a través de una supervisión sólida de los mercados y de una mejor coordinación entre organismos de acreditación, certificación y supervisión. Esto debería también hacer comprender mejor el etiquetado de los productos en la CE con el fin de proteger mejor a los consumidores contra los productos peligrosos. No sólo las mercancías, también los servicios deberían ser seguros y de buena calidad. Es necesario reflexionar más profundamente en qué medida pueden garantizarse y comunicarse mejor en el sector de los servicios la seguridad y la calidad.

El mercado único también debe seguir mejorando las condiciones marco para las empresas. En contraste con los grandes operadores que han aprovechado bien el acceso a las oportunidades del mercado único, las pequeñas y medianas empresas a menudo encuentran el mercado único fragmentado y difícil de penetrar. Por ejemplo, la diversidad lingüística de Europa y las variadas preferencias culturales y de los consumidores, un activo muy valioso y una fuente de innovación, hacen aún más complejo el mercado único para las PYME. Los diferentes planteamientos fiscales y la dificultad para encontrar un apoyo unánime para un planteamiento común de las normas fiscales también pueden actuar como freno sobre la penetración de las PYME en el mercado único. Aunque en los últimos años resulta más rápido y más sencillo crear una empresa en cualquier lugar de Europa, hay que hacer más para mejorar el acceso para las PYME, facilitar su crecimiento y desarrollar su potencial empresarial. La Comisión consultará a todos los interesados a fin de desarrollar otras iniciativas que adapten mejor el mercado único a las necesidades de las PYME de hoy

Cuadro Un mercado para los consumidores y las PYME

Derechos y vías de recurso de los consumidores : Un planteamiento global de los derechos de los consumidores en toda la UE creará un marco regulador sencillo y de fácil cumplimiento y ayudará a eliminar las barreras a las compras transfronterizas a las que se enfrentan actualmente los consumidores y las empresas. Ofrecer recursos a los consumidores, incluidos los más vulnerables, los que tienen necesidades especiales o incapacidades, determinar derechos y normas de accesibilidad y protegerles contra los riesgos y amenazas a los que no pueden enfrentarse de manera individual es un objetivo central de la estrategia de la política de los consumidores. Basándose en su estudio del acervo de los consumidores de la UE, la Comisión presentará nuevas iniciativas en 2008 sobre los derechos contractuales de los consumidores y las vías de recurso colectivo, facilitando también las reclamaciones por daños causados por violaciones de los derechos de los consumidores y del Derecho de competencia.

Acceso a unos servicios financieros al por menor de calidad : La elección de una cuenta corriente bancaria, una forma de pago, un producto de inversión o seguro, una hipoteca personal, un plan de ahorro, pensión o préstamo, un seguro de vehículos de motor, todos ellos suponen decisiones personales importantes con un efecto significativo en las economías domésticas. Parece probado que este sector puede ofrecer grandes beneficios en términos de precios, opciones y confianza en los productos y servicios ofrecidos. Un documento de trabajo de los servicios de la Comisión publicado junto a este informe describe las iniciativas previstas por la Comisión para estimular la competencia y mejorar la capacidad de los consumidores para tomar decisiones por sí mismos. Entre ellas están mejorar sus conocimientos financieros, permitir a los consumidores cambiar fácilmente de proveedores y de cuentas bancarias, eliminar las ventas vinculadas de productos contrarias a la competencia y estimular el mercado de créditos hipotecarios.

Seguridad alimentaria : La UE tiene el compromiso de garantizar la máxima seguridad alimentaria en todo su territorio. La Comisión presentará una iniciativa sobre el etiquetado de los alimentos y los productos nutritivos y revisará la legislación sobre nuevos alimentos.

Productos farmacéuticos : La consolidación y racionalización de los mecanismos de vigilancia del mercado de medicamentos contribuirán a mejorar la seguridad de los pacientes en Europa. La mejora del acceso a la información sobre productos y servicios farmacéuticos permitirá a los pacientes tomar decisiones más informadas sobre su salud. La Comisión está preparando un paquete de medidas para lograr estos objetivos, que también ayudarán a mantener a Europa como lugar prioritario para la innovación y el desarrollo relacionados con la salud.

Una Ley de la Pequeña Empresa para Europa : La Comisión examinará una serie de iniciativas para apoyar a las PYME, en forma de Ley de la Pequeña Empresa para Europa en 2008. Esto podría proporcionar directrices y disposiciones adaptadas para las PYME siguiendo el principio de «pensar primero a pequeña escala». Podría reunir los elementos de diversas políticas y legislaciones referentes a las PYME con el objetivo de reducir más la carga administrativa innecesaria, aumentar la participación de las PYME en los programas de la UE, mejorar el acceso de las PYME a la contratación pública y reducir los obstáculos al comercio transfronterizo, favoreciendo de este modo la innovación y el crecimiento. La Comisión también examinará de qué forma las políticas y las prácticas fiscales afectan al crecimiento de las PYME y propondrá un Estatuto de la sociedad privada europea para facilitar las actividades transfronterizas de las PYME.

Mejora del entorno fiscal : Se seguirán realizando esfuerzos para reducir los costes de cumplimiento resultantes de la fragmentación fiscal del mercado interior, en especial para las PYME, así como para permitir a las empresas elegir una base impositiva a escala comunitaria. Las iniciativas políticas para reducir la doble imposición también deberían facilitar la actividad transfronteriza tanto a las empresas como a los ciudadanos.

2.2. Aprovechar la globalización para el beneficio de Europa

La globalización es una fuente formidable de dinamismo y de cambio. El mercado único es el mejor activo de Europa para sacar provecho de la globalización. Permite a los europeos beneficiarse de la apertura de los mercados de todo el mundo por la reducción de los precios y el aumento de las posibilidades de elección. Incita a las empresas a mejorar la eficiencia e innovar y ayuda a que consoliden su competitividad con el fin de incorporarse a los mercados internacionales. Hace que Europa resulte más atractiva a inversores y empresas de todo el mundo. Permite a Europa tomar la iniciativa en la fijación de referencias y en el logro de la convergencia de normas en todo el mundo, facilitando las exportaciones europeas y garantizando que las importaciones cumplen las normas necesarias, protegiendo también con ello a los ciudadanos europeos.

Para desarrollar su régimen regulador, la UE ha trabajado con los Estados miembros con el fin de conciliar sus diversos planteamientos y encontrar la mejor combinación que permita que el comercio prospere respetando al mismo tiempo la legislación laboral, la salud, la seguridad y las normas ambientales. Esto ha llevado a la UE a desarrollar un marco regulador y de supervisión moderno e innovador, siendo vista como organismo elaborador de normas internacionales en muchas áreas, tales como la seguridad de los productos, la seguridad de los alimentos, la protección del medio ambiente, la contratación pública, la reglamentación financiero y la contabilidad. La norma GSM es utilizada actualmente por casi dos mil quinientos millones de clientes de móviles de todo el mundo. En la negociación de las emisiones de CO2, la seguridad de la aviación o las sustancias químicas, la UE ha establecido nuevas normas, que se están adoptando gradualmente en todo el mundo. La política de competencia de la UE también tiene un alcance global, con el desafío de la Comisión a los carteles, las fusiones anticompetitivas y los abusos de posición dominante que afectan a los consumidores y a las empresas europeos, independientemente de la nacionalidad de las empresas afectadas. El contexto internacional está cambiando rápidamente. Muchos desafíos exigen cada vez más una acción internacional coordinada, ya sea para abordar el cambio climático o para luchar contra la piratería y la falsificación. Se está abriendo paso un nuevo enfoque internacional centrado en la cooperación reguladora, la convergencia de normas y la equivalencia de reglas. Este planteamiento debería desarrollarse más en interés común de la UE y de sus socios. Esto estimulará una «convergencia de máximos» en lugar de una «carrera a los mínimos».

¿Que puede hacerse para alcanzar este objetivo? El camino a seguir debe basarse en tres pilares identificados en la agenda «una Europa global»[4].

Cuadro 2. Una Europa global: El camino a seguir

Ampliar el espacio competitivo para las empresas europeas más allá de los límites físicos del mercado único, abriendo otros mercados a través de la liberalización comercial multilateral y bilateral, así como de la aplicación activa de los derechos de acceso al mercado. La Comisión está comprometida con el éxito del Programa de Doha para el Desarrollo. Empleando la plataforma creada por la Organización Mundial del Comercio, la Comisión ha iniciado negociaciones para lograr acuerdos de libre comercio «profundos» destinados a lograr un mejor acceso al mercado para las empresas de la UE y un elevado nivel de convergencia reguladora. También se pondrán en marcha iniciativas específicas para estimular la aplicación de los derechos de propiedad intelectual y el respeto total de las normas internacionales sobre subvenciones. Por otra parte, el control de las ayudas estatales, como uno de los instrumentos de la política de competencia, garantiza un mercado interior competitivo integrado. Esto debe complementarse con el uso activo de herramientas de política comercial para responder a las subvenciones extranjeras abusivas y otras prácticas comerciales desleales, así como garantizar unas condiciones de competencia equitativas a escala internacional, incluyendo la apertura activa de mercados en el extranjero.

Ampliar el espacio regulador del mercado único , promoviendo la cooperación sobre normas y valores de Europa en el extranjero permitiendo que las normativas europeas se beneficien de las mejoras prácticas de todas partes, y garantizando que las normas europeas sean una referencia para los estándares mundiales. La Comisión participa en una serie de diálogos multilaterales y bilaterales para mejorar la convergencia reguladora con sus principales socios y con sus vecinos inmediatos. Multilateralmente, es importante avanzar en el problema de la coherencia reguladora en la agenda de la OMC. Foros bilaterales, como el Diálogo Regulador sobre los Mercados Financieros UE-EEUU o el Consejo Económico Transatlántico de reciente creación, constituyen buenas oportunidades de cooperación efectiva. Estos esfuerzos deberían ser más concentrados, complementar las negociaciones comerciales y relacionarse más eficazmente con los esfuerzos de cooperación a la formación, asistencia e investigación. La Comisión también debería apoyar a supervisores y reguladores europeos en la profundización de su cooperación internacional. La UE debe seguir desempeñando un papel de liderazgo en organismos internacionales de elaboración de reglas y establecimiento de normas, y para ello necesita hablar con una sola voz. Por ejemplo, la Comisión buscará una mayor convergencia de las normas de competencia en foros internacionales, como la OCDE. Por último, la UE también debe poder aprender: estudiar las normas internacionales al concebir las propias soluciones políticas de Europa e inspirarse en las mejores prácticas de los reguladores extranjeros debería servir para mejorar la normativa de la UE y facilitar su aceptación en el extranjero.

Asegurarse de que los beneficios de la apertura llegan a los ciudadanos europeos , a través de mejores normas, precios más bajos y más opciones, que deben lograrse mediante una estrecha supervisión de los mercados y una actuación apropiada para mejorar su funcionamiento o para crear un entorno más competitivo en la UE y en los Estados miembros. La UE tiene una responsabilidad específica en el seguimiento de los acuerdos comerciales y la garantía de que produzcan los efectos previstos. El caso de los productos textiles es un buen ejemplo de las condiciones que deben cumplirse para que la apertura de los mercados dé sus frutos. En enero de 2005, tras una fase transitoria de aproximadamente una década, se desmanteló un sistema de cuotas con 40 años de antigüedad para los productos textiles y la ropa (los «Acuerdos Multifibras») siguiendo las normas de la OMC. Un estudio reciente ha mostrado que la repercusión para los consumidores, aunque positiva por término medio, ha variado mucho en la UE dependiendo de la estructura de la industria nacional competente y del nivel de competencia en el sector minorista. En Irlanda y Reino Unido, los precios de la ropa han bajado en torno al 50 por ciento en términos reales, mientras que en Italia y España se han mantenido en gran medida. Este tipo de análisis se hará en otros sectores, promoviendo medidas de acompañamiento para que los consumidores puedan aprovechar los beneficios del comercio internacional.

Un documento sobre la dimensión exterior del mercado único que acompaña a este informe detalla en mayor medida cómo deberían ajustarse las herramientas del mercado único para dar respuesta al cambiante contexto internacional.

2.3. Nuevas fronteras: conocimiento e innovación

El mercado único concebido originalmente para una economía basada en los productos primarios y los bienes manufacturados tiene que adaptarse para estimular la apertura y la integración en una economía basada en el conocimiento y orientada a los servicios.

En la actualidad, los servicios constituyen la fuerza económica dominante en Europa. El sector de los servicios supone el 70% del PIB, el 68% del empleo y el 96% de los nuevos puestos de trabajo creados en la UE. Sin embargo, sólo supone el 20% del comercio en el interior de la UE. Esto refleja el hecho de que los servicios tienen a menudo un carácter intrínsecamente local y el cliente quiere estar cerca del prestador de servicios. Pero también indica la necesidad de explotar más su potencial, reducir barreras y aumentar la competencia en el sector de los servicios. El hecho de que sólo el 6% de los europeos esté utilizando las operaciones electrónicas transfronterizas ilustra el potencial que sigue sin ser aprovechado.

Se están adoptando muchas medidas. La prestación de servicios en toda la UE debería desarrollarse con la aplicación de la Directiva sobre servicios, que debe transponerse al Derecho nacional para finales de 2009. Del mismo modo, las iniciativas sobre las industrias de red (energía, telecomunicaciones, servicios postales, transporte) están dando resultados in situ cuando se aplican plenamente. Por ejemplo, gracias al marco europeo unificado de telecomunicaciones, los ciudadanos y las empresas se han beneficiado de una bajada de precios, más opciones y servicios innovadores. La reorientación de la ayuda estatal hacia objetivos horizontales como la innovación y el conocimiento también debería contribuir a aprovechar el potencial del mercado único.

Sin embargo, aún puede hacerse más. Por ejemplo, se debería permitir que los ciudadanos, las empresas y las autoridades públicas aprovechen las nuevas oportunidades que se ofrecen en Europa utilizando las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Las TIC son esenciales para el buen funcionamiento del «mercado interior por vía electrónica», creando servicios interoperables tales como la facturación, la contratación y la informatización aduanera. Con el rápido desarrollo de estas tecnologías, existe el riesgo de que los Estados miembros opten por soluciones distintas o incompatibles y que surjan nuevas «barreras electrónicas» para los usuarios finales. Los Estados miembros y la Comisión, trabajando juntos, deben redoblar sus esfuerzos para evitar la fragmentación del mercado y promover soluciones relacionadas con las TIC comúnmente acordadas.

Es necesario realizar más esfuerzos para promover la libre circulación del conocimiento y la innovación como «quinta libertad» en el mercado único. El mercado único puede ser una plataforma para estimular la innovación en Europa. Fomenta la difusión de nuevas tecnologías en toda la UE. Favorece a las redes (virtuales y reales) y estimula el desarrollo de un sector logístico sofisticado que permita la gestión integrada de los flujos de mercancías, energía, información, servicios y personas. Facilita el intercambio de conocimiento a través de la movilidad de trabajadores, investigadores y estudiantes. Más adelante se esbozan varias iniciativas para estimular el mercado único del conocimiento y la innovación.

Cuadro 3. No existen fronteras para las personas, los productos y los servicios innovadores

Movilidad de los investigadores : El Séptimo Programa Marco de Investigación ofrece apoyo directo a las redes e integra la investigación en toda la UE. Como parte de la realización de una zona europea de investigación, se está trabajando para introducir el equivalente de un «pasaporte de investigador» que eliminaría las barreras a la movilidad de los investigadores y facilitaría el intercambio de los mismos.

Un marco modernizado para las comunicaciones electrónicas : Las nuevas propuestas de reforma de la Comisión para las normas de las telecomunicaciones en la UE aspiran a la realización del mercado único de los servicios de telecomunicaciones, lo cual resulta esencial para una economía y una sociedad más digitales. Estas propuestas aumentarán la coherencia y la predictibilidad y facilitarán el desarrollo de nuevos servicios transfronterizos. También desarrollarán el potencial económico del liderazgo de Europa en las tecnologías inalámbricas haciendo unas políticas de espectro de radio más eficaces, flexibles y orientadas al mercado. En 2008 las propuestas serán seguidas por una iniciativa de actualizar el servicio universal en apoyo de la transición a una sociedad de la información para todos.

Derechos de propiedad intelectual : Se han sentado las bases para que las decisiones se adopten en un marco común de la UE para la protección de patentes, elaborando un sistema de patentes sencillo, rentable y de alta calidad para Europa. La Comisión presentará una estrategia para los derechos de propiedad industrial en 2008, incluidas las actividades que aspiran a mejorar la concienciación y la aplicación de los derechos de propiedad industrial por parte de las PYME y la gestión de los derechos de propiedad industrial por parte de instituciones de investigación que cuentan con financiación pública. Por otra parte, se propondrá un plan de actuación sobre aduanas para combatir la falsificación y la piratería.

Normalización : La Comisión presentará una estrategia de normalización en 2008 para permitir que los resultados de la I+D encuentren su camino para llegar a los mercados, en especial a través de las PYME, y faciliten la adopción de nuevas tecnologías para el ahorro de energía y ambientales. Se pondrá un énfasis particular en la participación de las PYME y de la comunidad investigadora.

Facturación electrónica : La Comisión propondrá un marco europeo para la facturación electrónica que facilitará la transmisión de facturas en formato electrónico en toda la UE.

Autentificación y firma electrónicas : Partiendo del trabajo en curso en el ámbito de la administración en línea, la Comisión presentará en 2008 un plan de acción específico para promover más la aplicación de la firma y la autentificación electrónicas mutuamente reconocidas e interoperables (identidad electrónica) entre los Estados miembros, facilitando con ello la prestación de servicios públicos transfronterizos.

Informatización aduanera : En el año que se cumple el 40 aniversario de la Unión Aduanera, la Comisión y los Estados miembros van a empezar a aplicar la Decisión relativa a la informatización aduanera, cuyo objetivo es conseguir que las aduanas y los sistemas informáticos de las empresas sean interoperables en toda la UE.

2.4. Las dimensiones social, ambiental y de cohesión

La apertura de los mercados y la integración económica tienen repercusiones sociales y ambientales, que deben tenerse en cuenta tanto en Europa como en el extranjero. Esto exige una mejor evaluación del impacto de las decisiones y una mejor capacidad colectiva para anticipar, estimular y gestionar los cambios derivados de una mayor apertura y de los avances tecnológicos. Esto también implica conseguir que los precios de mercado reflejen sus costes reales en la sociedad y el medio ambiente, así como concienciar a los ciudadanos sobre las consecuencias para el medio ambiente y para la sociedad de sus opciones como consumidores. Estas prioridades son esenciales para la viabilidad a largo plazo del mercado único y constituyen la base de la estrategia del desarrollo sostenible, de modo que los beneficios de un mundo más abierto sean compartidos de manera más uniforme y se transmitan a generaciones futuras.

El desarrollo del mercado único ha ido acompañado de la agenda social europea. El conjunto de derechos compartidos y de valores, que se expresan claramente en el artículo 2 del Tratado de Reforma y en el «acervo» comunitario en materia de política social, reflejan un compromiso de actuación europea en varias áreas de política social.

La política económica, social y de cohesión territorial europea, apoyada por los fondos estructurales de la UE, conecta y capacita a ciudadanos y empresas, ayudando al mercado único a desarrollar todo su potencial. Esta política ha ayudado a difundir los beneficios del mercado interior a todas las regiones de la Unión, garantizando que las ventajas de la apertura son ampliamente compartidas y amortiguando los posibles efectos negativos del ajuste.

Las sociedades europeas evolucionan rápidamente. Los avances tecnológicos y la globalización están afectando la forma en que los europeos viven y trabajan, con nuevas oportunidades de empleo, carrera y servicio, la demanda de nuevas cualificaciones y un ritmo de cambios cada vez mayor. El mercado único ha impulsado nuevas tendencias en la movilidad intracomunitaria. Algunos trabajadores tienen dificultades de adaptación y ven estos grandes procesos como una amenaza, especialmente cuando afectan a sus comunidades locales. Son preocupaciones legítimas que deben tenerse en cuenta. Deben garantizarse los derechos de los trabajadores y mantenerse unas condiciones de competencia equitativas, especialmente a través de la correcta aplicación de la legislación laboral de la UE.

Tener más en cuenta la dimensión ambiental no es sólo importante por sí mismo, sino que también puede generar muchas nuevas oportunidades. La ecoindustria no sólo emplea a sectores como la fabricación de coches o los productos farmacéuticos. La determinación de la UE de actuar y promover sus normas a escala internacional supondrá una ventaja importante en la forma de promover las nuevas tecnologías y generar nuevos empleos. La experiencia de Europa en la lucha contra el cambio climático, por ejemplo, promocionando los productos y servicios con baja intensidad de carbono, sirve de inspiración en todo el mundo, estableciendo referencias mundiales y generando nuevos mercados de exportación.

Cuadro 4. Hacer avanzar la Europa social

Preparar el camino para una nueva agenda social : Como parte de la Agenda para los Ciudadanos de la Comisión, se está realizando una consulta sobre la realidad social de Europa. Junto a este informe, la Comisión está publicando una visión sobre cómo los europeos pueden acceder a las oportunidades generadas por una Europa abierta, moderna y cambiante. Las reacciones a esta visión servirán para la preparación de una agenda social renovada que establezca iniciativas a escala de la UE, que la Comisión presentará a mediados de 2008.

Servicios de interés general : El protocolo acordado junto al Tratado de Lisboa establece los principios de la UE aplicables a los servicios de interés general y establece un marco nuevo, transparente y fiable para el Tratado. Es fruto de la experiencia de una década de debate sobre el papel de la UE y resalta la convergencia de puntos de vista, especialmente desde el Libro Blanco de la Comisión de 2004. Junto a este estudio se presenta un documento sobre servicios de interés general, incluidos los servicios sociales de interés general, para examinar esta nueva situación. Pronto se presentará una iniciativa sobre los servicios de atención sanitaria.

Facilitar la movilidad : La movilidad de los trabajadores es un derecho establecido por el Tratado de la UE y resulta esencial para el funcionamiento del mercado único. Se facilitará más la libre circulación de trabajadores cuando lleguen a su fin los acuerdos transitorios previstos para los nuevos Estados miembros. Tras el Año Europeo de la Movilidad de los Trabajadores 2006, la Comisión presentará un plan de acción de movilidad laboral para finales de 2007 que incluirá un estudio de las normas comunitarias sobre la coordinación de la seguridad social.

Derecho l aboral de la UE : Las normas vigentes en la UE reconocen los derechos fundamentales de los trabajadores, por ejemplo en materia de información y consulta, e imponen exigencias mínimas que garantizan unas condiciones equitativas para trabajadores y sociedades. En 2008, la Comisión presentará una propuesta para modificar la Directiva sobre la constitución de un comité de empresa europeo.

Integración transfronteriza : Para ayudar a los ciudadanos de la UE a vivir y trabajar en las regiones fronterizas se ha concebido un nuevo instrumento legal, denominado "agrupación europea de cooperación territorial" (AECT), para poder presentar nuevos enfoques cooperativos transfronterizos en áreas tales como la atención sanitaria, la prevención de riesgos, la protección ambiental, la cultura, el turismo y las infraestructuras transfronterizas locales.

3. OBTENER RESULTADOS

Para que dé resultados, el mercado único debe adaptarse y aplicar nuevos planteamientos. Esto es muy importante ahora que la UE es mayor y más diversa. El buen funcionamiento del mercado único es una responsabilidad conjunta de todos los niveles de gobierno y supervisión. El mercado único se basa en la confianza, una confianza que puede estimularse y consolidarse tanto mediante una estrecha colaboración administrativa como mejorando la información. Es necesario contar con una asociación renovada para asegurarse de que el mercado único aproveche su potencial.

3.1. Un mercado único más basado en hechos y guiado por los efectos

La UE debería centrarse en las áreas más importantes, actuando cuando los mercados no funcionen bien y cuando el efecto sea máximo. La acción exige esfuerzos por parte de todos los interesados para seguir la evolución del mercado, identificar problemas, evaluar el margen de acción y obtener información de la base. Los esfuerzos para mejorar el funcionamiento de los mercados del gas y la electricidad ofrecen un buen ejemplo.

La Comisión y las autoridades nacionales tienen mucha experiencia con la supervisión de los mercados y los sectores. Esto debe desarrollarse aún más. Las investigaciones del sector de la competencia, la identificación de los mercados líderes y el desarrollo de iniciativas tecnológicas conjuntas dan buena parte de la respuesta. Pero en varias áreas deben recogerse más pruebas recibiendo reacciones efectivas del funcionamiento del mercado único en la práctica. También debe tenerse más en cuenta a los consumidores, las PYME y la dimensión global, así como las consecuencias sociales y ambientales.

Cuadro 5. Actuar donde resulte importante

Supervisión de los mercados y de los sectores : Como parte de este estudio, los servicios de la Comisión han desarrollado una metodología para una supervisión más sistemática del funcionamiento de los mercados más importantes de bienes y servicios. La primera etapa de esta metodología consistió en estudiar los sectores que ofrecían los mayores beneficios potenciales en términos de crecimiento, creación de empleo y bienestar de los consumidores. En la segunda etapa, se examinarán más detalladamente los sectores seleccionados para determinar por qué están funcionando mal los mercados (falta de apertura o integración, falta de posibilidades y transparencia para los consumidores, bajo grado de competencia, insuficiente entorno reglamentario y falta de innovación). Esto permitirá obtener información esencial para abordar los desafíos específicos a los que se enfrenta el(los) sector(-es) afectado(-s). Este informe va acompañado de un documento de trabajo de los servicios de la Comisión en el que se presentan los primeros resultados. La Comisión tiene intención de trabajar estrechamente con las autoridades nacionales para desarrollar este nuevo enfoque.

Un indicador de los consumidores : La aplicación de la metodología antes citada se basará en un indicador de los consumidores que servirá para supervisar los resultados desde la perspectiva de los mismos y mostrar qué mercados no están dando los resultados económicos o sociales esperados, utilizando indicadores clave tales como denuncias, precios, satisfacción de los consumidores, posibilidades de intercambio y seguridad, así como indicadores sectoriales adicionales cuando sea posible. Se elaborarán nuevas fuentes de datos, por ejemplo para comparar precios de consumo. Este indicador se integrará con el Indicador del Mercado Único a partir de 2009.

3.2. Más centrado y mejor ejecutado

Para que avance el mercado único, la Comisión se ha comprometido a utilizar una combinación de herramientas «más inteligente», unas herramientas que sean simples y tengan en cuenta plenamente la subsidiariedad, la proporcionalidad y distintas tradiciones nacionales.

Ciudadanos y empresas necesitan seguridad jurídica para dedicarse con confianza a actividades transfronterizas. Las disposiciones reglamentarias siguen siendo, por lo tanto, importantes en algunas áreas, pero pueden no ser siempre necesarias o adecuadas, por ejemplo cuando los obstáculos para el funcionamiento del mercado único no sean fundamentalmente legales, sino principalmente de comportamiento o institucionales. La diversidad de la UE constituye un incentivo aún mayor para que la legislación sea sencilla. En la práctica, los mejores resultados, por lo tanto, se lograrán a menudo mediante una combinación de herramientas (por ejemplo, mercado único y competencia), que complemente instrumentos jurídicamente vinculantes con planteamientos tales como la orientación, la autorregulación, la formación o la asistencia. Es necesario realizar continuos esfuerzos para implicar y consultar a los interesados sobre las políticas del mercado único. Las propuestas importantes seguirán siendo objeto de análisis de impacto rigurosos y la Comisión está comprometida con la reconsideración de la intervención de la UE cuando deje de lograr los objetivos deseados o éstos hayan cambiado, ya sea por la evolución del mercado o por la actuación a un nivel local, regional, nacional o internacional.

La aplicación y cumplimiento de las normas del mercado único en toda la UE resultan fundamentales. Los beneficios del mercado único no se materializarán si no se aplica correctamente el Derecho comunitario o si no se mantienen satisfactoriamente los derechos que crea ni se garantizan los medios de recurso. Proseguirán los esfuerzos para mejorar la aplicación del Derecho comunitario con el fin de garantizar que los ciudadanos, los consumidores y las empresas comprenden y pueden hacer un uso efectivo del marco regulador del mercado único.

Cuadro 6. Utilizar mejor las herramientas del mercado único

Una mejor combinación de instrumentos : Junto a este informe se presenta un documento de trabajo de los servicios de la Comisión que examina las herramientas disponibles para dar forma, gestionar y aplicar las políticas del mercado único, y debate cómo pueden lograrse mejores resultados a todos los niveles de gobernanza.

Mejora de la aplicación : Tal como establece en su reciente Comunicación sobre la aplicación del Derecho comunitario[5], la Comisión adoptará medidas en estrecha colaboración con los Estados miembros para evitar que se planteen problemas y resolver rápidamente los constatados. En los casos en que se produzcan infracciones del Derecho comunitario, éstas serán tratadas y la Comisión dará prioridad a las que tengan mayor repercusión. Se solicitará a los Estados miembros que faciliten la información concordante que muestre cómo se transpone al Derecho nacional la legislación comunitaria. La Comisión publicará más información de carácter general sobre el estado actual de aplicación de la ley y de los procedimientos legales para asegurar la corrección de las infracciones del Derecho comunitario.

Solución concreta de los problemas : SOLVIT es una red de expertos del mercado único a la que pueden recurrir los ciudadanos y las empresas que encuentran problemas causados por la incorrecta aplicación de las normas de la UE por parte de las autoridades nacionales. Desde su creación en julio de 2002, la red de centros nacionales SOLVIT y el equipo SOLVIT de la Comisión han resuelto más de 1 300 problemas, provocando a veces modificaciones importantes en la legislación nacional. Alrededor del 80% de los problemas encontrados se han resuelto, sin tener que utilizar la vía judicial, la mayoría de ellos en el plazo de diez semanas. A medida que la gente conoce los servicios que SOLVIT puede ofrecer, se van recibiendo más casos.

3.3. Más descentralizado y basado en las redes

El mercado único exige medidas por parte de las autoridades y de los interesados a todos niveles de gobernanza de la UE. Deben conjuntarse para asegurarse de que las normas del mercado único se conozcan, comprendan, apliquen y hagan cumplir. Fomentar la responsabilidad y reforzar la confianza mutua resultan claves para conseguir que el mercado único funcione de manera efectiva: esto exige nuevas relaciones laborales y nuevos planteamientos.

La experiencia en algunos Estados miembros ha demostrado que puede ganarse mucho con la creación de «centros del mercado único» coordinando los esfuerzos nacionales para conseguir que el mercado único funcione. En la UE, el ejemplo de la Red de Competencia Europea muestra cómo una red formada por las autoridades de competencia de los Estados miembros y la Comisión puede garantizar la aplicación efectiva y coherente de las normas de la UE. Tal como se hace, por ejemplo, en el ámbito de las aduanas y a través de la Red de aplicación legislativa en materia de consumo, la UE también puede desempeñar un papel en el apoyo al intercambio de información y de personal entre las Administraciones nacionales. En muchas áreas, se puede intensificar la cooperación, el establecimiento de redes y el intercambio de prácticas entre autoridades administrativas, judiciales y reguladoras de los Estados miembros, así como entre reguladores de la UE.

Cuadro 7. Trabajo en asociación

Estos últimos años se han adoptado muchas iniciativas a nivel local, regional, nacional y de la UE para mejorar la transposición, aplicación y ejecución de la legislación de la UE, difundir la información y reforzar la cooperación transfronteriza entre las administraciones. La UE puede basarse en estas experiencias para identificar lo que funciona bien y lo que no, y dónde resulta necesario un mayor esfuerzo para hacer que el mercado único sea una realidad. La Comisión trabajará con los Estados miembros en el Comité Consultivo del Mercado Interior para identificar las buenas prácticas, acordar directrices y proporcionar apoyo mutuo. Los coordinadores nacionales responsables de la estrategia de Lisboa también deberían ser invitados a desempeñar un papel importante en el fortalecimiento de la coordinación estratégica y el intercambio de experiencias.

3.4. Más accesible y mejor comunicado

Puede hacerse mucho más para mejorar la comunicación y dar a conocer las oportunidades ofrecidas por el mercado único. Los ciudadanos, las empresas y las autoridades locales y regionales deben tener acceso a la información y comprender las normas para aprovechar oportunidades que ofrece el mercado único. La transparencia de las normas y el acceso fácil a la información tiene también especial importancia para los socios no pertenecientes a la UE.

Se anima a los Estados miembros a reforzar sus actividades de comunicación en el mercado único y a dar a conocer mejor las fuentes de información. La Comisión apoyará estos esfuerzos. Como parte de ese estudio, se han intensificado las actividades de comunicación: se ha puesto en marcha un proyecto piloto de «embajadores del mercado único» y se está desarrollando un punto de acceso único a internet para los diversos servicios de asistencia sobre el mercado único de la UE. Todo ello complementará el trabajo más amplio que están desarrollando la Comisión y los Estados miembros sobre la provisión de información y resolución de problemas para ciudadanos y empresas.

Cuadro 8. Mejora del acceso a la información

¿ Necesita ayuda ? Servicios de asistencia de la UE : ¿Está viajando por Europa y se pregunta sobre sus derechos?¿Está buscando trabajo?¿Tiene problema con la matriculación de su coche?¿Tiene dificultades para crear su empresa? Europa tiene respuestas y puede ayudarle. Se creará un punto central único que integrará los servicios en línea existentes en la UE para que los ciudadanos y las empresas encuentren respuestas sobre el mercado único, bajo la forma de acceso a través de la «ventanilla única» a los actuales sistemas de información, asistencia y resolución de problemas gestionados por la UE (incluidos Europe Direct, Tu Europa, SOLVIT, el Servicio de Orientación de los Ciudadanos, EURES y la nueva red integrada de apoyo empresarial).

¿Quiere ver cómo está funcionando el mercado único? El cuadro de indicadores del mercado único : La Comisión supervisará los resultados del mercado único e informará regularmente sobre las prioridades en el Consejo Europeo de primavera. Esto incluirá la información ya recopilada sobre la transposición de directivas de la UE, infracciones y el uso de mecanismos de resolución de problemas, como SOLVIT. También incluirá indicadores económicos, por ejemplo sobre el seguimiento de los mercados, y fomentará la evaluación comparativa de los resultados entre los países de la UE. En 2008 se publicará una primera edición de este indicador ampliado del mercado único.

4. CONCLUSIÓN

El mercado único, uno de los éxitos más concretos de Europa, puede ayudar a ésta a resolver los desafíos del siglo XXI. Un mercado único abierto, integrado y competitivo estimulará el crecimiento económico y unas relaciones comerciales sanas, abrirá posibilidades y creará puestos de trabajo. Impulsará los intereses y valores de los europeos en la era de la globalización. Vendrá acompañado del acceso universal efectivo a servicios clave, altas normas sociales y ambientales y altos niveles de inversión en investigación y educación. Como esfuerzo conjunto de todos los interesados y de todos los niveles de gobierno, el mercado único mostrará los resultados que Europa puede ofrecer a sus ciudadanos.

Para llevar adelante las ideas establecidas en el estudio, la Comisión invita al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones a:

- Ofrecer su apoyo de forma amplia al reposicionamiento del mercado único según se describe en esta Comunicación; en especial, el Consejo de primavera de 2008 debería asegurarse de que las prioridades del mercado único figuren de manera más prominente en la estrategia de Lisboa, incluida su dimensión exterior, y de que los resultados de este informe alimentan el próximo estudio de la Unión Económica y Monetaria con motivo de su 10º aniversario en mayo de 2008.

- Destacar la importancia de los beneficios sociales en términos de oportunidades, acceso y solidaridad que puede generar el mercado único aprobando el planteamiento establecido en el documento exploratorio que acompaña a esta Comunicación.

- Apoyar el planteamiento de los servicios de interés general, incluidos los servicios sociales de interés general, establecido en la Comunicación que acompaña a este informe.

[1] Un documento de trabajo de los servicios de la Comisión publicado junto a este informe recuerda los logros del mercado único.

[2] COM(2007 )60 de 21.02.2007.

[3] COM(2007) 581, de 3 de octubre de 2007.

[4] COM(2006) 567 de 4 de octubre de 2006.

[5] COM(2007) 502, de 5 de septiembre de 2007.

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